El tiempo trascurrió en un parpadeo, pero creo que eso se debe a que estaba esperando a que este día llegara. Esta era la semana en la que iríamos todos de compras para la llegada del invierno. Ry había dicho que tendría esa semana libre de actividades, así que era una buena oportunidad.
Chris y yo salimos directamente a esperarlos en la entrada, pasamos el rato hablando de lo que compraríamos hasta que oímos el llamado de los chicos. La primera persona que vi fue Araroza y sus amigas, después vi a Collins siguiéndolas varios pasos detrás. Seguí mirando, pero no había más nadie.
-Ry ya se fue hace tiempo.
-¡¿Qué?! ¡¿Por qué?!
Es extraño… ¿Le habrá pasado algo? ¿O quizás… algo ocurrió en el Club?
Por suerte no paso algo como eso. Araroza nos cuenta que Ry no pude venir, la razón no era muy clara, pero podía darme una idea. También que se disculpaba con nosotros.
La situación me dejo confundida, ya que pensaba que estaría libre de trabajo, no puedo entenderlo. Pensando así, Araroza siguió manteniendo la idea de ir de todos modos, incluido Chris y los demás.
Me sentí un poco mal, pero también decidí ir, sería grosero no hacerlo.
Estoy preocupada por Ry, pero debe de tener sus motivos. Realmente es una lástima, esperaba poder pasar el rato al igual que antes. Pero no puedo seguir de esta manera, debo divertirme también por mi cuenta.
En eso, con Araroza y sus amigas pasamos un gran rato hablando de ropa hasta llegar al centro comercial. Extrañaba esto de cierta manera; con mis compañeras de clase, después de lo ocurrido en la semana pasada, ya no podía verlas como antes, ni siquiera podía fingir simpatía.
En cambio, con Araroza llegábamos a tener muchas similitudes, tenía un gran sentido de la moda y era muy buena conversando, debe ser muy popular. Al estar pasando de tienda a tienda no dejábamos de probarnos ropa.
Saliendo de una tienda, Araroza murmuro algo.
-Umm~ ¿debe ser una lástima que Ry no esté aquí verdad?
-Oh… si, lo es. Pero él debe de tener una razón.
-¿Qué razón debe tener un chico para perderse pasar una tarde con damiselas tan encantadoras como nosotras?, ¿Uh? No sé qué tiene en la cabeza; a veces es inteligente, otras veces es un tarado y unas veces un astuto zorro, ¿no lo crees?
-Jejeje, esa sería una descripción adecuada, pero ese debe ser el encanto de Ry.
-¿Encanto, eh…?
Araroza sonrió y miro al vacío del techo unos segundos. Luego giro levemente su rostro hacia mi dirección.
-¿A ti te gusta, Ry?
-¿¡…!?
Mi pecho dio un leve salto al escuchar su pregunta de forma casual. Tan repentino y sin ningún aviso.
¿Por qué? ¿Qué me está preguntando?
-B-B-B-Bueno, si me gusta. Claro que me gusta Ry.
-Pero hablo de que si te atrae como hombre.
-Ah… pues…
¿Qué es esto? ¿Por qué estoy tan nerviosa con una simple pregunta? Primero pregunta si me gusta Ry como un amante de la nada… yo… bueno… no lo sé.
-Eso que dices… ¿Acaso a ti te gusta…?
-Oh, ¿cambiaste el tema? A mí la verdad no me gusta de esa manera, es más divertido molestarlo y ver las caras que pones cuando me acerco a él. Cuando le di de comer aquella vez colocaste una cara muy increíble.
-¡¿Q-Q-Q-Que…!? ¿¡Tú me viste hacer…!?
Esta mujer es muy retorcida, jamás había conocido alguien igual ¡¿Así que aquella vez se divertía viéndome?! ¡Ahhh! ¡No puedo entenderla para nada!
-Además, si tienes planeado salir con Ry o lo que sea, te advierto que quizás perderás tu tiempo.
-¿Uh?
Sin dejar de caminar, Araroza mostró unos ojos serios como si lo que decía fuera algo complicado.
