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Chapter 27 - Una joven muy astuta

Varasloth miró fascinado las nuevas propiedades que sus oscuras escamas presentaba tras la asimilación de los restos de la espada de Elmoth, lo que parecía inconcebible había ocurrido, su dureza y firmeza habían aumentado.

—"Siempre hay un cielo sobre el cielo y un hombre sobre el hombre"— pensó emocionado el demonio. Lo que en su plano original había sido considerado el pináculo de protección natural y física, incapaz de poder mejorarse y blasfemamente llamado perfecto, acababa de avanzar a un nuevo nivel.

—"En verdad mis horizontes se han expandido."— continuó Varasloth sonriendo, la manifestación de infinitas posibilidades y mundos le ofrecían al demonio de igual manera incontables formas de continuar evolucionando, tanto física como mentalmente. —"¿Existirán artes académicas que superen a las de mi plano original? ¿Literatura? ¿Matemática? ¿Política? ¿Psicología? ¿MAGIA? ¡MÁS Y MÁS!— la emoción abrumadora que recorría el ser del demonio que encontraba justificación en su insaciable sed de conocimiento y obsesivo anhelo por aprender más, por un momento no pudo ser contenida y Varasloth se vio forzado a incrustarse sus filosas garras en sus pantorrillas para poder controlarse. Tras retomar el autodominio, el demonio avanzó con alegres saltos hacia un espejo de la habitación para observarse, de pronto de su frente, en medio de sus dos hermosos ojos y sus seis pupilas doradas y oscuras, una línea se formó en el medio al nivel de su frente, la cual ferozmente se abrió dejando al descubierto un tercer ojo.

Sin embargo, el mencionado órgano no tenía forma física como sus dos ojos naturales, sino poseía la apariencia más de una marca o tatuaje púrpura, detrás de Varasloth dos enormes ojos púrpuras se materializaron de forma amenazadora. Era evidentemente la habilidad era producto de la asimilación de los ojos de Emerson. Inicialmente el demonio había intentando acoplar los ojos del anfibio con los suyos para obtener practicidad, más la funcionalidad y diferencia de elementos y orígenes hacían la tarea extremadamente complicada, tras perder en el intento inicial, uno de los ojos, Varasloth tuvo que optar por rascarse la cabeza y modificar el ojo restante a un órgano superficial para evitar la incompatibilidad. Lamentablemente esta decisión implicaba que el ojo carecería de carácter evolutivo a diferencia de sus dos ojos originales, más por el momento era suficiente, quizás con el tiempo se le ocurriría alguna solución.

Mientras Varasloth meditaba estas cuestiones, su puerta sonó, una de las sirvientas elementales de la residencia le alcanzó el desayuno así como le informó que la señorita Yasa solicitaba su presencia en su residencia para informarle lo descubierto de los demonios capturados así como realizarle una petición.

Varasloth comió calmadamente con gran placer los alimentos que se le habían ofrecido y finalmente se dirigió a los aposentos de Yasa. Desde que Nina le había ofrecido los aperitivos en la prueba de La Primera Sombra, su interés y degustación por los alimentos y cocina se había incrementado, el arte y estudio culinario se encontraba dentro de su lista de pendientes, más por el momento poseía temas más importantes e interesantes a tratar, no obstante, la idea de conseguirse un chef personal había rondado recientemente su cabeza.

Al llegar a la morada de Yasa, en el jardín bajo la protección de una amplia sombrilla, la elemental tomaba el té. La apariencia de la mujer y el ambiente era radicalmente contrastantes con la feroz apariencia que había mostrado en su primer encuentro.

—Varr, ven aquí, siéntate conmigo, prueba estas galletas. — dijo la elemental sonriendo.

Una pizca de confusión recorrió el interior del demonio, la amabilidad que la joven mostraba evidentemente era producto de la modificación de sus memorias, más el rango de influencia no era tan amplio y dominante. La mujer delante suyo realmente era una buena persona y se preocupaba por el ficticio niño, —"¿Acaso debería sentirme mal por utilizarla?"— pensó por un momento.

Pero recordando sus objetivos y misión, consideró que el hecho de no haberla asesinado a ella y a sus subordinados era pago suficiente a la amabilidad que ahora mostraba. Varasloth asintió y continuando con su papel de niño inocente, saltó a la silla para empezar a devorar sin reparo las galletas y el té que se le habían ofrecido.

—Varr, los demonios hablaron finalmente tras la tortu...— más se interrumpió bruscamente e intentó ocultar lo que había querido decir tosiendo incómodamente, quizás pensó que la tortura no era un tema que debía ser divulgado frente a un niño, —tras el interrogatorio, los demonios confesaron que te habían capturado por el potencial mágico que tu tribu posee y sus conocimientos en magia.—

—"¿AH?"— miró el demonio incrédulo a Yasa, —¡ESOS BASTARDOS!—. Varasloth sabía que les había indicado que inventaran una historia, pero les había dicho expresamente que no lo incluyeran y pese a que sabía, que era imposible que su nombre no saliera en la interrogación dado que se suponía que ellos lo habían estado secuestrando, no esperaba que fueran tan inútiles para revelar su afinidad mágica.

