El escenario de la batalla consistía en enormes piedras meteóricas. Cada piedra estaba inscrita con las palabras de muchos Paragones virtuosos; energías misteriosas y poderosas emanaban de ellos continuamente. Fue esta energía la que protegió el escenario de la batalla, haciéndolo impermeable a cualquier daño que los contendientes pudieran infligir.
"¡Un escenario de batalla del nivel Virtuous Paragon!"
A pesar de que esta no era la primera vez que lo presenciaba, el escenario de la batalla todavía infundía asombro a Nan Huairen.
El discípulo Zhang estaba muy orgulloso y comenzó a presumir: "Este escenario de batalla fue creado por nuestro Gran Anciano; incluso puede resistir el poder destructivo de múltiples Paragons virtuosos".
Nan Huairen no pudo evitar murmurar en voz baja: "En el pasado, nuestra Antigua Secta Incienso de Purificación también tenía un escenario de batalla..."
La verdad era que la Antigua Secta Incienso de Purificación también tenía un escenario de batalla, pero no era del nivel de Parangón Virtuoso. Algunos dicen que estaba casi al nivel del Emperador Inmortal, por lo que podría resistir una pelea entre los Reyes Celestiales y los Emperadores Inmortales por igual. Fue encontrado por el Emperador Inmortal Min Ren en las profundidades de un espacio desconocido.
Desafortunadamente, nadie sabía por qué se selló esta etapa de batalla. A partir de ese momento, nadie pudo ingresar a la arena.
"¡Grandes cuatro golems de piedra!" Li Qiye estaba allí, pero se perdió la conversación por completo. Sus ojos estaban enfocados en las cuatro estatuas gigantes ubicadas en las cuatro esquinas de la arena.
Cada uno de ellos superaba los cien metros de altura. Todos ellos tenían diferentes expresiones, pero todos eran muy realistas. Era evidente que fueron tallados por las manos de un experto de renombre con una técnica de cuchilla que era muy natural y perfecta.
Esto era lo que quería ver. Después de la muerte de Nine Saint Virtuous Paragon, nunca había visitado esta secta. Fue sorprendente ver las cuatro estatuas después de todos estos años.
Cuando Nan Huairen y el discípulo Zhang estaban charlando, nadie notó a Li Qiye. Un momento después, el discípulo Zhang finalmente vio lo que Li Qiye estaba tratando de hacer. Levantó las cejas y preguntó: "¿Qué está haciendo este idiota?"
Nan Huairen notó que Li Qiye estaba tratando de subirse a la parte superior de la estatua del este. Sin embargo, debido a su débil cultivo, no pudo llegar a la cima.
En este momento, muchos estudiantes rodeaban el escenario de batalla. Todos vieron a Li Qiye luchar como un niño de pueblo que visitaba la capital por primera vez. Las risas estallaron y las burlas llenaron la arena.
Nan Huairen estaba tan avergonzado que quería cavar un hoyo y esconderse en él para siempre. No pudo ver qué tenían de especial estas cuatro estatuas que llevaron a Li Qiye a tomar medidas.
Li Qiye le indicó a Nan Huairen que se acercara. Nan Huairen no podía decirle que no al discípulo principal, especialmente cuando toda una secta estaba señalando a la persona. Caminó abatido hacia Li Qiye bajo las miradas escrutadoras de todos los discípulos.
Li Qiye ordenó con calma: "Esta estatua es demasiado alta, llévame allí".
"¡¿Hah?!" Nan Huairen estaba estupefacto. Se preguntaba en silencio si Li Qiye se había vuelto loco. Subir a la estatua frente a tantos discípulos de Nine Saint Demon Gate fue una gran bofetada en sus rostros.
"¿Vas a llevarme o quieres seguir viendo mi espectáculo de monos?" Li Qiye comentó con indiferencia como si todo esto no tuviera nada que ver con él.
Sin ninguna otra opción, Nan Huairen agarró a Li Qiye y saltó. De un solo golpe, llegaron a la parte superior de la estatua.
Li Qiye se sentó en el hombro de la estatua y miró tranquilamente a lo lejos, abrazando la escena frente a sus ojos.
Nan Huairen no era tan gruesa como Li Qiye. Inmediatamente saltó y esperó al pie de la estatua. Se quedó allí, esperando, en caso de que algo sucediera. Simplemente no podía abandonar a su condiscípulo.
El discípulo Zhang, sin embargo, no quería quedarse allí ni un segundo más. Inmediatamente se fue sin un saludo de despedida.
"¿Cree que es un pez gordo, sentado en la parte superior de la estatua?"
