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Chapter 79 - CAPÍTULO 63- El infierno. Parte 2.

CAPÍTULO 63- El infierno. Parte 2.

(Pov- Kei.)

Las oscuras calles de la Capital, con pocas personas transitando. No se cambian de acera al verme, ellos bajan la mirada y se arrodillan ante mí, por el miedo que tienen de hacerme enojar. Las acciones que hoy hizo mi madre les hizo olvidar que yo no soy como ella, yo nunca mataría a alguien solo porque me ve feo o choca por accidente conmigo. La sangre Molfer, un antónimo de paz, un sinónimo de miedo.

—Pero hasta un Molfer también siente miedo.

Gabrielku, el demonio conocido como "el príncipe bestia". Drin me dijo que ese demonio está casi a un nivel de un comandante, pero como dejó de entrenar tan arduamente, su nivel de pelea se quedó estancado. ¿Por qué ahora solo entrena lo necesario para no perder poder? Por amor.

Cuando se enamoró, decidió dejar de entrenar todo el día, para poder pasar tiempo con la persona que ama, una acción que los demonios consideraron una traición, pues prefirió a una persona, a costa del bienestar de toda una raza.

Grifio, un comandante, intentó capturarlo y experimentar con su cuerpo, como una forma de castigo, ganando al mismo tiempo un conejillo de indias, pero Desmolfer lo evitó. Le salvó la vida y permitió su comportamiento, a cambio de aceptar una misión secreta.

Según Drin, eso fue hace 600 años, así que sospechamos que la misión consistía en manipular a una familia de la realeza, para tenerlos controlados, garantizando una fuente de información constante. Y la Reina actual de esa familia Real, sería la Reina de Turger.

Los demonios están un paso por delante de los humanos... Tal vez cientos.

¿Y yo? Solo puedo improvisar sobre la marcha, no tengo nada más que me pueda servir. Y usar mi habilidad en la Reina Demonio es... Ah, simplemente imposible. El Dios supremo no permitiría tanta ayuda, es imposible que mi habilidad pueda afectarle. Es por simple lógica.

Gabrielku es poderoso, pero Drin tiene la ventaja sobre él. A diferencia de él, ella no dejó de entrenar nunca, lo que significa que tiene una mejor arma que él: la experiencia. A Drin solo le falta ganar más poder, y con mi habilidad, es posible que alcance a Gabrielku en dos meses... Bueno, sería exagerado decir eso, pero al menos ganará suficiente poder como para poder tener 20% de probabilidad de victoria.

Pero incluso con nuestras mejoras a futuro, tengo miedo. Estoy consciente del gran peligro que ellos representan para mí. Conocen mi identidad, ellos pueden revelarla cuando se les antoje. No abrieron la boca porque me tienen miedo por el poder que usé con Nero, pero ahora ese miedo disminuyó. Ya no estoy a salvo.

Ir al infierno por ese objeto. Una misión suicida, ir a territorio enemigo. Así de desesperado estoy. Pero si lo logramos, nuestra supervivencia estará garantizada por un poco más de tiempo.

Vaya, vaya... Ya, ya... Tranquilo.

Mis brazos no dejan de temblar. Tengo miedo. Muchísimo miedo. Estoy a punto de perder a mi familia, la vida tranquila que tengo, y las personas que más quiero podrían morir. Ya perdí a Treka, no quiero perder a nadie más... Ah...

—Como si eso fuera posible.

No todo es color de rosa. No siempre la esperanza, bondad y el esfuerzo puede garantizar la victoria. La vida no es justa, pero depende de mí si permito que la injusticia me afecte.

... No vale la pena pensar sobre eso. Los sentimientos negativos solo frenan mi avance.

—Vaya, vaya. Tengo hambre. ¿En dónde puedo comer?

Comí con las chicas, pero sigo con hambre. Creo que eso de que el estrés hace engordar a las personas es cierto. ¿Engordé en mi mundo por la depresión o el estrés?

Ah, como sea. Veamos... Vaya, vaya. Un restaurante barato, con un borracho vomitado y orinado afuera, adornando el ambiente. Me siento como en el viejo oeste o algo así, esa cosa de vaqueros.

