He estado pegado a mi computadora por más de un día y medio escribiendo el final de mi novela.

Mi teléfono no paraba de recibir mensajes y llamadas como si el mundo se fuera a acabar, era mi editor. Se suponía que debía de haber mandado mi parte hace 4 días atrás, pero tuve un par de inconvenientes a causa de mi estado de salud.

—Gunther, mis superiores empezaron a preguntar por ti, necesito que me mandes tu escrito antes de que termine la semana, si no lo haces puede que en verdad te terminen despidiendo por no cumplir con la fecha de entrega.

Ese fue un mensaje de voz de mi editor, y si, por muy estúpido que suene, mi nombre es Gunther, pero prefiero que me llamen Gun.

Mi editor siempre fue un hombre muy bueno conmigo, el no era como los anteriores que me trataban mal y me trataban como esclavo, cada vez que yo le preguntaba si podía tomarme algunos días de descansos el accedía sin mucho problema.

Es bien sabido de que yo padezco de algunos problemas de salud desde hace un par de años. Pero no hay que sentir pena de mi, todo es por culpa de que no salgo de mi maldita casa para ejercitarme un poco, ni siquiera para tomar el sol o tomar un poco de aire fresco.

Por lo tanto, el único culpable de todo esto es nada más y nada menos que yo, y mi falta de respeto a mi propia integridad

Tenía unas ojeras que me hacían ver como un mapache a causa del insomnio, y no ayudaba en nada que también tuviera anemia, también había tomado una cantidad tan insana de cafeína que había empezado a perder mi sentido del gusto.

Mis ojos estaba clavados en la pantalla como si estuviera hipnotizado, y en cuestión de minutos termine página tras página como su fuera un robot que no se cansaba

Pero lastimosamente los humanos tenemos límites, y muchas veces esos límites eran difíciles de distinguir antes de que las consecuencias llegarán.

Repentinamente pare de escribir y me aparte del monitor al sentirme un poco mareado, intente levantarme para salir a estirarme y tomar un poco de aire fresco, pero mis piernas no respondían por mucho que lo intentará, se sentían igual de pesadas que las mismísimas rocas.

Cada segundo que pasaba era como si mi estado empeorará gradualmente.

Me costaba organizar mis pensamientos debido al cansancio y sentía que me derretía, pero regrese a mis sentido en el momento que sentí un dolor punzante en mi pecho, era como si un cuchillo estuviera atravesando mi corazón.

—¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHH!

Ese fue mi último intento para poder llamar la atención de mis vecinos, pero había olvidado que hace unas dos semanas, ordene que la habitación donde yo estaba fuera insonorizada, de esa forma nadie podría interrumpirme mientras escribía, y al mismo tiempo evitaría que los vecinos llamaran a la policía cuando jugará League Of Legends.

Resumen: He muerto...

Yo ya estaba consciente de que eventualmente me moriría de esta forma tan patética. Desde joven he tenido la mala costumbre de dejar todo mi trabajo a último momento, lo cual tendía a causar que yo siempre estuviera trabajando con la cuerda en el cuello para poder cumplir con la fecha acordada

Tenía la idea de que la muerte sería agónica, pero fue lo contrario a lo que pensaba, fue como caer en un profundo sueño después de regresar a casa de un horrible día de trabajo.

Todo era oscuro a mi alrededor... una cálida oscuridad que me abrazaba y no me dejaba ir.

No había ninguna luz al final de túnel, ni siquiera había algún ángel que acudiera en mi rescate para sacarme de aquí, algún dios

Solo una oscuridad que te asfixiaba.

Ya no tenia sentido pelear, simplemente acepte mi destino y deje de poner resistencia.

•••

—KABOOM

Justo cuando empecé a disfrutar de este momento de tranquilidad, escuché un estallido muy similar al de un trueno, pero no pude ver de donde venía.

—POW

Recibí una patada, la cual me hizo regresar a la realidad de golpe.

Se sintió como cuando tienes uno de los sueños más hermosos que pudiste haber tenido en tu vida, y de repente llega tu madre con un vaso de agua para que te dignes a levantarte e ir a la escuela.

