-… ¡¡Qué diablos!! (Niger)
Me levante del suelo de forma alarmada, el lugar donde me encontraba justo ahora… era mi habitación, una que no podía olvidar jamás y nunca, después de todo… he vivido aquí toda mi vida.
Rápidamente revisé mi pecho… pero no había nada, ni siquiera una simple cicatriz de aquella herida que recibí por esa espada.
-¿es que acaso fue solo un sueño?... no lo entiendo, si eso fue un sueño… como llegue a mi cuarto después de que termino la fiesta… (Niger)
Revise mi habitación con una mirada rápida, al no encontrar ninguna anormalidad me levante lentamente de mi cama y me vi en el espejo, solo tenía un simple bóxer de color azul puesto.
Solo di un suspiro y me resigné de seguir pensando en esto. Me vestí y bajé las escaleras con la intención de llegar a la cocina.
Al llegar… note algo extraño.
Todas las luces de la casa están apagadas, me aproximo al interruptor de luz… pero aun así no enciende.
-… esto no me da buena espina… (Niger)
Claramente esto no era normal, para nada normal.
Me empecé a sentir nervioso, un miedo instintivo empezó a emerger como si ya supiese que lo que está pasando es algo realmente malo.
…
''BAAAAAAAAAAAANGGGGGG´´ El tremendo resonar de una explosión fue fácilmente audible. ''-¿Qu-------´´ ''BAAAAAAAAMMMMM´´ otra explosión más no me dejo hablar debido a que la casa sufrió una fuerte sacudida similar a la de un terremoto. No espere ni un solo segundo más y salí corriendo en dirección de la puerta de enfrente para ver lo que estaba ocurriendo.
El cielo nocturno todo despejado el cual solo tenía a las hijas del caos como acompañante.
''Gruukk´´ El crujir de los objetos que actualmente están siendo consumidos por llamas carmesí que iluminan el ambiente en caos y destrucción.
Las personas corriendo y gritando desesperadamente por la calle.
-¡Los monstruos, los monstruos no están atacando! (Hombre A)
-¡Corran! ¡Corran! (Mujer A)
Se podía notar claramente su miedo y nerviosismo por aquellas criaturas que los perseguían.
Bestias hambrientas perseguían a los humanos con la única intención de clavar sus colmillos y garras en la piel de sus víctimas. Mis ojos estaban clavados en la horrenda escena que se estaba llevando a cabo frente a mí.
Sangre salía y llovía, lobos desgarraban con sus dientes la carne de las personas, goblins cortaban a la gente que tuvieran en frente causando que su sangre manchase de rojo las calles.
Los gritos de dolor de los hombres, mujeres y niños eran la música de fondo en esta terrorífica obra.
-… esto… esto no puede estar pasando… esto no puede ser verdad… (Niger)
Retrocedí unos pasos debido a que aún no podía creer que algo como esto de verdad este pasando.
''Graaa´´ escuche el rugido de una bestia cerca de mí, gire mi cabeza lentamente en la dirección de donde vino el rugido. Y hay pude ver, un lobo que era 3 veces más grande que uno normal, dos colmillos sobresalían de su boca como los de un tigre dientes de sable, y algo similar a un cuerno estaba en su cabeza.
Ese monstruo era conocido como Lobo colmilludo, un peligroso monstruo que era capaz de matar fácilmente a 2 leones y 3 osos el solo. Ese lobo caminaba lentamente hacia mi mientras abría su boca dejando ver fácilmente sus afilados dientes y ese aliento que salía en forma de humo blanco.
Me congele…
Claramente no podría escapar ahora, mi muerte ya estaba decidida…
Ese Lobo colmilludo salto hacia mí con la intención de matarme.
Pude sentir su aliento rosando mi piel…
Entonces…
De pronto un puño delgado puño impacto en la cabeza de ese monstruo y la volvió trisas un segundo después, pequeñas gotas de sangre salpicaron mi mejilla.
Y ahora, en el lugar donde antes se encontraba ese peligroso monstruo estaba de pie una de mis hermanas.
Amber.
