(¡Hola! Dejen comentarios, para inspirarme a seguir escribiendo 😊 Ah, sí, por cierto, dejen una reseña en general de la novela, la necesito, hace mucho tiempo que no recibo una reseña y la novela ya avanzó mucho. Por favor, dejen una reseña, no les toma mucho tiempo. Se los agradecería. Espero sus opiniones.)
CAPÍTULO 68- Final de la prueba especial.
(Pov- Saik.)
Yuki se quedó dormida en mis brazos. No quiero moverme para no despertarla, así que supongo que dormiré en esta posición. Diría que es una posición incómoda, pero es todo lo contrario, me siento muy, pero muy cómodo en esta posición. Me hace sentir... ¿como un padre? No, no es amor paternal, es amor de hermanos, hermandad... Espera... Es cierto... Yo... Yo siento amor por Yuki. Amor familiar... Amor de verdad... Amo a Yuki, realmente la considero mi hermana menor. Mi familia. Mi única familia.
Mi familia... Familia...
—¿Sigo queriendo suicidarme?
No lo sé, con este nuevo acontecimiento, las dudas acerca de mi futuro acaban de nacer en mí. Nunca había tenido dudas acerca de lo que haría en el futuro. Bueno, sí, pero dudas insignificantes, como la posibilidad de no suicidarme si embarazo a Naima, pero las dudas que acaban de nacer en mí son muchísimo más poderosas que las anteriores, y tienen el poder suficiente para hacerme cambiar de idea. Tienen el poder de cambiar el futuro de mi vida.
Vi miles, cientos de miles de últimos momentos de niños pequeños, y cada uno de esos últimos momentos fueron horribles y dolorosos, pero... aunque yo experimenté el dolor que ellos sintieron, no me sentí mal por ellos... a excepción de unos cuantos.
Hay tres en particular que realmente me hicieron sufrir de verdad y lograron que alguien como yo sintiera empatía por ellos.
Número 1 tenía razón respecto a mí, soy alguien egoísta, y quiero cambiar. Quiero ser alguien más amable, una mejor persona, alguien que sea capaz de lograr que Yuki diga "¡Estoy orgullosa de mi hermano mayor! ¡Lo amo tanto!"
Quiero ser un buen ejemplo para Yuki. Un buen hermano mayor para ella.
Los tres últimos momentos que lograron cambiar mi manera de pensar y me hicieron dar cuenta de lo importante que es Yuki y número 31 para mí, son los más tristes y dolorosos que experimenté, y no porque ellos hayan sufrido más dolor físico, al contrario, los tres finales son de los menos dolorosos en cuanto al dolor físico. Los finales más dolorosos fueron simplemente eso, dolor físico, y estaba más que acostumbrado a ese tipo de dolor.
Me violaron muchísimas veces, de cientos de maneras posibles, y después me mataban, e incluso me enterraban vivo o me lanzaban al agua para que el cadáver no sea encontrado. Pero, a pesar de que prácticamente me violaron a mí, simplemente ignoraba mi entorno y me ponía a pensar en cómo esquivar el ataque del Golem y golpearlo. ¿Por qué no me importaba lo que estaba sintiendo? Porque sentía lo que los niños sintieron, pero no me lo hicieron directamente a mí. Yo sabía que mi cuerpo estaba ileso, y saber eso me hacía sentir más tranquilo. Además, si dejaba que ese dolor me afecte, le daría la satisfacción de verme sufrir a esa chica, y no quería darle ese gusto.
Siempre que me violaban o torturaban, ignoraba el dolor y me ponía a pensar en otras cosas. Después de saber cómo esquivar y golpear al Golem, me ponía a pensar en mi vida escolar, en Naima, la presidenta, la madre de Sylphie, número 31 y Yuki, y con el paso del tiempo en esos últimos recuerdos, me daba cuenta de lo importantes que son número 31 y Yuki en mi vida, pues fueron las personas que más extrañé ver y hablar con ellas. Las demás pues... sí, las extrañé, pero no tanto como extrañé a Yuki y a número 31. Extrañaba la sensación de peligro que me daba la presidenta, los insultos y la mirada de asco de Naima, y lo agradable que era hablar con la madre de Sylphie.
Y por eso los tres últimos momentos que más me impactaron me dolieron más, y uno de ellos está relacionado con número 31, y por eso ese lo saqué de mi mente y lo guardé. No sé lo que contiene ese recuerdo sobre ella, lo único que sé es que está relacionado con ella. Me di a mí mismo instrucciones de mostrarle ese recuerdo a número 31 cuando ella quiera verlo.
Sé que ese es uno de los tres últimos momentos que más me impresionaron, porque ninguno más me impresionó más.
