Instalaciones de C. R. U. E. L

Narrador:

Como cada día Ava se pasea por las instalaciones supervisandolo todo, Rose una muchacha normal había sido encargada de cuidar cierto bebé molestoso. Desde el área de donde todos trabajaban se oía el llanto del pequeño.

-Haced que se calle- exigió Ava.

-Lo siento- dijo la pobre Rose que no debía culpa.

-Por eso es por lo que hay que usar proteccion- murmuró indignada.

Voy a contaros una historia... hace un año y once meses, ya estaba en marcha en plan del laberinto cuando la joven Lilia va a una revisión médica, allí queda informada de que estaba embarazada. Rápidamente la doctora informó a Ava de la situación.

-Tienen 15 años ¿en qué estaban pensando?- se quejó Ava escandalizada.

-Le di la opción de abortar, pero quiere tenerlo... ¿la obligamos a abortar?- preguntó la doctora.

-No, así el bebé nacerá inmune, podríamos investigar con él, que lo tenga.

Así decidió ella pero Newt, el padre del futuro bebé ya había sido mandado al laberinto, por lo que no tenía ni idea, eso dejó a Lilia en una profunda tristeza. Pasaron los nueve meses el niño llegó al mundo, luego pasó un año, meses... Lilia lo crió sin ninguna ayuda y se negó a que lo vieran ya que al trabajar allí los veía capaz de cualquier cosa.

Hace una semana que Lilia fue mandada al laberinto A por su mala conducta, además de que su trabajo no estaba siendo eficiente y seguía negándose a que nadie viera a su bebé. La verdad es que el niño no había parado de llorar desde entonces.