Hay estaba ella de pie vistiendo su ropa de guardia y armadura ligera. Su puño derecho está cubierto de sangre, pero, aun así esa expresión soñolienta aún está en su cara.
Me miró fijamente durante unos segundos y luego puso una sonrisa, esa era la sonrisa más hermosa que he visto en toda mi vida. Amber se acercó a mí y con sus brazos me abrazo de manera suave.
-no te preocupes, ya estoy aquí hermanito, nada te va a lastimar. (Amber)
Su voz era calmada, dulce y despreocupada como siempre. Entre sus brazos, sentí el calor de su cuerpo y su natural olor.
Mi mente poco a poco se fue relajando y me calme.
-Bien, así está mejor, ahora vámonos, este no es un lugar seguro. (Amber)
-pero Amber, no podemos dejar a los demás debemos ayudarles, si no lo hacemos---- (Niger)
-¡escúchame muy bien hermanito, hace unos momento estabas tan asustado que apenas y podías mover tu cabeza!... ¡Estos monstruos tienen el nivel suficiente como para darle una buena pelea a caballeros del 4-rango! ¡Con mi nivel actual solo puedo proteger a una persona, y ese eres tu Niger!... sé muy bien que es difícil y frustrante huir de algo así. Pero es lo mejor que podemos hacer. (Amber)
-… (Niger)
A pesar de que era algo muy molesto…
El volver a ver mi impotencia por ser débil, el saber que hay vidas que pude salvar si tuviera la fuerza.
Mordí fuertemente mi labio inferior y asentí con la cabeza a las palabras de Amber y empezamos a correr.
Aunque hay muchas cosas que quiero preguntar… tengo que dejarlas de lado.
Amber y yo empezamos a correr entre el caos que hay en la ciudad.
.
.
.
Después de correr durante un buen tiempo terminamos llegando a un refugio que al mismo tiempo es un centro de vigilancia de la A.D.E y los caballeros.
Pasamos por la puerta principal después de que mi hermana hablara con uno de los guardias de la entrada y le mostrase lo que parecía ser un tipo de placa o algo similar.
Mientras caminamos por los pasillos se podían ver fácilmente un enorme número de refugiados.
En ese momento, en mi mente aparecieron mis dos mejores amigos quienes nunca me dieron la espalda.
La ansiedad por saber si esos dos estaban bien me empezó a invadir y un gran nerviosismo me ataco y causo que empezara a sudar por tener en mente lo peor.
atravesamos el pasillo y llegamos a una puerta la cual fue abierta inmediatamente por Amber y entramos a esa habitación.
Al observar el interior... Toda la presión, miedo y preocupación que sentí desapareció.
Después de todo, hay se encontraban mis dos amigos sanos y salvos.
Amber se fue diciendo que tiene algo más que hacer y me dejo con Helenio y Kira. Procedimos a sentarnos en una mesa que está desocupada.
-Bien chicos, me alegra que enserio estén bien. (Niger)
-A nosotros también nos alegra que tu estés bien Niger. (Kira)
-Si. Pero pasando al punto importante. Se ve que no entiendes muy bien lo que está pasando. (Helenio)
-Así es, es por eso que quiero que ustedes me expliquen cómo es que de un momento a otro ocurre una gran invasión sin previo aviso. (Niger)
Ante mi petición, Kira y Helenio se miraron entre ellos durante unos segundos como si pensaran en cómo decírmelo.
-escucha atentamente y no te vayas a alterar Niger… llevas 7 días es coma. (Helenio)
-… (Niger)
No sabía cómo responder a esas palabras. Me quede en silencio y mirando a la mesa tratando de procesar eso.
Y como mis dos mejores amigos me vieron preocupado, empezaron a contarme poco a poco lo ocurrido.
Al parecer, luego de que me fui de la casa de Helenio.
Al día siguiente mi madre llamo a su casa para preguntar por mí. Debido a que no regrese a la casa, viendo se preocupada mi madre comenzó a buscarme y movilizo a un ejército en mi búsqueda… literalmente lo hizo.
Y conociéndola eso es posible.
