POV CAMERON
Cinco meses más tarde
Hoy era el día en el que Lara volvería a montarse en el coche. Estos últimos meses se puede decir que no fueron sus mejores ya que al principio le dolía bastante la rodilla y no le gustaba estar fuera del coche, eso se notaba de lejos, pero por fin estaba curada casi del todo y se montaría en el coche para ver si podría aguantar.
Para suerte mía no tenía entrenamientos hasta más tarde, por lo que decidí que era mejor acompañar a Lara, por lo que en este momento estábamos en la habitación de descanso, yo sentado en el sofá con Bianca y Eli haciendo ejercicios con Lara.
"Lara, ¿segura que estás lista para montarte en el coche?" preguntó Bianca por la milésima vez en la mañana "Bianca, deja de preocuparte. Si no me monto en ese coche te juro que mato a alguien."
"Tienes que entender que no tienes la rodilla al cien por ciento. Las vibraciones…" empezó, pero Lara no tarda nada en girarse en su dirección y enviarle una mirada exasperada "Bianca, xuroche que che acabarei por cerrar esa boca para que deixes de decir estupideces, en serio. (Bianca, te juro que acaberé por cerrarte esa boca para que dejes de decir estupideces, en serio)"
"Non son estupideces, solo preocupome pola tua rodilla. (No son estupideces, solo me preocupo por tu rodilla)" Sea lo que sea que estén diciendo, sé que las dos estaban estresadas, una porque su hermana no dejaba de insistir en que tal vez debería no hacer las prácticas y la otra por la rodilla de su hermana.
"Xa che dixen… (Ya te dije…)" empezó Lara, pero Eli no tarda nada en acercarse a Bianca y ponerle una mano en el brazo "Bianca, amor, no sé qué es lo que estáis diciendo, pero te prometo que tu hermana tiene la rodilla como para poder montarse en el coche. Se pondrá una rodillera un poco más acolchada y eso ayudará a que no le duela la rodilla."
"Prométeme que si te duele la rodilla te bajarás del coche." Pidió mirando a su hermana "Lo haré." Afirmó y Bianca tomó una respiración profunda "Está bien, me calmaré." Respondió Bianca sentándose de nuevo en el sofá.
Después de unos minutos más, Lara acabó de hacer sus ejercicios de la rodilla y se fue a poner el mono, mientras Eli se sentó al lado de Bianca y empezó a pasarle la mano por la espalda. "Bi, te aseguro que está lista para montarse en ese coche." Insistió Eli, dejándome a entender que no era la primera vez que tenían esta discusión "Puede ser, pero no quiero que le pase nada como la última vez."
"Gallagher no está en la pista más. Estará ella sola, no pasará nada y verás como para el fin de semana que viene la tenemos corriendo la carrera." Aseguró mi mejor amiga y asentí, porque eso era lo más probable "Cameron, ¿acaso no te asusta que le pase nada?"
"En ningún momento dije que no me asustara." Respondí sinceramente, pero eso no implicaría que no iba a insistirle en no montar en el coche "Lo que Cameron quiere decir es que está acojonado, pero no dirá nada para no preocupar a Lara. Además, sabe lo que es estar apartado de la competición."
"A veces me das miedo, Eli." Dije riéndome y esta se encogió de hombros, pero con una sonrisa en su rostro "Soy de las pocas personas que te conocen bastante bien." Aseguró y asentí, porque era cierto.
Unos minutos más tarde, Lara salió del baño haciendo que los tres nos levantásemos del sofá. Ella estiró su mano en mi dirección y no tardé nada en cogérsela. Entrelazamos nuestros dedos y salimos de la sala.
Una vez llegamos al box, la gente se fue hacia Lara para darle datos del coche y ella escuchaba atentamente. Se podía ver el brillo que tenía cada vez que se subía a un coche y me encantaba de verla así de contenta.
Cuando los mecánicos acabaron de decirle lo que tenían que decirle, Bianca le pasó el balaclava, el casco, los cuales se puso y se metió en el coche. Lara se puso el cinturón y Bianca le apretó este, le dijo algo y pude ver que Lara le mostró el pulgar hacia arriba.
"Debe ser un ritual de ellas." Dijo Eli a mi lado mirando en la dirección de las hermanas "¿De qué hablas Eli?" pregunté, confundido por un momento "Siempre lo hacen. Bianca le aprieta el cinturón, le dice algo y Lara le muestra su pulgar. Debe su ritual."
