ZONA DE CAZADORES
Un ambiente sumamente inquietante estaba a la vista. Y frente a un par de chicos dos auras escalofriantes netas de depredadores los miraban con ojos amenazantes.
Eran cazadores con sus inconfundibles máscaras de depredadores a los costados de sus rostros, los cuales sabían perfectamente a que venían ambos chicos y sin más preámbulos hicieron la pregunta aquella que definía a cualquiera sea quien sea.
—¿Qué signo del zodiaco son? —
Entonces la voz grave de uno de los chicos se escuchó.
—Mi signo zodiacal es Aries. —
El dueño de esa voz sin duda fue Tyler. En cuanto lo dijo su compañero Bradley respondió también poco después.
—Y el mío, Escorpio. —
Los ojos de los dos cazadores burbujeaban con interés junto a leves sonrisas.
—Miembros del ´Gran top´. Eh — habló el primero.
—Mph… Interesante, interesante. se lamió ligeramente el labio el segundo. Lideres innatos ¿Verdad? — Miró a su compañero en busca de una respuesta.
—Si. Respondió el primero volteándolo a ver. Aun así, debemos verificar si son actos. —
Los cazadores dirigieron sus miradas a Tyler y Bradley al mismo tiempo.
—Bien. Vengan los dos, ahora. —
El tono de voz del cazador que los guio sonaba más respetuoso que antes, lo que le pareció completamente raro a Tyler, aun así, se mantuvo en silencio por el momento.
En eso miró a Brad ley.
Como si hubieran usado telepatía Brad ley entendió sus acciones y asintió.
Para empezar, bajaron en un ascensor hacia el subterráneo.
Al llegar al primer piso pasaron por un largo pasillo y unas cuantas cámaras en el mismo para luego llegar a un gran campo de entrenamiento completamente equipado, desde afuera donde había grandes ventanales transparente que permitían ver hacia ese mismo campo observaron un poco lo que había dentro, ambos chicos contemplaron toda clase de herramientas que a simple vista se podían decir que eran de la mejor calidad posible, había de todo en ese lugar.
Todo con lo que logrará llevar un exhaustivo entrenamiento con un objetivo claro.
—Vamos entren. Dijo otro cazador, su voz a diferencia del primero el de este aun sonaba hostil. Es hora. —
En cuanto se adentraron más al interior del enorme campo de entrenamiento lograron ver como a la distancia varios grupos se encontraban siendo dirigidos por algunos cazadores con sus respectivas mascaras a los costados.
Al notar su presencia unas cuantas miradas se centraron en Tyler y Brad ley, ellos sabían que como cazadores potenciales no debían sentirse intimidados a pesar de que esa fuera la situación, ambos mantuvieron sus vistas a la par de quienes lo observaban mientras esas mismas personas se acercaban caminando lentamente hacia ellos.
Eran tres cazadores. Y dos de ellos desafortunadamente ya los conocían, eran los dos sujetos que hace tres días los habían recibido en la entrada de la estación para luego uno de ellos brindarle una terrible paliza a Tyler.
Las yemas de los dedos de Tyler temblaron ligeramente, pero logró mantener al margen esa leve sensación.
Una linda cazadora que nunca habían visto antes se acercaba junto a los otros dos, en cuanto estuvo cerca de ellos se adelantó y habló primero.
—¿Nuevos reclutas? — Preguntó.
Los ojos de los cazadores detrás de ella se mostraban descontentos.
—Si. — Habló un cazador de nuestro lado.
—Ya veo. Lo dijo al mismo tiempo que nos observaba y colocaba uno de sus mechones detrás de su oreja. Se dirigió a nosotros. Andando. —
Al estar a punto de darse la vuelta de regreso por donde vino. Alguien alzó la voz.
—Pero… continúo el cazador a nuestro lado que al parecer no había terminado de hablar. Ambos son miembros del ´Gran top´ por ende lideres innatos. —
La mujer lo miró con una mirada bastante complicada y el ceño fruncido.
—¿Qué? Su voz sonó algo fastidiada. Este es el reclutamiento de cazadores ¿Acaso crees que ´lideres innatos´ importa ahora? —
Los otros dos cazadores que ya conocían a excepción de sus nombres desprendían un aura asesina hacia Tyler y Brad ley.
—Conoces el proceso, Ashley. — Ahora ambos cazadores se miraban de forma desafiante el uno hacia el otro.
La cazadora rechinó los dientes.
El ambiente empeoro drásticamente.
—¡¡Atención!! —
Alguien clamó con una voz tan fuerte que retumbo por todo el lugar, logrando que todas las miradas de los presentes se centraran en él.
Luego de obtener lo que quería, continúo.
—¡Con ustedes la líder! —
Lo que lo llevó a apartarse y permitir la entrada de aquella bella dama que tanto Tyler y Bradley habían conocido hace poco.