Me encontraron tirado en el parque con mi ropa llena de sangre, pero sin ninguna herida.
Luego de muchos exámenes no lograron determinar lo que tenía y por qué no podía despertar…
Pero luego llego por el que deberíamos de preocuparnos.
El Castillo Emergente comenzó a mostrar signos de la ``Ruptura de puertas´´
Que indicaban los signos de una ``Gran invasión´´
Pero con diferencias de otras, esta fue mucho más grave, ya que desde un principio los monstruos salieron en olas y olas, y con un gran número de ellos con un gran tamaño y nivel.
La ``Gran invasión´´ empezó un día después de que me encontraron.
Y hasta ahora, no se ha mostrado el comandante de esta.
Los comandantes son los monstruos que dirigen las invasiones. Usualmente suelen ser los primeros en salir, o a veces aparecen en medio de la invasión… pero extrañamente el comandante de esta no ha aparecido.
-… y eso es todo lo que sabemos hasta ahora, tu hermana Ambir parece estar dirigiendo a un ejército para tratar de mantener a los monstruos a raya y evitar que se esparzan aún más. (Helenio)
-… (Niger)
-Apenas somos estudiantes, ni siquiera somos aspirantes, así que no tenemos la autoridad para interferir, es mejor que nos quedemos aquí. (Helenio)
-Aunque nunca me ha gustado quedarme de brazos cruzados… esta vez comparto tu razonamiento Helenio. (Kira)
-… ¡! (Niger)
-¡Niger espera! ¿Qué haces? (Helenio)
Sin decir ni una sola palabra me levanté de mi asiento y así corriendo lo más rápido que pude.
-… Esto es malo… Si los registros sobre ``La gran invasión´´ de hace 12 años son ciertos… Estamos en camino de esa misma situación… ¡Tengo que decirle a mi madre! (Niger)
Así es.
En ``La gran invasión´´ de hace 12 años. Los números de las oleadas fueron muchos más de lo normal. Eh incluso después de que las puertas nuevamente fueran selladas 6 días después… El comandante no apareció…
Pero eso fue un error.
El comandante ya estaba presente en medio de la invasión… Solo que no lo vieron hasta el último momento… Y ese comandante era…
.
.
.
Corrí por los pasillos de la estación en busca de mi madre. Según las personas a las que pregunte, me dijeron que mi madre estaba teniendo una reunión de emergencia en estos momentos.
Por suerte, la estación en la que estamos es la más grande de todas en la capital Elrin.
Así que de seguro deberían de estar en el último piso.
Corrí a toda marcha por las escaleras ya que no tenía tiempo para esperar el ascensor.
No tarde demasiado en llegar al último piso.
Me pare frente a la enorme puerta.
Podía escuchar a las personas hablando, gritando o discutiendo. Pero no podía diferencia que era lo que estaban diciendo.
Respire hondo y luego de que me mentalice, pose mis manos sobre la puerta y empuje. La puerta se abría lentamente.
Pesaba bastante.
Con la puerta abierta pude ver el interior de la sala.
Una especie de mesa redonda se encontraba en medio. Un alto número de hombres estaban sentados. Altos miembros de la policía, militares, caballeros y magos. Los exploradores no se incluyen ya que prácticamente ellos son independientes, si quieren o no participar aquí ya es decisión suya.
Todos eran hombres importantes, cada uno tiene consigo a 3 o 5 guardaespaldas de alto nivel y especialistas.
Pero…
Entre todos esos hombres, solo una mujer estaba sentada en medio de ellos, una mujer que se ganó el respeto y derecho de estar sentada ahí en ese puesto. Mi madre.
Yuuki Lisien.
También conocida como ``La emperatriz del vacío´´ una maga usuaria de una extraña magia que actualmente, solo 7 usuarios en total se han visto en toda la historia desde la aparición del castillo emergente.