Pobre hombre. Ropa muy sucia y rota, una clara evidencia de que es un vagabundo. Pedir limosna, para seguir comprando alcohol. ¿Por qué las personas se vuelven alcohólicas? ¿En serio el alcohol las hace sentir bien? Que estupidez.

Drin y Eris se ponen cachondas al estar ebrias, así que creo que el efecto que tiene depende de las personas. Me pregunto si alguien escribió una tesis sobre este tema, me interesa saber más sobre... eso... Puaj.

—Una monedita, mocoso.- Dijo el vagabundo, poniendo su mano llena de mugre en mi hombro.

Mi sangre Molfer está hirviendo de ira. Quiero matarlo. Verlo suplicar. Quitarle las uñas una por una, para después bañarlo con ácido, y ver su cuerpo derretirse, mientras sus gritos de dolor salían de su asquerosa boca con dientes amarillos.

—Quítate de mi camino.

Lo hice a un lado y seguí con mi camino.

No soy un monstruo, y no permitiré que mi sangre Molfer me manipule.

¡Quiero verlo sufrir por ensuciarme...! Pero Kei Edna sabe que solo busco una excusa para desquitarme con alguien, y eso sería malvado de mi parte.

Sé perfectamente que estoy reprimiendo mis sentimientos negativos, pero no me desquitaré con un inocente.

Prefiero esperar y usarlo con ese Slime de mierda.

—Buenas noches.- Dije, entrando al restaurante.

Vaya, vaya. Como me lo imaginé. Está lleno de borrachos, hombres en... lencería sexy, acompañando a las mujeres para que beban más, y huele bastante mal. Personas jugando cartas, hombres dándoles sexo oral a mujeres, peleas, discusiones. Un ambiente salvaje. O lo era, se volvió silencioso e incómodo cuando se dieron cuenta de mi presencia.

Miré a un pobre anciano, desnudo y con un collar con correa, obligado a comportarse como un perro por poco dinero. No creo que sea esclavo, pues en este tipo de lugares, las mujeres pueden comprar a un hombre temporalmente y hacerles lo que ellas quieran.

Estar condenado a humillarse y sufrir, solo para conseguir un poco de dinero y tener al menos un pan en el estómago...

Diría que los comprendo, pero tuve muchísima suerte de ser bendecido con un linaje noble y un gran poder. Llegué a este mundo siendo nivel 0, como ustedes, pero la ayuda de Zius me permitió no sufrir lo que los hombres de este mundo sufren... Aunque, bueno, a cambio de eso, me tocó entrenar con mi madre y estar en riesgo de muerte cada día de mi vida.

Solo aguanten unos años más, les prometo que intentaré derrotar a Fravi... Solo intentarlo.

Camino hacia la barra, y antes de que se arrodillen ante mí, grito:

—¡¡Si se arrodillan, están muertos!! ¡¡No me gusta que me traten como noble!! ¡¡Seré un plebeyo cuando cumpla 15!! ¡¡¿Les quedó claro?!!

Todos asintieron. Usar el miedo para evitar sentirme incómodo. Eso no me hace diferente a un noble, que obliga a los plebeyos a obedecerlo, pero al menos así evito que se arrodillen ante mí todo el tiempo.

—¡¡Solo vine a divertirme!! ¡¡Consuman todo lo que quieran, esta noche pago yo!!

—¡¡Así se habla!!- Gritó una mujer enana, levantando su gran tarro con cerveza oscura.

—¡¡Te has ganado mi corazón, papi!!- Dijo... ¡¿un hombre?!

¡O-oye, oye, idiota, no me enseñes el trasero! ¡Soy heterosexual!

M-mejor ignoro que vi eso.

El ambiente alegre regresó, llenándose de festejos, y aprovechan mi generosidad, ordenando muchísimas bebidas, comida y hombres. Sé que esos hombres son maltratados, pero así se ganan la vida, es inevitable, y tampoco puedo mantener económicamente a los hombres para evitar que vendan sus cuerpos, eso retrasaría mis planes a futuro, no puedo desperdiciar mi tiempo en ellos. Cruel, pero necesario.

Me senté en la barra.

—¿Qué desea ordenar, joven Molfer?- Dijo la bartender.

—Por favor, tráeme la mejor comida que tengan. Y un vaso de agua helada también, por favor.

—Si me permite una recomendación, nos acaba de llegar este vino tinto de...

—Dije agua, por favor. No quiero nada más.