Pero de repente, una fugaz idea cruzó su mente, —La mocosa no era idiota, no diría algo así sin pensarlo, ¿No será que...? ¡Demonios, debo ir a revisarlos, necesito leer sus memorias ahora!—

Pero cuando Varasloth intentaba buscar una excusa para poder desaparecer y adentrarse nuevamente en la mazmorra, una fuerte explosión resonó a lo lejos.

Yasa inmediatamente se levantó y llamó a sus sirvientas, —Lleven a Varr a su dormitorio.— luego miró al niño y dijo —Regresaré a verte, la explosión parece provenir de la prisión, algo debe haber ocurrido, quizás sea obra de los demonios, pero no entiendo cómo lograron obtener ayuda.— dijo mordiéndose el labio de ira mientras su figura se perdía a la distancia.

Varasloth miró estupefacto los diferentes caminos que el humo surcaba desde la prisión hacía el firmamento para desaparecer, mientras el caos descendía sobre la ciudad.

Procesando continuamente lo que acababa de ocurrir acompañó a las sirvientas a su dormitorio, donde una vez dentro y seguro de encontrarse solo rápidamente vibró sus escamas adoptando su forma invisible y salió disparado en dirección a la prisión.

En el trayecto pudo ver a lo lejos con sus agudos ojos que un inmenso agujero se había formado de un lado de la prisión, dejando libre el acceso para que cualquiera de los prisioneros pudiera escapar fácilmente. Lógicamente muchos de ellos, ya se encontraban a cientos de metros intentando camuflarse en el caos y cambiando su apariencia.

Varasloth intentó sentir las marcas de mana de los demonios, más sus sentidos no alcanzaron a detectarlos con precisión, sabía que habían utilizado la gema de teletransportación y que de alguna forma había ocultado o erradicado su marca rastreadora. Sin embargo, la gema de teletransportación no incluida una explosión ni características destructivas dentro de su repertorio, lo que significaba que pese a sus agudos ojos y el minucioso trabajo de los guardias elementales de élite, los demonios habían conservado ciertos artilugios de respaldo para su evidente premeditado escape.

La mente de Varasloth empezó a trabajar a gran velocidad entrando en un trance monstruoso, la mocosa no le había mentido eso era claro, más quizás alguna parte de la información brindad era cierta de forma parcial. Dicha información no revelada, era de tal importancia que el equipo de demonios no podía darse el lujo de ni siquiera esperar un solo día en la prisión por temor a ser descubiertos o que Varasloth regresase con mayor tiempo y leyera sus memorias o los asesinara. La información divulgada sobre su afinidad mágica en la madrugada de dicho día, había probablemente tenido el objetivo de mantenerlo ocupado y lejos de la prisión, permitiéndoles escapar con facilidad.

Una expresión espeluznante se formó en el rostro de Varasloth, había sido engañado. Si bien las condiciones del interrogatorio y las limitantes del tiempo habían jugado un gran papel en la historia que se iba formando detrás de bambalinas, no cambiaban el hecho de que el demonio, había sido engatusado.

Dentro de su interior, una furia inmensa empezó a despertar, más cuando empezaba a hervir en su punto más alto, Varasloth simplemente exhaló un gran suspiró. —"No vale la pena, cuando la encuentre de nuevo me encargaré de arrancarle la piel y que desee haber muerto en aquel calabozo, ¿A donde se fue mi serenidad absoluta? ¿Es que acaso todos estos nuevos estímulos del mundo afectan mi paz interior? ¿Es lo que los monjes conocen como tribulaciones carnales? Debo meditar más seguido, quizás hasta se me caiga el cabello y me vuelva calvo, pero la serenidad e iluminación son necesarias si deseo recuperar mi auto control."—

El demonio era listo, sabía que con el paso del tiempo desde su salida de su plano menor original y su travesía por la prueba de La Primera Sombra, su carácter y personalidad iban cambiando también. Su anterior calmada y serenidad que había obtenido tras el regreso del abismo de la locura y desesperación de su antigua prisión, empezaban a ponerse a prueba ante estímulos carnales y mundanos, el demonio debía recuperar el control absoluto de sus emociones y pensamientos, como en antaño lo había tenido. Solo de esa manera, junto al dominio total de su cuerpo, podría continuar el eterno camino de evolución al cual estaba destinado así como la recolección de toda la información y maravillas que la infinidad de mundos podía ofrecerle.

Sin embargo, cuando Varasloth se empezaba a retirar de la escena, notó con sus agudos ojos al muchacho elfo de pobre linaje draconiano correr entre la multitud desesperadamente, intentando ocultarse de los guardias persecutores.

Los ojos del demonio lo siguieron interesados en advertir cuál sería su destinado desenlace, más la culminación de la esperada aventura y la legendaria epopeya que narraría el escape del joven y sus posteriores increíbles hazañas, fueron brutalmente frustradas por nada más ni nada menos que Yasa, quien rápidamente noqueó al niño y lo lanzó a una de las celdas elementales que eran transportadas conteniendo a los prisioneros recapturados.