Abrí los ojos y miré que estaba cayendo desde unos 8 metros de alto, apunto de caer de cara contra el suelo y romperme todos los dientes en el proceso

Sin dudarlo puse mi brazo izquierdo en medio para tratar de aligerar los daños de la caída, pero sólo fue una reacción instintiva

—Crack

Ese fue mi brazo el cual se disloco en el momento en el que caí directo en el suelo, era de esperarse teniendo en cuenta la gran altura desde la que caí.

Mire hacia arriba en busca de los culpables, y sorpresa, allí estaban en el puente de donde me habían empujado de forma rastrera

Eran 4 hombres jóvenes, la apariencia que tenían me daba a entender que rondaban la edad de unos 15 a 18 años cada uno, pero a pesar de su edad tan joven, era más que obvio que su intención fue la de matarme cuando me empujaron. Pero cuando vieron que logre sobrevivir a la caída empezaron a actuar de forma nerviosa sin saber que hacer.

Sería estúpido que me quedara a esperar a que alguien viniera a salvarme, el dolor era fuerte pero el miedo a que esos idiotas me mataran era aún mayor.

Mis piernas temblaban como si estuviera apunto de cagarme encima, y aun no lograba asimilar lo que estaba ocurriendo

Comencé a correr, el agua estaba sucia porque venia de las alcantarillas, por suerte el agua no era muy alta pero si era suficiente como para ralentizar mi avance.

Por suerte para mi, cuando ellos vieron que este agua era residual se dieron por vencidos y me dejaron de perseguir.

Los vi alejándose poco a poco, pero aún no estaba seguro de si se habían ido o solo estaban esperando que saliera del agua para no ensuciarse.

Me espere algunos minutos más y me concentre para prestar atención y poder escucharlos en caso de aun seguir allí. Pero por mucho que espere ya no había ninguna clase de movimiento, así que tenía luz verde para salir del agua asquerosa del río.

No tenía ni siquiera mi teléfono encima, así que no me quedo de otras más que colocar de nuevo en su lugar mi brazo que estaba dislocado.

—Argh...

Fue más doloroso de lo que pensaba, pero logré aguantarlo para evitar llamar la atención no deseada. Aun no podía mover mi brazo como debería pero mínimo aun era funcional.

Por desgracia el olor del agua quedó fuertemente impregnada en mi ropa, no pude evitar vomitar cuando me di cuenta que el agua residual de las alcantarillas.

Recupere la compostura después de vomitar dos veces seguidas, por suerte estaba lloviendo y pude usarla para mojar mi ropa y quitarle ese mal olor. Pero fue entonces cuando me di cuenta de que no podía reconocer donde estaba ahora mismo.

También me percate de que ahora era pequeño que antes, era moreno, tenía un cabello poco cuidado que era largo y negro, mi ropa era de pésima calidad, tenía una incontable cantidad de agujeros y me daba mucha picazón usarla.

Era más que obvio por lo anteriormente mencionados, que este cuerpo no era el mío y le pertenecía a un joven de 16 años como mucho.

Y eso solo significaba una sola cosa...

—¿Es esto obra de dios o de algun ser supremo? ¿Sistema? ¿Dios?

Grite a los cuatro vientos sin recibir ningún tipo de respuesta o señal divina.

¿Esto es una reencarnación? No, las reencarnaciones solo son cuando eres traído como un bebé y iniciar una vida desde cero.

Esto era una transmigración en todo el sentido de la palabra.

Pero en vez de alegrarme por este milagro que todos anhelarían, yo simplemente me quede estupefacto tratando de asimilar toda la mierda que acababa de ocurrir sin tener que volverme loco en el proceso.

Tenía que aceptar que este no era mi cuerpo y mi anterior vida se había ido por el desagüe como si no valiera nada.

Desde mis bienes materiales, mis cuentas bancarias, mis fanáticos, y los años que le dedique a la escritura, todo se habían esfumado como si nunca hubieran existido, y ahora no me quedaba de otra mas que aceptarlo y seguir adelante.

Estaba descalzo, mojado como un perro faldero, caminando por una ciudad que no conocía, aunque lo correcto sería...

Una ciudad la cual no recordaba...

La ciudad lucia más moderna de lo que yo pensaba que sería.

La idea que yo tenia de este mundo era que se trataba de uno medieval con falta de avances tecnológicos, pero era lo contrario, incluso habían carruaje los cuales se impulsaban usando artefactos mágicos

Camine por las calles mientras contemplaba las maravillas que está ciudad tenia para mi.

