—...¿Enserió?.
—Si, enserió.
—...
El hombre tomó un respiro profundo y miró al vendedor descarado, que tenía una sonrisa come-mierda en el rostro: —Esto es demasiado caro.
—¿No puedes pagarlo? .—El vendedor volteo los ojos y dijo—. Si no puedes pagarlo, ¿que haces preguntando el precio? Vuelve cuando tengas plata~.
El hombre se fue cabiz bajo y decepcionado, ya que no pudo comprar el artefacto extraño. Hoy era el cumpleaños de su querido niño, pero no pudo encontrar algo interesante aparte del extraño artefacto.
Al parecer, tendrá que comprar un dulce o algo...
Mientras tanto Alexander, que lo había visto todo, estaba de brazos cruzados y un poco interesado en el artefacto parecido a una tabla.
Había pasado 7 años desde que voto/tiro a su sistema y actualmente tiene 8 años. Media unos 1.40 cm, cabello rojo y naranja que le llegaba hasta la espalda superior y par de ojos cafe marron profundos. Su cola, que había crecido un poco, se meneo de izquierda a derecha mientras reflexionaba.
Al final, sin poder resistir a su curiosidad, Alexander se acercó al mercader ambulante, que curiosamente era humano, para ver que era exactamente el artefacto raro.
—Buenas joven, ¿que va a comprar hoy? .—El mercader había estado contando unas monedas de bronce cuando sintió a Alexander acercarse, guardo rápidamente todo y sonrió a un posible cliente.
Alexander miró la mesa bellamente decorada; Había un florero, un telmo de plata con patrones de flor, una bolsa llena de semillas desconocidos, núcleos de mana pequeños y el artefacto raro.
Si Alexander tuviera que comparar el artefacto; Se veía igual a un IPhone 6. Pero muy maltratado y desgastado, parecía que lo habían abandonado y posteriormente enterrado bajo tierra de lo sucio que esta.
En ese estado, si Alexander no se hubiera acercado, nisiquiera se hubiera dado cuenta de los detalles:
—¿Cuanto por esto? .—Alexander señaló el "celular" y preguntó.
—¿Eso?...Bueno... unos 10 de oro, joven.
El comerciante parecía un poco incómodo al ver el celular/artefacto sucio. No lo limpio debido a que tenía miedo de dañar una posible mercancía.
No es la primera vez que un mercader limpia un tesoro y al final lo rompe o lo daña por accidente.
Sin querer arriesgarse, el mercader lo tomo tal cual estaba cuando lo encontró y lo exhibió.
Debido a que parecía un artefacto muy moderno y posiblemente funcional, el mercader le puso el precio de 10 de oro.
Un precio muy alto para un pueblo rural pero muy bajo para una gran ciudad o un gran imperio.
—"¿10 de oro...? Esto no vale 10 de oro" .—Alexander pensó y miró al "celular", negó con la cabeza y sacó de su bolsillo 2 moneda de oro—. Señor, esto no vale 10 de oro; Mínimo, 2 de oro son suficientes.
El mercader se sobresalto al ver que el niño, que creía iba a perder el interés al saber el precio, sacó 2 monedas de oro: —Mi precio es fijo Joven; ¡10 monedas de oro!, ¡Ni más ni menos!.
Alexander sonrió tranquilamente y respondió: —Señor, mire bien el objeto; ¿No se le hace conocido?. Una cosa tan dañada y sucia no valen 10 de oro, mínimo valdría 100 o 200 de plata, pero hoy le estoy dando 2 de oro que ya es demasiado. ¿Pero usted me pide más? No sea tan codicioso y acepte la venta que le doy; Nadie en este pueblo compraría tal cosa sucia a 10 de oro.
El mercader se rasco la cabeza. Es cierto que había intentado vender esa cosa en varios pueblos pero todos y cada uno de ellos había logrado vender toda su mercancía, menos el artefacto sucio.
Al final, si no lo vendía hoy en este pueblo, lo regalaría a la primera persona que vea o lo votaría. Después de todo, el objeto estaba lleno de tierra y ensuciaba mucho su caravana.