Después de unos minutos, Lara salió del box y Bianca se fue hacia el muro. Tanto yo como Eli salimos al muro y ella se acercó a donde estaba Bianca la cual se podía notar nerviosa. Mientras tanto, yo me quedé en el muro viendo el coche de Lara cada vez que pasaba.
Media hora más tarde, Lara estaba volviendo al box, y en cuanto se bajó del coche, se sacó el casco y balaclava se podía ver una gran sonrisa plantada en su rostro. Bianca a mi lado suspiró supongo que porque no veía a Lara cojear y se veía más contenta de lo que se la veía en los últimos meses.
Estuvo hablando como una hora con sus ingenieros y mecánicos mientras nosotros estábamos esperando a que acabase. En cuanto acordaron que mañana subiría de nuevo al coche, se acercó a donde estábamos nosotros y me dio un beso.
"¿Qué tal en el coche?" pregunté pasándole mi brazo sobre sus hombros "Genial, ya lo echaba de menos." Dijo con una gran sonrisa en su rostro "Lo pude ver en cuanto te bajaste del coche." Aseguré riéndome "Y parece que no cojeas." Dije fijándome en ese pequeño detalle "No me duele nada, asique puedes dejarte de preocupar."
En ese momento, Bianca le pasa el teléfono a Lara, la cual en cuanto ve el nombre sonríe y no tarda nada en contestar y poner en altavoz. "Abueliña, a que debo a tua chamada? (Abuelita, ¿a que debo tu llamada?)" dijo Lara con una gran sonrisa en su rostro.
"Quería saber cómo che foi na túa práctica. (Quería saber como te fue en tu práctica) respondió, y supongo que le estaba preguntando como le había ido las prácticas "Genial abuela, mejor dime como sabías que estaba fuera del coche."
"Acaso está aí Cameron?" preguntó, probablemente con una sonrisa en su rostro "Cameron y Eli abuela." Aseguró Bianca a lo que Lara asintió "Hola chicos, perdonad a esta anciana." Dijo esta soltando una risa "No tenemos nada que perdonarte, es natural para vosotras."
"Lo es. Ahora ¿me podéis decir si no me está mintiendo para no preocuparme esa nieta mía?" preguntó y pude ver como Lara frunció el ceño "Abuela, non o estou facendo. (Abuela, no lo estoy haciendo)" dijo Lara y a lo que su hermana se empezó a reír.
"Non che está mentindo, abuela. (No te está mintiendo, abuela)" respondió Bianca y pude escuchar como al otro lado del teléfono, Carmela suspiró "Me quedo más tranquila." Respondió, y parecía sincera, lo que me dejaba entender que no era la primera vez que Lara había hecho algo así para que no se preocupasen por ella.
"¿Acaso no te fías de mi abuela?" preguntó algo como ofendida Lara "No es que no me fie de ti, pero tienes la costumbre de no decirme nada que me pueda preocupar." Afirmó, y sabía que había dado en el clavo "Pero estoy bien, ya lo echaba de menos." Aseguró Lara.
"Me puedo hacer una idea. Ahora la próxima vez que vengas vamos otra vez a esos coches pequeños y me enseñarás a conducir como tú." Dijo y Lara empezó a reírse "Mejor ¿por qué no te llevo en el del rally?" preguntó "No tienes competición lo que te queda de año Lara."
"Pero Bianca tiene su coche y estoy completamente segura de que Cameron puede conseguir uno. Tres ya son multitud." Respondió, mirando en mi dirección haciéndome la pregunta "Lara tiene razón, puedo empezar a buscarme un coche de esos." Aseguré, si algo quería, era hacer feliz a esa señora que se había ganado una parte de mi corazón.
"¿Haríais eso por mí?" preguntó algo como sorprendida y asentí a pesar de que sabía que no me podía ver y la mirada de agradecimiento de Lara era lo mejor a pesar de que no era necesaria, porque era cierto lo que había dicho y ella sabía lo que pensaba de su abuela. "Eso y mucho más, abuela, pero no te preocupes, te enseñaré a conducir el kart también." Aseguró Lara
"Gracias Lariña." Agradeció a su nieta "No es nada, abuela." Aseguró Lara "Bueno me tengo que ir, hasta más tarde miñas nenas." Dijo, probablemente con una gran sonrisa en su rostro "Queremoste abuela." Respondieron las dos al mismo tiempo "Querovos, hasta máis tarde."
