Los seres humanos son criaturas extrañas, a pesar de entender que tienen el 99% de probabilidad en su contra, siempre que aya un 1% de probabilidad a su favor no dudarán en hacer todo lo posible para lograr su objetivo.
Sin embargo si se dan cuenta de que ese 99% de probabilidad en su contra se convierte en un 100% rápidamente se rendirán sin ninguna resistencia.
Esto se ha demostrado muchas veces a lo largo de la historia, aunque también hay excepciones y esas son las personas que a pesar de tenerlo todo en su contra y aún sabiendo que no podrían lograr su objetivo aún así dan todo por su causa incluida su propia vida.
Eso fue lo que pensó Steven mientras corría con todas sus fuerzas restantes en una máquina de correr.
Mientras luchaba por mantener una respiración constante Steven se decía para si mismo estás palabras para mantenerse enfocado en su gran meta, bajar de peso.
A lo largo de su vida a Steven nunca le había importado su apariencia ni como vestía, siempre había sido el chico de aspecto descuidado al que no le importaba lo que la gente pensara de el.
Sin embargo a principios de este año una chica comenzó a llamar su atención, era bonita, divertida y sobre todo disfrutaba charlando con ella.
Varias veces había tenido la idea de confesarle mis sentimientos, pero finalmente siempre terminaba por omitir todos eso.
Debido a que no tenía confianza en mí mismo, en primer lugar no era muy guapo, eso siempre lo había sabido y no había nada que pudiera hacer para mejorar mi apariencia, por lo que siempre me he aceptado a mí mismo sin ningun problema.
Pero había algo que no podía aceptar sobre mi y eso era un enorme recubrimiento de grasa por todo mi cuerpo también llamado obesidad.
Yo siempre había sido un chico delgado ya que aunque comía mucho también hacía mucho ejercicio, era un balance perfecto.
Pero ese balance llego a su fin por uno de los enemigos más grande que la humanidad ha tenido que enfrentar el covid-19.
No se confundan no estuve infectado pero junto a la mayoría de las personas tube que pasar por una de las más grandes torturas por las que nunca había pasado.
Esta tortura tenía el nombre de "cuarentena" consistía en prohibir a los ciudadanos que salieran de sus residencias. Algo que no fue del agrado de muchas personas, sin embargo al final de cuentas todos se vieron obligados a cumplir con este arreglo.
Por mi parte al principio sufri mucho, después de todo era un chico muy inquieto que pasaba la mayor parte de su tiempo jugando y tonteando con sus amigos. Pero a pesar de eso encontre algo en que refugiarme, algo que desde hace un tiempo sabía que existía aunque no me había llamado la atención hasta ese momento.
Ese algo tan increíble es el "anime". Pase una gran parte de la cuarentena solo viendo anime hasta que descubrí que ya había visto la mayoría de las obras que me interesaban, fue ahí donde encontre lo que sería mi próximo pasatiempo las "novelas ligeras".
Mientras el tiempo pasaba yo no hacia más que comer y recostarme en mi cama para ver anime o leer novelas ligeras. Así transcurrió el tiempo hasta llegar a la actualidad.
Con una meta que cumplir junto con el apoyo de mis amigos comencé a participar en toda clase de deportes en la escuela desde el fútbol hasta el voleibol, siempre que tenía una oportunidad de jugar me ponía manos a la obra.
Junto con una estricta dieta y disciplina la cual desarrolle cuando empezé a asistir al gimnasio en unos 5 meses había cumplido mi meta y aunque no tenía un cuerpo con músculos totalmente definidos estaba bastante satisfecho con mi logro.
Finalmente había llegado el momento de cumplir con mi objetivo final, el objetivo por el que tanto luche y derrame sudor y lágrimas.
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06:00 AM | Yaque abajo | Villas del Lago
Después de despertarse Steven siguio su rutina habitual. Se baño, se puso su uniforme, se desayuno y se cepillo antes de finalmente partir a la escuela.
Steven vivía en una villa, o más exactamente cerca de una villa. Esto se debía a que su madre trabajaba como contable y conserje para los dueños de la villa.
Estas Villas estaban ubicadas en una montaña cerca de un gran lago de ahí su nombre "villas del lago".
Debido a la ubicación remota de las villas cuando su madre comenzó a trabajar en ellas Steven se vio en la necesidad de transferirse a la escuela del pueblo que se encontra a solo unos 10 minutos de su nueva casa.
Mientras Steven atravesaba el camino accidentado de la montaña su corazón estaba palpitando con fuerza impulsando sus nervios a un nivel extremo.
Su mente estaba echa un lío mientras pensaba en como declarar sus sentimientos a Elaine la chica que había robado por completo su corazón.
Cuando estaba a punto de llegar a la escuela Steven respiro hondo y trato de calmarse antes de dirigirse a la entrada.
"Buenos días" le dije con una sonrisa amistosa al portero mientras entraba a la escuela.
A lo que esté con una cara sería asintió con la cabeza a la vez que me devolví el saludo "Buenos días"
Después de entrar me percate de que no había llegado nadie lo cual no era sorprendente ya que era muy temprano.
De camino a mi salón de clase me encontré con varios maestros y estudiantes a los que saludé con cortesía.
En realidad el edificio escolar no era grande más bien era pequeño, sin embargo teniendo en cuenta la cantidad de estudiantes inscritos en el, este edificio era bastante espacioso.
