El dolor era insoportable. Mi cuerpo estaba cubierto de golpes y moretones, y mi mente estaba llena de rabia. Me encontraba en la zona pobre de la capital, el lugar al que fui llevada después de presenciar la muerte de mis padres y ser capturada por los mismos caballeros que juraron protegernos. Nunca pensé que la traición y el sufrimiento fueran parte de mi destino, pero aquí estaba, enfrentando la crueldad de aquellos en quienes confiaba.
Pero no era momento de lamentarse, tenía un plan. Aunque los guardias no lo sabían, todavía tenía mi libro. Me había dado cuenta de algo: cada vez que leía algo en este libro, me volvía más inteligente. Sin embargo, no podía volver a leer nada sobre el pasado, presente o futuro. Al parecer, eso solo se podía leer una vez. Aun así, gracias a la inteligencia que el libro me proporcionaba, pude planear algo. Solo me hacía falta algo, y ese algo estaba ahora junto a mí en la prisión. Si no recuerdo mal, era un personaje del libro. Pero parece que está a punto de despertar. Creo que es momento de empezar mi plan, lo más conveniente es solo contarle lo más conveniente. Bueno, ya veremos.
Después de una pelea que tuvo la chica llamada Robin con un caballero, empezamos a hablar. Le conté bastantes cosas: sobre la invasión de esas criaturas, sobre cómo los caballeros mataron a mis padres. Pero cuando le conté sobre lo que pasó con el libro, se sorprendió.
"Oye, ese libro se parece bastante a mi flauta", dijo Robin.
"¿Tu flauta tiene escrito el futuro del mundo?" pregunté un poco estupefacta.
"Eh... no, claro que no. Te digo que aparece cuando queramos, pero cada vez que yo uso la flauta entro en estado de 'chroma'. ¿Tú no puedes hacer lo mismo?"
"Mmmmmmmh, no sé. Haber... mmmmmmmh. El propósito de las armas es atacar. Cuando las personas normales atacan, entran en estado de 'chroma'. Se vuelven más enojados, más fuertes... Si no me equivoco, esa es una flauta. El propósito de una flauta es hacer música. Cuando haces música, entras en un estado de 'chroma'. Pero el libro, el objetivo de un libro es leerlo. Pero cuando lo leo, no pasa nada aparte de volverme más inteligente", pensé y pensé, pero al parecer todavía no soy tan inteligente.
"Los libros no solo sirven para leer. ¿Nunca has intentado escribir?", dijo Robin.
"Mmmmmmm, no, nunca he intentado leer. De todos modos, no tengo ningún lápiz", respondí.
"¿Y qué es eso que tienes en la mano?"
"Mmmh, ¿el qué?" Cuando miré mis manos, vi una pluma que nunca antes había visto. Tenía una base negra pero hermosos patrones dorados. Sin pensarlo, el libro creó una hoja en blanco. Puse el lápiz y entonces ocurrió. El libro se iluminó, al igual que la primera vez que lo toqué. Nunca antes
había escrito, pero ahora mi mano se movía sola. Junto con la pluma, empecé a moverme por el libro. Me iluminé cada vez más a medida que escribía, y entonces lo vi. Vi cómo podíamos escapar. En ese momento, decidí dejar de escribir.
"Mmmh, vi cómo podemos salir de aquí", dije emocionada, aunque en mi tono de voz no se notara. Al final, es un defecto que siempre he tenido.
"Eh, ¿en serio?", dijo Robin. "Si mira, bueno, escucha lo que te voy a decir".
Y así es como decidimos escaparnos juntas. Fue todo muy rápido y sin muchas comprobaciones, pero el hecho de que ambas sepamos nuestro oscuro pasado nos ayudó a crear una confianza bastante estable. Además, aunque sea muy inteligente, sigue siendo una niña. No puedo dejar que una niña esté en este lugar.
-Taat, taat, taat- el sonido de la gran puerta que nos mantenía prisioneras empezó a abrirse.
En ese momento, empezaría el plan. Yo no tenía que hacer casi nada, simplemente empecé a usar la flauta. Rápidamente, empezó a sonar una melodía pacífica. De repente, empecé a iluminarme junto con mi flauta. Todo alrededor se inundó con mi luz, y todo se empezó a calmar. Los caballeros se empezaron a sentir mal, cansados. Empezaron a sentir que necesitaban un descanso, que simplemente querían acostarse y disfrutar del momento. Pero ellos habían sido entrenados, el cansancio era lo más normal en un campo de batalla.
