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Chapter 108 - \1762/ (3)

Ya para cuando todos estuvieron preparados, se presentaron las emociones de Azrael… con él durmiendo en una cama a un lado, salivando y disfrutando del sueño, podría verse claramente que estaba disfrutando de eso por sus ronquidos sencillos sin ser molestos.

—Soy lo que vendría siendo Alegría… pero honestamente no parezco nada alegre con lo que le dije a esa mujer— dijo el tío cosa disculpándose y presentándose con todos

Todos le dieron la razón.

—Solo por qué eres el más fuerte de nosotros no significa que la alegría sea lo mismo— reprochó al que le había roto la muñeca que se había recuperado poco después—, se supone que lo que represento debe tener más poder que los demás, el miedo debe ser más fuerte que nada

—Si, si, ya cállate mierdoso— dijo una mujer con claramente una gran pillama de un animal parecido a un ajolote de color azul con una gran cola que llegaba hasta el suelo, de cabello corto estilo "shullete" (corto en la parte alta de la cabeza y largo en la nuca) alborotado y los singulares cuernitos en la capucha

Esa mujer veía a todos enfrente de ella, podía verse que estaba lista para atacar por la mirada y pose de manera de acoso sexual.

—No es de adivinar que ella es Amor, no sé preocupen, Principal es heterosexual…

—¡Gracias a dios!

—Pero al no tener control… ella es bisexual, es la mas vigilada de nosotros, así que, cuidado con ella

—Holis, un gusto— dijo con una sonrisa coqueta guiñando un ojo y una pose de paz

Habían chicos y chicas interesados, otros igual, pero recordaron que era parte del que estaba durmiendo plácidamente a un lado y la exitacion se fue de sabático para ellos.

—Hablando de control, el niño de ahí se encarga de eso, el tamaño es proporcional a las emociones que gobiernan en principal… es pequeño y por eso él tiene que dormir

El niño asintió, de unos 5 años con ropa de tirantes de una sola pieza con una camisa negra, cabello negro y expresión normal promedio.

—Eso explica muchas cosas… todas, de hecho— dijo un alumno

Los demás asintieron dándole la razón.

—Los dos últimos son magia y tristeza, no sé separaran a menos que quieran, también son muy tranquilos, así que si algo les interés a ellos, dejenlos ser

Esos dos últimos eran gemelos, un hombre y una mujer, vestidos de la manera de Jezabel, una gran túnica con capucha, pero con ropa cuál corsario pirata, con cinturón de cuero y otro cinturón cruzado del hombro derecho hasta la cadera del lado izquierdo. Pero no saludaron, solo miraron a los alumnos.

»Así que espero y puedan soportarnos hasta que principal termine de dormir que no sabemos cuándo sera eso, pero no creo que mucho

Uno de los alumnos lejos de la clase especial levantó la mano.

—¿Si?— preguntó Alegría

—Gracias por el aviso, pero hay algo que me da curiosidad… ¿De dónde Azrael sacó los diseños de ustedes? Se que existen síndromes y eso de personalidades múltiples, pero ver físicamente a tantos y así de extraño… bueno es extraño

Esa era una buena pregunta.

—Es lo que siempre le pregunto a Alegría, pero él no me responde como quiero— dijo Amor molesta mirando enojada a su "hermano"

—No, no, tampoco es como si lo supiera, la primera vez que salimos tuvimos conciencia y ya teníamos nuestra tarea implantada, no sé si tenemos alma o algo así, tenemos los mismos recuerdos que principal, pero no sé de dónde saco la forma en la que nos presentaríamos

—¿Es cierto?— preguntó Miedo

—Si… ¿Tu crees que no me siento raro con tanto cabello sobre mi cuerpo? No puedo preguntarle ya que es cosa de él, pero me he acostumbrado y honestamente creo que no me puedo enojar si estoy vivo

Amor lo miró de pies a cabeza y se calmó, después con un par de dedos de su mano jugo con su cabello mirando a otro lado.

—Tiene razón, me gusta mi estilo

—Suertuda— dijeron los gemelos al unisono

Así que aún la pregunta seguía en el aire y podría ser respondida una vez Azrael despierte.

La personalidad de Alegría por mucho que su nombre dijera eso era el más tranquilo del grupo, se la pasaba arrastrándose por todos lados, esos si, si le preguntabas algo te respondía cordialmente así como en su expresar.

