—Tía, estoy bien —respondió Scarlett, devolviendo el abrazo y ofreciendo una cálida sonrisa a Carter, quien todavía la miraba con el ceño fruncido.
—Me alegra escuchar eso, Scarlett —dijo la tía Martha mientras soltaba lentamente su abrazo—. Siéntate, habla con tu hermano. Iré a la siguiente habitación, dejándolos a ustedes para que hablen...
Sin embargo, antes de que Martha saliera de la habitación, Scarlett la detuvo. —Tía Martha, espera... La cirugía de Carter fue un éxito. Creo que necesitas relajarte un poco —dijo Scarlett—. ...Puedes quedarte en nuestra casa unos días.
Scarlett estaba demasiado preocupada por la condición de la tía Martha, temiendo que se agotara debido a que había pasado más de una semana en este hospital sin ir a ningún otro lugar.
—Esto— Martha estaba atónita al escuchar la oferta de Scarlett. No recuerda cuántos días había pasado aquí, demasiado centrada en la recuperación de Carter.