Aunque cansados y un poco confundidos, abrieron la puerta de la celda y vieron a una chica iluminada con una luz verde. Aunque de forma lenta, se dieron cuenta de que era culpa de ella que se sintieran así de cansados. Sabían que no podían simplemente atraparla, tenían que acabar con ella.
Empezaron a brillar de rojo, espadas, lanzas y otras armas. Los cuatro caballeros entraron en su estado de 'chroma' en la celda para acabar con la prisionera. Pero estaban tan concentrados que se olvidaron de un pequeño detalle: un detalle que les robó las llaves. En un momento, habíamos terminado el primer paso para el escape.
Ahora simplemente tenía que salir, pero estaba rodeada por caballeros, personas entrenadas que apuntaban sus armas hacia mí. No sabía qué hacer y no podía dejar de usar la flauta, porque entonces los soldados dejarían de sentirse cansados.
Entonces, escuché a Luna: "El primero en golpear será el de la lanza, apuntará a tu pecho".
Sin tiempo para pensar, esquivé el ataque.
"Dé un paso atrás, luego esquiva el balanceo de la espada con dos pasos a la derecha", siguió diciendo Luna.
Di un paso atrás y vi cómo el del hacha hizo un golpe hacia donde estaba antes. Sin pensarlo, también me moví a la derecha y pude esquivar el balanceo del espadachín.
No había terminado de moverme cuando Luna ya me estaba dando las siguientes instrucciones.
Nunca pensé que moverme y soplar sería tan complicado. A veces, al moverme, me desafinaba y los soldados perdían el efecto de calma. Pero cada vez estaba más cerca de la salida. Sin embargo, en un pequeño descuido, me tropecé. La canción se detuvo repentinamente, salí de mi estado de 'chroma' y, sin dudarlo, mientras los soldados terminaban de salir de su confusión, decidí correr hacia la puerta. Luna, al ver esto, corrió también. El plan decía que teníamos que cerrar la puerta para dejarlos encerrados, pero esto no sería posible. La puerta era demasiado pesada para que pudiéramos cerrarla antes de que los caballeros se recuperaran.
El pasillo se extendía ante nosotras, con múltiples bifurcaciones y puertas cerradas. Luna lideraba el camino, dirigiéndonos por los laberintos de la prisión con destreza. A medida que avanzábamos, escuchábamos los gritos de los caballeros detrás de nosotros, recuperándose de su momentánea debilidad.
De repente, llegamos a una intersección con tres posibles direcciones. Luna no sabía nada más de esta parte, nunca había pasado por ninguno de estos lugares. No sabíamos a dónde ir. Fue entonces cuando el libro de Luna tuvo un destello. Luna rápidamente abrió el libro. Al parecer, en esta semana nos dimos cuenta de que cuando el libro tenía un destello, significaba que se había actualizado. Luna empezó a leer su libro. Los caballeros nos estaban alcanzando, pero Luna seguía corriendo mientras leía. Gracias a las instrucciones del libro, empezamos a avanzar en el laberinto, pero algo me estaba preocupando.
En vez de subir, estábamos bajando. Llegó un momento en el que ya no había paredes de piedra, simplemente había rocas. Hasta que un momento llegamos a una cueva por donde pasaba un arroyo. Al parecer, usaban este arroyo como método ilegal para usar el agua y no pagar impuestos.
Mientras pensaba en esto, vi cómo Luna se había tirado al arroyo. Yo no sabía nadar, pero no podía quedarme aquí. Así que, aunque con desconfianza, me tiré al río subterráneo.
Las corrientes nos arrastraron. Justo cuando pensé que en verdad era bastante divertido ser arrastrada por el agua, vi cómo de repente el camino se acababa. Entonces me di cuenta de por qué los caballeros no nos habían seguido. Yo pensaba que era porque sus armaduras les impedirían flotar, pero la verdadera razón era que el camino que habíamos tomado no tenía un final. entonces llegamos al final, la cueva terminaba junto con nuestro camino empezamos a caer, pero para mi alivio caeríamos en el mar.
hasta que recordé...
¡No se nadar!