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Chapter 5 - Prólogo. Capítulo 5

Todas parecían confundidas cuando dijo eso. 

La alquimista Akero Ikari dijo. 

No conozco mucho de los clanes bajos, siempre me mantuve en tierras del rey. 

Pero las salvajes tampoco parecen saber quien es. 

Están haciendo memoria, como si el nombre les sonara de alguna parte pero no lo recordaran.

-Lo tengo -Dijo una de las salvajes- ¿No es la loca del pantano? 

-Bueno, creo que sí está un poco loca -Dijo Alex- Pero sí, está en los pantanos, es ella. 

-La había olvidado por completo -Dijo la salvaje que nos había amenazado antes- Es una rara total, recuerdo haber visto su nombre en alguna reunión, no creo que signifique un peligro ni nada por el estilo, aunque no sé si esté en los pantanos, no la vi en tierras del rey. 

-Yo puedo ir a verificarlo, no se preocupen -Respondió Alex, parecía tener prisa.

-Está bien, pueden pasar -Dijo la misma chica- Pero si los veo atacando a algún miembro, poco me importará el acuerdo, van a ser cazados y asesinados por las salvajes. 

-Claro, claro -Dijo Alex restándole importancia- Nos vamos entonces. 

Alex ignoró totalmente al resto de las salvajes.

No hice más que seguirlo, pero la tensión era abrumadora. 

Caminamos por todo el terreno de las salvajes. 

Había un montón de casas y establecimientos, era un pequeño pueblo de videojuego, aunque las estructuras tenían algunas peculiaridades, parte de la madera se veía muy real, con detalles y rayaduras, pero había otras que tenían una resolución muy baja, era como un escenario del mapa con texturas sin desarrollar. 

Es muy extraño, hay partes que parecen tan reales, pero otras que realmente me hacen recordar que estoy dentro de ROTL. 

Algo curioso fue que había una taberna con el símbolo de Tedehm, uno de los 4 grandes clanes, aunque es el más nuevo, siendo que es el único hecho por jugadores y no por parte de los desarrolladores, es el que más influencia tiene.

Tienen estructuras en todas partes del mapa, parece ser. 

Luego de pasar por todo el terreno de las salvajes nos adentramos a un lugar lleno de árboles, el cual parecía seguir siendo terreno de las salvajes, pero era muy distinto, hasta el aire se sentía más contaminado, era un pantano, el piso ya no tenía arena ni nada por el estilo, era puro barro. 

Al fondo de ese pantano había una cabaña, alrededor de ella se contraían un montón de árboles y ramas, en forma de espiral. 

-El lugar es un basurero ¿No es así? -Me dijo Alex. 

Quería responderle, pero el olor incluso me estaba dando nauseas. 

¿Esa tal Akero Ikari vive aquí? 

¿Cómo un ser humano puede vivir así? 

La vida del ser humano. 

Siento como si me hubiera olvidado algo. 

Antes de que fuera transportado. 

Una persona.

Un funeral. 

¿Alguien cercano a mí murió? 

Joder, de verdad, no logro recordar nada. 

Alex tocó la puerta de la cabaña. 

Del otro lado de la puerta se oyeron un montón de cosas cayendo y cristal rompiéndose. 

-¡Akero ¿Estás bien?! -Gritó Alex. 

-¡Sí, todo bien, ya voy en camino! -Respondió una voz chillona del otro lado de la puerta. 

Luego de unos segundos una chica abrió la puerta. 

Tenía una estatura similar a la de Alex, también tenía el cabello bastante corto y oscuro. 

Tiene una cara bastante simple, siento como si la hubiera visto en algún lugar, pero creo que recordaría conocer a alguien así. 

Sus ropas están todas sucias, de hecho, ella también lo está.

No lleva nada de armadura, solo algunas ropas de cuero al estilo medieval. 

-¡Alex! ¡Hola! -Gritó la chica- Te tardaste un montón, vi que formaste un buen problema en tierras del rey. 

-Tuve que venir caminando, le di mi teletransportador a un compañero -Respondió Alex- Vengo con un invitado especial. 

Akero me miró fijamente. 

-Entonces está es la razón del enorme desorden en tierras del rey -Dijo Akero- Te has traído contigo al infame traidor de la serpiente. 

¿Cómo se supone que le responda? Estoy realmente nervioso. 

Que Alex me tendiera la mano no significa que haya dejado de estar en una situación de desventaja. 

Akero se acercó a mí y empezó a mirarme por todas partes. 

Esto es demasiado incómodo. 

Estoy demasiado tenso. 

-Dejalo, acabamos de tener un encuentro desafortunado con tus compañeras -Dijo Alex alejando a Akero de mí. 