—Como deseé.

Suspiro e intento tranquilizarme. Mañana me espera una misión suicida, esta podría ser mi última noche con vida. Pensé que estar en un ambiente de fiesta me ayudaría a relajarme, pero no, me sigo sintiendo igual.

Pasaría todo el tiempo con las chicas, pero si me ven desesperado y sin esperanza, la moral se iría a la mierda. Las chicas parecían muy concentradas mientras planeaban lo que haremos mañana, ellas genuinamente creen que saldremos ilesos del infierno. Yo soy el único que está asustado... O, tal vez, las demás hacen lo mismo que yo, fingir que no estoy asustado ni preocupado. Fingir que todo está bien.

Ellas están preparando todo para el día de mañana, mientras yo estoy aquí, lejos de ellas, intentando quitarme el miedo... O porque me siento culpable, pues ellas podrían morir mañana por mi culpa, por involucrarlas en esto... No, no pensaré en eso. No hoy.

Mi parte del plan ya lo tengo memorizado, y Drin me dirá si hay cambios en mi parte del plan. Por ahora, solo intentaré relajarme. Después de todo, pocas veces en esta vida he tenido la oportunidad de relajarme y simplemente disfrutar de mi entorno. Todo el tiempo entreno. Todo el tiempo estoy alerta. Todo el tiempo pienso en nuevas técnicas. Solo por esta noche, me tomaré un tiempo libre y no pensaré en nada de eso. Drin es la experta en el infierno, ella será la líder del equipo mañana. Yo solo obedeceré sus órdenes.

... Ni siquiera sé por qué estoy aquí. ¿A quién trato de engañar? No sé lo que estoy haciendo. Solo improviso... como siempre.

Mi agua y comida llegó. Le di un sorbo a mi bebida, mientras corto mi filete con el tenedor.

—Hola, guapo. ¿Por qué la cara seria? Creí que venías a divertirte.

Una mujer capaz de sentarse a mi lado y atreverse a acariciarme el muslo, ¿eh? Que valiente de su parte.

—... ¿Qué quieres?

Creí que la conocía, pero no, no la conozco. Su cara no me es familiar. ¿Realmente es una chica que coquetea conmigo? Sé que el poder les atrae y todo eso, pero Kei Molfer da miedo, nadie se atrevería a coquetear con él. Si una princesa fue rechazada por Kei, ellas no tienen ninguna oportunidad de conquistarlo, y solo estarían molestándolo, y molestarlo es peligroso.

Y aún con todo eso, ¿ella se atreve a manosearme la entrepierna? Porque ya no es el muslo, es la entrepierna. ¡Uwaaaah! ¡¿La entrepierna?!

—Tsk. ¿En dónde quieres morir?

—Fufu. Sé que el adelanto es en un año, solo estoy revisando que esté en buenas condiciones, y vaya que está bastante bien. Tu madre no mentía cuando presumía el gran miembro de tu padre. La genética es tan hermosa, ¿no te parece?

Es la Reina usando magia de transformación. ¡Y que tema tan incómodo! ¡Suficiente tengo con los traumas que desarrollé cuando era un bebé y escuchaba a mis padres teniendo sexo a mi lado! ¡Que asco!

—Una margarita Shei, señorita.- Ordenó la Reina.

—Enseguida sale.

Seguí comiendo. ¿Me ha estado vigilando? Mis precauciones son muy buenas, no creo que me haya estado siguiendo sin que me diera cuenta. Creo que es solo una coincidencia.

—La héroe Luna. Grisia, la hija de mi rival. Eris, la compañera de Crisfa. Posiblemente también Nia. Y aunque lo dudo un poco, también podría incluir a tus dos más recientes compañeras, las Elfas, abuela y nieta.

—¿De qué hablas?

—Eres un adicto al sexo, ¿no? ¿Ya te follaste a Luna?

—No, ella solo es mi amiga.

—Vaya. ¿Y a Grisia?

—No me gustan las mujeres tan jóvenes, así que tampoco.

—Eris ya está confirmado. ¿Y Nia?

—Ah... Reina, prefiero no hablar de eso. Y espero que haya puesto un campo de insonorización, no quiero desperdiciar energía mágica.

Necesito toda la energía posible para el día de mañana.

—No te preocupes, no soy una idiota.

