"¡Zehahahaha!". En un misterioso e indistinguible lugar, un hombre viejo con el pelo cuidadosamente peinado en varias "M" se frotaba su barba inmaculada en forma de candado que se conectaba perfectamente a sus patillas, mientras soltaba una estruendosa risa. Sin embargo, la vejez no pudo quitar su escandalosa apariencia.
A pesar de su edad, el brillo en sus ojos no se había atenuado en lo más mínimo, y es que con la tecnología actual, no es un problema vivir varios cientos de años e incluso milenios para los más adinerados. De hecho, la inmortalidad no era algo imposible, sin embargo, el precio era demasiado caro… despojarte de tu humanidad.
La Familia Imperial Von despreciaba tales actos, aunque aumentar tu esperanza de vida era permitido. Algunos de los Emperadores Estelares más ambiciosos gobernaban durante milenios, pero incluso el Emperador con más miedo a la muerte no se le pasaría por la cabeza despojarse de su humanidad.
Había una especie de orgullo innato dentro ellos, vender su humanidad seria peor que venderse a si mismos y ser follado brutalmente por una manada de Hodors, una tribu muy parecida a los ogros de las historias de fantasía.
Esas palabras fueron dichas hace decenas de miles de años por el Emperador Von más longevo de la historia: Fackel Von Ignatius. En su lecho de muerte miró con calma a su hijo que acababa de heredar el trono y transmitió su legado. Aunque el hijo pensaba que esas palabras eran bastante groseras, creyó que era una buena frase para que su padre fuera inmortalizado en la historia.
Pero nadie podía imaginarse que el anciano que se aferraba tanto a la vida murió con una sonrisa en su rostro mientras miraba a quien llevará su fuego.
El Emperador de esta generación tampoco fue la excepción, pero tenía el deber de mantenerse vivo hasta que se escogiera un nuevo Emperador Estelar, hasta entonces, no podía permitirse morir.
Luego de reírse durante un par de segundos, sofocó finalmente la risa, pero la sonrisa en su rostro se mantuvo: "Interesante… Heard Alexa, ¡Orden de Prioridad 0! recupera el cuerpo de la madre de Luke y reactiva sus signos vitales… ya que estamos, haz lo mismo con las madres de Atom, Daryl, Zuko, Castro y Neji".
"A sus órdenes, Su Majestad". Se escuchó una voz robótica, pero sorprendentemente humana responder. Era una voz femenina, sonaba suave y agradable. Esta era el Cuarto Sentido, Heard Alexa, una antigua elite humana que optó por sacrificar su humanidad para mantener la estabilidad del Imperio Estelar Von.
"No me decepcionen… mis hijos". Murmuró el hombre viejo, y siguió viendo tranquilamente la actuación de sus otros hijos.
***
Luke se acostó en su cama y permaneció mirando al techo durante 1 hora. Todo tipo de pensamientos cruzaron su mente.
"… Leia no parecía reacia", Luke murmuró suavemente.
Luke ya no estaba preocupado por su padre, no ayudaría ponerse nervioso por tales asuntos, incluso si su padre quisiera matarlo no podía hacer nada para defenderse.
Podía quedarse pensando en qué hacer si se presentara tal situación y qué palabras podía decir para disminuir la posibilidad de que lo mataran, pero al final concluyó que era una pérdida de tiempo, no quería volverse paranoico.
"Sigh", Luke suspiró de repente. 'Solo puedo ir lentamente… mi primer objetivo será completar perfectamente el entrenamiento que dijo Leia'.
Luke cerró los ojos lentamente. Luego de unos minutos su respiración se volvió rítmica y entró al reino de los sueños. En él, una figura borrosa lo abrazó suavemente mientras acariciaba su cabello. Sorprendentemente, Luke no parecía aprensivo, como si fuera la acción más natural hacia él. Descansó tranquilamente en el regazo de esa figura hasta que se despertó.
***
Luego de ver a Luke irse, Leia se quedo unos minutos en su lugar para luego dirigirse hacia su habitación.