El primer último momento trata sobre el amor de hermanos. Una pequeña niña de tan solo 7 años con síndrome de Down, es quemada viva por esos malditos de la organización de caza fantasmas, solo por ser testigo de la presencia de un demonio. Sé perfectamente que los caza fantasmas asesinan y eliminan dejando sin rastro alguno a los testigos, para no poner en riesgo su existencia y evitar que los descubran, y no existe excepción alguna. Ellos eliminan a cualquier testigo, sin importarles la edad. Ellos eliminaron a esa niña quemándola viva hasta la muerte, frente a los ojos de su hermano mayor, y lo último que escuchó de su pequeña hermana, fueron sus gritos de dolor. Ver la expresión de terror de su hermano, con sus ojos llenos de lágrimas, me hizo pensar que incluso alguien tan inexpresivo como yo, reaccionaría de esa manera si a Yuki le hubiera pasado lo mismo que a la niña. Ese último momento me impactó por eso mismo, por ponerme en los zapatos de ese niño e imaginarme a Yuki en la posición de la niña. Ver morir a tu pequeña hermana menor y no poder hacer nada para evitar su cruel destino, me llena de impotencia incluso a mí, un tercero en la situación. El hermano debió sentirse peor.
Además, también me hizo sentir mal porque me recordó lo que hice en el pasado. Por mi culpa, por quitarle el fantasma que lo protegía, un pequeño niño con síndrome de Down murió. Me hizo recordar uno de mis pecados, recordándome que soy un monstruo.
No quiero que Yuki se entere de mi pasado, mucho menos quiero que su querido hermano mayor sea un monstruo, por eso quiero cambiar.
La número 2 fue ver a un hermano mayor, muriendo peleando contra un hombre adulto, intentando evitar que ese hombre viole a su hermanita. Ese hermano mayor era un adolescente, de mi edad, pero él era débil y fue asesinado, no pudo evitar que ese hombre viole a su hermanita. Al igual que el último momento anterior, me hizo sentir impotencia, pues sentí la desesperación de ese chico.
Me puse en sus zapatos y me sentí miserable. No quiero que Yuki sufra, mucho menos que algo como eso le pase. Soy poderoso, ningún hombre sería capaz de vencerme, pero si algo me enseñó la vida, es que este mundo es asqueroso e impredecible.
Miré su adorable rostro, cuya expresión me confirma que está profundamente dormida y cómoda... Tan linda.
Ah... Yuki merece un hermano mayor de confianza, no un monstruo.
Quiero dejar de ser un monstruo, pero... Espera... ¿Monstruo...? Monstruo... Ah, siempre había considerado mis acciones como necesarias, pero ahora recordar mis acciones pasadas me hacen sentir... mal... ¿Por qué hasta ahora me siento así? ¿Es por Yuki? ¿Por qué? Nunca me había sentido así, incluso cuando mis padres estaban vivos.
... ¿Estoy madurando? ¿O simplemente estoy cambiando porque quiero ser alguien de confianza para Yuki? Ah, Yuki, tienes demasiada influencia en mí. Comúnmente no permitiría eso, pero... Ah...
—No sé qué pensar al respecto.
Estoy muy confundido respecto a mis sentimientos actuales. Antes no me consideraba un monstruo y creía que mis acciones eran necesarias, y ahora que quiero ser una mejor persona para Yuki, esos recuerdos ahora me resultan asquerosos y me hacen sentir un monstruo.
Yuki, ¿me estás volviendo un chico sensible?
—Saik, cariño, ¿te encuentras bien?
—Ah, hola, número 31. Sí, estoy bien. ¿Qué te pareció tu primera conversación con Yuki? Es agradable, ¿verdad?
Número 31 se quedó en silencio, mientras una expresión de preocupación abunda en su rostro. ¿Por qué sigue preocupada por mí? Ya todo terminó.
—... ¿Qué pasó con el Golem? Te ves tan... distinto...
—... ¿Distinto?
¿Me veo distinto? ¿A qué se refiere?
—Sí, pareces alguien... débil.
—¿Débil?
—Te ves desanimado y triste. No te ves igual que antes. ¿Qué pa...?
—Borrar memoria
El tiempo se detuvo y el fantasma legendario número 97, el fantasma del tiempo, apareció frente a mí.
—¿Estás seguro de que quieres hacerlo, amo?
Me niego a ser débil. Con razón comenzaba a considerar a mi yo del pasado un monstruo por hacer todas esas horribles cosas que hizo. Me estoy volviendo un sensible, y me niego a ser un chico sensible.