Le entregaron la bebida y ella le dio un sorbo con sus gruesos labios rosados, mientras yo sigo comiendo.

No sé qué trata de hacer, así que mejor me mantengo alerta. Lo de Gabrielku con la familia Real de Turger es solo una teoría. Los príncipes y princesas se casan con otros miembros de la Realeza de diferentes países para mejorar las relaciones diplomáticas. Existe la posibilidad de que no solo la familia Real de Turger esté relacionado con los demonios. La Reina de Turger ya admitió estar relacionada con los demonios, pero ¿por qué decírmelo? ¿Para qué quiere reunirse conmigo? Entre más lo pienso, más dudas tengo. ¿Qué es lo que planean?

—13 años y ya eres todo un chico caliente. Realmente pareces más una mujer que un hombre en ese aspecto. Me pregunto si eso es algo positivo o negativo. Negativo para mis pobres sobrinas, condenadas a ser engañadas toda la vida, pero positivo para mujeres como yo, que solo queremos algo de diversión en la cama en lugar de una relación romántica. Hacerlo con un chico comprometido suena demasiado cachondo, ¿no te parece?

... Tengo la oportunidad perfecta para llevarla a la cama y volverla adicta a mí, logrando conseguir su ayuda, pero...

—Hueles a semen. Intenta llevarme a la cama cuando estés limpia. No quiero las sobras de nadie.

—Que buen olfato tienes.- Dijo, sonriéndome.

Si no me estaba vigilando, lo más posible es que esté en este lugar para follar con los prostitutos. Respeto la vida sexual de las personas, realmente no me importa follar con alguien que acaba de tener sexo con otro hombre, pero no quiero engañar a mis novias. No esta noche.

Ellas están muy ocupadas, preparándose para el día de mañana, y no quiero follar con una mujer mientras ellas trabajan en la misión. No he caído tan bajo todavía.

—Me voy a casa.

Me metí el resto del filete en la boca y me bajé de la silla.

—Te dejé un regalito en tu bolsillo.- Dijo la Reina, guiñándome un ojo.

—Gracias. Nos vemos después.

Me alejé caminando.

—¡Me apuntan la cuenta, mañana vendré a pagar!

Abrí la puerta, y antes de irme, activé mi modo rojo, logrando silenciar todo el lugar, por el miedo que me tenían.

La Reina solo sonreía, mientras se abría de piernas, enseñándome su... vagina. ¿Por qué no usa ropa interior? Ah, no estoy de humor para preocuparme por eso.

—¡No se atrevan a inflar los precios ni a inventar números que no vendieron! Si tratan de engañarme, se arrepentirán.

Me fui del lugar.

... Bien... Ah... ¡¿Por qué me enseñó su vagina?! Y estaba peluda. Creí que alguien tan elegante como la Reina la tendría rasurada. ¿Por qué la mayoría de chicas que conozco son tan pervertidas? Mei, espero que nunca te vuelvas como ellas. ¡Me aseguraré de convertirte en una mujer fiel como nuestra madre! Ella podrá estar loca, pero nunca ha engañado a nuestro padre. Así de poderoso es su amor por él. Espero que Mei consiga un amor como ese. Me pregunto cuándo conoceré a mi futuro cuñado. Los hombres de este mundo son inofensivos, así que no me preocuparía tanto, solo lo suficiente como para evitar que algún demonio disfrazado la engañe.

Ahora veamos el regalo de la Reina. Ni siquiera me di cuenta cuando lo puso en mi bolsillo. Veamos... ¡¿Q-qué?!

¡S-son sus bragas! ¡Y están húmedas...! Espera... T-tiene una gran mancha roja. ¡¿Está manchada con su periodo?! ¡Que asco!

La guardé en mi bolsillo. No puedo tirarla, eso podría hacerla enojar y mi progreso con ella se arruinaría.

Ah, al menos ahora sé que sí le atraigo sexualmente... Sexualmente, ¿eh?

Miré a mi alrededor. Hombres ebrios, drogados, semidesnudos. ¿Cuánto han sufrido en sus vidas? Y todo por culpa de una Diosa celosa. ¿Tan insignificantes somos para los Dioses, que es tan fácil arruinarle la vida a millones de personas? Que injusto.

