Mackie estaba muy feliz cuando vio que su mamá venía a recogerla. Temía que su mamá la hubiera olvidado porque era muy extraño que llegara tarde, a menos que peleara con su papá, cosa que sucedía a menudo cuando vivían juntos.
Pero ahora no estaban con papá y la mente simple de Mackie siempre creía que Tío no le haría daño a su mamá.
Entonces, ¿qué provocó que llegara tarde?
Mackie se sentó junto a su mamá mientras el chofer las llevaba de regreso a casa. Miró a su mamá un par de veces, revisando en silencio si había algún moretón visible en el cuerpo de su mamá o si había llorado hasta desmayarse como antes.
Pero no, mamá parecía estar bien e incluso tenía una sonrisa natural, lo cual era raro para Mackie.
Así que, incapaz de contener su curiosidad, Mackie preguntó: —Mamá, ¿estás bien?
—¿Mmm? Sí, ¿qué pasa, cariño? —preguntó Chloe.
—Porque es raro que llegues tarde a recogerme. ¿Tío te hizo algo?