-12 de agosto de 1997-
- "¿Estás listo hijo? – grita mi padre para verificar que estuviera ya vestido, no le respondo en el momento pues aún no estaba totalmente arreglado, se preguntaran ¿para que te estás alistando? Pues hoy es un día muy especial para todos, es la feria de ciencias en la universidad, donde mi hermano mayor participara con un proyecto fuera de este mundo, mi mente se llenaba de emoción en ver todas las innovaciones que habría en ese lugar, mi cerebro estaba a 100% de imaginación hasta que escucho a mi madre gritar "¡Hijo! ¡Baja ya!" a lo que respondí con un típico "Ya voy mamá" que damos todos cuando aún no estamos listos, pero no queremos que nos apresuren.
Ya bien arreglados mis padres y yo partimos a caminar 30 minutos hasta el gran evento, mi padre nos deja a mi y a mi madre en un árbol cercano esperando mientras avisaba a nuestro hermano que ya habíamos llegado, así que decidimos sentarnos y aguardar su regreso. Hablamos por un buen tiempo, pasaron minutos, demasiados minutos para que solo haya ido por él, por lo que mi mamá se levanta y me dice "Espera aquí, voy a ver qué pasa, quédate aquí" me da un beso en la frente y se retira dentro de la universidad luego, fui yo el que se preocupó, primero mi padre era el que tardaba, y después de otros largos minutos mi madre también se retrasaba, por lo que contradiciendo lo que me dijo mi madre, decidí levantarme y entrar a ver que pasaba, pero justo antes de poder siquiera entrar sucedió una cosa que no me esperaría, un sonido que se quedará en mi mente para siempre…¡boom!
Una enorme explosión que acabo con todo, arboles, estructuras, experimentos, de todo fue carbonizado en un instante, solo vi todo blanco, luego todo negro y de repente… me empecé a sentir raro… como si algo me estuviera pasando, no estaba ni despierto ni dormido, sentía que algo cambiaba, que yo cambiaba, esto no era normal para un niño de 9 años, y de pronto desperté entre cenizas, sirenas y muchos oficiales y médicos.
No me sentía para nada normal, sentía que algo en mi ser no estaba como debía de estar, estaba alterado, asustado, tenía tanto miedo, mi cerebro estaba pensando tanto que no me di cuenta que un oficial de policía se me estaba acercando, a pesar de todo el se me acercó muy bruscamente a ver como estaba, no entendía nada de lo que estaba pasando y de repente recordé algo… ¿Dónde estaban? ¿¡Dónde estaban mis padres y mi hermano?! El policía me tomo de la mano tratando de llevarme a un lugar seguro, yo no quería eso, quería a mis padres, así que trataba de soltarme de su agarre e ira buscar a mis padres, el solo me repetía "No vallas haya niño, es muy peligroso", yo no deseaba estar a salvo, yo quería buscar a mi familia, yo solo necesitaba soltarme, de repente sentí escalofríos, ira… y me di cuenta que estaba diferente en mí.
Sentí que todo mi cuerpo reaccionaba distinto, era como si de repente me llenará de energía, como se hubiera comido 1000 chocolates de golpe, como si fuera una batería que de alguna forma electrocuto a el oficial y lo dejó tumbado en el suelo.
El uniformado se desplomó y todos vieron una luz azul que rodeaba a nuestros seres, procedieron a rodearme mucho policías, que solo me alteraban más y más, que de repente solo veía rayos azules a mi alrededor, es como si todo me estuviera pasando, y de pronto sentí un pinchazo en mi cuello, era un dardo con un símbolo raro, no medió tiempo ni de procesarlo, pues caí al suelo, y justo antes de caer vi una silueta rodeada de dos soldados muy grandes y un señor calvo con una pistola, supongo que el me disparó, pero no tengo tiempo para pensar, de hecho no puedo…ni…pensar. Veo todo borroso … creo que esto se pondrá cada vez peor.