—Empezaré a planificar el encuentro entre ustedes dos. ¿Quizás llame a un taxi y lo organice en un café? ¿Tienes algún café que te guste? —preguntó Chloe.
Pero Vernon rápidamente lo rechazó, —No podemos organizar el encuentro afuera —dijo Vernon—. Ella es una mujer buscada, y Vicente tiene muchos de sus agentes alrededor. Si tenemos una reunión en un espacio abierto, él se enterará y todo se arruinará. Por lo tanto, necesitamos un espacio más privado.
—Además, no puedes simplemente llamarle un taxi. Eso es demasiado arriesgado. Enviaré a uno de mis hombres a buscarla y podemos hablar aquí, en este apartamento —dijo Vernon con firmeza, sin darle a Chloe ninguna oportunidad de rechazar su decisión.
Chloe hizo una pausa momentáneamente antes de asentir, —Está bien, estoy de acuerdo con eso. ¿Quieres que prepare algo para ustedes dos? Puedo, um... supongo que prepararé una merienda.
