El Pentágono, Estados Unidos, 02 de Diciembre de 2010, 08:14 am

Dentro del lugar donde los hombres más poderosos del mundo se reúnen para discutir el destino de la nación de la Libertad y la Democracia, la gente anda trabajando de manera precipitada y alarmante, como si una gran amenaza viniera a por ellos.

El Pentágono, Sala de Guerra.

General 1: ¡¿ENTONCES ESTA DICIENDO QUE NOS QUEDEMOS AQUÍ SENTADOS MIENTRAS ESOS RUSOS HACEN ESO?!

Persona 1: (asustado) ¡Nada de eso señor!, ¡solo estamos dando la información importante!

General 2: ¡Cálmate Robinson! ¡todavía no sabemos para que quieren crear esas cosas!

Gral. Robinson: ¡Demonios Williams! ¿Acaso no ves lo grave que es esta mierda?

General 3: Esas palabras Stephen, estás en presencia del Presidente de los Estados Unidos.

En uno de los extremos de la mesa redonda, se encontraba nada más y nada menos que Barack Obama, el (anterior) Presidente de los Estados Unidos, escéptico y el único relajado de toda la conferencia.

Presidente Obama: Primero tenemos movimientos extraños de los Musulmanes en todo Medio Oriente, ¿Y ahora esto?

General 4: Como el Agente Petterson nos acaba de explicar, Señor Presidente, la situación es más peligrosa de lo que esperábamos.

Presidente Obama: ¿Quién más sabe de esto?

Agente Petterson: Solo los de Inteligencia y las personas sentadas aquí, Señor Presidente.

Presidente Obama: ¿Su hijo puede encargarse de esto, Mariscal McGuire?

Mariscal McGuire: Sin duda alguna, Señor Presidente, mi hijo cumplirá sin reparos.

Presidente Obama: Lamento pedirte esto, y más cuando tú hijo está de vacaciones.

Mariscal McGuire: No se preocupe, mientras mi hijo siga en el ejército, no habrá nada que temer.

General 3: Escuché que tú hijo se va a casar con la hija mayor de los Eisenhower.

Mariscal McGuire: A él no le agrada este compromiso, pero es lo mejor para él, (se levanta de su asiento) en fin, tengo que levantar a mis chicos y ponerlos a trabajar, Caballeros, Señor Presidente, me retiro.

Aquel hombre de mediana edad, con sus cicatrices y su expresión seria se va de aquella reunión, mientras, los demás miembros del Estado Mayor siguen en su discusión.

General 4: ¿Está bien que le dejemos está situación delicada a los hombres de McGuire?

Gral. Robinson: Sabes bien que esos tipos nunca le han fallado a la nación, Anders.

Gral. Williams: Además, ¿A quien le confiariamos tan delicada Operación a alguien que no sea El Águila Oscura y su montón de lunáticos?

Gral. Anders: ¿A los SEALS, Las Boinas Verdes o a otros equipos de las Delta Forces, tal vez?

Presidente Obama: Estamos hablando de una Operación de máxima prioridad en medio de la nación Rusa, ninguno de nuestros equipos de Fuerzas Especiales haría una locura como esa a excepción del Equipo 262 de las Delta Forces.

General 3: ¿Deberíamos hacer de esta una Operación conjunta con los SAS Británicos y los Franceses?

Gral. Williams: Olvídalo Bailey, entre más grande sea la Operación, peores serán las consecuencias si fracasan, y las cosas podrían ser ir a una Guerra contra Rusia, China y NorCorea...

Agente Petterson: Que Dios bendiga al Equipo 262 y cumplan la misión.

Todos: Que Dios nos bendiga.

10 días más tarde...

Rock Island Arsenal, Illinois, 10:00 am

La base militar de Rock Island Arsenal es una de las muchas bases del Ejército de los Estados Unidos, sin embargo, en los últimos años la base ha adquirido fama y renombre gracias al Escuadrón #262 de las Delta Forces, en donde se encuentra el Legendario Francotirador más poderoso en la Historia de los Estados Unidos:

EL ÁGUILA OSCURA.

Mientras tanto, en las barracas...

Entre las decenas de literas del edificio, se escuchan los ronquidos profundos del único hombre que se encontraba en el lugar, de repente, se abre la puerta de la habitación, a la que entran un par de hombres con cubos de agua.

Casi sin avisar, le tiran toda el agua al soldado durmiente.

Soldado 1: ¡¡¡MIGUEL!!! ¡YA DESPIERTA MALDITO FLOJO!

Y tan pronto como el Soldado le gritó al hombre, este último se levantó bruscamente, dándose de lleno contra uno de los tubos de la cama de arriba.

Miguel: ¡¿PERO QUE...?! (se recompone del golpe, mirando a los demás) ¡¡PUTA MADRE SIMON PHILIPS!! ¡¿CUANDO DEJARÁN DE TIRARME AGUA ENCIMA EN LAS MAÑANAS?!

Simon: ¡CUANDO DEJES DE DESVELARTE EN LAS NOCHES VIENDO ANIME HIJO DE LA CHINGADA!

Soldado 2: ¡HOY ES UN DÍA MUY IMPORTANTE PARA TODO EL ESCUADRÓN Y TODAVÍA TIENES EL DESCARO DE LEVANTARTE TARDE!

Miguel: (Enfadado) ¡Argh!, ¡SABEN QUE NO QUIERO CASARME CON LAURA HOY Y SIEMPRE SIGUEN JODIENDO!

Soldado 3: SI SI, LUEGO NOS CUENTAS TUS ESTUPIDECES, POR LO MIENTRAS, ¡LEVÁNTATE!

Miguel: ¡BUENO YA VOY!

*15 minutos más tarde...*

Aquel soldado se había arreglado como todo un galán de telenovela para asistir a su boda de ensueño, AUNQUE DE MALA GANA.