Al notar su presencia como su mirada fría y penetrante todos agacharon sus cabezas en señal de respeto incluso aquellos cazadores de elite de la estación con excepción de Tyler y Bradley que no entendían con exactitud la situación.
Después de unos segundos todos levantaron sus cabezas, pero con sus miradas aun en el suelo.
Entonces finalmente la líder habló. Una mujer con una belleza sin igual.
—Bien. ¡Todos presten atención! Como ya deberían saber hoy empieza su primer día de reclutamiento. Al decirlo unos ojos juguetones y maliciosos se reflejaban en su iris. Sean bienvenidos a su peor pesadilla o al mejor ensueño de su vida. —
En cuanto lo dijo todos los novatos tragaron saliva abruptamente.
—¿Por qué eso de pronto? Ya lo sabemos. — murmuró Bradley.
Tyler también tenía eso en mente. Estaba por decirle algo cuando sus ojos se encontraron con los de su líder, lo que lo llevo a quedarse perplejo por unos segundos y manteniéndole la mirada.
Una leve sonrisa de fulgor se plasmó en el rostro de Rachel. Para luego voltear su mirada y culminar su discurso.
—Ashley. ¿Qué sigues esperando? — Preguntó Brett.
—¿Eh? Respondió ella un tanto fuera de sí y el cazador la fulminó con la mirada. Si… señor. — fue lo único que pudo decir.
Luego miró a Tyler y habló. —Ustedes dos síganme. Ahora. —
—Pero... mi señor. Replicó el cazador de nuestro lado. Ese no es el protocolo. —
—¿Pretendes contradecirme? — Respondió Brett llevando su cabeza hacia atrás y mirándolo de reojo con gran enojo.
—¿Estás seguro de querer hacer eso? — incitó el compañero de Brett de forma maliciosa.
—Yo… — tartamudeo el hombre frente a él.
—¡Uf! —
Un gran resoplido llamó la atención de todos.
—Qué situación tan complicada. ¿Debería interferir? —
Para su sorpresa era nada más y nada menos que la mismísima líder sentada en un sillón que se encontraba cerca.
Brett apretó sus dientes y lanzó una mirada furtiva hacia la mujer luego solo se marchó del lugar.
—Con su permiso, líder. — dijeron ambos cazadores despidiéndose de la líder.
Y al igual que Brett se marcharon.
En cuanto se alejaron.
—Cazador Ghael. ¿Cuál fue el motivo de su disputa? — preguntó la líder.
El cazador a nuestro lado se puso tenso.
—¿Entonces? ¿Responderás a mi pregunta? —
—¡Si, mi señora! Respondió con apuro. Lo que pasó fue que mi superior Brett no me permitía continuar con el protocolo con los nuevos reclutas ya que ellos pertenecen a los signos lidérales, entonces… —
—Es suficiente. Lo interrumpió al mismo tiempo que se levantó y se fue acercando a él. Comprendo la situación y aprecio que sigas las reglas, pero… Entonces se detuvo justo a su lado y continúo. Nunca olvides a qué lugar perteneces. —
Su repentina voz completamente fría lo dejó paralizado.
—¿Te ha quedado claro? —
—Si, señora. — respondió impotente mientras apretaba sus dientes.
—Ahora ustedes dos pueden irse, yo me encargo del resto. — Ordenó.
Ambos cazadores sin decir una palabra asintieron ante su orden y dieron una corta reverencia para luego retirarse.
Entonces sus ojos se encontraron con los de Tyler y Bradley estrechándose en una rendija.
Y abrió su boca. —Síganme es hora de que su travesía finalmente empiece. —
Poco después llegaron a una gran oficina elegante.
Estando dentro les pidió que se sentarán y en cuanto a ella también lo hizo al otro lado del escritorio.
Sacó unos cuantos papales y se los entregó.
—Estos papales son importantes. Léanlos y luego fírmenlos. Solo así serán parte oficial de este reclutamiento y posibles cazadores en el futuro. —
Tyler los tomó enseguida y le dio unos similares a Brad ley ambos leyeron y leyeron.
Los documentos eran básicamente las reglas del campo de entrenamiento, las medidas a tomar en caso de pasar las pruebas para ser un cazador, algunas cláusulas y por ultimo las reglas exclusivas para aquellos lideres innatos que se unían a tal reclutamiento.
Eso le pareció extraño aun así Tyler lo leyó de forma persistente y detallada, se sorprendió con todo lo que estaba escrito.
*El contenido de los documentos, reglas, medidas y más serán publicadas para los lectores en los siguientes capítulos, gracias por su comprensión. *
Tyler tomó un bolígrafo y sin una gota de duda firmó los papeles en su mano, Bradley al ver sus acciones hizo lo mismo.
—Bien. Entonces está todo listo. — la bella dama mostró una sonrisa juguetona.
—Espera. Habló Tyler. Tengo un par de preguntas para usted. —
—Continúa. —respondió.