-Talvez no lo conozca tanto como tú. Pero si algo pude notar de él es que no está interesado en tener un romance. Aunque "interesado" no sería como lo interpretaría… más bien seria que él lo "bloquea".
-¿Por qué dices eso…? ¿Te lo dijo él?
-No tuvo que hacerlo. Antes quise pasarme un poco, pero al final termine siendo rechazada, aunque parezca difícil de creer así fue. Ese cretino inútil… lo dejé pasar esa vez, pero en algunas ocasiones parece una persona diferente, me hace pensar que algo malo pasa con él.
-...
La voz de Araroza la hacía sonar consternada, no podía entender muy bien lo que quería decir. De lo que recuerdo, Ry siempre parecía nunca estar interesado en cosas románticas o estar flirteando con mujeres. Que diga que es algo malo para una persona de su edad, no me parecía lo correcto, entiendo que quizás debería de al menos llegar a mostrarse interesado como todo hombre joven; pero Ry siempre tenía cosas de que ocuparse y talvez evite tener esos pensamientos.
La forma en que lo dice no parece que sea mentira. ¿Qué a veces parece alguien diferente…? Eso es muy… no, a veces puede hacer cosas que no pensé que era capaz. Es cierto que tuve un mal presentimiento con lo ocurrido en su clase, pero eso ya se entendió que lo hizo por los demás. Me cuesta creerlo todavía…
-Te digo esto para que no esperes algo de Ry, deberías apuntar a otro, como el galán que siempre traes detrás de ti, pero eso ya es decisión tuya.
-Yo… la verdad no estoy tan segura de lo que siento. Yo solo quiero volver a como éramos antes de separarnos.
-Ya veo, entonces no hay de qué preocuparse. Ry solamente está concentrado en lo suyo, eso no quiere decir que sea malo, y como están yendo las cosas, estoy segura de que hará un gran escándalo pronto, por lo que deberíamos estar ahí en ese momento para que no sienta que está solo, ¿me equivoco?
Incluso ahora, no podía dejar de pensar en lo que decía.
¿Por qué es tan complicado aclarar mis sentimientos?
Nada más sé que no quiero verlo solo. Pero sería sentir lástima, y eso es lo que más odia.
-Sí, tienes razón. Gracias, Araroza.
-Solo dime Sara. Yo te llamaré por tu nombre también.
-De acuerdo.
Seguimos hablando un poco más después de eso, aún reafirmo mi opinión de ella, siendo muy malvada a veces, pero me agrada, y sus pensamientos coinciden con los míos. Terminamos teniendo una buena relación y compramos muchas cosas, fue un día muy satisfactorio.
Los días pasaron y no había sabido casi nada de Ry en toda la semana. Le preguntaba a Sara, pero solo respondía con que se había escapado. Cada vez que tenía un momento de libertad se iba al gimnasio de la Academia y al terminar regresaba a su casa sin decir nada.
Estaba preocupada, podría decirnos aunque sea unas palabras. Sara mencionó de nuevo que tenía esa expresión extraña de nuevo, era imposible convencerlo cuando estaba así; es lo que decía. Realmente no entiendo a qué se refiere, si lo viera talvez si lo entendería.
Eso me hizo darme cuenta de lo mucho que me importa Ry. Quiero entenderlo, realmente quiero… pero si lo hago… talvez me pondría en su camino y me deteste.
Teniendo estos pensamientos conflictivos.
Entramos en la época de invierno, y las noticias llegaron.
-¿¡Perdiste!? ¡¿En serio?!
Cuando regresamos del descanso a nuestro salón. Había un gran grupo reunido alrededor de Jimy Marz con un escándalo. Marz estaba lastimado, se podía ver por los moretones en su rostro y su claro mal humor.
La vista me pareció confusa y Chris se acercó para oír mejor, yo lo seguí detrás.
-Oye, Marz ¿Qué paso con que eras el más talentoso y que ganarías fácilmente?
-¡Ya sé lo que dije, ¿sí?! ¡Solo tuve mala suerte esta vez! ¡El próximo año ganaré definitivamente!
-Hahaha que mal perdedor~
-¡¿Qué dijiste?!