—No puedo moverme libremente por qué hasta él más mínimo toque puedo romper lo que sea, soy el que conserva más la fuerza de Principal, además que camino así por qué apenas puedo ver dónde voy, me es más fácil por eso solo hacerlo con mis dedos… si, se que es perturbador lo que hago, lo sé muy bien

Pero no dejaba de ser alguien responsable con sus movimientos, aunque también se veía que no quería contenerse.

—Lo siento mucho, debí ver algo como eso, pero ella lo supo esconder muy bien— dijo Carmilla a Alegría—, en serio lo lamento

—Es normal, esa mujer ya lo tenía calculado, pero creo que no previó que esto pasaría, no es como si supiera todo de él realmente

—¿Entonces, Jezabel si la odia? Perdón, pero en serio quiero saber

Estaban en el área de entrenamiento hablando tranquilamente.

—Es un matrimonio, debe haber de todo y ella también lo odia por muchas cosas que quiere olvidar pero no puede, así que muy, pero muy en el fondo es así… es un empate, ya viste lo que hace ella y lo que hace y le dice él

—Ya veo

—!CARMILLA! ¡CARMILLA¡ ¡AYUDA! !AYUDA POR FAVOR¡

Esa llamada de auxilio vino de Gabriele que estaba sujetada de una esquina del edificio y tratando de escapar de alguien que la tenía de los pies, para después no poder mas y se jalada hacia esa esquina.

»! AUXILIO¡ ! AUXILIO POR FAVOR, QUE ALGUIEN ME SALVE¡

—!AMOR¡

Alegría corrió aún más rápido que Carmilla y sin esperar el golpe tan escalofriante que le dió a Amor y sin ver fue tal que cualquiera, hasta el más resistente ser posible, podía haber muerto en pedazos esparcidos como si un tren bala lo atropellara, Amor fue arrojada violentamente hacia la pared estrellándose de cara hacia el muro y callendo al piso después sin sangre, sin daños, pero si inconsciente.

—Esa maldita, ¡esa maldita!

Volteando a ver vio a las víctimas, entre ellas las de siempre, una marea de sirvientes en el suelo inconscientes tal vez por ser atacados sin poder defenderse de las técnicas de masaje de Amor, más parecía que habían defendido a Gabriele a más no poder tratando que ella escapara a pedir ayuda. Miró a las ventanas y por suerte, vio que nadie estaba de mirón o al menos así fue como lo notó.

Amarró a Amor como si fuera un animal grande salvaje y sin control, aún cuando ella estaba inconsciente.

—¿Estás bien, Gabriele?— preguntó Carmilla

—Si...yo solo quería ir al baño… gracias— las lágrimas de Gabriele no mentian en cuando como se sentía—, lo siento, lo siento, no soporté

—¿Por q...

Hasta la pregunta era demasiado estúpida para hacerla, y gracias a dios que se detuvo, se acercó a una sirvienta y le quitó la falda, a otro le quitó el esmoquin y la cubrió.

—!Si alguien se atreve a ver, lo mataré¡— gritó

Gabriele nunca mentía cuando ella por muy exagerada que fuera se sentía mal, eso era lo que le encantaba a todo mundo que la conocía pues decía que era sincera y no se aprovechaba de eso por qué se disculpaba después, más en casos así cuando alguien se aprovechaba de ella, hacia enojar a cualquiera que intentase algo con ella, todo mundo ya quería su cabeza en bandeja de barro.

Esto podría considerarse acoso sexual máximo y sería totalmente imperdonable que la víctima fuese la descendencia de su mejor amigo o alguien más de ella bajó la responsabilidad ahora de ellos y no de Principal.

—Hasta para esto hay límites— dijo Alegría con un enojo totalmente palpable que hasta sus cabellos querían erizarse

Miró a Amor que había despertado y claramente escucho eso.

—Teehee♥ — dijo con una sonrisa traviesa

Alegría le dió una patada en la nariz aún peor que la anterior y ella no se dolió ni quejó, es más, ni una gota de sangre o herida, nada, y eso que hizo temblar la tierra con ambos golpes.

—Me molesta tanto que seas la resistencia de principal

—Teehee♥ perdon~~

—¡CALLA LA PUTA BOCA¡

Solo pasaron 15 minutos y las emociones estaban reunidas listas para el veredicto.