Pero, ¿quien hubiera pensado que en este pueblo había alguien dispuesto a comprarlo?, a pesar de que lo compraba a un precio mucho menor que originalmente quería, al final una venta era una venta.
El comerciante suspiro y acepto las dos monedas de oro:
—Bien, puedes tenerlo —dijo el comerciante.
—Gracias —dijo Alexander y tomó el celular entre sus manos.
Después de eso, Alexander camino hacia la plaza/parque del pueblo y se sentó en una de las bancas de piedra. Miró a su alrededor y vio a algunos niños de su edad jugando, varias personas semi-humanas de distintas razas y características durmiendo en el suelo mientras tomaban sol y uno que otro grupo hablando.
Sonriendo por la atmósfera pacífica, Alexander miró su celular.
Estaba muy maltratado; La pantalla esta rayada ligeramente y llena de polvo, la parte trasera tenía tierra pegada y toda su superficie estaba sucia debido a la tierra amarilla. En general, este celular debió haber dejado de funcionar hace años pero hoy lo compro.
¿Porque lo hizo si obviamente la cosa estaba más que dañada? Simplemente lo compro porque quizo.
—Así que esta es la tecnología de punta en este mundo... —dijo Alexander con un mirada profunda hacia el celular polvoriento, llena de pensamientos.
En los 7 años, a pesar de hacer un mínimo esfuerzo, no fue lo suficientemente perezoso como para no leer uno o dos libros acerca de temas distintos. Como la historia del mundo, la geografía, las leyendas o los distintos lugares.
Incluso leyó libros sobre magia y alquimia solo porque se le hacía interesante los dibujos.
Grande fue su sorpresa al enterarse que había múltiples energías en este mundo. Mana para los magos, Qi para los guerreros o como a él le gusta llamar "Cultivadores" y Aura, también existía energia mental para los psíquicos.
Esos 4 poderes existían en el mundo. Habían más energías pero eran minoría en comparación.
Los humanos no tenían una conexión tan cercana al mana debido a ciertos asuntos en el pasado, así que la energía que más usaban era la del cielo y la tierra, osea el Qi y el poder propio como el aura.
Algunos incluso usaban el poder de la mente, aunque comparado con los primeros 3, era parcialmente más débil.
Debido a que para ellos no fue suficiente, empezaron a investigar y gastar sus altos niveles de longevidad para poder desarrollar algo que los saque de la situación tan peligrosa que tienen.
Así, mucha tecnología nueva y rara apareció en el mundo. Si Alexander tuviera que comparar la tecnología de su anterior mundo con la de esta, se sorprendería al ver un margen tan grande entre calidad, utilidad y efectividad. La tecnología de su anterior mundo sería solo juguetes en comparación.
Por ende, el artefacto o "celular" que tenía en sus manos sería considerado un "tesoro" para las atrasadas razas extranjeras. Claro, las demás razas estaban en proceso de copiar y crear sus propias armas.
Los elfos dejaron sus arcos de madera y empezaron a usar arcos de hierro y pistolas. Obvio, sin dañar la naturaleza.
Los demonios dejaron sus conjuros y crearon bombas de maldiciones. Obvio, con intenciones de maldecir las tierras y dejar morir la vida.
Las hadas empezaron a usar cristal y usar ropa...
Alexander incluso había hecho una lista de cosas increíbles que había pasado debido a la nueva tecnología.
Claro, debido a que en este mundo existía la magia, el Qi y el aura, no dañaron tanto el mundo para conseguir sus objetivos como hicieron las grandes potencias de su anterior mundo.
Por ejemplo, Alexander estaba muy seguro de que este teléfono usaba batería hecha con un núcleo mágico y un poco de ciencia.
Claro, incluso si dañaran el mundo produciendo tal tecnología, eventualmente todo se arreglaría debido al mana atmosférico y el Qi, que eran energías hecha del propio mundo.
A no ser que claro, suceda algo que dañe de forma irreversible al planeta...
Alexander reflexionó un rato escuchando el viento, las risas risueñas de los niños, y el suave maullido perezoso de los hombres Zorros.
