En mi pueblo, solíamos contar historias en teatros sobre monstruos y héroes, interpretados por los niños y adultos de la aldea, entre esas tantas historias, aprendí acerca de diferentes especies de bestias al rededor del mundo, slimes... Goblins... Lobos... Mandrágoras... Y por supuesto, aquellos árboles andantes conocidos como treants, monstruos pacíficos que resguardan el bosque de aquellos que osan dañarlo sin dar algo a cambio, si cortas un árbol, deberás plantar uno devuelta, y si no eres noble en este intercambio y no restauras lo perdido, ten por seguro que alguna aldea cercana será atacada por estos guardianes, no comprendo por qué los slimes y los diferentes animales del bosque están asustados de él, ya que su trabajo es protegerlos en primer lugar, tal vez solo sea un malentendido y pueda arreglar esto pacíficamente...
No sé qué tan efectiva sea mi espada contra la madera mágica de un árbol andante...
El sol pasó de estar en su punto más alto a empezar a anochecer en cuestión de horas, que pase caminando en la dirección que aquellos slimes marcaron con un rastro de materia viscosa... Y muchos arañazos bestiales en los árboles... Supongo que el miedo no era infundado...
A lo largo del camino, sentía cada vez más aquella presencia que acechaba en el bosque, como si estuviera siendo constantemente observado, pero cuando volteaba a ver a mis alrededores, no había nada... Más que cuerpos de limos desparramados... Lobos estrella en descomposición que soltaban un hedor horrible... Y diferentes plantas como algunos árboles y arbustos con sus hojas cayéndose... Lentamente marchitándose...
Me detuve un momento, agachándome y acercando mí vista a uno de los matorrales marchitos, al acercar mi mano a una pequeña hoja y tocarla con cuidado, esta se volvió polvo al instante... No soy experto en árboles... Pero eso no es normal... Pareciera que le succionaron toda la vida que tenía, hasta que quedo seco... ¿Un treant es capaz de hacer algo así?
Llegue... Al menos eso parece... Y pensar que habría algo así en medio del bosque... Ruinas de lo que parece ser un castillo... Los árboles opacaban la edificación que no era tan alta como los pinos que lo rodean, con musgo saliendo de la estructura hecha de roca y madera... El viento entre los árboles hacia un silbido que demostraba el silencio que inundaba la zona y daba a denotar la ominosa presencia proveniente más allá de la oscuridad de aquella entrada derrumbada...
—¿Qué...? ¿Quién hace un castillo en medio del bosque...?—
Así como iba entrando a las ruinas, un eco se escuchó desde el interior debido a mi voz, el lugar estaba lleno de escombros con musgo creciendo de ellos, varias bancas destruidas y algunas intactas, y en el fondo, una capilla con un pedestal se encontraban, me acerque lentamente hacia el pedestal, escuchando como el suelo de madera crujía tenuemente, y evitando orificios en el piso que iban al piso inferior, que desde aquí arriba debido a la falta de iluminación, no se podía distinguir nada...
Al sortear todos los huecos y evitar una caída dolorosa, llegue al pedestal, detrás de este, había una pintura polvorienta que hacía imposible distinguir el dibujo, de mis ropajes, saque un pequeño paño blanco, con el que quite la mayor parte del polvo, al menos, la que logre alcanzar... Del polvo, un rostro de una mujer hermosa, con ojos blancos, sosteniendo una lira ornamentada y ropajes de color azul se mostró con un fondo lleno de nubes y color azul, ¿tal vez el cielo?
—Un dios foráneo eh... Bueno... Prefiero mucho a los dioses dragón, pero gracias por permitirme entrar en su morada... Supongo...—
Mi pueblo ya que adora a los dragones, creemos en los dioses dragón, que simbolizan la armonía del mundo, a los que les rezábamos por protección y bendiciones cada día... Supongo que este lugar era para adorar a esta hermosa chica, haciendo más o menos lo mismo que nosotros, hasta que paso algo aquí... Mostrando mis respetos, golpee con la palma de mi mano derecha mi pecho 2 veces en acción consecutiva, provocando un sonido leve a través del cuarto.
—¿Hmm? ¿Y esto?—
Cuando voltee atrás mía, el pedestal tenía un libro algo polvoriento, pero pareciera que fue usado recientemente debido a que había pliegues y un olor extraño proveniente de él...