Una vez dentro saltó a su cama hecha de los materiales más finos del Imperio Estelar Von; lana de ovejas lunares, plumas de bisonte mágico y otros materiales hechos con tecnología. Por cierto, a pesar de que el bisonte lleva la palabra "mágico" en su nombre, está lejos de serlo, se le llamaba así porque sus plumas cambiaban de color dependiendo la dirección y tipo de luz, haciéndolo parecer un adorable arcoíris andante. Una vez que las plumas eran extraídas perdían este efecto y se mantenían blancas, perfectas para crear soportes para la cabeza… almohadas.
Leia se acostó de lado en posición fetal mientras abrazaba su almohada, solo se le podía ver sus hermosos ojos, la almohada tapaba el resto de su rostro. Sin embargo, esto solo agregó más puntos a su ternura y les daría a los machos de corazón la necesidad de protegerla.
¿Pero cómo Leia podría permitir que otros la vieran así? Solo adoptó esta postura porque nadie la podía ver, incluso el Emperador sabia dar privacidad a sus huéspedes.
Leia estaba pensando en lo ocurrido hace unos minutos. Ella era solo una joven doncella que intentaba escapar de su destino de plebeya.
A pesar de que sentía repugnancia frente a esos nobles, ella tambien era una joven estudiosa que estaba acostumbrada a leer historias sobre personas y sus experiencias. Leia tambien anhelaba el amor y ser querida por su ser amado.
Sin embargo, Leia no era tonta, aunque la apariencia de estos nobles no era baja debido a la mejora de su estirpe durante generaciones que aseguraba que la mayoría de los nobles tuvieran garantizada una apariencia superior al promedio, sabía que estos nobles tenían malas intenciones y no eran sinceros en absoluto.
'Tal vez esas jóvenes de campo ignorantes estén felices por ello, pero yo solo siento asco en mi corazón'. Esos eran los sinceros pensamientos de Leia frente a la persecución de estos nobles, ella anhelaba algo especial.
Con el tiempo, estos pensamientos de doncella fueron debilitándose, aunque sentía lo mismo, era mejor estar enfocada en su carrera, por lo que fue evitando pensar en estos asuntos hasta que sus sentimientos fueron reprimidos en el lugar más profundo… de su corazón.
Pero estos nobles no tenían intención de detenerse en lo más mínimo. Cuando se dieron cuenta que sus avances pacíficos no daban resultados empezaron a volverse más agresivos.
Aunque la mayoría era escoria, había algunos que tenían pensamientos sinceros hacia Leia, pero por supuesto, no era amor en absoluto y Leia no podía sentirse segura.
El año pasado Leia se percató de que su vida y la de su familia podría estar en peligro. Su padre era un simple plebeyo sin poder político en absoluto. En cuanto a su madre… Aunque provenía de un linaje de guardias reales, el trabajo familiar se cortó hace algunas generaciones por algunas causas que Leia no entendía.
Leia era muy consciente de lo que podría pasar en esta situación. Ella seria capturada y amenazada con su familia, incluso si ella se resistía fríamente a las amenazas, probablemente se convertiría en una esclava o algo peor, mientras que su familia no estaría mejor. Su padre seria utilizado para experimentos o asesinado directamente, si tuviera suerte, podría calentar la cama de algunas nobles femeninas o nobles masculinos con gustos peculiares, pero su madre casi seguro tendría el mismo destino que ella.
Naturalmente, nadie abogaría por ellos, algunos podrían usar el asunto para presionar a la familia del noble, que era la razón por la cual los nobles no corrían desenfrenados por el mundo. Por supuesto, el Emperador debía mantener un orden estable.
Era la naturaleza humana y de algunas otras especies ser así, incluso si el Emperador creara una Ley Marcial que prohibiera estrictamente este tipo de asuntos y utilizara millones de inteligencias artificiales para supervisar no lo detendría.
Esa sería la decisión más estúpida que un gobernante podría hacer, el Imperio Estelar no puede funcionar con la represión absoluta, una sociedad orientada al progreso no podía detenerse u obstaculizarse para ofrecer una mayor una vida pacifica a los plebeyos.
¿Las consecuencias? Degeneración de la especie, detención del progreso, golpe de estado, Carecer de poder para combatir las invasiones de otros alienígenas, y un sinfín de problemas.