Si cambio, seré presa fácil para cualquiera. Si cambio y me vuelvo un chico sensible que se preocupa por sus acciones y que no quiera hacer ciertas cosas para lograr sus objetivos solo porque eso lastimaría a personas inocentes, Yuki estará en peligro.
Debo seguir siendo el mismo Saik de siempre, para que Yuki esté a salvo mientras entreno a Sumi y que ella sea capaz de proteger a Yuki.
Aunque intente ser una mejor persona y no quiera suicidarme, no podré estar con Yuki por mucho tiempo, ya sacrifiqué la mayor parte de mi vida, moriré en algunos años. Pondré en peligro a Yuki si soy un chico sensible. El futuro de Yuki depende de Sumi, y si entreno a Sumi con una mentalidad de chico sensible, el futuro de Yuki estará en peligro. Debo entrenar a Sumi para que sea como el Saik del pasado y no para que sea como el Saik del presente.
El Saik del pasado podrá haber sido un monstruo, pero sus métodos daban resultado siempre. Eso es lo que necesita el mundo.
Si me vuelvo alguien sensible que se preocupa por otras personas ajenas a él, Yuki estará en peligro, y no quiero eso.
Por el bien de Yuki, debo seguir siendo el mismo monstruo de siempre. No puedo permitirme cambiar. No cambiaré.
No vale la pena arriesgar el futuro de Yuki solo para satisfacer mi propio deseo de ser un hermano mayor ejemplar para ella. Moriré en algunos años, es por eso que no vale la pena ser un chico sensible solo para satisfacer ese deseo. Esa satisfacción de ser un hermano mayor ejemplar solo duraría poco tiempo y pondría en peligro el futuro de Yuki, pero si sigo siendo el mismo monstruo insensible de siempre, al menos podré mejorar las posibilidades de victoria de Sumi, así asegurando un buen futuro para Yuki. Y si le oculto a Yuki mi pasado, ella me seguirá viendo como un hermano mayor y no un monstruo.
Ser un chico sensible que se preocupa por los demás solo me hará más débil. No puedo permitirme ser débil.
No puedo permitir que mis emociones me controlen.
—Sí, quiero hacerlo.
—Borrar todos esos malos recuerdos recientes te costará demasiado, amo. Creo que te quedarían... dos años de vida. Sí, vivirás dos o tres años más si borras todos esos recuerdos, amo.
—Haz lo que puedas, pero que me quede el tiempo suficiente para llegar a la graduación.
—Ya veo... Amo, usted conoce las consecuencias de sus actos. Si quiere evitar el infierno, podríamos ir al...
—No, aceptaré las consecuencias de mis acciones. No soy un cobarde para evitar el castigo. Además, creo que tengo conocidos en el infierno, no será tan malo.
—¿En serio recuerda a sus esposas en el infierno, amo? Por fin. Pensé que la maldición de aquél Dios de mierda duraría más tiempo.
...
...
...
¿Qué?
—¿Tengo esposas en el infierno?
—¿Eh?
—¿Ellas me engañaron o por qué borré mis recuerdos con ellas? ¿Y esposas en plural? ¿Cuántas son?
—Amo, ¿en serio no las recordó justo ahora?
—No. ¿Y a qué Dios de mierda te refieres? ¿Al protector de las almas?
—... Mierda... Bueno... Ah... Pues... Bueno, cuando él regrese, usted ya estará muerto, así que no importa. ¿Confirma el borrado de memoria?
¿"Cuando él regrese"? ¿Un enemigo del pasado que no recuerdo regresará? Ah, no tengo tiempo para estas tonterías.
Sé que debería importarme, pero justamente por eso lo trato de ignorar. Si permito que algo me haga cambiar de opinión acerca del borrado de memoria, significará que realmente me estoy volviendo en alguien débil de mente. Debo seguir siendo un Saik insensible y poderoso. Es el Saik que este mundo necesita.
—Ah, ¿ese enemigo podrá ser derrotado por Sumi?
—Un Saik de 8 años, con 98 fantasmas legendarios apenas logró derrotarlo. Pero Sumi mostró tener muchísimo poder espiritual incluso sin tener fantasmas legendarios... Yo diría que Sumi tiene un 80% de victoria a su favor y 20% en contra.
—8-2, ¿eh? Vale la pena el riesgo... ¿Y en serio estoy casado? ¿Tengo hijos?
—Casado sí, pero no tiene hijos.
—... Me pregunto si en el infierno me drogué o algo parecido. ¿Por qué me casé? Supongo que era necesario para mi misión o algo parecido... Ah, como sea.
—Perdón por mencionarlo, pero como dijiste que tenías conocidos en el infierno, creí que te referías a ellas.
—Me refería a los demonios que hice mis esclavos, pero ya no importa. Borra mi memoria, excepto ciertos recuerdos.