Presiono tranquilamente el botón de encendido al costado del celular y espero...
Entonces, la pantalla se iluminó y el logo [Z-series] apareció.
—¿Enserió prendió?... Este teléfono enserió es fuerte, ¿eh? .—Alexander se sorprendió y levanto una ceja.
Después de un rato, el menú principal del teléfono apareció en pantalla, había lo basico; Contactos, galería, cámara, blocs de notas, mensajes...
Alexander por curiosidad abrió la galería y encontró varias carpetas, un tanto sospechosas.
—¿"Tiempo Con Mi Esposa"?... ¿"Mi hermosa prima"?...¿"Mis tres bellas tias"?... Vaya, el propietario original de este teléfono debió tener mucha confianza al no tener una contraseña de bloqueo... .—Alexander levanto una ceja y examino las carpetas de fotos.
En ellas había múltiples fotos ya viejas de jóvenes mujeres, cada una con su encanto y belleza propios. Algunas posando provocativamente mientras sonreían a la cámara, otras directamente estaban desnudas mostrando la belleza de sus cuerpos y algunas eran tomadas como recuerdos de viajes.
Lo que no daba confianza a Alexander eran esos titulo que tenían las carpetas...
—Al final, no lo puedo juzgar —dijo Alexander y se encogió de hombros.
Después de mirar un rato la galería, borro las carpetas y cerró galería. Cosas como el nudes de alguien era un asunto privado y que más de un desconocido lo viera era muy irrespetuoso hacia la persona en cuestión.
Alexander dirigió su mirada hacia el icono de Contactos y lo presiono: —Vamos a ver que tenemos aquí...
Después de presionarlo, una larga lista de contactos desconocidos para Alexander apareció. Había varios que tenían un nombre gracioso; "Mi buen Pana Rodri", "La vecina de al lado", "La vendedora de chusma", "Mi Sexy y Bella tía", "Mi otra sexy y bella tia", "Mi sexy y bella tía 2", "Mi madre, la progenitora", "Mi gran prima vendedora de dulces".
Y la lista seguía y seguía...
Alexander nuevamente hizo lo mismo que con la galería, borro cada contacto y cerró la aplicación.
Después paso su mirada por la pantalla buscando algo más que sea de interés y vio el bloc de notas: —Me pregunto que guardas aquí, amigo...
En el bloc de notas había varios borradores de cosas al azar. Algunas aparentemente eran cosas vitales o sin importancia.
—Enserió... ¿Quien hace un diario en el bloc de notas? .—Alexander sonrió al ver una carpeta titulada "Mi diario" en el bloc de notas y lo abrió.
En ella, el anterior dueño del celular explicaba su día a día. Cosas como que comió, que hizo o con quien hablo.
Algunas eran graciosas, otras aburridas o interesantes. Básicamente el anterior dueño se llamaba Rick Chadsley, un adulto humano que vivía en el mega continente Hyuman. Un mega continente habitado casi en un 90% por humanos.
—Lo lamento, Amigo Rick. Pero este teléfono ahora es mio; El que lo encuentra se lo queda, dicen .—Alexander murmuró y sonrió. Borro todas las carpetas del bloc de notas y cerró la aplicación.
Alexander miró el porcentaje de la batería y vio que solo tenía unos 42% de carga. Alexander entonces recordó de que no tenía cargador y maldijo su mala suerte.
—Bueno, ya pensaré en algo. —Al final, nuevamente se encogió de hombros y puso ese tema de lado.
Apago el celular, lo limpio lo mejor que pudo de la tierra y polvo, y se lo puso en el bolsillo de su túnica.
—Es extraño usar solo una túnica sin pantalones... bueno, ya que —dijo Alexander un poco incómodo debido a que estaba más acostumbrado a los pantalones que a solo tener una túnica en el cuerpo.
Alexander miró al grupo de niños semi-humanos que estaban jugando a la pelota y se levantó de su asiento, se palmeo el trasero y se fue a jugar:
—Oigan hermanos, ¿me puedo unir?.
—¡Claro, mientras más mejor!.