[Cariño, cariño, ya terminé los planos de las rutas de escape, de la 1 a la 180. De la 181 a la 200 no las usaremos, escapar por esas zonas es imposible, serían las primeras que serían vigiladas si nos descubren, por estar vinculadas a las áreas más importantes del infierno.]

[Muchas gracias. Asegúrate de descansar.]

[¡Eso debería decirlo yo! No has recuperado ni siquiera el 10% de tu energía. Recuerda que no puedes usar pociones de energía mágica porque tus padres las usaron en ti para evitar que mueras, por eso es importante que descanses muy bien.]

... ¡¿Qué?! ¡Espera, espera! ¡¿No puedo usar las pociones de energía mágica?! ¡El límite es de 5 pociones de energía mágica por mes, así que no podré usarlas mañana! ¡Uwaaaah!

[¡¿P-por qué no me lo dijiste antes?!]

[¡¿N-no lo sabías, cariño?! ¡Creí que ya te lo habían dicho!]

C-cuando una persona se enferma, su cuerpo se calienta para eliminar los virus y las bacterias que causaron la enfermedad, y lo mismo pasa cuando alguien se desmaya o está a punto de morir en este mundo. Las personas con magia curativa, al desmayarse por culpa de alguna herida, su cuerpo automáticamente usa la energía mágica para activar la magia curativa, evitando la muerte.

[¡P-pero mi madre me salvó, ella es experta en magia curativa! ¿Por qué usaron las pociones de energía mágica en mí? ¡Era innecesario!]

[Fue tu hermana. Ella las usó en ti por precaución, para evitar que algo saliera mal.]

Ay... Eso sí es algo que Mei haría. N-no puedo enojarme con ella, pues no sabe que las necesitaría. ¡¿Mañana tendré que ir al infierno con tan solo el 20% de mi energía mágica?! ¡Ahora sí estoy más que muerto!

[Nos vemos mañana, Drin. Iré a descansar. Cuídate.]

No quiero preocuparla más, que pase lo que tenga que pasar.

[¡Hasta mañana, cariño!]

Que extraño. No parece preocupada por mi falta de energía. ¿Tan confiada está en el plan? Ella es la experta, así que depositaré toda mi fe en ella. Esta misión trata más de sigilo que de poder.

Saludé a las sirvientas nocturnas y entré a mi casa. Haciendo el menor ruido posible, subí las escaleras y entré a mi habitación.

—Descanso...

Tanto estrés me terminará matando.

Cama, mi suave cama... Tanto sueño...

¿Eh? ¿Q-qué? Ah, tan cómodo que estaba durmiendo. ¿Por qué me desperté...? E-es cierto, ¡siento algo en la punta de mi miembro?! ¡¿Me lo están lamiendo?! ¡¿La Reina se metió en mi cama...?! ¿Eh?

—¿Q-qué?

Al abrir los ojos, no vi a la Reina.

—Hola, lindo esposo.- Dijo ella, con la punta de mi miembro en sus labios.

—¿Eh? ¡¿Nerka...?! ¡Hmmmmh!

Me tapé la boca, para que mis sonidos no se escuchen. ¡No puedo desperdiciar energía mágica para poner un campo de insonorización! ¡No puedo gemir!

L-los movimientos bucales de Nerka me hacen retorcer en la cama, sintiendo cada succión y lengüetazo. ¡Hmmmmh!

S-su lengua baja hacia mis pelotas sagradas y las chupa como... ¡Que vergüenza! ¡No puedo acostumbrarme a esta clase de situaciones!

Su mano masajea mi miembro de arriba hacia abajo, mientras sus labios saborean mis bolas sagradas... ¡Eso suena peor! ¡Que vergüenza!

—Que lindo, te estás cubriendo el rostro.

Nerka tomó mis manos y se sentó sobre mi entrepierna, acariciando mi miembro con su húmeda vagina, sin llegar a la penetración. Solo la acaricia, para hacerme desesperar, aunque ella es la que terminará por desesperarse primero. ¡Estoy tan preocupado, que no puedo excitarme! N-no quiero que me descubran, pero tampoco puedo desperdiciar energía mágica. El campo de insonorización gasta el 1% de mi energía mágica por cada minuto que pasa. No puedo darme el lujo de desperdiciarlo solo para tener sexo.

