La historia comenzó el día en que Marta le dió a su marido aquella desagradable sorpresa al llegar de imprevisto a casa con una especial noticia.
—¡Joaquín! ¡Estoy embarazada amor! — decía contenta mientras entraba a la mansión con cierta desesperación.
Ellos eran una de las familias de la vieja aristocracia de la ciudad, poseían empresas por todo el país y a ojos de los demás eran un matrimonio muy felíz.
Sin embargo la realidad de ellos era muy distinta. Joaquín nunca pudo superar su esquizofrénico vicio de llevar a la cama a toda clase de mujer que se le cruzaba en su camino y se lo permitía.
Aunque Marta, su esposa, era linda mujer, buena persona y muy atractiva, él nunca se sintió satisfecho con ella. Esa tarde el infiel marido no contaba con la temprana presencia de su esposa, por tal razón llevó a una de sus amantes a la mansión.
Cuando Marta entró a la mansión, Joaquín estaba en la cama más en concreto en el interior de su amante se turno.
Pero los gritos de su esposa lo sobresaltaron, se levantó de la cama en menos de un segundo y mientras se vestía le dijo a Lola, que posaba en la cama matrimonial totalmente desnuda que se vistiese y se oculte.
Ella protestó, sin embargo él la sujetó del brazo y la sacó a rastra de la cama. Arrojandole la ropa le dijo nervioso:
— Ve al baño y vistete
En tanto Marta ya había recorrido la planta baja sin haberlo encontrado, ahora se disponia a buscarlo en el primer piso. Subía las escaleras gritando alegremente.
—¡Joaquín! ¡Mi amor! ¿Dónde estás? ¡Tengo una excelente noticia para darte!
Éste en dos segundos se puso el pantalón, la camisa a medio prender y estaba colocandose los zapatos cuando ella entró al cuarto, él se colocó de pie debido a la soprpresa y ella dijo:
— ¿Joaquín? ¿Qué hacías Joaquín?
Pero sin que él pueda responder, Lola salíó del baño en ropa interior diciendo:
— ¿Para eso me trajiste hoy? Vine para tener sexo contigo Joaquín y resulta que me pides que me encierre en el baño porque tu esposa está aquí ¿Qué significa ésto?
Marta, al verla y oírla sintió un gran dolor en su pecho. Miró a su marido notando las fachas que éste tenía para decir:
— Dios mío, o sea que....mientras yo trabajo tú....tú....
— No Marta, no es lo que parece ser — exclamó desesperado.
Marta sintió que le faltaba el aire, un golpe seco en pleno pecho la sorprendió. ¿Qué había sucedido? De repente todo se le vino abajo, su familia, la dignidad.
Ella siempre supo que su marido era ojo alegre, pero jamás imaginó que llegase a ese extremo. Joaquín trataba de darle todo tipo de explicasiones y Lola seguía protestando mientras ella reflexionaba sobre esa desastroza situación.
En un momento dado su ahogo fue tan grande que rugió:
—¡Basta!
Ambos se callaron, fue cuando ella tomó a Lola de los cabellos y la llevó a la puerta de calle para empujarla fuera y arrojarle el vestido que Joaquín le hubo acercado.
— ¡Vete perra! ¡Vete y jamás regreses! — cerró violentamente la puerta. Su marido quiso seguir disculpándose pero ella se impuso — Agarra tus cosas y vete.
Jaoquín quedó en una pieza, en absoluto silencio. La miró a los ojos para comprobar que ella hablaba en serio. Supo que nada lograría seguir insistiendo por lo cual se fue al cuarto. Marta fye a ver a su madre para desahogarse ya que estaba desecha.
Al llegar le contó todo llorando amaegamente. Su madre le dijo:
— Hija, debes calmarte y pensar en tu bebé. A él no le hace bien que te pongas así.
— A ellos — respondió Marta sonriendo de repente.
—¿Cómo? — contestó asombrado la anciana
— Son mellizos mamá. Bueno....en realidad son gemelos.
Se abrazaron contentas las dos, pudo relajarse junto a su madre. Horas más tarde regresaba a casa donde Joaquín la esperaba. Ella se enfureció al verlo allí, pero él seriamente le habló.
— No me ire de aquí y tú no harás más escándalos porque no nos conviene a ninguno.
—¿Qué cosa dices?
— Sabes perfectamente que la imagen es indispensable para la empresa, en especial en éstos momentos.
Lo que sucedía es que ambos estaban en plena campaña política debido a que aspiraban a entrar a la cámara de diputados.
Al recordar ésto ella se frustró pero fue conciente de que su marido tenía razón.
— Está bien, reconozco que tienes razón. Mientras sigamos en éste ambiente nada podemos hacer.
Joaquín sonrió sintiendose victorioso pero ella aún no había acabado.
— Por tal razón nos reriramos — ante éstas palabras él empalideció abruptamente — Me dejó de interesar la política. Ya no quiero ser diputada nacional.