—¿Confirma? ¿Seguro que no se arrepentirá?
—Confirmo. Y esta vez, haz mejor la parte de reemplazar los recuerdos. No quiero sospechar.
—A la orden, amo.
Sumi, es momento de darte algo especial.
•
•
Ah, que bien dormí.
Ya mañana es la final, por fin podré irme a casa a disfrutar de mi vida.
—¡Buenos días, Saik! ¡Te hice el desayuno!
—Déjame adivinar, ensalada de frutas.
—¡Oye, no soy tan predecible!
—...
—...
—Entonces, ¿qué hiciste de desayunar, Yuki?
—Pues... ¡Vamos a comer muchas frutas cortadas en un coco!
—Básicamente ensalada de frutas.
—¡Sí, sí, comeremos ensalada de frutas como siempre! ¡¿Feliz?!
—Amaneciste de malas, ¿eh?
—¡Por supuesto! ¡Naima vino y se robó nuestras frutas! ¡Y tú no te despertabas! ¡Por eso estoy enojada! ¡Te hiciste el dormido para no ayudarme a evitar que se las robe!
—Pues realmente estaba dormido, no fingía. ¿En serio se las robó?
—¡Sí! Afortunadamente encontré más para el desayuno.
Vaya, vaya. Naima me robó frutas... Robó... ¿Por qué robarme hasta este día? ¿Por qué no me robó antes? ¿Apenas entró en desesperación...? O... tal vez...
—¿Por dónde se fue Naima?
—Fufu. Oh, Saik, mi héroe, ¡¿irás a recuperar nuestras frutas?!
—Le iré a robar algo. Ojo por ojo.
—¡Hahahahahaha! ¡Bien hecho, Saik! ¡Por aquí, sígueme!
Lo siento, Yuki, pero no planeo robarle nada a mi futura novia, lo único que le robaré será el corazón en el futuro. Estoy más que seguro de que es otra la razón por la que decidió robarme.
Seguí a Yuki por cierta ruta, y durante el camino me di cuenta de muchas cosas, o más bien, pistas. Cáscaras de frutas y rastros de pisadas. Ese rastro fue hecho a propósito. Si Naima no quisiera que yo la pudiera encontrar, habría escapado sin dejar cáscaras de frutas en el suelo. Es un rastro demasiado obvio para un experto. Naima se aseguró de dejar cáscaras en el suelo cada cierto tiempo, para evitar ser demasiado obvia, pero eso solo hubiera funcionado si yo no fuera un experto en el tema del rastreo. Incluso si ignoro el hecho de que hay hojas aplastadas en el suelo debido a las fuertes pisadas de Naima, es demasiado obvio que ella quiere que yo la encuentre.
—Yuki, yo sigo el rastro, sé en dónde puede estar. Regresa a hacer el desayuno, yo me encargo del resto. Tengo muchísima hambre y prefiero evitar perder más tiempo con ella. Llegaré a su campamento y le robaré la comida o la ropa, lo primero que encuentre.
—¡Hahahahahaha! ¡Por supuesto! ¡Vamos, Saik, roba su ropa interior, te doy mi aprobación!
—Lo intentaré.
Yuki se dio media vuelta y yo seguí mi camino.
Naima, ya estás en movimiento, ¿eh? Perfecto, porque yo también haré mi movimiento.
Saqué mi teléfono de mi bolsillo y le envié mensaje a cierta persona.
[Ahora. Te enviaré mi ubicación cuando la vea.]
Es cuestión de tiempo antes de que ellos vengan por mí por usar mi teléfono para otra cosa que no sea para las clases virtuales, así que...
[Estás expulsado de la prueba especial.]
El brazalete se activó. Bueno, tengo pocos minutos.
Comencé a correr, siguiendo el rastro... Mmm... Por aquí... Oh, vaya, vaya.
Salí de entre los árboles y a la distancia veo a Naima, sentada en el suelo justo en la orilla de un precipicio.
Está comiéndose mis frutas, seguramente para provocarme y lograr que yo vaya hacia ella. Bastante inteligente, Naima. Demasiado inteligente. Si en mi posición hubiera estado otra persona, habrías ganado, pero tuviste la mala suerte de que yo sea tu "enemigo".
Le envié mi ubicación a "ella" discretamente, para evitar que Naima me viera haciendo eso.
Me acerqué hacia ella y ella fingió que no me vio, pero estoy bastante seguro de que ya me vio y que sigue comiendo solo para que yo me confíe.
Me paré frente a ella. El brazalete solo se activa conmigo, no con los demás. Me enteré de que Evelyn y Bell renunciaron a la prueba porque los vi tomando clases presenciales, el brazalete no me avisó. Estaré a salvo por unos minutos.
