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Chapter 103 - La Reunión de los Seekers (III)

Después de unos minutos de caminata llegamos al frente de un gran estadio donde nos detuvimos.

[Aquí es donde será realizado el evento] dijo Corneria dándose la vuelta para mirarnos.

[Es bastante grande, supongo que se usaría para fines deportivos] me pregunté en voz alta.

[En cuanto entremos empezarán las preparaciones de inmediato. Espero que estés preparado]

[Disculpa, pero no creo haber aceptado en ningún momento] respondí. [Solo vinimos a confirmar algo. Terminando de hablar con todos nos iremos]

[El resto de los participantes están esperando adentro. En cuanto entres comenzará el sorteo para confirmar el orden de los enfrentamientos]

[Oye, que te estoy hablando...]

No sirve de nada hablar con esta mujer. Realmente hace las cosas a su manera.

[Solo quienes vayan a participar son permitidos. Cualquier otra persona debe abstenerse de entrar]

[¡Que te digo que no voy a participar! ¿¡Qué tengo que hacer para-!?]

[Deberías prestar más atención a la situación]

Una voz nueva vino desde mi espalda interrumpiendo mi frase.

No. Recuerdo haberla escuchado hace tiempo. ¿Dónde?

Mi piel se erizó. Lentamente giré mi cabeza y al verlo lo recordé inmediatamente.

Un chico de atuendo oscuro, con el pelo largo para un hombre promedio, el cual se cubría con una capucha, una especie de hombrera con una capa corta de color púrpura descansaba en su hombro derecho. En su mano izquierda sostenía una gran guadaña que rodeaba al cuello de María.

[¡Asriel!] gritó ella en una mezcla de sorpresa y miedo.

¿En qué momento apareció detrás de nosotros? ¿Cómo pudo escabullirse sin que nadie se diera cuenta?

[¡Tú! ¿¡Qué diablos haces aquí!? ¡Deja a María fuera de esto!]

[¿No escuchaste lo que la chica explicó? Solo los invitados pueden entrar al torneo, osea solo poseedores de un Object. Ningún otro es bienvenido]

Cuando llegamos a esta ciudad y me explicaron las reglas, había un claro detalle que pasé por alto.

Dijeron que eran 15 y esperaban a una última persona. Solo una. Entonces, ¿qué pasaría con María?

Me dejé llevar un poco por la actitud relajada de Corneria, por eso se me había olvidado considerar con quien estaría tratando.

¿Qué posibles psicópatas o asesinos podrían haber entre este grupo de personas? Lo que es cierto es que no consideré la peor opción, que alguien como él estuviera aquí.

[No es necesario que ella esté aquí, ¿no? Déjame ocuparme de eso, la llevaré a otro lugar más... tranquilo]

[¡Maldito!]

¿Qué puedo hacer ahora? Si hago un movimiento en falso puedo ponerla en peligro.

[Suficiente] dijo Corneria dirigiéndose hacia ese tipo. [¿Qué crees que haces? Esto no es parte de lo que estaba estipulado]

[Solo estoy tomando medidas para asegurarme de que acepte] respondió y luego se giró para mirarme. [Y en eso estamos, participa y gana si quieres volver a verla]

[¡Oye!]

[No pierdas hasta que te enfrentes a mi, disfrutaré descubrir lo que tu Object puede hacer]

[¡Asriel!] gritó María desesperada.

El hombre hizo un movimiento con su guadaña generando una ráfaga de aire que entró en mis ojos y me impidió ver. Al terminar ambos habían desparecido.

[¡María!]

Estiré mi mano en donde había estado sin poder alcanzarla.

[Bueno-]

[¡Devuélveme a María!] grité hacia Corneria interrumpiendo su frase, ella se me quedó mirando con su cara sin expresiones.

[Sus acciones no tienen nada que ver con la gestión de este torneo. Lamento informarte que no poseo ninguna relación con él]

[¿¡Dónde se fue!? ¡La iré a rescatar ahora mismo!]

[No tengo manera de saber donde pueda encontrarse. Debes tener idea de lo que son capaces los Objects, algunos tienen habilidades capaces de alterar el tiempo espacio. Sin algún detector es imposible determinar con exactitud su procedencia]

[Maldición... ¡maldición!]

Ese sujeto... ahora si que ha cruzado la línea.

[Esto no es parte de lo que estaba planeado, nunca se consideró tener algún tipo de rehén. Lamentablemente no creo que quien organice esto haga algo al respecto. La única opción que veo es participar y esperar que cumpla su promesa]

[¿No estás trabajando bajo sus ordenes?]

[Solo sigo sus instrucciones para facilitar el desarrollo de este evento. Estas vienen por medio de cartas, no conozco su rostro ni lo he visto en persona]

[...]

[En fin. Por muy doloroso que te sea hemos de seguir adelante]

[... dime, ¿cómo se llama ese tipo de la guadaña?]

[Zeke]

¿Así que esta es la única opción que me queda? No puedo creer que haya caído tan bajo. Solo lo vi un par de veces antes, nunca lo imaginé capaz de ser un secuestrador.

Respira hondo, estar alterado no me servirá de nada.

[Zeke, espera que ponga mis manos en ti si le llegas a tocar un pelo]

[¿Y que harás?]

[No es que tenga alternativa. Lo enfrentaré y lo haré pagar]

[Muy bien]

[Tú también participas, ¿verdad?]

[En efecto. Tendrás que ganarme para alzarte como el ganador, estaré esperando ver que tan lejos puedes llegar] dijo haciendo un gesto con su mano que demostraba un poco de orgullo.

[...]

Puede que no sea muy expresiva en su rostro, pero si puede demostrarlo de otras maneras.

No he visto lo que ella es capaz de hacer, ni tampoco los otros 2 guardaespaldas que están aquí. De la misma manera no se nada sobre el arma de Zeke. Ya ha sido capaz de escabullirse un par de veces, también me cortó con ella y estuve en coma por unos días. Aun quedan el resto de participantes.

Necesito prepararme para lo peor. Pase lo que pase debo ganar.

[Nuevamente...] tras una leve pausa las puertas del estadio se abrieron y Corneria hizo una reverencia. [Bienvenido número 16, al torneo de los Seekers]