—Muerte

—Matanza

— Homicidio

Amor se estaba retorciendo de dolor (interno) aún sujetada con lo que le hizo Alegría, más las demás emociones estaban ahí, si uno sabe algo, los demás lo saben, así que Magia estaba con Tristeza (los gemelos) frente a ella, estaban estirando la mano derecha cada uno mientras Amor seguía tratando de pedir ayuda o gritarles que se detuvieran, pero ellos solo seguían adelante.

—Eso es extremo— dijo Miedo (el chico desaliñado) jugando ajedrez con Alegría

—Lo sé —respondió Alegría con una taza de té en una mesa donde estaba el juego

Control (el niño de la caja de arena) solo miraba eso y suspiró.

—Detenganse— dijo a los demás

Los gemelos lo miraron, aunque indiferentes para otros, como dije, podían saber lo que el otro sabía. Así que se detuvieron aún queriendo torturar más a su hermana. Ella se sintió aliviada, vomitando trozos de metal, orugas venenosas y muchas navajas así como cristales puntiagudos de su boca entre la saliva y entre otras cosas que dejarían como líquido cada órgano interno.

—!Lo siento, lo siento! !No volverá a pasar¡— grito ella desesperada casi en lágrimas—, !No volverá a pasar!

Alegría tomó otro sorbo de té y la miró.

—Tienes suerte, si hubiera ido en serio cuando te golpeé, no existirías más en Principal, le encantaría la idea, pero eso no sería bueno, todos nosotros somos iguales en diferentes rasgos, así que si vuelves a hacerlo con cualquier alumno, peor con ella y Louise, aún cuando esta última lo haga a propósito, Control se irá a jugar todo el día y te encerraremos con los gemelos

Y sin excepción todos la miraron súper enojados con los ojos rojos y un aura de muerte hacia ella.

—!Entendido, entendido¡ !Lo prometo¡ !Déjenme de mirar así, no es bonito¡

La soltaron después y ella se quedó ahí, no dolida ya que cuando algo la dañaba el dolor desaparecía enseguida.

Ellos se fueron de ahí dejándola sola.

»Que malos son♥, bueno, tendré que hacer celibato a la fuerza…, tendré que conformarme conmigo misma

Y como bien habían dicho, ella no era para nada fácil de detener, era la más extrema de todas las emociones de Jezabel, la más difícil pero no imposible de detener, así como lo que estaba por ocurrir lejos de ahí.

*Undyne*

—Regocijate hermano mío, un dragón, la madre de Silver saldrá del sello que su esposo le puso, un sello que le costó la mitad de su vida dragón para detenerla, le dije a la general Zartremist que si quería tendría a su disposición refuerzos de mi reino, tú dices, ¿Quieres ir enseguida o te preparas para la mitad del combate? Sin faltas— dijo Louise en su trono, no quería corona, no hasta casarse con Azrael, en cambio tenía un brazalete que sobreponia en su brazo, era grande color magenta con gemas color violeta, celeste y rojo que podría decirse que el nombramiento está ahí oficialmente, pero no voluntario de su parte.

Su hermano estaba frente a ella, también había recibido la noticia, así que quiso confirmarlo con ella, cosa que le fue otorgada sin preguntar siquiera. Mayran estaba a un lado de Louise, de pie y esperando decir algo y observar esto.

—¿Refuerzos? Pensé que nuestras relaciones con Tyran eran muy intensas como para andar en compañía de ellos

—¿Más intensas que un dragón que antes casi extermina a todo el mundo?— preguntó ella—, ¿Que es la madre de la mejor amiga de la mía y que resulta ser suegra del rey demonio? ¿Así de intensa?

—... Ya entendí, pero si algo sale mal…

—Es cosa de Silver, ella quiere todo el trozo, nosotros como dije, solo seremos refuerzos, Zartremist y su gente ya tienen todo preparado en su lado, solo es cosa de esperar… a menos que tú quieras ir

Seraya que estaba a gusto con su puesto, sabía perfectamente los pros y contras de lo que ella dijo. Pero saber que poco después de sus planes algo como esto iba a venir… lo empezaba a hostigar.

