Se alza atónito y dice: Pero, ¿Qué?.. ¿Cómo sabes eso?.
El Sr. Watson era un hombre alto de 1.75 con profundos ojos marrones y cabello castaño, su piel era blanca como la nieve, al verlo note el gran parecido con su hija y mientras sonreía dije
Yo: su hija es igualita a usted sólo que mujer - luego hice una pausa y dije- si quiere saber como lo sé atiéndame en la sala.
Y antes de bajar le dije: por cierto, excelente novela, la leí en el camino -mientras se la mostraba y bajaba las escaleras-.
Tal como había pensado mis palabras le dieron más curiosidad que enojo y más de como sabía aquello, claro que al ver a Manuel entendió un poco a lo que me refería, dijo que en si su familia no había puesto ni denuncia, ni carteles, ni nada así que antes de un gran enojo decidí interrumpir y preguntar
Yo: Sr. Watson, quiero saber ¿Qué paso con la familia de Zafiro Casanova?.
Este alza la vista hacia mi y pregunta: ¿Por qué quieres saberlo?.
Hasta que Clara dice algo que lo deja pensativo
Clara: viéndola bien, tiene un parecido con esa chica.
Este se incomoda un poco mientras dice: es imposible, ella si estuviera viva tendría 48 años y no 30 y pico.
Clara quiso insistir pero prefirió callar y ver que pasaba mientras nos servía un rico te de canela, espere un poco y dije
Yo: por favor, cuénteme, ya que esto es importante para mi.
Me miro fijo y dijo: responde mi pregunta y yo te contaré.
Mientras miraba a la ventana le dije: yo soy Zafiro y necesito saber que ocurrió mientras Manuel y yo éramos peones, para luego ser vendidos como esclavos en Egipto.
Ríe un poco y dice: claro y ya te creí, ahora me dirás que existen las sirenas y todo eso.
No titubee en decirle que era correcto y que si existían pero en un plano paralelo al nuestro.
Siguió insistiendo hasta que me pidió pruebas y le dije
Yo: trato hecho -luego de una pausa le dije- pregunté cosas personales, que no estén en páginas webs o búsquedas fáciles.
Me miro asombrado y se levantó del sofá buscando una caja con los archivos muertos de nuestro caso y mientras volvía pregunto: ¿Qué edad tenía Zafiro al desaparecer?.
Lo miro fijamente y digo: sabe bien que eso está en una página web, pero si así quiere empezar muy bien -mientras hacía una brisa fría en la calle le dije- desaparecí unas semanas antes de mi cumpleaños número 8, mis hermanos quisieron salir conmigo a la plaza donde había una hermosa fuente, me pareció raro que me invitarán pero acepte.
Le describo el vestido y la fuente y luego de una pausa digo: me presentaron a Amanda nuestra tía, a la cual nuestra madre nunca nos mencionó ni hablo de ella, se que le envió regalos a mamá por su cumpleaños, si mal no recuerdo cumplía 36, la misma edad que tengo ahora.