Con eso colgó y estiró su mano en mi dirección, la cual no dude nada en cogérsela. Empezamos a caminar hacia la sala de descanso y una vez entramos en ella, Lara se fue directamente a la ducha mientras tanto nosotros nos sentábamos en el sofá.
"¿Ves como no tenías que preocuparte por tu hermana, amor?" aseguró Eli a su novia "Puede ser que no tuviese que hacerlo, pero conozco a Lara y sé que haría cualquier cosa por montarse en ese coche."
"Lo sabemos todos, pero no haría nada descabellado, te lo aseguro." Dijo, porque a pesar de que su hermana también lo sabía, todas las personas que era cercanas a Lara sabían el significado que tenía para Lara su carrera deportiva y que no haría nada para dañarla.
"No me fio en eso de ella. Ahora ¿Te puedo pedir un favor?" preguntó mirando en dirección a Eli "El que quieras." Le aseguró "Es seguro que tanto mi madre como mi abuela vengan para la semana que viene para ver la carrera de Lara."
"Eso es genial, pero ¿qué tengo que ver yo en todo esto?" preguntó Eli con el ceño fruncido "A que Lara no lo sabrá hasta después de la carrera." Respondió con una sonrisa empezando a aparecer en su rostro "¿Por qué si se puede saber?"
"Porque queremos que sea una sorpresa para ella." Aseguró y Eli asintió "Entiendo, ¿quieres que vaya a por ellas al aeropuerto?" preguntó "Si no es mucha molestia, si no puedo mandar a alguien."
"No, no tienes por qué hacerlo, puedo ir yo a por ellas." Afirmó, y la sonrisa de Bianca aumentó de tamaño "Genial, te quiero un montón solo por eso." Respondió y Eli se rió "Y yo pensando que me querías por más cosas."
"Por el resto te amo." La sonrisa de Eli creció y Bianca le dio un pequeño beso. Después de unos minutos, tanto Bianca como Eli decidieron irse a no sé dónde la verdad, pero tampoco me molesté demasiado en entender a donde iban a irse.
Unos minutos más tarde, Lara salió del baño solamente envuelta en una toalla, lo que hace rápidamente me quede mirando para ella embobado y excitándome rápidamente, tanto que los pantalones me apretaban un poco.
"A pesar de no estar mirando para ti, sé que estás mirando para mi trasero Cam, y te aseguro que al menos mi cara está más arriba." Dijo sin girarse en ningún momento en mi dirección "No puedo evitarlo." Respondí sinceramente "Y lo sé."
Con eso se dio la vuelta y empezó a caminar lentamente hacia mí. Podía ver como su sonrisa iba ampliándose en su rostro lentamente y en cuanto llegó a donde estaba, se sentó a horcajadas en mi regazo.
"Lara, si quieres salir de aquí en una media hora te recomiendo que te levantes…" empecé, pero el brillo que apareció en su rostro, lo conocía muy bien "¿Por qué?" preguntó empezando a pasar un dedo por mi pecho "Sé que puedes notar lo que está pasando hacia el sur de mi cuerpo…"
"¿Y quién te dice que no es lo que quiero en este momento?" susurró en mi oído "¿Aquí?" pregunté, mirando hacia la puerta "¿Acaso hay algo que nos lo impida?" inquirió, elevando una ceja "No, pero…"
"Pero nada, ¿tú lo quieres?" preguntó y asentí "Sabes que no me puedo negar." Aseguré y su sonrisa aumentó de tamaño "Pues bien, porque yo también lo quiero, así que deja de buscar excusas y hazme el amor Cam."
La sonrisa en mi rostro se amplío y rápidamente me acerqué a ella y empezar a besarla. También podía notar la sonrisa de Lara en el rostro y de vez en cuando movía sus caderas hacia mí, consiguiendo así que se me escapasen gemidos.
