Según una leyenda local en medio de uno de los bosques más grandes del continente existÃa una torre que sobrepasaba los cielos, nadie sabÃa lo que habÃa en la parte superior de esta pero lo que si se sabÃa era que aquel que lograra escalarla cambiarÃa su forma de pensar para siempre.
—Bueno, eso es lo que dice la leyenda. Pero nunca nadie ha logrado llegar hasta aquÃ, asà que eso es lo que hace más interesante que lo hayas logrado.
Dijo el sujeto sentado en una silla elegante, después de relatar la leyenda, a la primera persona que habÃa visto en milenios.
—Umm… Disculpa, ¿Quién eres?
—Soy uno de los 24 guardianes, o creo que asà es como nos llamaban.
— ¿Guardianes? ¿De qué hablas?
—El que no conozcas nuestra existencia quiere decir que los registros siguen sellados. Me pregunto que estará haciendo Seraphiel… dejando eso de lado, no se los demás pero por lo menos yo me dedico a pasar el tiempo viendo el mundo.
— ¿Registros?— El invitado estaba visiblemente confundido con los conceptos que recién estaba conociendo.
—Es algo en lo que está documentado todos y cada uno de los eventos en la historia por más pequeños que fueran, y que deberÃan haber sido liberados hace ya algún tiempo.
—Espera, no es eso ¿impresionante? ¿Cómo guarda tanta información junta?
—Realmente nunca los he visto, asà que no estoy seguro de saber cómo funcionan.
— ¿y porque estás aquà arriba?
— ¿Quieres escuchar una historia? Es una de mis favoritas debido a que, de los diferentes eventos que han cambiado la historia, este tuvo su inicio cerca de aquÃ.
—Vaya cambio de tema tan forzado…
— ¿Y bien?
— ¿Tengo otra alternativa?
—Sucedió relativamente hace poco tiempo, en el orfanato de una ciudad pequeña al sur de aquÃ…