—¿Eres el líder aquí? —
—Si y no. —
—Espera. ¿A qué te refieres con eso? —
Ahora no solo Tyler estaba confundido si no también Brad ley no comprendía la respuesta de la mujer.
—Lo responderé en forma simple. Se levantó de su asiento mientras se acercaba a la ventana principal del lugar. Soy una de los tantos lideres que existen como cazadores. —
Tyler no demoró en entender sus palabras y con la poca información que había obtenido pudo deducir sus palabras con exactitud hasta cierto punto.
—Eres parte del ´Gran top´. ¿Verdad? —
Los ojos de la mujer se estrecharon cómodamente al encontrarse con la mirada de Tyler. Y ella asintió dos veces.
Tyler continuo.
—¿Qué signo zodiacal es? —
—Leo. —
Justo ahora los rumores que había escuchado antes recuperaban su lógica en ese preciso momento.
´´Se dice que los signos zodiacales de Leo son bastantes atractivos con todas sus palabras´´
Ahora entendía el porqué de la belleza indescriptible de la mujer frente a ellos.
—Entonces. ¿Qué deberíamos hacer ahora? O tal vez… — dijo Tyler, pero no pudo terminar de hablar.
Rachel sostuvo con fuerza su mandíbula como la de Bradley. Y habló.
—¿Me pregunto si saben exactamente en lo que se acaban de meter niños? Su tez ahora se mostraba sombría y opaca Bien. Es suficiente de este teatrito. —
Luego de estas palabras los soltó.
El ambiente ahora tenía una espesa niebla escalofriante que, aunque no se logrará ver estaba allí.
—Es cierto, ambos son miembros del Gran top al igual que yo, pero eso no quiere decir que serán privilegiados solo por ello. Si bien tienen uno que otro punto a su favor, tienen más en contra de lo que imaginan, si realmente quieren ser lideres y ser tratados como tal demuestren que realmente pueden con ese título. —
El rostro tanto de Tyler como de Bradley estaban intranquilos con las palabras de la mujer aun así se mantenían en total calma.
La bella dama sonrió con placer ante la reacción de los chicos, entonces alzo su mano y junto a un sutil gesto sin dejar de contemplar a ambos chicos llamó a alguien que desde mucho antes estaba en el lugar.
Entre las oscuras sombras de los rincones estrechos que se encontraban en esa modesta oficina algo se movió, los chicos miraron esa escena atónicos y desconcertados.
Se dieron cuenta que la sombra que se movía lentamente pertenecía a una persona, pero no a cualquiera era un tipo enorme de al menos 1,90 metros o un poco mas quien sabe el punto es que no siendo suficiente con su enorme estatura también tenía una masa corporal formidable y un aura tenebrosa. Si se tratara de describir a esta persona en una sola palabra, sería un enorme acorazado.
Con el sutil movimiento de Rachel, el enorme acorazado se acercó a los tres en general.
Cuando estuvo lo suficiente cerca como para observarlo mejor, se inclinó hacia la mujer.
—Es suficiente, Brandon. Lleva a nuestros nuevos reclutas a la base de pruebas lideral. Su mirada se volvió maliciosa ante ellos. No son especiales a pesar de sus signos… Hizo una corta pausa para hacer que ambos chicos se desesperaran minuciosamente. Pero deben ser entrenados como verdaderos asesinos depredadores. —
—Lo entiendo, líder. Yo mismo me encargaré de estos dos. —
La mirada del acorazado se penetró de forma abominable y con furia en Tyler y Bradley, sus ojos de un color dorado intenso contenían toda una ira consumida en llamas.
—No fue eso lo que te pedí, Brandon. —
La bella mujer con una mirada seductora pero desafiante observaba al enorme acorazado.
—luego de eso llévalos con Kayden. Sin duda sabrá como manejarlos. —
—Yo podría hacer un mejor trabajo que ese tipo, mi señora- — enseguida una irá en los ojos de la líder se disparó.
—¿Me contradices? Estas poniendo en duda mi palabra. ¿Es eso? —
—No. Yo… mi líder. —
La mirada de la mujer se estrechó formidablemente.
—Lo que ordene, líder. — habló el acorazado con un tono de rendición total. Mientras empujaba con ambas manos los hombros de los dos chicos dejando atrás a la bella dama.
Tyler la volteo a ver por un segundo.
Su rostro contenía un éxtasis a simple vista. De inmediato se dio cuenta como todo esto sería más complicado de lo que llegó a imaginar en su momento.
El acorazado Brandon llevo a Tyler y a Bradley hacia una área distinta y distante de la que habían visto en su llegada, se puso frete a ellos dándoles la espalda y abrió un portón de acero oscuro como la noche.
El lugar estaba completamente plagado de un ambiente lleno de desesperación, agonía e ira.
Sala de reclutas.
Habían llegado a la primera sala de reclutas, finalmente su travesía empezaría.