Ya vali, hoy valgo.
Así estuve cuando estaba por morir otra vez ,en manos de Satán, me mira con los ojos rojos totalmente rojos, ya no sentía la mitad de mi cuerpo y sentía mi pecho arder como si pusieran un encendedor en mi interior. En un momento el bebé empezó a llorar y los médicos lo sacaban de los brazos de su madre difunta, Satán solo miraba a el bebé y a la mujer. De un momento a otro estabamos fuera del hospital, aunque me seguía ahorcando, solo me miraba, yo lloraba del dolor de mi pecho que el calor había desparecido y mi cuerpo parecia un cubo de hielo. Luego me suelta, no podía moverme, no sentía nada de mi cuerpo.
Satán:_ última oportunidad.
Y desapareció sin decir ninguna palabra más.
Tarde más de una hora para poder sentir otra vez mi cuerpo, luego seguí mi camino y entre a un hotel para descansar.
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Luego de eso paso una semana, todo era normal, los mismos pecadores. Iba por un callejón yendo para las calles pobladas y en un momento veo una puerta con un nombre que se me hizo tan conocido " La Sacra Corona Unita". Sin pensarlo entre sin saber que habría.
Era como un bar pero se me hacía tan reconocido, estaba lleno de gente con trajes, no sabía que hacer estaba tan alarmada de como salir o quedarme a averiguar. En un momento me quedé pensando en porque la gente no me miraba ya que en ese lugar resaltaba demaciado al no llevar un traje como los demás, de pronto un tipo me traspasa, me di cuenta que este "poder" por asi decirlo era mío. Seguí caminando y viendo todo el bar era grande, había chicas en tubos. ¿querrán practicar a ser bomberos?. Me quite esa idea de la cabeza y seguí caminando, de pronto un grito de un hombre llamo mi atención. Ese grito venia de una habitación en el fondo del bar, al llegar a la mitad del bar sentí ese olor, ese aroma era más fuerte que el de la mujer de aquel día , sentia que venía más de una persona ese aroma. En ese momento sentí unas nauseas que deseaba que terminarán, deseaba matar, eliminar ese aroma que odiaba tanto, eliminar a esos pecadores.