Dorothea intentó soltar su mano, pero cuanto más tiraba, más fuerte Shailene agarraba su muñeca. Fue un movimiento tan desesperado que Dorothea comenzó a preguntarse por qué había malgastado tanto tiempo tratando de consolar a Shailene.
Está claro que esta mujer no era una profesional. Nunca le dio a Dorothea un cierre sobre qué hacer para calmar su corazón.
—¡Suéltame, Shailene! —Dorothea espetó.
Shailene negó con la cabeza vehementemente, —¡Primero tienes que escucharme! ¡Chloe es una mujer manipuladora! Podría parecer dulce o tímida, pero en realidad es la mujer más cruel que encontrarás en tu vida.
Dorothea dejó de luchar cuando Shailene dijo eso. No podía creer la audacia de esta perra poco profesional, juzgando a una mujer maltratada aunque nunca había conocido a Chloe en su vida.
