El ascensor llegó rápidamente. Con el sonido de timbres y chasquidos, la puerta dorada delante de Percy se abrió suavemente, y una fuerza desde atrás lo empujó hacia el ascensor. Pronto, una gran cantidad de magos entraron y apretujaron a Percy contra la pared del ascensor.
"¿No podrían aplicarle un Encantamiento de Extensión Indetectable a esta cosa?" se quejó Bob, el mago con barba descuidada, porque había demasiada gente y su caja delante de él se pegaba aún más a su cuerpo, lo que lo hacía sentir incómodo.
Los magos alrededor asintieron y murmuraron en acuerdo.
Cuando el ascensor estuvo lleno y ya no cabía más gente, la puerta de la rejilla se cerró con un clic. Con el sonido de la cadena, el ascensor subió lentamente y luego se detuvo. Luego, una voz fría de mujer resonó:
[Séptimo piso, Departamento de Deportes y Juegos Mágicos, incluye la Sede Oficial de la Liga de Quidditch de Gran Bretaña e Irlanda, Oficina de Patentes de Productos Cómicos]
La puerta del ascensor se abrió con un chirrido, y varios magos se esforzaron por abrirse paso y salir. El espacio dentro del ascensor se volvió un poco más amplio.
El ascensor continuó subiendo y llegó al sexto piso. Como el Ministerio de Magia estaba construido bajo tierra, los pisos disminuían en número. La sala principal en la que Percy ingresó por primera vez estaba en el octavo piso, y debajo estaban el Departamento Misterios y la Sala de Juicios de Wizengamot. El ascensor siguió subiendo y finalmente llegaría al primer piso, donde se encontraba la oficina del Ministro de Magia y los Servicios de Logística. La Oficina Internacional de Cooperación Mágica, a la que Percy se dirigía, se encontraba en el quinto piso.
El ascensor se detuvo brevemente en el Departamento de Transporte Mágico, algunos magos salieron y varios aviones de papel entraron. Todos los aviones de papel tenían el mismo color, un tono púrpura claro, y tenían el sello del Ministerio de Magia en sus alas.
Percy sabía que eran mensajes que se enviaban entre departamentos. Cuando su padre comenzó a trabajar, los mensajes todavía se enviaban con lechuzas, lo que provocaba que todo el Ministerio de Magia estuviera lleno de excrementos de lechuzas.
Mirando los aviones de papel que volaban tranquilamente sobre su cabeza y luego mirándose a sí mismo, impecablemente vestido, Percy pensó que esta reforma era realmente grandiosa.
[Quinto piso, Oficina Internacional de Cooperación Mágica, incluye la Asociación Internacional de Comercio de Magia, la Oficina Internacional de Leyes Mágicas y la Rama Británica de la Confederación Internacional de Magos]
"¡Permiso, por favor!" Percy se esforzó mucho por salir. Frente a él, había un pasillo limpio y ordenado, sin adornos innecesarios. El piso era tan brillante como un espejo, lo que daba una sensación refrescante.
Recordando el pasillo del Departamento de Deportes y Juegos Mágicos que parecía una discoteca nocturna, Percy pensó que había tomado la decisión correcta al elegir este lugar.
Antes, bajo la guía de una amable bruja, Percy había solicitado varios puestos y, finalmente, el Departamento de Accidentes y Catástrofes Mágicas, el Departamento de Transporte Mágico y la Oficina Internacional de Cooperación Mágica mostraron interés en él. Después de una cuidadosa consideración, Percy eligió la Oficina Internacional de Cooperación Mágica.
En ese momento, apareció una figura al final del pasillo.
"¿Eres Percy Weasley, el nuevo asistente del jefe de departamento?" La mujer que se acercaba era una bruja con un aspecto elegante. Su apariencia no parecía de una bruja, sino más bien la de una ejecutiva de oficina. Tenía el pelo corto y llevaba gafas de montura negra. Su túnica de bruja estaba claramente modificada, no tan suelta como las túnicas de los demás magos, lo que facilitaba su uso en la vida diaria.