La joven elemental procedió inmediatamente a continuar su eficiente caza contra los demás fugitivos mientras Varasloth evaluaba intervenir para recuperar al niño que había conseguido llamar su atención, más imponer fuerza en un momento como este solo llamaría la atención innecesaria así como no justificaría la seguridad y libertad del niño. Lo que Varasloth necesitaba era un chico de recados, no convertirse en un niñero, por lo que dejó temporalmente la cuestión para analizar posteriormente.

Sin más preámbulos regresó a su habitación en donde para su sorpresa, una de las sirvientas se encontraba esperando su respuesta a un costado de su habitación respetuosamente.

Varasloth fingió despertar recién y preguntó el motivo de su presencia a lo que la sirvienta respondió, —La anciana Livinia requiere su presencia, vengo para acompañarlo a su residencia.—

El demonio levantó una ceja confuso al no entender el motivo por el cual estaría siendo invocado por una de las ancianas de la familia Dumin, más sin demora innecesaria acompañó a la sirvienta. —¿Quizás es por la afinidad mágica que los estúpidos demonios me lanzaron como bomba?—

Más cuando llegó a la residencia de la anciana, la cual por cierto era muchísimo más grande que la de Yasa, evidenciando la diferencia de estatus, pudo advertir que junto a ella también se encontraba el anciano Jomei y el patriarca Zabai.

Rápidamente su cerebro empezó a elaborar una historia concisa y coherente así como respuestas creíbles para las posibles preguntas que estaban por asediar, no obstante, la interrogante que se le hizo fue muy simple.

—¿Es verdad que puedes utilizar magia?— preguntó el anciano Jomei cautelosamente.

Varasloth continuando con su papel de niño tímido e inocente respondió cohibidamente, —Sí señor.—

El anciano asintió complacido y miró al resto de sus congéneres para continuar, —¿Puedo saber de qué tipo?—

Los ojos de Varasloth se entrecerraron, la pregunta era compleja e implicaba una trampa, dependiendo la respuesta que diese está limitaría su actuar e implicaría que siempre debería estar pendiente de no levantar incongruencias con su afinidad y sospechas de su nivel, sin embargo, el tiempo que se tomó para pensar y analizar una adecuada respuesta fue malinterpretado por los ancianos quienes rápidamente procedieron a explicarle su situación.

—No te preocupes Varr. — dijo la anciana Livinia, —No sé si Yasa llegó a explicarte, pero verás nosotros los elementales debido a la definición de nuestro elemento nos vemos casi en su totalidad limitados a los elementos que poseemos, las máximas variaciones que podamos generar dependen de si poseemos o no alguna variación, por ejemplo Yasa puede utilizar magia de acero y magia de tierra. El patriarca, magia cristalina y de tierra, y así sucesivamente. Sin embargo, te preguntarás entonces si todos poseemos limitaciones elementales, ¿Cómo es que nuestros poderes llegan a diferenciarse cuando alcanzamos nuestro máximo potencial? La respuesta es sencilla, con magia complementaria y auxiliar, es decir magia que no tenga afinidad elemental, por ejemplo magia de camuflaje, sónica, de reforzamiento, de potenciamiento físico y demás. El gran problema, es que dado que los elementales usamos normalmente nuestra magia y habilidades de forma instintiva, dado que nuestros cuerpos físicos básicamente están formados de ellos, de manera general nunca hemos estudiado teorías mágicas y lo peor, no poseemos dichos conocimientos sistematizados y esquematizados como por ejemplo si lo tiene la familia Imperial ap Rhodri del continente de Aurovia. Ellos a diferencia nuestra, poseen academias y escuelas de magia que permiten la correcta y eficiente transmisión de conocimientos. De forma concreta y resumida, para no alargar más el asunto, queríamos que enseñaras inicialmente a un grupo de nuestros más prominentes y talentosos jóvenes cualquier tipo de magia auxiliar y complementario que conozcas. ¿Podrías?— dijo amablemente, aunque era evidente que la tentación del conocimiento le era muy necesaria. Probablemente si Varasloth no tuviera el aspecto de un niño y que los conocimientos eran mejor transmitidos con una relación profesor - alumno, habría ahorcado a Varasloth hasta que revelase todos sus secretos.

Varasloth quedó anonadado por varios minutos sin decir una sola palabra, los ancianos y el patriarca no lo interrumpieron presumiendo que evaluaba revelar los secretos de su tribu y aldea a un clan extraño y lo que ello podría conllevar. Más se sentían confiados con sus respectivas cartas bajo las mangas, tenían en su limitada concepción, suficientes recursos para tentar a un niño.

No obstante, por la mente del antiguo monstruo una explosión de ideas y furia surgían, —"¿FAMILIA IMPERIAL AP RHODRI? ¡ESA MALDITA BASTARDAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!"— Sin percatarse, había permitido que un miembro de la familia imperial del continente demoníaco se le escapara bajo sus narices, lo que significaba que no había sido engañado una sino dos veces.