—Madre, te vas a desmayar cuando te cuente esta noticia. Simón quiere cortejarme —Kate saltó emocionada. Había estado conteniendo su emoción hasta que él se fue.
—¡Bien hecho, Kate! —Katrina aplaudió a su hija. Era maravilloso que Kate atrajera a un hombre como Simón. Era rico y tenía buenas conexiones. —Vas a necesitar ropa nueva si vas a estar cerca de un hombre como Simón —pensó en la ropa que Kate había estado ordenando. Katrina ya no estaba impresionada por el aspecto de todas ellas. Incluso las que Kate quería guardar.
—Deberíamos comprar vestidos nuevos hasta que me pida la mano en matrimonio. Puedo devolver el dinero una vez que me case con él. No puedo esperar para contarles esto a mis amigos. Sabía que se reían de mí porque Alessandra se casó con Edgar pero me miraba a mí. Grace hervirá de celos —dijo Kate.