»Hermano, siempre y cuando te mantengas al margen de lo que deseo, puedes hacer lo que quieras, pero si llego a saber que pasas ciertas líneas de las cuales sabes que no me gustan, pues lo siento…

—Lo se, lo sé, ambos nos conocemos… como dije antes, no quiero ser como nuestro tío… trato de ver qué es lo mejor de este lado, pero es difícil, más es lo que me busqué, así que solo puedo quejarme en silencio— dijo Seraya con una honestidad normal—, lo que aquí me preocupa es el hecho de como terminará esto, Tyran no tiene buenas relaciones con nosotros y sabes que solo están unidos por Azrael y la general Zartremist

Eso era verdad, una verdad innegable.

»La escuela está muy aparte de todo eso, si solo aparecemos… diciendo que somos refuerzos, aún cuando los reyes de ahí nos den permiso, los soldados no suelen pensar como ellos

—La gente de Tyran pensaran que no pueden con eso, lo sé, por eso dije, refuerzos, también lo pensé — dijo Louise comprendiendolo—, no es como si solo vinieran a pedir ayuda simple, no después de todos los conflictos que tenemos por los materiales y comida… y ellos con nosotros por las armas, pero vaya, resulta que su codicia por tener lo mejor, irónicamente fue también lo mejor para nosostros… eso no me gusta, ¿Lo hiciste?

—Si, maté a todos los que habían conseguido esas armas de contrabando, no me dolió por qué los demás los trataron de traidores

Louise se acomodó ahora mal en su trono a propósito, de cabeza con los pies en el reposa hombros y la falda caída a su estómago con las manos casi llegando al piso no le importaba mostrar su ropa interior por sentirse cómoda.

—Mayran, ¿Que debería hacer? Lejos de decirle a mi hermano que se prepare, siento que igual no quiero meterme mucho en esto, Silver está preparada, los de ahí también… mi esposo no quiere meterse y se que lo hará de todas maneras, aún en ese estado meterá su cuchara y honestamente yo no quiero seguirlo, no quiero arriesgar a mi hermano y su gente… mi gente a eso, ¿Que opinas?— preguntó cansada de tanto pensar y lanzando un consejo

Mayran se quedó pensando un poco, la situación era sería, eso sí y lo que diría haría que Louise pensase lo mismo, lo aceptase o no quisiera. Así que suspiró un poco antes de hablar.

—Es mejor prevenir que lamentar, si Louise no quiere entrar, como dijo, solo serían refuerzos, más no es por meter estrategias pues no las comprendo mucho, pero se que eso sería problemático y pienso que deberían al menos estar cerca de esa zona, digo, si es algo sumamente difícil es igual de complicado el no ver al elefante en la habitación con respecto a la madre de Silver… por algo es que ella es extremadamente peligrosa, solo sería de prepararse a más no poder y esperar lo mejor aún con Azrael fuera de combate, siempre habrá algo que pueda igualar las cosas, así que mi opinión es esa, prepararse… más me llama la atención algo si se me permite preguntar y no les incómoda

—¿Que cosa?

—Si digamos, gana nuestro lado… ¿Silver matará a su madre o la volverá a sellar? — preguntó Mayran

—Facil, ella…

—...

—...

El silencio reino por incluso media hora, Louise se había acomodado de golpe para pensarlo, Seraya no sabía mucho, pero igual lo pensaba, más la conclusión es la misma a la que llegó Louise.

—Necesito más potencia de fuego

—Lo se, iré a hablar con los demonios más fuertes, ellos estarán contigo en la vanguardia, dejaré vigías por si Arcaida decide atacar aquí… había pensado en algo y en alguien, pero lo mantendré en caso de sumo estado de emergencia, y tengo que mantenerlo en secreto para mí, solo para mí

—Entendido

—Si eso resguarda nuestro reino de esto, adelante

La conclusión era sencilla, Silver NO matará a su madre. Seraya se fue decidido a proteger lo que podía

«En serio que estamos a mano»

Quería enojarse, pero no podía, más solo decidió ayudar a su manera y forma, justo como sus caprichos de siempre.

—Creo que sin querer apresure las cosas— dijo Mayran

—Si, así me encanta, gracias

—Como gustes

En casi la zona Zero del volcán las cosas a pesar de ser tranquilas también tenían cierta tensión.

—Chronique

Frente a todos estaban otros soldados, pero estos sentados y otros tantos preparados para atacar a quien sea, en el frente estaba aquella hada, pero no como Silver la había visto antes, falsamente alegre, falsamente divertida, ahora la seriedad del asunto la hizo ver totalmente diferente y ambas los sabían.