-Ma---- (Niger)
-¿Qué haces aquí niño? (Hombre Militar A)
-Esta no es una sala de juegos, regresa con los demás. (Hombre Caballero A)
-mama necesito decirte algo urgentemen------ (Niger)
-Niger, este no es un momento para hablar. ¡Necesito que te retires ahora mismo! (Yuuki)
Mi madre empezó a desprender una extraña aura que me intimido. Me congele por completo, era un miedo inexplicable.
Con pasos tambaleantes empecé a retroceder hasta quedar afuera de la sala.
Las puertas fueron cerradas y yo no pude moverme incluso después de eso.
.
.
.
-… con que esa es la verdadera fuerza de alguien que consiguió el título de ``Emperatriz´´… Mi madre sí que es alguien de temer. (Niger)
5 minutos después fue que logre moverme.
Pero por más que intente abrir la puerta de nuevo… Mi mente se congelaba e involuntariamente me alejaba… Es como si tuviese una especie de bloqueo mental.
Así que decidí resignarme y me decidí a volver con Helenio y Kira.
Me empecé a dirigir a la puerta que lleva a las escaleras…
Pero aun no podía quitarme esa sensación de inquietud que surgió en mí cuando Helenio menciono que el Comandante de la gran invasión aun no aparecía.
Estaba justo frente a la puerta y puse mi mano sobre la perilla. Le di vuelta y esta se abrió.
``BAAAAAM´´ Como si fuera una especie de interruptor, una especie de explosión provino desde detrás de mí.
Me gire rápidamente y note que…
Uno de los guardaespaldas que vi dentro de la sala donde estaba mi madre, se encontraba tirado junto a la enorme puerta que fue desprendida a la fuerza de su lugar. Y ahora estaba clavada en la pared.
No lo pensé dos veces y corrí a máxima velocidad. Me pare justo en frente del hombre…
Su brazo derecho no se encontraba, su pierna derecha tampoco, mitad izquierda del torso faltaba de igual manera, los rastros de una terrible y gigante mordedura eran visibles.
Claramente ese hombre estaba muerto.
La sangre fluía sin cesar y las tripas, intestinos y otros órganos se podían ver con facilidad.
Una horrible y terrorífica escena.
Me dieron nauseas al ver eso… Pero no era tiempo de sentirse mal.
Entre a la sala en silencio.
Las luces fallaban así que todo se encontraba oscuro, era muy difícil ver. Todo el humo y polvo también dificultaban la visión. Pero lo que alcanzaba a ver… hacia parecer que en esta sala ocurrió una pelea, no, una guerra que duro días.
Todo estaba destruido y en mal estado, techos, paredes y piso.
Me adentre más en la sala…
``tuuc´´
Mis pies tocaron algo. Me agache para ver que era…
Caí sentado en el piso al saberlo… Era el brazo de una persona.
Y esa siendo otra señal.
El polvo se empezó a disipar junto al humo, y la luz de la luna entro por un enorme hueco que se encontraba en el techo. Todo eso me permitió ver claramente el escenario frente a mí.
Una sala repleta de cadáveres descuartizados. Sangre fresca manchaba las paredes y el olor a muerte flotaba libremente.
``Ruuuaaaa´´´
El leve rugido del causante de todo esto se podía oír.
Mi vista se centró en los dos únicos individuos que aún seguían en pie.
Mi madre Yuuki, se encontraba de rodillas en el piso sujetando con fuerza lo único que le quedaba de su ahora ausente brazo izquierdo. Se podía ver que respiraba con dificultad y que no se encontraba para nada bien.
Frente a ella.
Una de las criaturas que se podrían considerar míticas, siendo ellas parte de las criaturas más, pero más peligrosas dentro del castillo emergente. Sus azuladas escamas brillaban con una fuerte intensidad por causa de la luz de la luna, sus afiladas garras rasgaban el suelo con el mínimo movimiento, sus rasgados ojos no se apartaban de la presencia de mi madre, demostrando estar alerta; sus grandes y filosos dientes eran fácilmente visibles. Sus alas se mantenían completamente extendidas y la cola se mantenía en movimiento.
Ese mítico ser que anteriormente se conocía como solo una mera leyenda… ahora estaba frente a mis ojos.
-… ¡Un DRAGON!... (Níger)