Marz parecía más irritado de lo normal, pero cuando entramos y preguntamos qué pasaba nos dijeron que había perdido las selecciones para el torneo. Por eso estaba tan enfadado, ya que perdió después de haber dicho todas esas cosas antes.
¿Pero quién ganó?
Esa pregunta se quedó en mi garganta, y mientras seguían molestando a Marz. Chris se acercó y pregunto.
Marz puso una cara más agria cuando lo vio.
-¿Quién ganó al final, Marz?
-¡Tch! Fue ese tipo… El Singular, Ryuji Narukami.
-¡¿Qué?! ¡¿Ganó un Singular?!
¿¡Ry ganó!?
Sentí que mi pecho gritaba de esa manera. Chris, con una sonrisa satisfecha, dio un vistazo hacia mí como si dijera que eso en verdad estaba pasando.
Los demás parecían no creer lo que habían escuchado y llenaban en salón con palabras despectivas e incrédulas. No quería escucharlos, así que me aleje de ellos. No podía dejar de sonreír.
Podría decir que la razón por la que no veíamos a Ry, es porque sabía lo que venía y se estaba preparando. Eso tiene mucho sentido. Si era así, entonces podía entenderlo perfectamente. Y estando con esos ánimos, pase el resto del día con una sonrisa boba.
Cuando las clases terminaron, Chris dijo que me adelantara, ya que tenía que entregar unas cosas en el salón de maestros. Le tome la palabra y eso hice, lo esperaré en la entrada mientras tanto.
Pero al llegar…
-¿Uh? Oh…
Un rostro conocido estaba ahí.
Había rastros de heridas en su cuerpo, parecía muy cansado y agotado.
Y en el momento que se dio cuenta de que lo miraba.
Una sonrisa animada apareció.
-Hola, Ari ¿Buen tiempo para salir, no?
-¡Ry!
Grite su nombre con más fuerza de lo normal, camine más rápido para llegar hasta él. Quería preguntarles muchas cosas, pero no sabía por cuál empezar.
Ry hablo primero después de mirarme fijamente.
-Oye, Ari, te ves muy estresada, ¿te has visto en un espejo?
-¡¿Tú lo has hecho?! ¡¿Acaso ya viste como te ves?!
-Claro que lo sé, y tengo una buena razón para estarlo.
Como siempre, hablaba en un tono casual y sarcástico, como si no hubiera nada de malo. Me hizo reír al ver ese rostro simplón.
-Ya lo escuché, ganaste un lugar en el torneo, mi clase enloqueció al oír esa noticia. Felicidades, Ry.
-SI, gracias. Pero no deberías de felicitarme, aún me falta para ganar. Así que guárdate tus cumplidos y lágrimas por ahora.
-Jejeje, si tú lo dices, ¿y por qué aseguras que lloraré?
-Eres muy sentimental, Ari. Puedo notarlo ya que somos muy similares.
-¿Qué? ¿En serio?
¿Qué somos similares…? No esperaba eso de él.
-¡Oye, Narukami!
Una voz se escuchó a nuestras espaldas y ambos nos giramos a ver de quien se trataba.
Era Jimy Marz con un grupo de chicos. Al verlo mi humor se agrietó, no toleraba este sujeto.
¿Pero por qué habla con Ry? ¡¿Acaso busca venganza por lo que paso?!
-Oh, Blair también está aquí, ¿ya se conocían?
-Marz, ¿Cómo está tu rostro? Se ve muy mal desde aquí.
-Está bien. Tú tampoco te ves tan reanimado, pero es de esperarse, ya que te enfrentaste a mí.
¿Qué está pasando…?
Tanto Ry como Marz hablaban con mucha tranquilidad, pensaba que Marz no toleraba a Ry después de lo que dijo aquella vez. Ahora se hablan como si fueran amigos.
-Bueno, me voy largando. Más te vale descansar y estar en tu completo estado para el torneo, o te daré una paliza.
-Seguro. Recuerda usar hielo para bajar la hinchazón.
-¡Cállate, déjame en paz con eso!
