- Has mejorado mucho, Aiden - dijo el general Keller - ¿Preparado para lo siguiente?
- ¡Sí, general! - dijo Aiden a pleno pulmón, con una motivación que no le cabía en el cuerpo
- Dime, ¿tienes alguna experiencia usando espadas?
- Iba a clases de de artes marciales mixtas, incluso practicabamos con espadas de madera.
- Bueno, espero que eso te sirva. - dijo el general Keller y dió comienzo al entrenamiento.
Aiden comenzó, pero era la primera vez que sostenía una de verdad. No era muy ligera, pero, aún así seguía siendo fácil de controlar. La espada tenía la hoja muy afilada, Keller trajo una enorme sandía y pidió a Aiden que la partiese con un corte limpio.
¡Zass! La sandía se partió con una velocidad de nanosegundos, incluso la mesa donde estaba puesto se dividió en 2...
- Nada mal, me imaginé algo peor
- Yo... La verdad es que la espada lo hizo solo, sentí su energía y se apoderó de mí...
- Veo que... No hace falta buscar otra, esta espada ya te ha elegido y hay otra igual, por si quieres usar armas de doble empuñadura, ese poder es lo que debes controlar de ahora en adelante. Todos los oficiales y generales tienen sus propias espadas especiales. Hace falta ponerles un nombre, ¿no crees?
- Emm... Déjame pensar... ¿Que te parece Twins of the Silent... Death and Destruction (Muerte y Destrucción) ?
- Nada mal, ¡Ahora que conectar con las almas de estas espadas para dominar su poder!
- ¿Y como puedo hablar con ellos? - preguntó Aiden confuso
- Esa información no te la puedo dar, cada uno conecta a un ritmo diferente que otros. Intenta conectar tu alma con la de ellos. Puedes pedir ayuda al Gran Maestro en la Academia - respondió Keller con sinceridad, el ya había conectado con la suya hace mucho tiempo atrás.
- Entendido... - dijo Aiden desconcertado
- Daré este entrenamiento por concluido hasta que hables con estas dos preciosidades... - soltó Keller mientras le daba a Aiden las dos espadas doradas con empuñadura en forma de dragón.
Aiden abandona el campo de entrenamiento en dirección a la Academia, estas espadas desprendían un aura brillante se mirase por donde mirase.
(Mente de Aiden)
(Ahora que miro la espada detenidamente, veo que estos dragones tienen los ojos de color rubí apagado y unos detalles muy precisos de las escamas... ¿Será que me dan estas espadas porque soy el supuesto "Nuevo Titán"? Yo... nunca me valoré lo suficiente, ni siquiera me pienso capaz de ocupar esta posición "social")
La mente de Aiden aún recordaba el sufrimiento de un pasado oscuro, él a sus 16 años ha sufrido toda una vida, aún tiene cicatrices de todo esto que le sirvió como recordatorio para que no se olvide de todo lo que pasó.
En pocos minutos llegó a la Academia, era un lugar inmenso, ¿como llegará a donde el Maestro? Es muy probable que esté en la biblioteca, así que, se fue directamente en dirección a la biblioteca, pero lo que vió fue algo muy distinto a lo que se esperaba...