—No quiero ser entrometida, pero ¿has tenido noticias de Erin? —preguntó Eleanor.
—No, en realidad —respondió Alessandra, recordando ahora lo que estaba sucediendo con Erin—. Ella debía venir a medirme para nuevos vestidos. Necesitaré que comience a hacer vestidos para cuando empiece a crecer, pero no ha aparecido. No he estado saliendo de casa para poder visitarla, así que le he enviado una carta. No entiendo por qué me está evitando.
—Bueno, es una situación bastante embarazosa en la que se encontró. Probablemente piensa que la compadecerás. Estoy segura de que he oído que ella y Dale están juntos de nuevo. Quizás se casen pronto para acabar con todos los chismes. Quitó el foco de atención de Emma por un tiempo —dijo Eleanor.