-Eso veo, porque ni siquiera ha dicho una palabra -Dijo Akero en tono burlón- Está más tenso que un cable. 

-Lo siento -Dije finalmente- Soy Souki Aiko. 

-Ya veo, Souki Aiko -Me respondió Akero de nuevo como si se estuviera burlando- Soy la alquimista de las salvajes, Akero Ikari.

Seguido entró a la cabaña, invitándonos a entrar también. 

-Pónganse cómodos -Dijo Akero señalando unos muebles, mientras se iba a otra habitación- Mientras tanto hablenme ¿Qué los trae aquí y no a Firedwater directamente? 

De la habitación donde estaba Akero empezaron a salir varios sonidos extraños. 

-Es bueno que quieras ir al grano -Dijo Alex- Vengo a hacer una pequeña prueba, y eres la única alquimista que conozco.

-Alquimista es un término demasiado ostentoso para lo que hago -Respondió Akero mientras seguía haciendo cosas en esa habitación- Soy una maga. 

-Maga sigue siendo bastante ostentoso -Dijo Alex burlándose de ella- Pero bueno, vengo a preguntarte por alguna manera de quitarle el símbolo de la serpiente a Souki Aiko.

¿Eh?

¿Quitarme el Símbolo de la serpiente? 

-¿De qué hablas? -Le pregunté a Alex. 

-Te vendría bien ¿No crees? -Me dijo- Es un inconveniente grande, y aparte no puedo ponerte el símbolo de Firedwater si ya tienes ese. 

-Una manera de quitar el símbolo del traidor -Dijo Akero mientras llegaba con una bandeja con tres tazas de metal, la cual dejó en una pequeña mesa frente a nosotros- Aquí tienen, es lo que pude hacer, llegaron muy de improvisto. 

Tiene un líquido verde adentro ¿Será té de Matcha? 

Lo bebí al mismo tiempo que Alex.

Una vez tragué un poco estuve a punto de devolver todo lo que estaba en mi estomago. 

Escupí lo que todavía estaba en mi boca y dejé la taza de vuelta en la bandeja. 

Alex estaba mirándome, aún con la taza en la mano. 

No se lo ha tomado todavía.

Maldito traidor, creí que lo había tomado al mismo tiempo que yo.

-¡¿Qué es esto?! -Le pregunté a Akero todavía con el mal sabor de boca. 

Akero reía. 

-Es agua con un hechizo de infusión, quería ver que tal me salía, tenía que saber a café, pero aparentemente no funcionó -Me respondió entre risas. 

-No nos uses como conejillos de indias -Dijo Alex con un tono de broma. 

-Lo siento, lo siento -Dijo Akero todavía riéndose- Pero la reacción del traidor de la serpiente fue maravillosa. 

-Sabía como agua estancada -Le dije todavía sintiendo el sabor del "Café" en la lengua. 

-Pero bueno, me hablaste de un hechizo para retirar el símbolo de la serpiente -Dijo Akero ya más calmada- El otro día estuve mirando algo al respecto, puedo revisarlo si quieres. 

-Sería de mucha ayuda -Respondió Alex.

-Claro, esperen aquí, iré a buscarlo -Dijo Akero entrando a otra habitación. 

La cabaña era pequeña, cuando entraba a otra habitación era como tenerla a unos pocos metros de distancia. 

Mientras oíamos a Akero buscar en su enorme desorden se hizo un silencio algo incómodo.

Hemos estado al 100 todo el día, es la primera vez que tenemos un momento de tranquilidad desde entonces. 

Mientras afuera se ve como empieza a atardecer. 

-Es todo muy extraño ¿No lo creen? -Dijo Akero desde la otra habitación. 

-¿A qué te refieres? -Preguntó Alex,

-A todo esto -Respondió Akero- Sigue siendo muy raro estar dentro de ROTL ¿Crees que realmente estemos muertos? 

Alex se recostó un poco más en su asiento antes de responder. 

-Es verdad que es raro, pero mantengo las esperanzas de que esto no es el fin -Respondió Alex- Cuanto menos este tiempo te has entretenido con todas tus pociones y magia. 

-¿Este tiempo? -Dije notando lo raro que sonaba- Pero si no han pasado más que unas horas desde que estamos aquí. 

-Ah, claro, sobre eso -Me respondió Alex- No te lo conté pero Akero y yo llevamos algo de tiempo aquí, unas dos semanas, fuimos transportados aquí con antelación junto a otras 5 personas. 

Eso me suena de algo. 

¿Pero de donde? 

Otras 5 personas. 

Hace dos semanas. 

7 personas hace dos semanas. 

Siento que algo relacionado a ello pasó antes de venir aquí. 

Dentro de mi computadora, lo ví en una sección de noticias. 