—¡Pero yo sí quiero serlo!
— Que lastima porque ahora mismo me abro de ésto.
— ¡No me puedes hacer ésto!
— Puedo y quiero.
—¿Es tu venganza?
— No Joaquín, no es venganza. Solo deseo mantenerme lejos de la política y dedicarme solo a las empresas.
—¿Estás loca Marta? ¿Qué te hizo cambiar así?
— El saber que estoy embarzada, eso me hizo cambiar.
Joaquín quedo en blanco unos instantes al oír aquello, pero minutos luego pudo reaccionar. La idea de ser padre lo alegró pero ella le espetó:
— Serán solo míos.
—¿Serán?
— Si, voy a tener gemelos.
— Fantástico...pero....un momento ¿cómo es eso de que serán solo tuyos? Yo soy el padre.
— Si pero nunca fuiste un buen esposo, por tal razón jamás serías un buen padre.
Pero Joaquín le prometió cambiar, como primera prueba Marta le pidió que renuncie a ser político como ella y así lo hizo él.
Los meses pasaron y aunque Joaquin se esforzó muchisimo lo cierto era que su vicio era mucho más fuerte que él. Ésto hizo que Marta se desilucionó de él y al llegar el momento del parto ella, sin decirle nada aún, decidió divorciarse definitivamente de Joaquín. Había contratado a un abogado para que inicie los trámites.
Pero ellos no eran los únicos millonarios con problemas. Había otra familia similar a ellos. Belén y Javier. Pero a diferencia del otro matrimonio, éste era en verdad felíz.
Ambos se amaba, por tal razón cuando ella se enteró que estaba embarazada se alegró tanto que corrió al trabajo a ver a su marido para darle la buena noticia.
—¡Javier! ¡Estoy embarazada!,
— ¿Qué?
— Seremos una familia mi amor.
Ambos se abrazaron felices y contentos en medio del pasillo de la empresa. Eran el centro de todas las miradas
—¿Cuándo nacerá?
— Nacerán
—¿Cómo?
— Voy a tener gemelos
— Mi amor ¡Que felicidad!
Los nueve meses pasaron velozmente. Alegría y felicidad reinaban entre ellos como siempre. Juntos prepararon los cuartos para los bebes.
Nueve meses después el gran día llegó y ambos matrimonios se internaron en la misma clínica. Marta no tuvo problemas en su parto, por tal razón dió a luz sin inconveniente alguno.
Tres horas después de haberse internado sus hijas nacían sanas y fuertes. Marta las tomó a ambas en sus brazos sintiendose inmensamente felíz. Joaquín entraba momentos luega a la habitación y emcionado también tomó a una de ellas entre sus brazos.
— Hemos formado una familia Marta.
— No, no formamos una familia porque tú la destruíste hace mucho — dijo ella seriamente
— Marta no hablemos de eso, no en éste momento
Ella cayó porque compartía su opinión, pero no lo haría por mucho tiempo ya que la decisión había sido tomada. Tras horas después ella decidió hablar con su marido.
— Joaquín tenemos que hablar
— Ahora no, tenemos mucho tiempo.
—Es importante
— Te dije que ahora no
— Y yo te digo que es importante, se trata de nosotros — él la miró asombrado — Quiero el divorcio.
La reacción de Joaquin fue inesperada, nada dijo y se marchó. Al día siguiente ella volvía a pedirle el divorcio y él recién pudo comprobar que ella hablaba en serio.
Aunque se negó nada pudo hacer, ella tenía todos los papeles ésto lo.llevó a aceptar aquello nomás.
Cuando salió de clinica comenzaron la división de bienes. Marta se quedó con el 75% de la fortuna y los bienes debido a las múltiples pruebas que presentó e contra de él ante el juez.
Pero Joaquín tenía un excelente abogado, éste logró no solo el.25% de la forruna sino la tenencia legal y definitiva de una de las niñas. Marta nada pudo hacer al respecto.
Así Joaquín de marchó de la mansión con una de las niñas. Luna era su nombre. Así Marta se quedó con la otra niña. Cristal era su nombre. Su dolor fue tan grande que decidió ocultarle a Cristal la existencia de su gemela.
También le mintió respecto a su padre ya que optó por decirle que éste había muerto. Joaquín se trasladó a otra ciudad con su hija.
Se compró una casa bastante amplia sin ser una mansión. Éste tampoco le dijo nada a Luna sobre su hermana gemela ni su madre.
Durante varios años pudo vivir de ese dinero pero al ser tsn vicioso se quedó en la ruina total al poco tiempo. Así acabó sus días en la prisión.
Luna no tuvo el mejor de los ambientes para crecer, ésto la llevó a aprender la supervivencia de todo tipo. Conoció varios hombres volviendose una buena acompañante. Ésto la hizo obtener de sus clientes lo que necesitaba.
Pudo acumular una buena cantidad de dinero y puso un bar nocturno propio ya que conocia su funcionamiento a la perfección. Sus clientes pertenecían a la clase media alta y alta.