—Larguense, cuidare este sitio y mataré al primero que se atreva a decir lo contrario, saben que me dió permiso y más que nada, lo haré aunque me mate— dijo el Hada Marchita lo más seria posible—, seremos la primera línea de defensa, ustedes solo asegúrense de sobrevivír y seguir con lo que sea que estén planeando, largo

Y todo mundo aparte de los suyos, sabía que estaba hablando muy en serio. No tuvieron más alternativa que hacerlo, pero en especial, Binari que estaba con ellas sintió que en especial, aquella general estaba mirándola no de forma amenazadora, sino más bien, tranquila por algo, algo que no sabía o ignoraba.

Zartremist miró afuera e igual quedó algo sorprendida, si la de adentro era una parte de las fuerzas de Azrael, las de afuera eran las restantes y no eran un chiste, claro que antes habían enfrentado a una que otra, pero ver a todas en legiones separadas ahora reunidas, la hizo tragar saliva.

—Me siento tan pequeña— dijo sonando decaída

Ni sus hombres dijeron nada pues no era la única en sentirse así, pero confiaban en la manera que harían las cosas, el país de Yireila (de ella) era conocido como uno de los más extremos que podía haber, sabían trabajar la herrería como ninguna otra, sabían controlar grandes bestias que no superaban a Bareyle, pero la calidad de las mismas hacían ver un gran número de fuerzas en solo un grupo de sus bestias de ataque y las más fuertes entre los reinos.

Pero hasta la más fuerte bestia que había en los bosques cercanos a la capital se le vió huir lejos de ahí mismo, toda la gente sabía lo que significaba y aún sabiendo eso, estaban dispuestos a seguir adelante, así era tomado y aprendido desde hace mucho tiempo.

—Por algo hasta los dragones tienen miedo de los semi-humanos y humanos por igual, Pui — dijo Silver—, no tienen restricciones de miedo como esto, algunos si, pero otros no, Pui

—Por algo hasta Azrael me dijo que respetaba a los héroes por eso— dijo Zartremist

—Si

Aunque tenían sus diferencias, habían ciertas cosas donde las dos concordaban. Estaban frente a una gran área abierta, al parecer los dragones listos de Silver llegarían poco después, algunos soldados de Yireila estaban en los alrededores, querían ver la fuerza de ataque de la esposa del Rey Demonio.

Cumpliendo su deseo, del aire y desde lejos se podían ver a dragones venir como si fuera una parvada de aves en migración, solo que estás crecían cada vez más de tamaño mientras más se acercaban, cuando se detuvieron hicieron ondas de aire que movieron muchos árboles y tiraron a uno que otro soldado, para después descender al suelo, todos los tipos posibles de dragones estaban frente a Zartremist que peleaba por no desmayarse, su mente sobrepuso la alianza de ella y no tomarlos como enemigos, más bien, como cazadores sin control.

—¿Están todos? ¿Pui?

El más grande miro a Silver y poco a poco se transformó en un humano.

—Si, pero, algunos tienen deudas de sangre con ella… les dije que los matarias sin dudarlo y aún así no vinieron

—Ah, ya veo

Después, Silver chasqueo los dedos y todos sintieron un escalofrío repentino, incluso con un dolor de estómago y miedo que vino de la nada.

»Cumpli mi parte del trato, solo eso importa

Absolutamente todos, hasta el más tonto sabría lo que ella acababa de hacer, así que decidieron forzar su mente a pensar otras cosas y no preguntar ¿cuántos dragones murieron por ese simple movimiento? Esa pregunta se la llevarían hasta la propia tumba.

—En serio que me siento tan pequeña— suspiró profundamente Zartremist tan melancólica como podía ser y por primera vez en su vida a punto de llorar en plena misión

Incluso la hizo dudar de que si fue buena idea tener pelea con ello por el asunto, más podía sentir que fue lo mejor, una fuerza de la segunda más fuerte (después del Rey Demonio) era la mejor opción que podía tener, tenía igual sus dudas, pero mientras todo esté moderadamente bien… el dolor estomacal por la potencia de fuego frente a ella y disponible lo valía.

—Quiero creer que así se sintieron mis antepasados cuando pasó la primera vez — dijo un soldado pálido

Los demás también se sintieron igual.