Por tanto, habían algunas situaciones donde el Emperador Estelar tendría que cerrar un ojo y mirar a otro lado, pero eso no quiere decir que los nobles pueden hacer lo que quieran. Para reprimir a los nobles, el Emperador favorece la competencia entre los nobles, mientras asegura su absoluta obediencia.
Esto podría ser complicado de hacer para gente la cual su espectro mundial solo abarca un mundo subdesarrollado, pero para las personas las cuales saben lo vasto que es el universo, saben que no es conveniente estar enredados en luchas de poder de esa magnitud, nunca se sabe si hay otro Imperio Estelar allá afuera esperando una brecha para atacar, o si ocurre algún evento cósmico y les tomara con la guardia baja. La familia Von ha gobernado durante tantos años que está marcado en el inconsciente colectivo, incluso si hubiera alguien tan tonto para desear el trono, seria desarraigado de inmediato bajo la intuición del Emperador, los Von podrían ser cualquier cosa, pero no eran estúpidos, compasivos y de corazón débil.
Entonces, Leia sabía que nadie podía ayudarla. Pero no podía quedarse en la tabla esperando ser cortada, se dedicó a buscar alguna forma en la que pudiera asegurarse un respaldo o posición en la que fuera difícil hacerle daño a ella o a su familia.
Para su decepción, la mayoría de las situaciones implicaba ofrecer su vida a la otra persona y las que no, eran fuerzas demasiado débiles para protegerla de estos nobles en la cima de la cadena alimenticia.
Pero esto era entendible, ¿Cómo podría una poderosa fuerza brindar ayuda por nada a cambio? De lo contrario, todos los plebeyos pedirían ayuda y no tendría fin. Esa fuerza estaría destinada a desaparecer o ser absorbida por otras fuerzas.
Leia en ese momento estaba muy deprimida: '¿Podría ser que este es mi destino?', Leia estuvo considerando el asunto durante unos días hasta que se decidió.
"Bien, si debo venderme a alguien, entonces elegiré el menos nocivo". Leia murmuró y fue a buscar a su madre para contarle su decisión, en comparación con su padre no confiable, se sentía más cómoda con su madre.
La hermosa joven se encontraba mirando a su madre en silencio.
"Entonces, hija, mi adorable princesa Leia, ¿me contarás lo que tienes que decir o continuarás mirándome con esa expresión lamentable? Mi corazón duele al verte así". Dijo suavemente Rose, la madre de Leia, con un tono preocupado, rara vez Leia mostraba tal seriedad. Rose estaba muy asustada.
Al escuchar el tono preocupado de su madre, Leia se sintió aún más triste, pero la convicción en su corazón creció. "¡Mamá! Ya no soy una niña, deja de llamarme así". Dijo Leia un poco avergonzada, ¿Qué era eso de princesa? Cuando niña podía haberle gustado como le llamaba su madre, pero ahora que comprendía el término, solo se encontraba avergonzada.
"¡Siempre serás mi princesa, no importa la edad que tengas! Además, todavía eres joven, solo tienes 18 años este año". Cortó Rose sin piedad. 'Mmph, veamos como educo a mi princesa más tarde'. Rose sonrió.
Al ver la sonrisa de su madre, Leia se estremeció en todo su cuerpo, dijo rápidamente: "Aunque tengo 18 años, la mayoría de edad en nuestra raza es a los 15 años, ya soy una adulta en todo derecho, no puedes intimidarme". Respondió Leia un poco vacilante, todavía tenia mucho miedo de esta madre desvergonzada.
"No me importa, ve y demándame si quieres, seguirás siendo mi adorable princesa para siempre". Respondió Rose y luego resopló altivamente.
Leia solo pudo poner una sonrisa irónica ante esto. "Sigh, ¿Cómo podría demandar a mi querida madre? Al menos deja de llamarme pequeña princesa". Leia hizo su petición, pero carecía de confianza.
Como era de esperar, Rose respondió directamente: "No. Entonces, ¿Qué problema tienes?", Rose preguntó seriamente, luego continuó, "Aunque tu padre y yo no tenemos conexiones profundas, no cualquiera puede intimidarnos".
Leia levantó las cejas con sorpresa, '¿Podría estar relacionado con la Guardia Real?'. Leia sintió un poco de esperanza, pero recordando con quienes están tratando rápidamente se extinguió.