Lara pasó su mano por debajo de mi camiseta y rápidamente me la saco. En el momento que estaba en el suelo, no tardó nada en llevar sus manos a mis pantalones, desabrochármelos y me levanté un poco para que me los pudiese bajar. Una vez bajados en poco, hice que sus piernas rodeasen mi cintura, me levanté saliendo de mis pantalones y boxers, y luego dando un leve tirón a la toalla que tenía enroscada, la dejé caer al suelo uniendo así nuestros pechos y haciendo contacto directo con nuestra piel.
Luego de eso, acosté a Lara en el sofá, pero esta no tarda nada en acostarme en el sofá y se sienta a horcajadas de nuevo sobre mi recostándose sobre mi pecho para besarme. "Quiero probar algo nuevo." Dijo, apartándose un poco de mí para mirarme directamente a los ojos "Lo que quieras, lo único que quiero es que me pongas ese coño tuyo en mi boca, quiero poder saborearte."
Lara se giró y me puso su coño en mi rostro y luego ella se volvió a recostar sobre mí, pero esta vez con su boca en mi pene, lo que hizo que gimiese y empezase a comérselo como sabía que le gustaba. Las vibraciones que hacía al gemir, hacia que me excitase más, como nunca lo había estado antes.
Después de unos minutos, se dio la vuelta y empezamos a besarnos, yo saboreándome en sus labios y ella en los míos. Mi pene estaba entre los dos en este momento, y Lara se movía lentamente sobre el, pero sin que llegase a meterse en ella, que era lo que más quería en este momento.
"Lara, quiero sentirte." Imploré "Y yo a ti." Y con eso, lentamente coge mi pene en su mano, lo dirige hacia su orificio y lentamente se va deslizando hacia abajo en este. Una vez está dentro de ella, se sienta en mi regazo y se queda mirando para mí con una sonrisa.
"Nunca he visto a una mujer tan hermosa como lo eres tú, Lara." Dije sin apartar mi mirada de la de ella "Pues yo los he visto." Aseguró con una pequeña sonrisa en su rostro "Eh." Protesté "Es cierto, pero me he enamorado de ti y por muy guapo que sea cualquier otro hombre, solo tendré ojos para ti y me parecerás el hombre más guapo de todo el mundo."
No tenía claro si la sonrisa me cogería en el rostro, pero es que no podía evitarlo, esta chica me hacía el hombre más feliz del mundo.
Lara puso sus manos sobre mi pecho y empezó a cabalgar, echando su cabeza hacia atrás. Mis manos acabaron en su trasero y no puedo evitar moverme con ella, lo que hace que ambos acabemos cerrando nuestros ojos y gimiendo de satisfacción.
Unos minutos más tardes me siento en el sofá, pasó mis manos por su espalda y empiezo a besarla por su cuello dejando algún chupetón, y besando sus pechos, pero no tarda nada en levantarme el mentón para besarla.
Luego de un rato en esta posición, paso mis manos por debajo de sus muslos y me levanto, haciendo que nuestro beso fuese más bruto. Los dedos de Lara acabaron en mi pelo y mientras tanto nuestras lenguas batallaban.
Empecé a caminar hacia el baño para ducharnos, y para que mentir, el sexo en la ducha con Lara era de lo mejor que había. Cerré la puerta con el pie y abría el agua sin fijarme demasiado en si estaba demasiado caliente o demasiado fría, aunque de ser esta última, estoy completamente seguro de que Lara no tardará nada en protestar. La acerqué más a mi si eso era posible y ella empezó a mover sus caderas, deslizando así su húmeda vagina sobre mi pene.
Nos metí en la ducha y en cuanto estuvimos dentro, la apoyé contra la pared y empecé a pasar mis dedos sobre su clítoris, consiguiendo que echase su cabeza hacia atrás. Lentamente, inserté uno de mis dedos en ella y puedo escuchar como gime.
"Cameron, te quiero dentro." Dijo después de un gemido "¿Acaso no me tienes ya?" pregunté y ella negó "Quiero tu polla dentro de mí, Cam." Respondió sin apartar su mirada de la mía "Eso está echo."
Rápidamente, inserte mi miembro en ella haciendo que nuestros gemidos subiesen de volumen hasta que los dos llegamos a nuestro clímax, y después de tomarnos un par de respiraciones profundas, nos duchamos y salimos de esta, tardando como mínimo una hora más.
Cuando terminamos, salimos de la sala de descanso y nos fuimos hacia el hotel, siendo interrumpidos un par de minutos por los mecánicos de Lara para decirle que, si pudiese, que se montase en el coche de nuevo por la tarde, a lo cual aceptó encantada.
