Días después de esa tan extraña situación, Fanny recibe sus calificaciones, ella misma las compara con las antiguas calificaciones y sin duda el promedio ha ido bajando cada vez más y no solo eso, reprobó una materia, matemáticas. Solo toma sus calificaciones y se sienta.
En el receso Lili se acerca y se sienta junto a Fanny.
—Se que has cambiado y estás pasando por mucho, pero si sigues con esas calificaciones no lograrás ingresar a la universidad, supongo que en tus planes está cursar medicina, como me lo habías contado antes, bueno eso recuerdo—agrega en un tono tranquilo.
—No eres mi mamá, ya lo sé, se que debí mejorar pero con tantos problemas es difícil, no puedo concentrarme, mi vida no podría ser peor, no creo que haya algo peor que lo que estoy pasando. En mi familia comienza a tacharme de "rara" y por otra parte en la escuela ni puedo subir las notas, no entiendo porque Kevin ni siquiera llama, ni un mensaje, nada...—responde Fanny y avienta los libros a la mesa.
Lili solo la ve y escucha. —Escucha, todo mundo tiene problemas, algunos peores que otros pero al fin de cuentas es lo mismo, un problema que se puede resolver. No le eches la culpa a Kevin, el está haciendo su vida felizmente en España, déjalo, si no quiere hablarte no puedes obligarlo, debes centrarte en la escuela que es lo único que tienes que hacer ahorita, toma mi consejo y libera estrés—agrega mientras la toma de las manos.
—Desde que nos conocimos supe que eras una chica cool, divertida, inteligente y hermosa, eres la envidia de otras chicas...—agrega Lili mientras guiña el ojo.
—Gracias, Lili—responde Fanny mientras la abraza.
Llega Kenia y se acerca a ellas.
—Hola lesbis...—se pronuncia Kenia mientras se sienta y abre su libro.
Ambas chicas ríen y saludan.
—¿Estudias para el próximo examen, nerd?—le pregunta Lili.
—Sí, aunque faltan días, quiero estar preparada—responde sin quitar sus ojos de la lectura.
—Si claro, la vez pasada dijiste lo mismo y al final sacaste 70 de 100%—contradice Lili mientras ríe.
—Bueno, algo es algo—ríe. —Creo que prefiero a reprobar el examen a la materia, sin ofender Fanny—dice Kenia con una pequeña risa.
—Jodete—contesta Fanny mientras le para el dedo.
Lili y Kenia solo ríen.
...
Saliendo de la escuela Fanny se sorprende de ver a su hermano a fuera esperándola.
—¿Jacobo?, ¿Qué haces aquí? No recuerdo la última vez que anduviste por aquí...—pregunta Fanny intrigada.
—Es que vine por ti, mi papá me mando para que te acompañara con él y mi madre—responde en un tono serio.
—¿A dónde?—interroga Fanny.
—Mamá se desmayo en la tarde, no quisimos avisarte ni nada pero papá fue quien la encontró y decidió llevarla a la clínica, está ahí y le hicieron estudios—contesta mientras ambos caminan y está un Uber esperándolos.
Fanny solo sube y se dirigen a la clínica.
—¿Pero mamá está bien?—pregunta Fanny.
—Lo que me dijo mi papá es que el golpe si fue un poco fuerte, no me explico mucho ya ves como es, pero dijo que estaba bien, supongo que son desmayos como los que solía tener hace muchos años—asegura Jacobo.
Fanny entra en el dilema si buscar a Kevin y contarle lo que sucede, o respetar lo que le dijo el antes de irse y no contarle nada.
Después de unos minutos llegan a la clínica y ven afuera el auto familiar.
Ingresan y luego su padre los espera en la sala.
—Su madre le están sacando sangre y preguntando unas cosas, ahorita saldrá y nos podremos ir—dice el mientras se sienta.
—Lo bueno es que no paso a mayores, papi—agrega Fanny.
—Sí—responde el padre mientras la mira de una forma diferente.