Después de recibir una respuesta afirmativa de Percy, la bruja lo miró de manera extraña y dijo: "Muy bien, sígueme. El Sr. Crouch quiere verte".
Percy se puso nervioso y arregló su cuello. No le sorprendió que el jefe de departamento, el Sr. Crouch, quisiera verlo. Después de todo, era su asistente, aunque solo fuera un pequeño personaje encargado de archivar documentos. Sin embargo, era apropiado encontrarse al menos una vez.
La bruja elegante condujo a Percy hacia el fondo del pasillo.
"Al Sr. Crouch le encanta la limpieza y el orden, así que el ambiente en nuestro departamento es el mejor de todo el Ministerio. Todo debe estar en su lugar y perfectamente organizado". Pasaron junto a una ventana y la luz brillante del sol iluminó el rostro de Percy.
Percy sabía que incluso debajo del suelo, la iluminación en el Ministerio de Magia no se veía afectada, ya que estas ventanas estaban encantadas. El clima que se veía a través de ellas era decidido por el Departamento de Mantenimiento y Reparación Mágica; si este departamento quería un aumento de sueldo, era muy probable que el Ministerio de Magia tuviera un período prolongado de mal clima.
Dieron vuelta en una esquina y se encontraron con dos grandes puertas de roble. En la parte superior de las puertas, con letras decorativas, se leía "Oficina Internacional de Cooperación Mágica". Al pasar por las puertas, Percy ingresó a un área abierta dividida en muchos cubículos pequeños, donde cada persona estaba inclinada sobre su escritorio, ocupada en silencio. El único sonido en el área era el rasgueo de las plumas sobre el pergamino y el ruido de los documentos siendo movidos. Era como si Percy hubiera ingresado a un salón de exámenes en lugar de un área de oficinas.
De vez en cuando, varias notas volaban desde los cubículos y se entregaban a los colegas cercanos, llevando mensajes escritos en ellas.
Percy vio un letrero en un pequeño cubículo que decía "Asociación Internacional de Comercio de Magia" con una tipografía muy ordenada.
Esta escena impactó profundamente a Percy, quien sintió que no había ningún lugar en el mundo más perfecto que este, donde la regla y el orden se manifestaban.
Mientras pasaba por los cubículos, Percy miró furtivamente dentro de uno de ellos y vio a un mago sentado en su escritorio, escribiendo algo en una nota. Había un montón de documentos perfectamente organizados sobre su escritorio.
"¡Seguramente está ocupado con algo muy importante!" pensó Percy para sí mismo.
Sin embargo, si Percy hubiera visto lo que estaba escribiendo, se habría quedado asombrado. En la nota del mago, estaba escrito en letras grandes: "Joey, ¿quieres ir a tomar algo al mediodía?"
La mayoría de las notas en esta oficina tenían un contenido similar, o eran sobre procesos burocráticos: aquí necesitabas firmar, allá alguien debía presentar una solicitud.
Incluso los magos en esta oficina dedicaban un poco de tiempo todos los días para escribir un resumen de su trabajo y luego enviárselo a su jefe. El jefe, después de leer el resumen, escribía un recibo y te asignaba el trabajo del día siguiente.
Los magos aquí, aparentemente ocupados, realmente estaban ocupados, pero en cuanto a la cantidad de trabajo que realmente hacían...
No preguntes, no preguntes. ¡Todos están trabajando muy duro!
Por supuesto, Percy, como recién llegado, no conocía esta verdad. La bruja que lo guiaba, incluso si lo sabia, no tenía intención de revelar este secreto tácito.
Y todo esto, se originaba en el señor Crouch, a quien le gustaba seguir reglas y estaba muy ocupado.
Percy y la bruja atravesaron esta área de oficinas y pasaron por varios pasillos y áreas similares hasta llegar a una puerta de madera, donde una placa en la puerta indicaba que era la oficina del señor Crouch.