-Ya lo recuerdo -Dije- Hace dos semanas hubo reportes, 7 reportes de muertes extrañas a jugadores de ROTL ¿Fueron ustedes? 

Akero llegó con unos objetos en sus manos. 

-Entonces es verdad -Dijo ella con una voz algo apagada- Estamos muertos, morimos hace 2 semanas al llegar aquí.

Volteé a ver a Alex.

Estaba encorvado en su silla, mirando al suelo, a través de sus lentes podía ver su mirada vacía. 

Ahora que lo pienso esto significa tanto para ellos como para mí.

Todos morimos. 

Y estamos atrapados aquí. 

-Lo siento -Dije al ver las expresiones de ambos. 

-No es nada -Respondió Alex- No es como que no hayamos contemplado esa posibilidad. 

Alex se levantó de su asiento, puso una mano en el hombro de Akero intentando consolarla.

-Esto solo significa que debemos esforzarnos más -Dijo Alex- Estamos frente a una nueva vida, en un nuevo mundo, y es lo menos que podemos hacer. 

Solo me quedé mirando, procesando la situación. 

-Es verdad -Dijo Akero levantando la mirada y sonriendo- Es lo menos que podemos hacer. 

Luego de eso Alex volvió a su asiento. 

-Es sorprendente ver lo bien que lo tomaste -Me dijo Alex- Esto significa que tú también estás muerto, pero te veo de lo más calmado. 

Es verdad, no me había afectado mucho. 

-Es extraño -Le dije- Estaría triste si conectara con mi vida fuera de ROTL, pero mis recuerdos están bastante difusos desde que entré aquí, siento que hay cosas importantes por las que debería lamentarme en este momento, pero no logro recordarlas. 

-Entonces tú también -Dijo Akero- A decir verdad, me pasa lo mismo, desde que llegué aquí hace 2 semanas hay muchas cosas difusas en mi memoria. 

¿Será cosa del momento en el que fuimos teletransportados? 

-Es curioso, porque yo lo recuerdo todo perfectamente -Agregó Alex- Mi vida antes, las personas que conocía, todo lo tengo claro como el agua. 

-Es algo muy extraño -Respondió Akero- Pero no podemos cerciorarnos de nada con lo poco que sabemos, ya que tampoco sabemos porqué estamos aquí desde dos semanas antes, ya que en ese entonces no tuviste la denuncia por Cheats, Souki Aiko, lo que nos deja aún más abierta la pregunta del por qué estamos aquí. 

Es verdad. 

Entonces Alex tenía razón. 

Hay algo más grande en todo esto. 

-Bueno, por ahora, vamos a probar esto -Dijo Akero levantando un talismán enorme- Es para remover maldiciones y demás, y el símbolo de la serpiente tiene toda la pinta de ser un símbolo maldito. 

-Encontraste algo bueno -Dijo Alex levantándose- ¿Estás bien con probarlo, Souki? 

Ellos realmente lucen como buenas personas, la manera en la que hablan y se preocupan por ellos, no creo que quieran hacerme algo malo. 

-Claro, no hay ningún problema -Le respondí- Vamos a probarlo. 

-Excelente -Exclamó Akero- Siéntate en ese banquillo de ahí dándome la espalda, yo me encargaré del resto.

Seguí las instrucciones de Akero y le di la espalda sentándome. 

Seguido ella me puso el talismán en la espalda.

Volteé a ver un momento, viendo como ella estaba formando círculos de luz con sus manos. 

Eran círculos mágicos violeta.

Me volteé dándole la espalda de nuevo. 

Escuchaba detrás mío varias chispas. 

Me pregunto si estará formando más círculos. 

-¡Sā shinboru! -Dijo Akero a mi espalda, mientras veía como en el reflejo de la pared un enorme brillo salía de mi espalda. 

-Ya puedes voltearte -Me dijo Akero luego de unos segundos, mientras me quitaba el talismán y veía el resultado. 

-Carajo -Dijo Alex.

-¿Qué sucedió? -Pregunté. 

-Se ve exactamente igual -Respondió Akero- El símbolo de la serpiente sigue ahí.

-Ya veo -Le dije desilusionado- Entonces el hechizo no funcionó. 

-Todavía podemos probar algo -Me dijo Akero- Quítate la gabardina. 

Le hice caso y me la quité.

-¿Alguna vez te habías quitado la gabardina estando aquí? -Me preguntó Akero. 

-No -Respondí- ¿Por qué lo preguntas? 

-Porque el símbolo ahora está en tu armadura -Me dijo Akero dándome la gabardina roja, la cual no tiene ningún símbolo.

Akero se quedó en silencio unos momentos. 

-Quiero probar algo -Me dijo Akero- Quítate todo, quiero verte la espalda. 

La orden me agarró desprevenido. 

-¿Qué dices? -Le pregunté volteándome.