Tenía 23 años cuando sucedió ésto y 20 cuando su padre murió. En su disipada vida se hizo de buenos amigos que la apoyaron en su emprendimiento nocturno.
Muy distinta fue la vida de Cristal, su gemela, quien se crió en un mundo compleramente diferente al de su hermana. Su madre se encargó de brindarle una excelente educación y con el tiempo le heredò el control total de la empresa. Eso ocurrió cuando ella cumplió 23 años. Tres meses después Marta murió de una emfermedad al corazón.
En cuanto a la otra familia Belén dió a luz a sus hijos. Eran dos hermosos niños sanos y fuertes. Sus nombres eran Diego y Daniel.
Sus padres se emocionaron muchisimo al verlos, eran en verdad felices. Dos días después regresaron a casa. Pero en el camino los asaltaron, todo comenzó cuando una de las ruedas del auto reventó.
Javier bajó para ver qué sucedió cuando un hombre se le acercó apuntandole con una pistola. Con éste llegaron tres más. Le ordenaron a Javier que le entregara toda la plata.
Obligaron a Belen a bajar del auto. Dos de ellos revisaban el auto en busca de objetos de valor. Pero en un determinado momento Javier perdió el control e intentó detener a esos malnacidos antes de que dañen a su querida familia.
Uno de los delincuentes, para detener a Javier, tomó a uno de los bebés y le apuntó con el arma. Aterrado Javier se detuvo .
—Tranquilos, ya no los intentaré detener.
El malandra que apuntaba a Belén exclamó:
— Nunca debiste intentarlo — luego le disparó en la cabeza. Su cuerpo cayó al suelo sin vida.
Ante éstos hechos inesperados el líder ordenó la huída y todos se fueron. Todo había pasado en tan solo unos momentos. Belén estaba muerta, uno de los bebés seguía en sus brazos y lloraba. Los delincuentes se escaparon llevándose al otro bebé.
Javier quedó shokeado ante semejante situación, al punto de ser internado en un psiquiátrico. Sus parientes se ocuparon de Diego, el bebé que permaneció con él.
Dos meses le llevó recuperarse pero al hacerlo, la realidad lo golpeó al punto de optar por aferrarse a su hijo. Por más que buscó a su otro hijo nunca tuvo éxito.
Cada bebé llevaba una medalla con su nombre grabado en ella. Siete años después Javier conoció a Marta en una fiesta y así sus hijos se hicieron grandes amigos.
Diego al igual que Cristal, tuvo una excelente vida, su padre le inculcólos valores morales que hicieron de él una gran persona.
Sin embargo Daniel tuvo una vida difícil, totalmente distinta a la de su hermano. Los delincuentes corrieron dos cuadras hasta que el que cargaba el niño preguntó qué hacer con él. El lider lo tomó y buscó un alejado orfanato donde lo dejó allí.
Diego heredó la empresa de su padre a los 23 años de edad, cuando éste murió. Como nunca tuvo una madre ni conoció a sus abuelos, Diego se aferró a Cristal a quien llegó a amar con locura.
La vida de Daniel, no obstante, fue muy dura. Vivió en el orfanato mientras fue menor de edad. Allí debió aprender a sobrevivir. Al salir se fue de la ciudad para instalarse en la misma ciudad donde vivía Luna.
La conoció al frecuentar el club nocturno que ella acababa de inaugurar. Luna se sintió atraída por Daniel casi al instante y al conocer su necesidad económica optó por usarla a su favor.
Así lo convenció para unirse a ella en su proyecto con el club nocturno. A Daniel no le gustaba ese trabajo que ella le ofrecía pero no tenía nada por ende no le quedó otra opción.
Luna le ofrecía un techo, comida caliente y un trabajo. Por tal razón Daniel se tragó su maldito orgullo y aceptó su oferta.
Pero para él, Luna era solo su jefa ni siquiera su amiga. Aunque ella tenía otra perspectiva sobre ese heemoso y peculiar azabache de ojos celeste.
Cuando todo comenzaba a marchar, Daniel conoció a Berta una muchacha de pueblo. Trabajadora, dulce y amable. Se conocieron en el mercado y desde entonces se hicieron buenos amigos.
Daniel se enamoró de su dulzura, su ternura y amabilidad. Berta amó la caballerocidad y hermosura. Ambos se entendieron debido a que padecieron la soledad y la necesidad afectiva siempre.
Luna vió en Berta a una peligrosa rival, la consideraba un insecto molesto al cual había que splastar sin compasión. Por supuesto que Daniel ignoraba esos pensamientos que rondaba en la cabeza de Luna, su jefa.
Nadie le quitaba a Luna lo que le pertenecía. Muy diferente a su hermana Cristal y su mundo. Ella junto a Diego eran felices. También tenían buenos amigos que considersban sus hermanos del corazón.
Es aquí donde ésta historia comienza.