Alexander sonrió ante la calidad bienvenida y empezaron a jugar a una versión un tanto abrumadora del fútbol. En donde no se contenían al usar su fuerza bestial a la hora de patear el balón.
Sin que se diera cuenta, una notificación apareció repentinamente en el celular, avisándole de algo. Pero Alexander estaba tan concentrado en el juego que no se dio cuenta.
——[2 horas después~]——
Alexander estaba caminando en dirección hacia su casa. En general el pueblo está conformado por 150 habitantes, y varias casas. En el centro de todo está la plaza/parque en donde está una estatua de un hombre sosteniendo una antorcha y portandor una gran armadura.
Supuestamente el fundador del pequeño pueblo Paja.
Al Oeste esta el Bosque del templo de la sabiduría. Un bosque que se hizo famoso durante un corto periodo de tiempo debido a que se creía que en ella existía un templo con innumerables técnicas, libros sobre alquimia y hierbas míticas.
Lastima que jamás hallaron el camino hacia el templo.
Mientras más caminaba Alexander, menos casas veía y mas pasto había. El sonido del viento tan relajante como siempre y el sonido de las cigarras era todo lo que se escuchaba...
—¡ ¡Waaaaah! ! .
O tal vez no.
Alexander escucho un llanto a la distancia y vio que en la pequeña corriente que conectaba con un pequeño rio estaba una canasta atorada por unas ramas.
Intrigado, Alexander camino a pasos tranquilos y mientras más se acercaba más fuerte era el llanto.
Cuando finalmente llegó, vio a un bebe cubrido con una manta de patrones blancos y negros, como el pelaje de un tigre.
Se agacho y aparto la manta. En la canasta, un bebé semi-humano estaba llorando a mares de suma tristeza. Sus brillantes ojos azules llenos de lagrimas, su hermoso cabello blanco despeinado con un par de orejitas de tigre blancas con patrones negros por encima y una pequeña cola por encima de su pañal.
Ella tenía un collar en su cuello con un símbolo de media luna y a Alexander se le hizo curioso.
Debido a que la bebé se podría deshidratar debido al llanto, Alexander la tomó con todo y canasta.
Antes de que pudiera ponerla en sus brazos, una mano pálida y delicada como el papel salió del agua y agarro la esquina de la canasta con fuerza negándose a dejar ir a la pequeña.
Alexander miró la pequeña mano de lo que parecia ser una mujer y después a la bebe, que había parado de llorar para mirarlo con curiosidad. Después de reflexionar, el hablo: —No tiene que preocuparse señorita; Yo la cuidare junto a mi familia de ahora en adelante, lo juro. Usted descanse tranquila.
Alexander había leído sobre estos casos en varios libros sobre magia espiritual; Existían personas que eran recias a irse o dejar algo atrás, así que se ataban sin darse cuenta al mundo material y no podrían descansar hasta que el asunto que dejaron atrás no se complete.
Ni vivos ni muertos; Existencias en constante sufrimiento y constante tristeza debido a que no pudieron completar sus asuntos en vida. La mayoría de casos solo se quedan así o se convertían en espíritus malignos mientras que en un muy bajo margen esos mismos seres lograban obtener la paz y dejar el mundo mortal para así reencarnar de forma satisfactoria.
Claro, la reencarnación no estaba confirmada. Era solo un concepto y nada más.
Claro, "Era" porque Alexander si confirmo que la reencarnación es posible pero no tenía pruebas concretas para que los demás le creyeran. No podía usar sus recuerdos como evidencia debido a que su secreto se revelaría y no quería tener más problemas de los que ya tenía.
Después de escuchar la suave voz y las palabras de Alexander, la mano pálida poco a poco dejó la canasta y se hundió en el agua.
Después, una voz llena de tristeza sono: —Gracias...
—No hay de que, descanse...
Alexander sonrió levemente y despidió a la mujer que ya había pasado a mejor vida. Miro a la pequeña tigre y sonrió mostrando sus colmillos: —Bienvenida a la familia Léblanc, pequeña.
La bebe parecía entender sus palabras, así que alzó sus pequeños brazos y hizo unos sonidos muy lindos combinado con pequeñas risas.