Fanny se sorprende pero no menciona nada ya que se ven interrumpidos por la llegada de la madre.
La madre y el padre cruzan miradas, Angelica sonríe.
Suben al auto y van camino a la farmacia para comprar medicamento, después compran comida y regresan a casa, la madre sube al cuarto a descansar. Mientras que el padre se queda con Fanny y Kevin.
En la cena el padre se porta indiferente con Fanny es notorio en las repuestas y actitud, Fanny y Jacobo lo notan pero no dicen nada. Ella sube a ver a su madre y después se mete a la ducha.
Al salir de la ducha se coloca a su pijama mientras se acerca al espejo y comienza a secar su cabello.
—Genial, ahora no se que sucedió con mi padre que también tengo que soportarlo—dice mientras se desenreda el cabello.
Apaga la luz y se acerca a la ventana, se sienta aún lado. —¿Qué estará haciendo Kevin?—se pregunta ella misma mientras ve la luna.
Después de unos minutos su teléfono comienza a vibrar, se acerca y cuando intenta contestar cuelgan la llamada. Después recibe un mensaje de Henry, avisando que está afuera.
—Ay no, no puedo creerlo—dice mientras se acerca a la ventana.
—Hola, baja...—dice el en voz baja mientras está en el jardín.
—Hola... son las 11 de la noche Henry, te pasas—ríe. —Ya voy...—responde Fanny.
Baja por las escaleras y abre la puerta lentamente, sale y se sienta en la banca que está en el jardín.
—No debiste venir, esta súper frío y además es tarde, mi padre no está de muy buen humor y si me ve aquí te matará—dice mientras se sientan.
—Es que iba pasando por aquí y pensé en saludarte, aunque era tarde y de hecho me iba meter por tu ventana si no me respondías—dice bromeando.
Fanny solo ríe. —¿Trabajas?—interroga.
—Algo así, casi no hemos mensajeado desde la otra vez, fue una experiencia cool cuando estuve aquí. Aunque me hubiese gustado que tu hermano no nos interrumpiera—dice riendo.
—Mi hermano a veces es así, el es...(es interrumpida por Jacobo).
—Psss Fanny!—dice Jacobo desde la ventana.
Baila los ojos. —¿Qué pasa Jacobo?—pregunta Fanny.
—Papá va para abajo—responde.
—¿Qué?—se exalta y ve que la luz de las escaleras está encendida y alguien va directo a la puerta principal.
Toma a Henry del brazo—Corre, escóndete a lado de la casa, allí hay arbustos—le dice mientras lo empuja y ella tira su teléfono al suelo.
El se tropieza pero logra llegar a lado de la casa y posteriormente a los arbustos, está algo asustado.
—¿Qué haces aquí, Fanny?—dice su padre mientras sale y ve a su alrededor.
—Nada papi, mi teléfono se cayó por la ventana y venía a recogerlo, no vuelvo a tomarle fotos a la luna, está hermosa, ¿no te parece?—responde Fanny para desviar la atención.
Su padre confundido voltea al cielo. —Solo hay nubes, Fanny...—dice mientras la ve como toma su teléfono.
Fanny solo ríe e ingresan a la casa.
Después de unos minutos Jacobo entra a la habitación de Fanny.
—Te debo una...—dice al verlo ingresar.
—Parece que si me lo agradeces de verdad, no te molestaste porque haya entrado sin tocar la puerta. ¿Como se te ocurre traerlo a él?—pregunta mientras empareja la puerta.
—Llegó solo, pero creo que ya se fue, no lo veo en los arbustos—contesta Fanny mientras está mira el por la ventana.
—Papá está extraño contigo, no lo provoques, no sabemos que suceda—comenta Jacobo.
—¿Pero que hice?—cuestiona ella mientras se sienta en su cama.
—No lo sé, está molesto contigo, quizá no debamos alegar nada, no mientras mamá esté así—responde antes de salir de la habitación.
Fanny solo suspira y se queda pensativa.
Al día siguiente...