—El sexo genera más energía mágica que el descanso, lindo esposo. Drin me envió para ayudarte. Un ganar/ganar. Jeje.

Con razón Drin no estaba preocupada, ella tenía este plan de recuperación. Pero, ¿cómo entró? ¿Logró burlar la seguridad de las sirvientas nocturnas? Espero que sea porque Nerka se volvió más poderosa y no porque las sirvientas bajaron la guardia.

—¿C-cómo entraste?

—Drin me enseñó a entrar sin ser detectada.

Ah, después le preguntaré los detalles.

Sus caderas se movían hacia adelante y atrás, y de repente, metió mi miembro dentro de ella, tapándose la boca para no dejar salir ningún gemido.

Yo me quedo sin hacer nada, sirviendo solo como un juguete sexual.

Tengo una habilidad perfecta para el sexo, un harem, y un miembro grande. Tengo casi todo, excepto deseo sexual... O más bien, mi deseo sexual es frenado por la culpa que siento en mi interior... Ah...

—¿Qué?- Dijo Nerka, al ser derribada por mí, ahora estando en la posición del misionero.

Una relación aburrida siempre fracasa. No puedo permitir que mis inseguridades y miedos me arruinen la vida.

Comencé a mover mis caderas, mientras con mis dedos acaricio su clítoris y chupo el dedo gordo de su pie izquierdo.

Mi habilidad me permite ver con claridad sus zonas erógenas, y las suyas están en los dedos de los pies, orejas, pezón izquierdo y ombligo.

Ella se tapa la boca, intentando no dejar escapar ningún sonido, y me muevo ni tan rápido ni tan lento, para evitar que la cama haga mucho ruido.

Sus pechos rebotan con cada embestida, haciendo ruido al chocar entre ellos, así que puse mis manos sobre ellos, para evitar que sigan chocando.

Esta posición hace ruido, probemos con otra.

Me di la vuelta junto con ella. La puse arriba de mí, en posición de... ¿cabalgata? Creo que así se llamaba.

Sostengo sus caderas a cierta distancia, y la penetro sin meterle todo mi miembro, evitando hacer ruido de choque de entrepiernas, y evito que mi trasero toque la cama, para evitar el sonido de rebote.

En el sexo, el tamaño no importa, sino la habilidad, así que meterle la mitad es más que suficiente, y si no es suficiente y no siente placer, puedo usar mi habilidad en ella.

El sexo es más complicado de lo que imaginé.

Dos horas después, por fin terminamos. Dejé de generar energía mágica, lo que significa que llegué al límite.

—E-eres increíble, lindo esposo.- Dijo Nerka, que todavía sigue unida a mí mediante nuestras entrepiernas.

Cabalgata inversa, ¿no? En esta posición, puedo ver su ano... Una vez escuché que el punto g de los hombres está en su ano. ¿Cómo se sentirá si...? ¡Uwaaaah! ¡No, no, no! ¡No soy gay, no soy gay! ¡Seiya imaginaria que apareció desnuda frente a mí con un gran rifle entre las piernas, vete de aquí! ¡No soy gay! S-solo es curiosidad, eso es todo.

Pero, sí, el ano de Nerka es lindo. Un lugar que debería de ser considerado asqueroso, se convirtió en algo sexual bastante popular. Todo es sexual, ¿verdad? Ah, sigo sin entender por qué las personas se vuelven adictas a esto, tanto que incluso violan, corriendo el riesgo de arruinar sus vidas e ir a la cárcel, en donde son violados por otros reclusos. A los pedófilos les va muy mal en esos lugares, y lo tienen muy bien merecido. Pero, ¿por qué arriesgarse tanto? ¿No es suficiente para ellos masturbarse o contratar alguna prostituta? Todavía soy muy ignorante en este tema de lo sexual, los fetiches y parafilias.

¿Tengo un fetiche? Las mujeres planas me encantan, pero creo que ese es un gusto estético. ¿No tendré algún fetiche raro? Espero que no.

... ¿Se enojará si lo toco? Ya lo he lamido y metido mi miembro ahí, no creo que se enoje.

Lo toqué un poco y, al hacerlo, Nerka se asustó y se levantó de la cama de un salto. ¡¿La incomodé?!

—¡L-lo siento! E-es solo que... B-bueno... Se veía... lindo.

—N-no te preocupes, es solo que mi cuerpo ya no puede más. Necesito un gran descanso.

