No recuerdo mucho aquel momento, aquella vida, no recuerdo casi nada. Me llamaba Julio, no sé cuántos años tenía, estudiaba algo que no recuerdo en la universidad, había hecho el examen para graduarme y había ido en dirección a mi casa, esa es la parte que más recuerdo:
En el trayecto notaba que me dolía la cabeza, la mente se me iba a todas partes y no era capaz de controlar mi cuerpo correctamente, a veces me desviaba del camino y casi me chocaba con la gente, en ese momento, no sabía que pasaba.
Recuerdo que me desvíe a un callejón, y cuando iba a salir, había alguien detrás mía, en ese momento no le había dado importancia, iba a retirarme cuando sentí un dolor punzante en el pecho, el dolor era insoportable y no era capaz de moverme, mis piernas no aguantaron y caí desplomado al suelo, mi mente luchaba por no desvanecerse, pero toda lucha había sido en vano, allí, morí.
Julio López Menéndez, ese era yo, no se que día morí ni cuántos años tenía, si tenía amigos, si tenía padres, solo recuerdo el día de mi muerte, y ni siquiera a la perfección,
Sólo sé una cosa; he reencarnado como Julius Goldenheart, hijo de el líder del clan Goldenheart, Fray Goldenheart,
y de una plebeya de clase baja llamada Annie, y, a pesar de ser hijo del rey, el hecho de ser hijo de una plebeya de clase baja y de a mis 4 años no haber demostrado ningun tipo de interés ni talento con la lanza, símbolo del clan Goldenheart hace que sea odiado incluso dentro del clan, incluyendo a mi padre, y solo exceptuando a mi madre Fray y a la bibliotecaria del clan, Freyja, que me cae bien porque me deja estar en la biblioteca leyendo a pesar de que se necesitan 6 años para ir solo y 14 para tener la sección superior.