•••

Antes de darme cuenta, acabe en el centro de la ciudad pidiendo limosna junto a un grupo de vagabundos.

Mientras yo caminaba sin rumbo ellos me vieron con mi brazo malherido y se apiadaron de mi, incluso uno de ellos compartió un pedazo de pan para que no me muriera de hambre.

Me sentí insultado porque me confundieran con uno de los suyos, pero me trataron muy bien y además, la gente que pasaba me empezó a dejar muchas monedas de limosna al ver que mi brazo si estaba herido de verdad.

Me dieron 28 monedas de cobre, lo cual era suficiente como para comprar ropa decente y una poco de comida en un puesto ambulante.

No aguantaba seguir caminando descalzo, así que le di unas 2 monedas de cobre a otro vagabundo para que me diera sus sandalias.

Fui a un puesto de comida ambulante, y mientras comía una brocheta de pescado escuche a una pareja discutir.

—Te dije que incluso aquí los vagabundos son frecuentes como en el resto de ciudades.— murmuró una mujer detrás mio.

—¿Y como iba a saber yo, de que incluso en la ciudad capital de Dyross, no iban a ser capaces de controlar a la cantidad vagabundos en las calles?— respondió enojado el hombre que la acompañaba.

Estaba en la capital del país Dyross.

Es esa misma Dyross que yo conocía, y gracias a esto por fin logre recordarlo, y ahora ya sabia donde estaba.

Dyross es un país en una de las historias más viejas que he escrito.

Se remonta a la época cuando yo aún tenía la esperanza de graduarme de la preparatoria y tomar una carrera en la universidad, fue entonces cuando comencé a escribirlo en conjunto a un amigo que hice en internet.

Era un trabajo de principiantes, muchos dialogos y historias eran muy planos, pero nos tomábamos nuestro tiempo para que nuestra obra se convirtiera en lo mejor de lo mejor, la crème de la crème.

Lastimosamente mi amigo desaparecio repentinamente sin ningun tipo de explicación, y fue justo cuando íbamos a empezar a escribir el final, así que no me quedo de otras más que tomar su lugar y arreglármelas para satisfacer a la gente que esperaba con grandes expectativas.

Y de forma extremadamente predecible, termine dando uno de los finales más insípido nunca antes visto o creado por un escritor, no era horrible, pero tampoco era la gran cosa como se esperaban los que seguían el proyecto de cerca.

Después de ese dia, me obsesione con crear una obra igual de buena por mi propia cuenta y inicie a trabajar de forma profesional en ello.

Esa es la razón de porque daba todo de mi escribiendo, al punto de descuidar mi propia salud en el proceso. Pero no tengo ni idea de porque comencé a llorar un poco al recordar mis humildes inicios como escritor.

El momento melancólico no duró mucho, porque también recordé lo que iba a ocurrir dentro de dos años.

Una de las guerras más horribles iba a iniciar justo aquí, en la capital del país Dyross.

Todo iniciaría por culpa de un grupo terrorista que repudia el uso de la magia, por lo tanto en los próximos dos años empezaran a planificar la creación de una cúpula de anti-magia.

Esta cúpula hará que sea inutilizable los artefactos mágicos y las técnicas mágicas, lo que significa que la capital quedará vulnerable en su totalidad a las fuerzas terroristas.

La capital será destruida y los países vecinos aprovecharan el caos provocado para iniciar una invasión en conjunto.

Dyross tiene una fama de ser uno de los países con mayores avances tecnológicos gracias a la magia, pero son extremadamente conservadores a compartir sus avances mágicos con el resto del mundo.

Todos anhelan un poco de lo que tiene Dyross, así que era obvio que iniciarían una invasión para poder hacerse con esos avances tan codiciados.

Puede que yo conozca el futuro y como evitar que pueda ocurrir, pero de nada sirve conocer el futuro cuando no tienes ningún tipo de forma de convencer a la gente de lo que dices. Si empezará a advertir de lo que ocurriría me tacharían de loco y me sacarían de la ciudad capital para evitar que cause incertidumbre entre los ciudadanos.

Lo único que yo puedo hacer en mi situación actual es solo una cosa...

Ir al casino, donde puedo ganar dinero y puede que algo mas.