—Hola, hermosa. ¿Me devuelves las frutas? Consíguete las tuyas.
—... Sabes, me das asco.
—¿En serio? Creí que las miradas de asco que me dabas eran de amor y amistad. Me siento un idiota.
—Te consideraba un genio, algo molesto, pero eras al menos confiable... O eso creía. Pero solo eres un asqueroso pervertido de mierda.
Mirándome con asco... No... Con odio... Ah, presidenta, eres realmente increíble.
—Gracias por tu sermón, pero tengo hambre. ¿Me devuelves las frutas?
Ella se levantó del suelo.
—Si me salvas, te dejaré tocar mis pechos.
—¿Eh?
Ah, ya veo.
Ella se hizo para atrás para caer a propósito del precipicio hacia una muerte segura. Sí, definitivamente las mujeres están locas. ¿En serio fue capaz de llegar tan lejos?
La tomé del brazo y la jalé para evitar que caiga. Puedo sentir muchísimo miedo en ella, su corazón está latiendo a un ritmo alarmante y su brazalete se activó de emergencia. Sí, las mujeres están locas.
Hizo eso solo para lograr activar su brazalete, para que le crean a ella y no a mí.
—¡Nooooooo! ¡Déjame en paz! ¡No quiero, no quiero! ¡¡Ayuda, por favor, Saik me quiere violar!!
—Vaya, vaya.
Se tiró al suelo y comenzó a gritar. Vaya, vaya, vaya.
Mmm... Estoy casi desnudo y Naima logró activar su brazalete genuinamente... Sí, si no tuviera un plan de emergencia, habría sido mi fin, tanto escolar como socialmente.
Si otra persona hubiera estado en mi lugar, Naima se habría salido con la suya, pero no soy un idiota. Ella perdió.
—¡¡Alto ahí, Saik!!
—¡¡Si te mueves, tengo permiso de disparar!!
Oh, el profesor de la clase 3-A llegó aquí demasiado rápido, y con él, está un policía. Sí, ya veo.
Me asomé por el precipicio. Vaya, vaya. Un colchón que se usa en las películas para grabar escenas de caídas a una gran altura está en el mar. Si Naima hubiera caído en esa cosa, habría salido ilesa, pues creo que es un colchón hecho por la empresa de Lalo, y sus productos son casi milagrosos.
Presidenta, pensó en todo, ¿eh?
Si saco mi teléfono, ese policía me disparará. No puedo tomarle foto a ese colchón para usarlo como evidencia. Vaya, vaya.
Y tampoco puedo usarlo porque se alejó demasiado de la orilla, o más bien, alguien lo está alejando.
Vaya, vaya.
El policía se está acercando cada vez más y Naima no deja de llorar. Ah, eres increíble, Naima, serías una gran actriz.
Dudo bastante que ese sea un policía de verdad, solo es otro actor. Esa pistola es falsa también. Sus métodos son buenos, pero tuvieron la mala suerte de que yo no sea normal.
Saqué mi teléfono de mi bolsillo.
—¡¡Dije alto!!
Y comencé a tomarle fotos al colchón, ignorando los gritos desesperados del supuesto policía.
Ah, si tan solo hubieras conseguido una pistola de verdad, señor.
—Bien, tengo mi primera prueba.
Miré de reojo al profesor de la clase 3-A, enojado, pues el supuesto plan maestro acaba de fallar.
Una supuesta víctima (Naima), un policía y un arma. Si yo fuera otro estudiante, uno ignorante respecto al tema de las armas, el plan habría funcionado, pues el estudiante no se habría atrevido a sacar su teléfono para tomarle fotos al colchón y no tendría pruebas que confirmen su versión de la historia. Ese estudiante sería definitivamente expulsado sin dudarlo, pues Naima tiene una prueba muy creíble.
Pero incluso si su arma fuera real, habría preferido que me disparen a perder. Hubiera recibido un disparo, pero habría conseguido pruebas de que su acusación era falsa.
En cualquier situación salgo ganador, presidenta.
Sabía que esto iba a pasar, por eso ya tenía un plan de emergencia.
—Bueno, Naima...
Me agaché y miré a los ojos a Naima.
—Tú siempre estarás con la persona que más beneficios te dé, ¿no? Entonces, ¿por qué escogiste a la presidenta y no a mí? Si me hubieras escogido, esta prueba especial hubieran sido unas vacaciones para ti y no un infierno, pero escogiste a la presidenta. ¿Y qué recibiste a cambio? Volver esta prueba especial un infierno y ahora serás expulsada. Un bonito final, ¿verdad?
