Se escuchaba las respiraciones agitadas de dos niños y una mujer, junto con sus pasos acelerados intentando escapar de aquellos hombres, sin previo se escucha un grito desgarrador por parte de la mujer. Los niños se detuvieron, con miedo de voltear y encontrar algo que los marcaría de por vida.
A pesar de todo se voltearon encontrado a su madre en el suelo, con los hombres que habían estado persiguiendo arriba de ella, forcejeando y llorando. La mujer tenía unas pequeñas gotas de sangre en el mentón debido a la caída
Los dos niños se quedaron paralizados, ante lo que tenían enfrente, la niña dio dos pasos hacia delante con intención de acercarse a su madre pero un grito de la detuvo.
-¡Corran, lo más lejos que puedan!-
Ellos no se movieron por un momento y la niña se acercó a su hermano, le susurro un "vamos", agarrando su mano y comenzado a correr, al lado contrario de donde estaba esa horripilante escena.
Después de creían estar lo suficientemente lejos, pararon al lado de un árbol. Las lágrimas empezaron a brotar de la de los ojos de la niña, mientras que el niño le acariciaba protectoramente su espalda.
-Vamos a salir de esta- le dijo el chico, mientras de sus ojos empezaban a brotar lágrimas, aferrándose a su hermano en un abrazo que la chica correspondió.