Marz se fue con sus amigos dejándome aún más confundida, por lo que acaba de pasar. Ry se comportaba normal como siempre.
-Marz y tú… ¿Son amigos?
-¿Amigos? Umm… no estoy tan seguro. Creo que esto es una relación por respeto solamente, pero es complicado, ¿sabes?
-Ya veo… es una sorpresa.
No puedo imaginarme a ese sujeto siendo amigable con Ry; pero eso se debe a que no me cae nada bien. Pero si Ry dice que estaba bien para él, que sea así.
Caminamos a la salida y continuamos hablando de otras cosas. Lo que había hecho en los últimos días; de entrenar un poco más para estar seguro de ganar en las selecciones. También se disculpó por no haber podido acompañarnos a comprar. De repente se inclinó en medio del camino, llamando mucha la atención de los demás, parecía muy arrepentido, y yo toda nerviosa le pedí que parara, ya que era muy penoso.
Incluso así… tenía puesta ropa muy abrigada a pesar de haber dicho que no tenía. ¿Fue con alguien más de compras?
-¿Esa ropa es nueva? Se te ve bien.
-Oh, ¿esto? Sí, fue regalo. Me gusta mucho.
¿Un regalo? ¿De quién habrá sido? ¿Si le pregunto se molestara?
Estaba indecisa de sí preguntar o no. Entonces Ry bajo su mirada y hablo.
-Tú también pareces vestir bien. ¿Es lo que compraste con los chicos, verdad? Te quedan bien, te hace ver más linda.
-Eh… ah…
Linda… dijo que me veía linda…
-Sí, gracias…
Los latidos en mi pecho están aumentando de nuevo. ¿Qué hago? Ni siquiera puedo verlo directamente. Tengo que cambiar de tema rápido.
-P-P-Por cierto, Ry. Ahora que estás oficialmente en el torneo, que harás mientras hacen los preparativos para el inicio.
-Ahora que lo mencionas, tenía pensado pasar a la biblioteca a leer unos libros. Quiero investigar unas cosas mientras me recupero. ¿Te gustaría ir conmigo?
-Sí, me encantaría.
Recuerdo que Ry menciono una vez sobre que le gustaba leer. Parece que era cierto.
-¡Ah, es cierto!
-¡¿Eh?! ¡¿Qué pasa?!
Repentinamente, Ry grito como si se hubiera acordado de algo, me sorprendió tanto que sentí que mi corazón se detuvo.
-Ari, ¿no habías dicho que querías ser escritora? ¿Cómo vas con eso, ya has escrito algo? Quiero leerlo.
-¿Uh…? Tú…
-¿Pasa algo malo?
¿Él se acuerda de eso…? A pesar de que su atención está en otra parte, recuerda eso… no entiendo…
-Yo aún estoy trabajando en eso… pero aún no encuentro un tema de que escribir.
No entiendo por qué Sara dice esas cosas de Ry. Él sigue siendo el mismo de siempre.
-¿Un tema…? Entonces, ¿Por qué no te inspiras en algo que te guste? Sería mucho más fácil y cómodo, ¿no?, pero no me hagas mucho caso, solo es una opinión vaga mía. Lo que sea que te inspire lo leeré con gusto, y también te daré mi sincera opinión, pero no esperes algo increíble, ¿vale?
-...
Sin darme cuenta, mi mirada estaba fija en él. No podía apartarla aunque quisiera.
Esta emoción es tan grande, abundante. Un sentimiento cálido que recorría por mi cuerpo me abrumaba… pero estaba tranquila.
Quiero seguir sintiendo eso.
Si lo hago, estoy segura de que podría escribir algo que me guste.
Algo que me guste…
-Yo… creo que tengo algo.
-¿En serio? ¿De qué se trata? Cuéntame.
-Por ahora es un secreto, así que…
Quiero escribir una historia inspirada en Ryuji Narukami.
-Da tu mejor esfuerzo de ahora en adelante. Te estaré observando.
-Ah… vale, no entiendo, pero eso haré.
Es muy vergonzoso, así que reiré junto a él.
Hasta que pueda ver adonde seguirá este curso.
Hasta que pueda entender este sentimiento que tengo.