Al abrir el libro, me encontré con diferentes tipos de dibujos y algunas runas que no podía entender, sin embargo las que si podía leer eran distintos hechizos de diferentes rangos…
—Woah, ¿esta cosa tiene hechizos -Ka?—
Habían distintos tipos de magia, desde Aqua hasta Freeze, me gustaría aprender esto pero mi espada no es como que maneje algún elemento…
Seguí hojeando hasta que llegue a la página del pliegue... Había cosas que no alcanzaba a comprender... Pero viendo aquellos símbolos... Algunos eran parecidos al círculo con el que invocaron mi arma en drakenshiel... Son estos... ¿Alguna especie de hechizo...? Al pasar a la siguiente página, había un círculo mágico, y algunas manchas rojas que estaban desperdigadas por el papel, debajo, había unas letras que a diferencia del resto del libro, la tinta parecía reciente debido a que no estaba difuminado como todo lo demás
—Ritual... de corrup— Antes de poder terminar de hablar, el sonido de madera crujir se escuchó fuertemente bajo mis pies, y al voltear abajo, el suelo se rompió
—Maldicioooooooooooooooo~~~—
El grito que pegue al aire al caer fue difuminándose conforme más caía al vacío, inmediatamente después de caer, me encuentre con el piso inferior, cuyo suelo estaba del mismo estado que el de arriba, golpeándolo y destruyéndolo, y después...
La caída se hacía más larga, pero a pesar de que era extraño que hubiera más pisos hacia abajo, lo que más me pareció extraño, era la cantidad de ramas con las que me chocaba al caer, pero estas se rompían fácilmente, y al ver de reojo mientras caía, todas sus hojas se habían caído, justo como el arbusto de antes...
Usando mi espada, rápidamente traté de usarla para desacelerar mi caída de alguna forma, y al ver la cantidad de escombros y madera que había, golpe lo más fuerte que pude a un tronco de árbol, para impulsarme al muro, que poco a poco se fue inclinando en diagonal, desafortunadamente, esto no me desaceleró...
Use mi espada contra la piedra, raspando esta misma y haciendo que chispas salieran por el contacto, haciendo un sonido metálico chirriante, y al alcanzar el final de aquella rampa, me golpee contra la tierra del suelo, rodando y con mi espada separándose de mí, quedando clavada en la tierra al lado de donde aterricé...
Mi respiración se entrecortaba y mi corazón iba a mil por hora, latiendo tan fuerte que pensé que mis oídos iban a explotar, acompañado de un dolor que entumecía todo mi cuerpo...
—Agh... Nunca en mi vida... Vuelvo a hacerle un favor a un slime...—
Entre quejidos pude exhalar aquellas palabras, poniéndome en pie lentamente y recuperando el aliento poco a poco
—Bueno... ¿Y ahora donde estoy...?—
Aquellas palabras resonaron por la gigantesca habitación, una arboleda oculta en una cueva profunda... La luz tenue del anochecer se podía observar desde arriba debido a los huecos que genere al caer y los que ya estaban... Y al dar un paso enfrente, escuche un crujido proveniente del suelo, voltee a ver inmediatamente a mis pies, para encontrar huesos... Huesos humanos...
Al ver esto, di 2 pasos hacia atrás rápidamente debido al susto, y al ver con detenimiento entre la agobiante oscuridad alrededor del lugar, había todo tipo de cadáveres... Lobos estrella... Goblins... Animales silvestres como aves o conejos... Y sobre todo... Alrededor de una plataforma en medio de la habitación... Se encontraban cadáveres humanos, reducidos a huesos y con túnicas de colores rojos... Y un emblema que... Un emblema que...
Recuerdos como un torrente en llamas pasó por mi mente... Recordándome el calor que aquellas llamas producían... Voltee mi rostro a otro lado inmediatamente, con mi respiración pesada y un chirrido en mis oídos que me ensordeció por un momento...
Después de recomponerme... Mis ojos se encontraron con aquella plataforma de piedra, que mostraba un brillo minúsculo de color púrpura, encendiendo mi curiosidad... Me acerque lentamente, mientras que en el camino, tome mi espada que yacía clavada en el suelo...
Al llegar, me encontré con varios símbolos que tenían aquella luz tenue, y una tenebrosa energía salía de él.
—Mana... Esto no tiene tanto tiempo...—
Tal vez lo usaron hace unos días, o incluso hace una semana... ¿Qué tramaban al hacer un círculo de este tipo? Tal vez aquel libro que halle allá arriba tenga algo que ver... Pero primero tengo que encontrar una salida... Había dos salidas en la cueva, una que está detrás de mí, y la que está enfrente de mí, ninguna parecía tener luz saliendo de ella, y al ver hacia arriba, el sol se había puesto por completo, y las estrellas empezaban a aparecer en el cielo, no encontré al treant... ¿Será que está en algún otro lugar o será un simple mito?