"¿Qué dices si los nobles estuvieran implicados?". No queriendo retrasar el asunto, Leia preguntó con una sonrisa irónica.
Al escuchar eso, un profundo ceño fruncido de Rose se formó en su aún impecable rostro, no peor que Leia, si situaban a las dos una al lado de la otra, nadie diría que son madre e hija, en cambio pensarían que eran dos hermanas gemelas, pero era imposible, la gran "madurez" de Rose las delataba, pero un par de hermanas mayor y menor no sería imposible.
Luego de pensar profundamente, Rose soltó: "¿Qué Nobles? ¿Te hicieron algo?" Preguntó Rose, había una frialdad inusual en sus palabras que se extendió en la habitación.
Leia se sorprendió por esto, ¿Cómo podría su amable madre soltar este tipo de "aura"?
Luego de salir del aturdimiento, Leia dijo débilmente: "Aborigen e incluso superior…". Aunque había algunas moscas de menor rango, los más preocupantes eran los Nobles aborígenes y de rangos superiores, no tendría sentido tratar a los pequeños mientras que los grandes aún están al acecho.
El ceño fruncido de Rose se profundizó aún más. Aborigen era un rango de nobleza que solo era otorgado a aquellas familias que eran especialmente reconocidas por el Imperio, a cambio de su lealtad, ganarían un estatus elevado, bajo la ley, eran incomparables a los plebeyos. Para hacer una comparación, era como la diferencia entre un humano y una hormiga, aunque esta hormiga todavía tenia algunos derechos básicos que impedía que fueran aplastadas sin restricciones.
En cuanto a los nobles de rango superior a Aborigen… eran como magnates que incluso los aborígenes tenían que agachar la cabeza cuando los vieran.
Incluso si los aborígenes ya no ponían a los plebeyos en sus ojos, eran como peces que saltaron de un rio al océano, un noble todavía podía tratar con otro noble, por no hablar del Emperador Estelar. Aunque eran inigualables a los plebeyos, aún tenían que poner una imagen benevolente, después de todo, la reputación, carácter y otras implicaciones están involucradas que les impide actuar imprudentemente, nunca se sabe cuándo tocas la línea de otro noble.
A menos que seas un legendario Legislador, todavía tienes que prestar atención a estas cosas, incluso tratando con un plebeyo, esa era la razón por la que Leia no había sido asaltada todavía.
"Esto…". Rose se sintió frustrada. Aunque confiaba poder tratar con estos Aborígenes, las repercusiones de esto serian fáciles de predecir, su familia seria exterminada e implicaría a otras personas.
Rose suspiró y miró a Leia con una mirada determinada: "Sigh, Leia, incluso si no me lo dices, puedo saber por qué te están molestando estos Nobles, a pesar de que confío en tratar con estos aborígenes, nuestro destino no seria diferente luego de que este asunto estalle".
Aunque Leia se sorprendió de que su madre poseyera este tipo de poder, la situación no cambió mucho. Pero antes de que Leia pudiera responder, sonó la voz de Rose: "¡No obstante!". Leia se sobresaltó con este grito, era la primera vez que veía a su madre así, "¡Incluso si nos lleva a la muerte, nos aseguraremos de llevarnos a algunos con nosotros!". Una sonrisa se formó en la hermosa cara de Rose.
"Estoy segura que incluso tu ingenuo padre piensa igual, estas son las enseñanzas de nuestra raza Anakin". Continuó Rose.
Incluso Leia se emocionó, 'Es lógico, si sufrimos, ¡Tenemos que asegurarnos de llevarnos a tantos como podamos! ¡Espera! No vine aquí con esta intención… ya tengo un plan…', Leia se sintió un poco avergonzada de dejarse llevar.
"Espera un momento madre, de hecho, tengo una solución a esto y esa es la razón de mi visita".
Rose frunció el ceño, '¿Qué tiene planeado esta mocosa? No querrá sacrificarse a sí misma, ¿verdad?'. "¿Qué es eso? Oigámoslo". Rose estaba preparada para rechazar cualquier pensamiento irrazonable de Leia incluso si tenía que atarla para evitarlo.