NOTA ACLARATORIA: en este capítulo, habrá indicios sexuales, de violencia explícita y temas delicados (religiosos) para algunos adultos.
Si eres susceptible a estos temas, se recomienda dejar de leer esta historia.
El conductor del auto, se baja del mismo, asustado y grita asustado: ¡juro que no la vi!
Jhon, perdió la borrachera en ese instante, el cuerpo de Cristina aún con vida.
Lo mira con horror en su mirada.
Jhon, sumamente confundido, llorando, intenta consolar a Cristina, pidiéndole que resista hasta que venga la ambulancia, quedando rodeado de gente junto al conductor.
Alguien llamó a la policía.
Lo curioso es que, la gente que los rodea, no se ve preocupada ni impaciente, algo inusual en eventos trágicos.
El auto que se había estacionado cerca de la casa, comienza a abandonar la escena de reversa dado el bullicio de personas.
Al poco rato, al escucharse a los lejos el sonido de las patrullas, todos los vecinos huyen a sus casas.
Quedando todo apagado, como si nunca hubieran salido esta noche.
Jhon, y el conductor estaban demasiado perturbados para notar este movimiento silencioso.
Al cabo de minutos, el área se llena de patrullas y la camioneta de la morgue.
Entre los detenidos se encuentra Jhon y el conductor.
Tocan en algunas casas, los vecinos dicen no haberse dado cuenta.
A pesar de que tanto el conductor, como Jhon declararon que había salido mucha gente de los alrededores, la policía supuso que, no estaban en sus cabales, considerando que ninguno acepto haber salido de su casa.
Aunque, esto también indicaba que había algo detrás.