—Tsk. Si hubiera estado contigo, ¡me habrías violado de verdad! ¡Eres un asqueroso pervertido de mierda! ¡¿Crees que no sé que chantajeas a una chica para aprovecharte de ella?! ¡No importa que le hayas tomado una fotografía al colchón, mi evidencia es mejor, ese colchón podría ser solo basura que algún idiota tiró al mar!
—Oh, ¿te refieres a Hanako? ¿Quieres conocerla? ¡¡Hanako, ven aquí!!
Ella salió de entre los árboles y se acercó corriendo hacia nosotros, con teléfono en mano.
... Wow... Sus pechos rebotan demasiado al correr. Definitivamente tener pechos tan grandes debe de ser demasiado incómodo para ella, pero como mis hormonas de adolescente se están activando, debo admitir que ver esa escena me está excitando.
Está en traje de baño y sus pechos rebotan al correr... Vaya, vaya. Mi pequeño yo no se equivocó, definitivamente tengo un buen gusto para las mujeres. Es una lástima que mi relación con ella no haya funcionado. Bueno, ahora tengo a Naima, plana, pero es hermosa para mí.
—La fotografía del colchón no es la única prueba que tengo.
—¡También tenemos un video de ti intentando caer sobre ese colchón para activar tu brazalete!- Dijo Hanako.
—¿Q-qué?
Esa expresión de Naima... Confusión y... decepción. ¿No creías que esto podría pasar? ¿Creíste que ganarías? Pues estabas muy equivocada.
Sabía que esto iba a pasar. ¿Por qué? Porque yo mismo manipulé la situación para que este escenario ocurra.
La vicepresidenta me estaba siguiendo a la distancia en el crucero, y me aproveché de eso fingiendo que me aprovechaba de Hanako para que la vicepresidenta creyera que yo era un violador y se lo dijera a la presidenta. Ella seguramente no se lo creyó, pero usó la oportunidad para entretenerse con el resultado que esto iba a tener. De alguna manera convenció a Naima de ayudarla, e incluso Naima intentó echarme a perder varias de las pruebas especiales extra, como la pista de la arena, cuyo objeto escondido fue encontrado por Naima y lo escondió en otra parte, para que yo no lo encuentre.
¿Por qué Naima no simplemente tiró esas cosas al mar en lugar de simplemente cambiar de posición esas cosas? Porque la presidenta no disfrutaría de una victoria fácil, por eso prefirió simplemente hacerme las pruebas más difíciles, pero no imposibles, además eso también le ayudaría a saber lo lejos que puedo llegar.
El odio de Naima por mí creció porque pensó que era un violador, por eso está tan confundida en este momento.
—E-esto... esto es... ¡Oye, tú, aquí hay un policía! ¡Deja de fingir y dile todas las cosas malas que Saik te ha hecho! ¡Sé perfectamente que finges ser su amiga porque te tiene amenazada!
—Nop. Me tocó los pechos porque queríamos manipular a la vicepresidenta, para que ella le diga a la presidenta que Saik es un pervertido, y que la presidenta te lo diga a ti. Fufu. ¡Y funcionó! ¡Hahahahahaha! ¡Saik, eres increíble!
—N-no... E-esto no puede ser real...
Miré al profesor.
—Mi profesora estará aquí pronto, así que no se vaya, profesor de mierda. Necesitamos testigos.
—Tsk.
Hanako me sonrió y se acercó a mí.
—¿Hice un buen trabajo?
—Más que bueno. Muchas gracias, Hanako. Te debo un favor.
—Fufu. Después me lo cobraré.
Tengo miedo de lo que me pedirá, pero cumpliré. Soy un hombre de palabra.
Oh, ahí viene mi profesora, junto con más personal de la escuela. Bien, a mostrar la evidencia.
•
•
Después de una hora, todo se arregló y en el lugar solo estamos los profesores, Naima y yo. A Hanako la perdonaron y dejaron que volviera a la prueba especial porque me ayudó a evitar que me acusen de una violación falsa. A mí también me perdonaron y volví a la prueba especial, pero Naima...
—Doble expulsión. Saik dijo que no presentará cargos en tu contra, pero la escuela no pasará por alto esto.- Dijo la profesora fríamente.
—Sí... Sí, lo acepto. Acepto mi castigo.- Dijo Naima, con lágrimas en sus ojos.
Ella genuinamente está triste, pues sus hermanos menores dependen de ella. Ella no quiere decepcionarlos.
Naima es una buena persona, solo aceptó ayudar a la presidenta por dos razones: la principal sería que pensaba que yo era un violador que abusaba de Hanako. La segunda razón sería el dinero que la presidenta le ofreció.
