El problema es que no era lo suficientemente valiente para preguntárselo directamente, así que buscaba valentía en el alcohol que oportunamente trajo
"De hecho eres aún más lamentable, si no me equivocó, el único motivo por el cual terminaste en la cárcel, fue por confiar en una prostituta del puerto ..." Amanda empezó burlándose, pero luego empezó a interesarse, o mejor dicho la sirena empezó a preguntarse por qué alguien actuaría así.
"Pero nunca me contaste tu historia con la prostituta, siempre creí que fuiste lo suficientemente tarado como para aceptar un crimen por sexo, pero si eras virgen cuando viniste a la cárcel eso no debió haber pasado..."
Lucas no respondió, pero de un trago terminó la botella que tenía en la mano y se fue por otra.
"Vamos Máximo, debe haber sido una gran historia de amor, ¿no?" Preguntó la sirena más interesada en la historia que en cazar al marinero.
"No ... Solo era una puta y yo un idiota que confiaba en todos, solo tenía 13 y recién escapaba de casa por lo que no entendía muy bien al resto de personas y esta puta me acogió como mi nueva madre"
"A cambio de comida de vez en cuando me pedía que realizara alguna tarea y para poder sobrevivir empecé aceptarlas, como no entendía bien la vida pensaba que era así como las madres alimentaban a sus hijos en esta nueva isla"
"Por su puesto que crecí y luego de un tiempo, aprendí que robar a las personas no era muy normal en esta nueva isla ... Por lo que termine preso a los 25 y a partir de ahí permanecí en la cárcel hasta los 31 cuando escapamos juntos"
"No fue una gran historia de amor, o me equivocó?" Preguntó Lucas con voz tambaleante, algo borracho,
"Al menos parece cierta, almirante" Dijo Amanda sonriéndole
"Vaya va mejorando ..." Murmuró Lucas "... o me estoy poniendo cada vez más borracho"
"Que paso en la taberna de La Cuevas, Amanda?" Por suerte o desgracia para él, finalmente reunió la valentía para preguntarle a Amanda, la pregunta que tenía en su corazón hace tanto tiempo.
"Solo sé que dormí, para despertar en la jaula de un esclavista, rumbo a una mina de carbón"
"Mmmm ... A ver déjame que lo piense " dijo Amanda con algo de apuro, la sirena se tomó su cabeza sin rostro con sus garras, como tratando de reunir fuerzas para encontrar los recuerdos en la mente de Amanda.
Lucas sabía como funcionaba, lo que estaba al frente parecía un reflejo provocado por su mente, pero en realidad era el reflejo de Amanda, la sirena se conectaba con la persona reflejada y miraba sus recuerdos para cazar a la presa, aunque normalmente el proceso lo hacen antes de atacar a la víctima.
Por lo que la sirena sabía todo acerca de Amanda, pero nada acerca de Lucas, salvo los recuerdos del propio Lucas por parte de Amanda.
"Oh lo recuerdo ..." Dijo Amanda nadando felizmente por el agua, moviendo sus piernas como si fuera una cola, tal cual lo haría un pez.
"Pero si quieres que te diga, tienes que lanzarte al agua ... Digo… a venir a nadar conmigo" Dijo la Amanda con una sonrisa en su rostro.