Como referencia pueden tomar mi salón como ejemplo, a pesar de que el aula no era grande todos los estudiantes cambiamos a la perfección sin tener la necesidad de invadir el espacio personal de nadie e incluso teníamos espacio de sobra.
Esto gracias a que en total solo éramos 6 estudiantes los que utilizábamos el aula.
Un minuto después llegue a mi salón de clase, donde de inmediato coloque mi mochila en un asiento y me quedé sentado esperando a mis compañeros los cuales fueron llegando uno por uno.
"Hola Steven, ¿Como estas?" Pregunto el primero de mis compañeros en llegar.
"Hey, Hola Estarlin. No estoy haciendo nada solo esperando que pasen las horas de clases para poder jugar fútbol." Le respondí con entusiasmo tratando de ocultar los nervios que sentía desde que salí de mi casa.
"En serio lo que se esperaba de ti desde temprano ya estás pensando en el fútbol. Por cierto hiciste la tarea de Matemáticas?" Me pregunto mientras acomodaba su mochila en su asiento.
Al escuchar las últimas palabras que salieron de su boca todos mis pensamientos se quedaron en blanco antes de repentinamente ponerme de pie. "De que tarea estás hablando?" Le pregunté con voz temblorosa.
A lo que el viendo mi reacción se echó a reír mientras me decía. "Calmate viejo solo es una broma, no hay tarea de matemáticas para hoy."
Después de escuchar su respuesta me senté nuevamente en la silla mientras soltaba un suspiro de alivio.
Sin embargo en ese momento se escucho la voz de una chica desde la puerta. "Estas seguro, mejor revisa tu cuaderno antes de hablar."
Esa chica era Crismeily la unica chica en nuestro salón de clase, también la más aplicada de entre los seis.
Cuando escuchamos el contenido de las palabras que Crismeily acababa de soltar, nuestras caras cambiaron, y al instante abrimos los cierres de nuestra mochila, sacamos nuestros cuadernos de matemática y comenzamos a buscar la última hoja en la que habíamos escrito.
Allí claramente vimos una serie de ejercicios sin resolver con un enunciado en su parte superior que decía tarea.
Al darse cuenta de que no habían echo la tarea ambos sintieron sus espíritus caer al suelo.
"No se preocupen chicos como soy magnánima les dejaré copiar lo que hice, pero solo por esta vez." Dijo Cris de repente con una sonrisa triunfante en su rostro devolviendo así el color a nuestros caras pálidas.
De inmediato ambos chicos se pusieron manos a la obra ya que solo les quedaba alrededor de unos 10 minutos antes de que empezará la clase.
Justo después de que terminaron entro un chico de aspecto aburrido por la puerta, sin siquiera mirar o saludar nadie se sentó en su lugar, saco un paquete de galletas de su mochila y comenzó a comer.
No es que este chico sea mal educado, ni que tenga una mala relación con nosotros al contrario es debido a que tenemos una buena relación que actúa de esa manera. El solo está siguiendo su rutina habitual, es su personalidad, en pocas palabras tiene rápidos cambios se humor.
Dos minutos antes de que empezará la clase, nuevamente entraron dos chicos al salón.
El primero se llama David, es un chico al que le gusta mucho hacer reír a las personas, aunque no es muy bueno en sus estudios es un tipo agradable.
El segundo era Kedwin un chico de casi dos metros de altura, el era el más fuerte de la escuela aunque no tenía músculos grandes y se veía un poco delgado la verdad es que sus músculos estaban muy definidos.
Después de entrar ambos saludaron uno por uno a sus compañeros de curso y esperaron la llegada del profesor antes de empezar la clase.
Más tarde después de terminar las primeras horas de clases, en el tiempo de receso Steven se armó de valor y fue a buscar a Elaine.
Cuando la encontró se paró justo al frente de ella y la saludo. "Hola Elaine cómo estás"
"Hola Steven, yo estoy bien, cansada de copiar la clase, pero bien." Respondió ella con una sonrisa.
Al ver su sonrisa sentí mi corazón latir más rápido de lo habitual sin embargo puse una fachada tranquila y con una ligera carcajada le respondí.
"De copiar todos estamos cansados, pero ya hablando en serio, puedes venir conmigo a un lugar con menos gente"
"Mmmmm como para que?"
"Es solo que te necesito decir algo importante, que no quiero que otras personas escuchen"
Al terminar de decir estás palabras un leve rastro de interés se reflejó en la cara de Elaine antes de que aceptara seguirme a otro lugar.
Cuando por fin llegamos a un sitio en donde no había estudiantes o profesores alrededor, reuní todo el valor que pensé que podría reunir durante mi vida y reprimiendo las ganas de echarme hacia atras, abri la boca y le dije.
"Elaine la verdad es que llevo un tiempo conociendo te y a lo largo de este tiempo de que aparte de que eres una chica bonita también eres amable, gentil y amigable. Además también me di cuenta de que tenemos mucho en común como por ejemplo a ambos nos gusta el fútbol, el voleibol y el anime entre otras muchas cosas más.
Aunque no me enamoré de ti a primera vista si se que lo que siento por ti es una gran atracción, por lo tanto quisiera preguntarte si te interesaría formar una relación más profunda que la de amigos conmigo."