Naima está en la escuela porque una profesora de otra clase le ayuda a pagarla, pero es pobre. El dinero fue algo que no se atrevió a rechazar... Creo que la amo más.
Ser capaz de llegar tan lejos solo para ser capaz de darles una mejor vida a sus hermanos menores... Te amo, Naima.
Ella se ve desesperada, una gran cantidad de sentimientos negativos, en su mayoría tristes, inundan su ser en este momento. Lo acaba de perder todo. Perdió su gran oportunidad de salir de la pobreza. Su gran oportunidad de graduarse en una de las mejores preparatorias del país. ¿Y por qué? Por intentar ganar dinero mientras hace algo bueno (expulsar a un supuesto violador).
Naima, lo siento, hice esto para ganarme tu amistad. Prometo ser un gran amigo y futuro novio para compensarte este dolor.
—Doble expulsión, ¿eh? Para que su punto de protección no tenga efecto, ¿verdad? Bastante inteligente, profesora. Entonces, ¿eso sería todo? ¿Puedo irme?
—Sí.
—Déjeme confirmar. ¿Solo es doble expulsión?
—Sí. ¿Querías algo más?
—No, al contrario, solo quería asegurarme para que no intente usar una triple expulsión. Quiero usar mi punto de protección con Naima.
—¿Qué?
—¿Eh?- Dijo Naima, confundida.
—¿Debo firmar algo o qué?
—Espera, Saik. Ella intentó acusarte de violación. ¿En serio quieres usar tu punto de protección con ella?
—No tengo nada en contra de ella, al contrario, ella y Ludius son las únicas personas que me agradan en la clase. Será aburrido ir a clases sin Naima. Ah, además, técnicamente la manipulé para que piense que soy un violador, así que no me sentiría bien que una persona buena como Naima sea expulsada por intentar expulsar a un supuesto violador. Quiero usar mi punto de protección con ella.
—Vaya... Bueno, si eso es lo que quieres. Naima, vámonos, te salvaste de la expulsión, pero sí estás expulsada de la prueba.
—¡¿En serio...?! D-digo... Y-yo... ¡¿En serio me salvarás?!
¿Debería aprovechar la situación y pedirle una cita a cambio...? No, eso sería aprovecharme demasiado de ella. Poco a poco.
—Claro, gracias a ti, pude humillar a la presidenta. Es lo mínimo que te debo.
—Yo... Pues... Gracias... En serio, muchas gracias.
Me extendió la mano... La chica que tanto me odiaba, me quiere dar un apretón de manos... Vaya, mi corazón se aceleró. Se siente bien.
La tomé de la mano.
—De nada, Naima. Espero que podamos ser amigos, no mentía cuando dije que Ludius y tú son las únicas personas que me agradan de la clase.
—Pues... podemos intentar ser amigos, pero ¿no te agrada Sylphie?
—Ah, es complicado... Profesora, si golpeo a un profesor, ¿me expulsan de la escuela o solo de la prueba especial?
—S-supongo que solo de la prueba.- Dijo asustada, pensando que la golpearía a ella.
No te preocupes, profesora, estaba hablando del idiota a su lado.
Sin esperar ni un segundo más, golpeé al profesor de la clase 3-A fuertemente en la cara y cayó sentado al suelo.
La profesora y Naima quedaron en shock ante mi ataque inesperado, y el profesor solo gruñe furioso, mientras su nariz sangra, al igual que sus labios.
—Sé perfectamente que usted ayudó a la presidenta, así que usted también es mi enemigo. Adiós. Vámonos, profesora, ya quiero irme a casa.
—¿Eh? Ah, claro... Vámonos.
La profesora se alejó y la seguí, junto con Naima. El profesor se quedó en el suelo, pues debe tranquilizarse para no golpearme. Ese profesor es demasiado temperamental. Podría usar eso a mi favor después.
—¡¿Por qué mierda hiciste eso, idiota?! ¡Te dieron la oportunidad de quedarte en la prueba especial y la desperdicias!
Ah, gracias por volver a la normalidad, Naima, me gusta más tu lado violento que tu lado sensible y triste.
—Hanako no dirá nada, al igual que los profesores. Pedí que no se hiciera público esto. Si nos expulsan a ambos, podríamos inventar que retamos a otra clase y perdimos. Nos culparán a ambos y no solo a ti. Prefiero evitar que te sientas peor.
—¿Y por qué te preocupas por mí? Eres un raro, ¿lo sabías?
—Porque me gustas, por eso me preocupo por ti.
—Sí, sí, te agrado, bla, bla, bla. Eso no te quita lo raro.
—Me refería a que me gustas de una manera romántica y todo eso. Ah, solo espero que mi casa no esté tan sucia. Me da flojera llegar a limpiar.