Detrás de mí, un sonido leve se escuchó, pero lo suficientemente fuerte como para que yo lo hubiera notado, por primera vez desde que he viajado en el bosque, la presencia que sentía vigilándome, se hizo tan fuerte, que una presión se ejercía en mi cuerpo... Como si algo aplastara mis pulmones, dificultándome respirar... Al voltear, con mi vista temblorosa, y un sudor frío que recorría todo mi cuerpo, ahí estaba... Entre las sombras... Con una sonrisa brillante en púrpura, que parecía burlarse de mí... Como si aquel señor muerte, me acechara en la oscuridad...
Y así, gritos se acumularon en mi cabeza, llantos de niños y flamas ardientes por doquier... Hasta que las voces casi destrozaban mis tímpanos, 2 voces opacaron a las demás.
¡¡C҉͓̟͇̼͕̻ͭ͌ͩ̒͘͜͡͞͠O̷̵҉̢̭͚̜̠ͫͣ͐͢͟͢͠͞͝R̴҉̷̨̖̮̉͑ͯ̑̋͟͠R̴҉̷̨̖̮̉͑ͯ̑̋͟͠E҉̰̰͎̆͞ A҉҉̦̣̤͔̟̩̋̿̏ͦ̈́̍͟͠R̴҉̷̨̖̮̉͑ͯ̑̋͟͠C҉͓̟͇̼͕̻ͭ͌ͩ̒͘͜͡͞͠H̴̶̵҉̨̡̛̼͎̫͓̒́̔ͩ͜͟͠͞͞E҉̰̰͎̆͞R̴҉̷̨̖̮̉͑ͯ̑̋͟͠!!
Y casi por instinto, y con un temor que se aferraba a mis nervios y aplastando mi corazón, como si tuviera mis latidos contados... Corrí en dirección opuesta a la de aquella sombra, dirigiéndome a la extensión de cueva que yacía enfrente de mí a toda velocidad.
—¡¡¡¡U̸̫̠̰͈̕U̸̫̠̰͈̕U̸̫̠̰͈̕U̸̫̠̰͈̕U̸̫̠̰͈̕Ŗ̴̪̈̄͞Ŗ̴̪̈̄͞Y̵̷̛̤͍̅́̕Ȧ̶̵̗̳Ȧ̶̵̗̳Ȧ̶̵̗̳Ȧ̶̵̗̳Ȧ̶̵̗̳Ȧ̶̵̗̳Ȧ̶̵̗̳Ȧ̶̵̗̳Ȧ̶̵̗̳Ȧ̶̵̗̳Ȧ̶̵̗̳Ȧ̶̵̗̳Ȧ̶̵̗̳H̶̪͍̒ͥ͑̓H̶̪͍̒ͥ͑̓H̶̪͍̒ͥ͑̓H̶̪͍̒ͥ͑̓H̶̪͍̒ͥ͑̓H̶̪͍̒ͥ͑̓!!!!—
Un chirrido abismal se escuchó detrás de mí que resonó por todo el lugar y después, el sonido de madera crujir de manera agresiva y tierra levantarse lo acompañó.
Corrí a través de la cueva, mientras esa cosa me seguía, golpeándose y abriéndose paso a la fuerza por la caverna que no era de su tamaño, vi como lianas de color café oscuro se extendían por el techo de la cueva, empezando a descolgarse y como si fueran tentáculos, estas mismas trataron de agarrarme, rápidamente sostuve con mi mano derecha la espada que yacía atada a mi cintura, desviando aquellas vides con destreza, Y al poco tiempo, logre salir de la cueva, llevándome a una zona repleta de árboles.
Atravesé el bosque, quitando de en medio los matorrales que entorpecían mi camino, mientras avanzaba, podía observar como los árboles se retorcían, como si quisieran aplastarme, y al poco tiempo, pude ver como los arbustos y matorrales que estaban a los lados de mi camino, se marchitaban rápidamente, hasta que sus hojas se volvían polvo...
De pronto, las raíces de los árboles comenzaron a salir de la tierra, empezando a bloquear el camino, generando vallas hechas de madera gruesa... No pude reaccionar a tiempo... Salte tarde encima de una valla, y debido a mi descuido, tropecé y caí al suelo, agarrando mi espada con toda mi fuerza mientras rodaba por el suelo debido al golpe, terminando en medio de un claro en la arboleda, en el que la luz de la luna bañaba el lugar, iluminando donde antes solo podía ver negro...