Fue entonces que Akero volvió a la realidad, parecía estar enajenada en mi símbolo.

-Lo siento, lo siento -Me dijo avergonzada- Solo si quieres, claro, quiero ver cómo se forma el símbolo en tu espalda. 

Verla mostrando expresiones me hace sentir más seguro, hace un momento se le veía muy concentrada. 

-Claro, no hay problema -Le dije burlándome un poco. 

Seguido me quité la armadura, la camisa negra, la cota de malla hasta que solo quedé en una pequeña camiseta. 

Ya entiendo porqué tenía tanto calor, llevaba muchas cosas encima. 

Finalmente me quité la camiseta, y fue donde sentí el dolor más horroroso que he sentido alguna vez. 

Sentía como si mi piel empezara a desaparecer. 

Empecé a gritar de inmediato. 

El dolor era insoportable, lo sentía hasta el pecho, por todo mi torso, era como si un montón de lanzas me estuvieran atravesando. 

El símbolo de la serpiente estaba marcandose en mi espalda desnuda. 

Fue entonces que sentí algo frío en mi espalda, y el dolor se detuvo. 

Volteé a ver, era el talismán, Akero lo puso sobre mi espalda, de esa forma el símbolo de la serpiente se marcó en la tela del talismán. 

-Lo siento, no tenía ni idea que eso podría pasar -Me dijo Akero. 

Agarré mi camiseta y me la puse, luego de eso me quité el talismán, sabiendo que el símbolo se grabaría en la camiseta. 

El dolor se detuvo de la nada, no era como si me estuvieran quemando.

Se sentía como un castigo del símbolo por intentar quitármelo. 

-No te preocupes, no había manera de que lo supieras -Le respondí- No pasa nada. 

-Lo siento, pero no tengo ni idea de como quitarlo entonces -Me dijo- Quería entender su funcionamiento, pero creo que va más allá de mis conocimientos. 

-De cualquier manera, lo intentaste -Le dije terminando de recuperar mi aliento de los gritos que solté- Muchas gracias. 

Akero cambió su expresión de golpe. 

-Vaya, el traidor de la serpiente me dio las gracias -Me dijo con un tono burlón- No hay de que, Souki.

Luego de eso miré hacia Alex. 

Estaba dormido en su silla. 

-Míralo -Le dije a Akero- Es entendible, fue un día cansado, yo también tengo sueño. 

-Se ve que la pasaron bastante mal -Agregó Akero- Vamos a llevarlo a la habitación de pociones, no tengo camas así que no les queda más que dormir en el suelo.

-Ya veo -Le respondí- No hay problema. 

Seguido lo cargamos hasta la habitación que Akero me indicó, estaba totalmente dormido, ya que ahora que lo noto, ni siquiera mis gritos lo despertaron. 

Lo dejamos en el suelo y salimos de allí. 

-Puedes dormir en la biblioteca, yo me quedaré experimentando con una cosas un rato más -Me dijo mientras me daba una manta. 

Bostecé al intentar responderle. 

-Claro -Le respondí- Muchas gracias por todo de nuevo. 

Akero solo me sonrió y se dirigió a la habitación de donde había sacado las tazas de agua estancada. 

Me dirigí a la biblioteca y me acosté en un rincón, tapándome con la manta, mientras observaba el cielo por la ventana. 

Pienso que tuve suerte al encontrar a estas personas, pude haber muerto al llegar aquí, es verdaderamente un alivio. 

Pero no dejan de inquietarme los recuerdos tan difusos que tengo. 

De cualquier manera, los ojos me pesan un montón, solo puedo pensar en dormir. 

Tendré muchos días para preocuparme. 

.

.

.

La luz del sol estaba directamente en mi cara.

Abrí mis ojos, ya estaba de día. 

Aunque algo me cosquillea la frente. 

Levanté mi mirada, y vi unos enormes ojos café frente a mí.

El cabello era oscuro. 

Aparte sentía algo realmente suave en mi nuca, no recuerdo llevar almohada. 

-Eh… Buenos días -Me dijo la persona que me miraba desde arriba, cuya cara se sonrojó. 

Toqué la almohada debajo de mí, pero se sentía como piel. 

Cómo piernas. 

Estoy acostado en el regazo de Akero, y ella está encorvada mirándome fijamente.

Me levanté y volteé hacia ella, quien se había levantado rápidamente. 

-Debo ir a preparar el desayuno -Me dijo tartamudeando mientras dejaba rápidamente la habitación. 

Estoy muy desubicado. 

¿Qué hacía Akero aquí? 

Todavía no me despierto del todo. 

De cualquier manera, dijo algo del desayuno.

Creo que esa es la única cosa clara que tengo ahora, 

El hambre que tengo.