Una vez llegamos al hotel, nos fuimos a mi habitación y nos acostamos en la cama, Lara dejando la cabeza sobre mi pecho y haciendo pequeños círculos en mi abdomen. "Oye cariño." Dije para llamar su atención "¿Qué?" preguntó "¿Alguna vez pensaste en tener hijos?" pregunté y con eso, Lara se gira para poder verme y puedo ver una pequeña sonrisa en su rostro, lo cual hace que en la mía aparezca otra pequeña sonrisa.
"¿A qué viene la pregunta?" preguntó con un brillo que nunca había visto hasta ahora "Curiosidad." Respondí encogiéndome de hombros "¿Si me gustaría tener hijos? Claramente, ¿Ahora mismo? Ahora mismo no."
"¿Cuánto más adelante?" pregunté con curiosidad "Un año, tal vez algo más." Respondió "¿Un año?" pregunté sorprendido y lo que hizo que una de sus perfectas cejas subiese "Si, ¿acaso eso supone un problema para ti?"
"No, no lo supone, solo pensé que querrías esperar más." Dije sinceramente "No quiero esperar más, pero debo suponer que quieres tener hijos tú también." Respondió "¿Contigo? Claramente." Le aseguré.
"¿Qué te parece si lo intentamos después de terminar la temporada que viene?" preguntó y asentí "Me parece genial." Dije dándole un pequeño beso en la sien "Te amo, Cam." Dijo "Yo también te amo, Lara. Ahora otra pregunta seria."
"Estás tardando en preguntarla." Dijo riéndose "¿Te gustaría casarte?" pregunté y asintió "Si, me gustaría, pero no una grandísima que van miles de personas y la prensa." Aseguró y asentí, porque yo quería lo mismo "La prensa no debería estar. Eso está claro."
"Lo odiaría." Afirmó "¿Y dónde gustaría casarte?" pregunté con curiosidad, aunque me puedo hacer una leve idea de donde se quiere casar "E casa, tal vez en la playa." Respondió "Por la iglesia."
"No creo, asique no." Y a pesar de que sabía que no era creyente, la verdad es que me sorprendía que no lo quisiese así "Pero si nos casamos en tu casa, acabaríamos por tener que invitar a toda la aldea."
"Y no me molestaría, al final los conozco de toda la vida. ¿A ti te molestaría?" preguntó mirándome fijamente "No, es más, me gustaría porque son como vuestra familia también." Dije, porque sabía que era cierto "Lo son." Respondió asintiendo "Entonces sí que me gustaría que estuviesen."
"¿Tú a quien invitarías?" preguntó con curiosidad "A mi familia, la cual tendrás que conocer en algún momento, por cierto, algún amigo y poco más." Dije pensando si se me escapaba alguien "¿De cuánta gente estaríamos hablando?" preguntó "Juntando a la gente de la aldea, tu madre, hermana y abuela, y mi familia y par de amigos, no pasaríamos de trescientas personas."
"Si juntamos a mis tíos, no pasaremos de esos trescientos tampoco." Aseguró "No es pequeña, pero tampoco enorme." Dije con una gran sonrisa en mi rostro "Exacto. Ahora lo que me pregunto es porque acabamos hablando de hijos y boda."
"Porque el sexo fue el mejor que tuve en mi vida y porque eres tú la única con la que me lo puedo imaginar." Respondí sinceramente "Eres muy mono cuando quieres." Dijo dándome un pequeño beso en el pecho "Lo sé, pero eso solo me lo guardo para ti, cariño. "
"Y yo pensando que el flirteo lo acabarías por dejar." Dijo rodando los ojos "No lo haré, eso que lo tengas claro." Aseguré, porque era algo que me gustaba y más cuando era ella la que lo seguía "Me gusta eso."
"Descansa un rato que te hará falta para la tarde toda la energía." Asintió y a los pocos minutos se quedó dormida. Yo no tenía sueño, pero tampoco me iba a levantar, aquí estaba de maravilla. Después de un par de horas, la desperté a Lara para ir a comer algo y una vez terminamos nos fuimos directamente al circuito, en el que al igual que la mañana, me fui hacia el muro a ver a Lara, y siempre que bajaba del coche, una gran sonrisa plasmada en su rostro.