"Hemos estado esperando, esperando que mi rey regrese…" El dragón rojo lloró y dijo.
Durante más de mil años, innumerables dragones murieron en batalla. Fueron perseguidos todo el tiempo.
Cada vez que querían huir hacia el norte, eran interceptados por los no-muertos. Los compañeros que los rodeaban eran cada vez menos.
Ahora, solo quedaban ellos dos, y siempre habían estado preocupados por lo que haría su Alteza una vez que murieran.
Qian Yuan levantó la cabeza, tenía los ojos inyectados en sangre y sus labios temblaban.
"Mi Rey… Mi Rey ya está muerto…"
Finalmente, dijo la verdad más difícil.
Los rostros de los dos dragones rojos se pusieron pálidos, porque su último rayo de esperanza desapareció.
"Mi Rey ya está muerto… ¿Cómo puede ser? Era tan fuerte... ¿Quién podría matarlo?" Long Huang era el dragón dorado de ocho alas más fuerte en sus mentes.
Si Long Huang todavía estuviera vivo, sería muy difícil para Long Yan derrotarlos, incluso si se uniera a los no-muertos.
Pero su rey ya estaba muerto...
Murió en el Continente Guangming.
Nunca podría regresar a su tierra natal y ver al niño nacido de él.
"Mi Rey está muerto… Entonces, ¿Qué vamos a hacer ahora?" Los dragones rojos cayeron desesperados. Long Huang ya había muerto, ¿No significaba eso que ya no tenían su última esperanza?
"Vamos hacia el norte, donde todavía hay muchos dragones que se resisten. Aunque nuestro rey y nuestra reina están muertos, Su Alteza todavía está aquí. Nuestro clan todavía tiene esperanza. En el norte, habrá muchos compañeros que nos ayudarán a lidiar con Long Yan y los no-muertos". Qian Yuan se secó las lágrimas.
Todavía tenían al hijo de Long Huang y Long Miao. Su Alteza un día crecería y vengaría a sus padres.
Los ojos de todos estaban centrados en el pequeño y tímido. Las miradas extremadamente ardientes hicieron temblar al pequeño dragón dorado asustado. Intentó acurrucarse detrás de los dragones rojos y no entendía de qué estaban hablando.
"¿Por qué Su Alteza no ha crecido todavía? Según la edad de los dragones, ya debería haber crecido". Qian Yuan miró al pequeño dragón dorado con la forma de un dragón joven y preguntó.
Uno de los dragones rojos respondió, "No tenemos idea. Su Alteza creció muy lentamente después de que nos lo llevamos. Más tarde, permaneció en la forma de un joven dragón. Él nunca creció. Estuvimos huyendo todo este tiempo y no tuvimos la oportunidad de descubrir por qué".
Ya habían pasado más de mil años; según todos los informes, el pequeño dragón dorado ya debería haberse convertido en un dragón adulto, pero su tiempo parecía haberse detenido y no podía seguir creciendo.
Los dragones jóvenes eran muy frágiles. Tenían poca capacidad para protegerse. Cuanto mayor sea el rango del dragón, más débiles serían cuando fueran jóvenes. La situación del pequeño dragón dorado ahora era que incluso un no-muerto ordinario podría matarlo.
"Si Long Shi todavía está vivo, debería estar en el norte. Debería saber el motivo de esto. Lo más importante para nosotros ahora es apresurarnos hacia el norte lo antes posible". Dijo Qian Yuan.
"Una vez que me deshaga de la energía de la muerte sobre ellos, partiremos de inmediato". Shen Yanxiao sabía muy bien que la situación actual era muy peligrosa.
Aunque mataron al dragón de hueso y atraparon a los no-muertos, si perdían el contacto por mucho tiempo, los subordinados de Long Yan estarían al tanto de la situación inusual. Si se encontraran con más perseguidores, no sería tan fácil volver a escapar.
"Pequeña Xiao, ¿Realmente tienes una manera de deshacerte de la energía de la muerte?" Qian Yuan miró vacilante a Shen Yanxiao.
Hasta donde él sabía, lo único en el mundo que podía lidiar con la energía de la muerte era el poder divino de los dioses. Antes, cuando fueron atacados por los tritones, descubrió que estaban cubiertos por una fuerza divina. ¿Fue eso obra de Shen Yanxiao?