—Creí que ustedes, los ricos, tenían sirvientas y... Espera... ¡¿Qué fue lo que dijiste?!
—Mi casa estará muy sucia y...
—¡No, lo otro!
—¿La parte de que estoy enamorado de ti?
—¡Sí, eso!
—Pues me gustas. ¿Por qué?
—¡Ahhhhhhhh! ¡¿Cómo dices algo tan vergonzoso tan a la ligera, idiota de mierda?!- Dijo Naima, sacudiendo mis hombros.
Vaya, no está sonrojada ni apenada, al contrario, está furiosa y llena de rabia.
—Ah, no serás fácil de conquistar, ¿eh? Ni siquiera te pusiste nerviosa. ¿Al menos me dejarías intentar ganarme tu corazón?
—¡Eres un puto raro! ¡Un raro!
—Me lo dicen seguido, comúnmente tú. Entonces, ¿me permites intentar enamorarte? Soy virgen, al igual que mis labios. Nunca he besado a ninguna mujer, aunque Saoto, el presidente de la clase, me robó un beso, pero me dio asco, no lo disfruté. Espero que eso último no te moles... Hmmmmh.
Naima me apretó los labios con sus dedos para evitar que siga hablando.
—¡Si te digo que sí, ¿dejarás de decir estupideces?!
Asentí y ella soltó mis labios.
—Tsk. En serio, eres un maldito raro sin sentido común.
—Pensé que éramos amigos, y los amigos son sinceros. Además, leí en Internet que, si quiero tener una relación romántica con una chica, en este caso tú, debo dejar en claro mis intenciones desde el principio para que puedas verme algún día como una posible pareja romántica y no un simple amigo.
—... ¿En serio te gusto?
—Bastante a mi parecer.
—... Ah, eres un puto raro.
—Bueno, le estás dando permiso a este raro de intentar enamorarte, así que tú también eres una rara.
—Más bien estoy loca... ¿Y Sylphie? No quiero tener problemas con ella, así que no le digas a nadie lo que sientes por mí.
—Ella no me gusta.
—Pero tú le gustas.
—Lo sé, pero ya la rechacé indirectamente muchísimas veces. Ya sabe que no me gusta.
—... Oye, idiota.
—Saik.
—... Oye, idiota, ¿por qué yo y no ella? Aunque odie admitirlo, es más hermosa que yo y sus pechos son gigantes. ¿Por qué no te enamoras de ella?
—La apariencia es temporal, mis padres me enseñaron que debo sentirme atraído por los sentimientos y no por la apariencia. Y tú, Naima, logras acelerar mi corazón y me gusta tu personalidad, por eso me enamoré de ti. Además, eres una chica inteligente que sabe evitar problemas, y lo confirmé cuando no quisiste participar con tus amigas en la trampa que me estaban preparando. Realmente me encantan las chicas como tú... Aunque también tengo la teoría de que estamos destinados a estar juntos, porque la presidenta es muchísimo mejor que tú, pero no me gusta para nada.
—No pues, gracias por eso último.
—Solo soy honesto.
—Tsk. Como sea.
Bueno... hice un avance enorme con Naima este día... Wow... Salió mejor de lo que pensé.
Oficialmente, Naima y yo somos amigos.
Próximo paso: ser novios.
Ya dejé en claro mis intenciones con ella, así que solo debo esperar... Ah, tengo hambre... Hambre... Ups.
Ven aquí... Ahí viene.
—¡¡Uwaaaah!!
Yuki chocó contra mí.
—¡Tonto, tonto, tonto! ¡Casi me ahogo con un pedazo de mandarina! ¡¿Y por qué tardaste tanto?!
—Profesora, ahora que estamos expulsados de la prueba especial, ¿cuándo regresaremos a la ciudad?
—Hoy mismo.
—Gracias.
—¡¿Eh?! ¡¿Te atraparon robándote la ropa interior de esta idiota?!
—¿Y bien, señorito enamorado? ¿No me invitarás a salir?
—¿Eh? ¿A-a qué se refiere Naima con...?
—Solo aceptarías porque te salvé de la expulsión. Prefiero invitarte a salir en el futuro, cuando seamos buenos amigos y me tengas una genuina confianza. Pero podemos salir como amigos, para conocernos mejor. ¿Te gustaría ir a un concierto? Me gusta el rock y habrá un festival de música rock en la ciudad en dos semanas.
—¡¿Eh?!
—Vaya, vaya. Al menos coincidimos en eso. También me encanta el rock. Está bien, suena divertido. Puedes considerarlo una cita si quieres, solo porque estoy de buen humor.
—Está bien, es una cita.
—¡¡¿Qué está pasando?!!