—Apuesto a que Diamante se quedó desnuda con él. ¿Qué puede hacer esa tonta de todos modos? ¡Actúa como si fuera una sabelotodo! Apuesto a que sacudía su trasero todos los días para que nuestro CEO la follara, ¡JAJAJA!
Chloe apretó su puño, podría no tener muchos amigos, pero ya consideraba a Diamante su buena amiga, su amiga, tal como Diamante solía decir al referirse a Chloe.
Nunca permitiría que alguien hablara mal de su amiga, así que juntó valentía y levantó la voz: —¡T—Retira eso!
Los dos hombres dejaron de reír y giraron sus cabezas hacia la señorita pequeña. Levantaron las cejas y la provocaron: —¿Qué dijiste de nuevo? No lo escuché, lo siento.
—¡Dije que lo retires! Gritó Chloe. Como había levantado la voz, ganó aún más valentía. —Diamante, ¡ella es una secretaria competente! Tiene mucho trabajo todos los días y definitivamente no tiene tiempo para coquetear con mujeres al azar como ustedes dos imbéciles