Saltó a mi cama y me abrazó.

—Lindo esposo, ¿es cierto que eras virgen en tu mundo original?

—Q-que pregunta tan repentina.

—¿Es cierto?

—Sí, lo era. En mi mundo soy considerado muy feo, así que nunca tuve suerte con las mujeres. Estuve a punto de perder mi virginidad en una fiesta, pero la chica que me sedujo dijo que... había sido un reto y se burló de mí... ¡Malditos traumas de mi pasado!

Y-ya me había olvidado de la prima de Cris. ¡Me vio desnudo y me humilló! ¡Ahhhhhhhhhhhh! ¡Quiero olvidarme de esa experiencia!

Suspiro... Extraño a Cris. Extraño tener amigos hombres, amigos que no quieren follarme.

—Ellas se lo perdieron, lindo esposo. Eres irreemplazable.

Me dio un beso en los labios.

Gracias, Nerka.

—Te amo, lindo esposo.

—Yo tam...

Me levanté rápidamente de la cama. E-este presentimiento. I-imposible. ¡Maldita sea!

—¿Lindo esposo?

—¡Nerka, ponte la ropa, necesito tu ayuda!

Abrí la ventana y salté. Mis Golems detectan a Mei y a mis padres, están durmiendo, pero dejaron de detectar a las sirvientas nocturnas y detectaron la presencia de alguien más. Un enemigo.

—Sé que estás aquí.- Dije, sin levantar tanto la voz para no despertar a nadie.

Este asunto es entre él y yo... Gabrielku. Su presencia es inolvidable.

Él salió del suelo frente a mí y se sacudió el polvo de su traje.

—No quería interrumpir tu noche de pasión, por eso esperé. Las sirvientas no pueden vernos, así que tu dignidad se mantiene a salvo. Si quieres puedes ir a ponerte unos pantalones, te espero.

—¿Las mataste?

—No, pero tampoco te diré lo que hice para evitar que nos vean. Toma.

No siento mentiras en sus palabras.

Me ofrece una carta con cierto sello, el de la familia Real de Turger.

—Es la invitación para la fiesta. El héroe Kei está invitado, no Kei Molfer.

—¿Una fiesta?

—Las señoritas héroes también asistirán. ¿No le parece lindo el gesto de Su Majestad? Podrá tener un emotivo reencuentro con sus viejas amigas.

—... ¿Ellas saben que iré?

—No, no lo saben. Será una sorpresa. Fue un placer volver a verlo, joven Molfer, pero debo retirarme. Que tenga una linda noche. Hasta pronto.

Gabrielku se alejó volando.

¿Las héroes irán? ¿Un reencuentro?

—¿"Qué chingados está planeando"?

"Puta madre", esto huele a una trampa peor de la que imaginé.

Abrí la carta y comencé a leerla.

... No... No, no, no... ¡Nooooo! ¡Ahhhhhhhhhhhh! ¡¿En serio cree que lo haré?! ¡Primero me mato yo! ¿Por qué me cuenta todo esto? ¿En serio quiere hacerme enojar? ¿Qué planea lograr haciendo eso? ¡Cada vez entiendo menos la situación!

—¡Maldita loca!

Nerka aterrizó a mi lado.

—¿Qué pasa, lindo esposo?

—Es la invitación de ese demonio, Gabrielku. La Reina me acaba de confirmar que está detrás de la desaparición de los aldeanos. Si quiero recuperarlos con vida, debo matar a Mei. "Está bien pendeja". Nunca mataría a mi hermana, mucho menos por aldeanos que no conozco. Me duelen sus muertes, pero no soy tan idiota como para condenar a los humanos con tal de salvar unas cuantas vidas.

—Simples aldeanos por la vida de Mei. No tiene sentido ofrecer ese trato, mucho menos a un Molfer.

—Porque lo hizo con la intención de burlarse de mí. La Reina intentó matar a mi hermana, ella lo ordenó. Envió a esa extraña mujer. Mi hermana casi muere, porque ella la quiere muerta.

Y mientras la Reina siga con vida, Mei seguirá en peligro. Mi dulce hermanita, podría morir por mi culpa.

—L-lindo esposo, activaste tu modo rojo.

—Mataré a la Reina... ¡Definitivamente la mataré!