Me levante lo más rápido que pude, poniéndome en guardia con mi espada enfrente, afrontando a lo que estaba adelante de mí con mis manos temblorosas y mi respiración agitada...
Un ser de 4 patas salió de las sombras de entre los árboles, con un cuerpo hecho de madera oscura, y varias marcas alrededor de su cuerpo, con un torrente de maná de color púrpura pasando a través de aquellos grabados, con un cuerpo largo y alto, con complexión delgada, pero imponente, con algo enfrente del que se asemejaba a un rostro, con 2 ojos brillantes en morado, y una boca que soltaba una mueca... Una sonrisa burlona que me provocaba repulsión... y miedo...
El treant no se veía como uno común, era el doble de grande, y ese maná que fluía a través de él... Los slimes nunca me explicaron que este treant era único en su especie.
Un treant anciano.
El monstruo enfrente de mí soltó un grito estruendoso que resonó a través de todo el bosque, más el sentimiento que provenía de él no era uno de furia o descontento... Sentía un gran pesar y sufrimiento viniendo de aquel ser, sentimiento que hacía que mi corazón se encogiera, y después... Comenzó su ataque.
Los árboles detrás de la bestia comenzaron a moverse de manera innatural, para que después, un brillo morado empezara a esparcirse a través de sus troncos, despojándoles de aquel verde que les daba vida, volviéndolos de un color marrón, y sus hojas empezaran a caer, el flujo de maná de aquel treant que pasaba a través de todo su cuerpo brillo más que antes, y en consiguiente, sus ramas y diferentes lianas que salían de él hicieron el primer movimiento al dirigirse a mi dirección, tratando de atraparme, desvíe aquellos troncos gruesos con mi espada herrumbrosa y esquive las lianas, rodando hacia mi izquierda, y posteriormente, empezando a correr hacia el treant, que en reacción a mis movimientos, extendió sus raíces a través del suelo, para que después de un momento, salieran del piso cuatro ramas que parecían lanzas dirigiéndose a mí.
Usando mi espada, desvíe la mitad de aquellos ataques, pero uno logro llegar a rozarme la mejilla, haciendo un corto profundo cerca de mi pómulo derecho, y el restante logro hacerme daño con un corte en el lateral de mi abdomen, la adrenalina que pasaba a través de mi cuerpo hacía que disminuyera el dolor, permitiéndome seguir adelante y conectar un golpe hacia una de las ramas de aquel treant...
Mi fuerza no fue suficiente... la rama era demasiado gruesa, y a pesar de que mi golpe había hecho un hueco en la madera, su extremidad no cayó... El monstruo inmediatamente volteo hacia mí, con aquella sonrisa burlona en su rostro, provocándome una sensación de que debía salir de ahí cuanto antes, una vez recobre el equilibrio después del ataque, opte por dar un paso atrás, pero el monstruo estaba lanzando un ataque en mi dirección con una de sus patas imbuidas con maná púrpura a una gran velocidad, reaccionando lo más rápido que pude, trate de cubrir el ataque poniendo mi espada en medio, y aunque pude evadir un golpe directo a mi cuerpo, sentí como mi brazo izquierdo emitía un crujido que fue acompañado por una gran descarga que recorrió todo mi cuerpo... Y después... Salí despedido debido a la fuerza del golpe... Estrellándome en contra de los árboles marchitos, que debido a su estado, dos se rompieron al golpearme con ellos antes de caer al suelo...
Frío... Sentí... Como la energía de mi cuerpo se iba desvaneciendo... Mi vista se hacía cada vez más borrosa... Y un sonido agudo que ensordecía mis oídos, hasta el punto en el que solo podía escuchar mis latidos, y mis pensamientos...
Observe como el treant me buscaba de entre la arboleda, deteniéndose entre ratos y soltando gritos chirriantes de agonía...
Sentía como un dolor insoportable recorría todo mi cuerpo, y también como mis extremidades no respondían...
Cada segundo que pasaba, me alejaba de mi razonamiento... Recordando mi vida hasta ahora... Y como aquella sonrisa... Aquella parca, me quito todo... Una sensación de muerte me rodeo... ¿Al fin llego mi hora...?
Si tan solo esta espada fuera algo útil...
Si tan solo fuera más fuerte...
Si tan solo aquellos goblins no hubieran secuestrado a Raciel...
Si tan solo...
Si tan solo no hubiera huido ese día...
Dios dragón... Respóndeme...
¿Por qué debería vivir...?
…
Y como si aquellas plegarias hubieran sido respondidas... Mi pasado se mostró tan claro como el agua... Volviendo a aquella noche... Donde las llamas y la muerte redujeron a cenizas todo lo que conocía...