"¡Este pueblerino está siendo demasiado grosero!"
Ignorando los comentarios que los discípulos de Nine Saint Demon Gate estaban arrojando, Li Qiye permaneció sentado en el hombro de la estatua. Le susurró como si estuviera teniendo una conversación con él.
Las acciones locas y sin sentido de Li Qiye hicieron que los espectadores cuestionaran su cordura. Este era realmente un idiota sin miedo. Sin embargo, nadie intentó detenerlo. Sintieron que estaba por debajo de ellos interferir con un loco.
Eventualmente, Li Qiye parecía haberse aburrido de estar sentado. Una vez más agitó su mano para señalar a Nan Huairen. Fue como si le hubieran quitado una roca de los hombros; Nan Huairen se sintió increíblemente aliviado de que esta locura hubiera llegado a su fin cuando derribó a Li Qiye al suelo.
"Primer hermano, el sol se ha puesto. ¿Volvemos y descansamos? Nan Huairen estaba orando con todo su corazón para que este discípulo principal pudiera evitarle más vergüenza. ¿Quién sabe qué otras cosas haría si continuaran su gira?
Al darse cuenta de que Nan Huairen parecía un cachorro muerto, Li Qiye se rió entre dientes y asintió con la cabeza en acuerdo.
"¡Tu madre!" Un discípulo no pudo evitar gritar después de ver la sonrisa diabólica de Li Qiye: "La Antigua Secta Incienso de Purificación es una secta de tercera categoría. ¡Eres simplemente un sapo que quiere comer carne de cisne! ¡Pah! Una tonta tortuga negra tiene el descaro de cortejar a nuestro mayor".
Al ver que alguien lo estaba desafiando directamente, Li Qiye se dio la vuelta lentamente y dijo: "¿Cortejar a su superior? No piensen demasiado de ustedes mismos. Incluso si un ángel celestial o un hada piadosa quisieran casarse conmigo, tendrían que orar por mi aceptación. ¿En cuanto a tu superior? Es una larga fila hasta que es su turno".
"¡Tu madre, estás cansada de vivir!" Todos los discípulos masculinos rugieron después de escuchar las palabras desvergonzadas de Li Qiye.
"¡Cálmate, cálmate, todos deberían valorar la paz y la prosperidad!" La situación actual envió escalofríos por la columna vertebral de Nan Huairen. Inmediatamente tomó a Li Qiye y se fue. No podía dejar a este loco afuera por un segundo más.
Después de llegar a salvo a su casa de huéspedes, Nan Huairen gritó: "¡Primer hermano, por favor! Este no es un lugar donde podamos decir y hacer lo que queramos. Da un paso atrás y aprecia el cielo alto y el mar profundo. Por favor, manténgase bajo control".
"¿Aguantar?" Li Qiye proclamó con indiferencia: "¡Un general detendrá a un ejército entrante, una presa detendrá la corriente entrante!" [1. Este es otro proverbio chino. Le dice a alguien que no se preocupe, casi como que sera sera. Suena muy bien en chino ya que solo consta de 8 palabras; 4 para cada prosa con la misma estructura tonal.]
Nan Huairen se congeló. Cuidar de alguien como Li Qiye era como encontrar problemas para uno mismo. Realmente lamentaba haber asumido esta misión para ir a Nine Saint Demon Gate.
***
Después de los eventos en la etapa de batalla, muchos de los discípulos de Nine Saint Demon Gate se indignaron. Du Yuanguang fue uno de los que realmente quería matar a Li Qiye. Era un discípulo externo, pero sus talentos innatos estaban por encima del promedio, por lo que muchos se referían a él como el "Pequeño Genio". Solo se había unido a la secta durante cinco años, pero ya había alcanzado la etapa cumbre del Palacio Provisional. Mientras pudiera aprobar con éxito el examen de este año, podría convertirse en un discípulo interno.
Du Yuanguang estaba muy enamorado de Li Shuangyan. Durante su examen de ingreso, ella fue una de las principales organizadoras. Fue amor a primera vista. También pensó que ella reconoció sus habilidades y talentos desde que lo aceptó.
Tenía una gran confianza en sus habilidades y deseaba que ella se convirtiera en su compañera de dao, por lo que el ser de Li Qiye, naturalmente, se convirtió en una espina en sus ojos.
Los ojos de Du Yuanguang revelaron su intención asesina mientras murmuraba para sí mismo: "Este mortal no conoce sus propios límites. Si no le doy una pequeña lección, seguirá pensando que está por encima del cielo y de la tierra".