Llega de la escuela, deja su mochila en el sofá y ve a su padre sentado en la barra de la cocina.
—¿No subirás a ver a tú madre primero? Esta muriendo por tu culpa y te da igual, Fanny—dice el mientras se quita los lentes.
—¿Disculpa?—ríe nerviosamente.
—Por tu culpa ella está enferma, tus dramas y problemas de "depresión" la tienen así, no sabe que te sucede y ve lo que le pasa. Toda tu depresión es algo que no existe, vuelve al mundo real, tú madre muere y tú alegas tener problemas emocionales que ni existen—responde Antony, su padre.
Fanny no responde nada por unos segundos, es tomada por sorpresa.
—¿Eso es lo que realmente piensas de mi? Que todo es un cuento, que mis problemas no existen... existen, y no quiero que mi madre sufra por eso, así que no me culpes, mejor apoyémosla—argumenta mientras sale de la cocina.
Es tomada del hombro por su padre, ella voltea y lo aparta sin quitarle la vista de encima. —Quítame las manos de encima...—dice molesta.
Antony se queda estático al ver la reacción de Fanny.
—Fanny tranquila, sube a tu cuarto a relajarte...—dice Jacobo mientras intenta que su hermana suba.
—¿Tranquila? Encima que me echan la culpa de la situación debo tranquilizarme—responde a Jacobo para después regresar a ver a su padre. ¿Que te pasa, papá? ¿Por qué actúas de esa forma tan violenta y extraña?—pregunta pero es interrumpida por su madre.
—¿Antony que carajos te pasa? Dejen de pelear—dice mientras baja la escaleras y tiene una mano en su corazón.
—No tienes que levantarte, mamá—dice Jacobo mientras se acerca a ella.
—¿Es cierto que por mi culpa estas así?—le pregunta a su madre.
—En los últimos meses y semanas he pensando en ti, en que te ocurre, a pesar de que hablamos pienso mucho en ti, ayer no me sentía del todo bien y con los problemas encima me desmayé, pero no es tu culpa...—responde de forma muy directa Angelica, la madre.
—¿No es mi culpa? Ja.. ¿que hice yo para que todo esto pasara?—pregunta mientras los ve a todos.
Toma su mochila y sube a su habitación.
—¿Por que no le dices la verdad? Dale un golpe de realidad a tu hija, demuéstrale que sus problemas ficticios son estupideces inventadas por ella misma, está loca...—dice Antony.
—Papá no digas que ella está loca cuando no es así, ni siquiera has pasado suficiente tiempo con ella como para darte cuenta si es verdad o no—responde Jacobo un poco molesto.
—Pues nunca está en casa, siempre está metida en su mundo, pocas veces está aquí, su madre es quien lo está pagando ahora...—responde el padre.
—Yo tampoco nunca estoy y no pareciera que te moleste, nunca dices nada. Pero como tienes algo contra Fanny supongo que no me dirás nada—contradice Jacobo.
—Callate Jacobo, no te entrometas en esto—es regañado por su padre.
—Sube a tu habitación, cariño—dice Angelica mientras le hace una señal con la mano.
Jacobo sube e ingresa a la habitación de Fanny, la encuentra sentada cerca de la ventana.
—¿Qué es lo que le ocurre?—pregunta Fanny entre lágrimas.
—Tiene miedo de perder a mamá, por eso reacciona de esa forma, una forma diferente y agresiva—responde mientras se sienta en la cama y escuchan la discusión de sus padres en el fondo.
—Nunca habíamos vivido esto—responde Fanny.
—¿De que hablas Fanny? Si esto lo vivimos cuando fuimos niños, quizá tú no lo viviste como tal, pero papá fue así en el pasado, ¿no lo recuerdas?—interroga Jacobo.
—Si, si lo recuerdo, solo que estoy algo distraída—contesta Fanny.
—No es tu culpa que mamá esté así, son cosas que ocurren. Oye, ¿y si husmeamos por las escaleras?—pregunta Jacobo con una sonrisa.
—Ya estamos grandes para eso—dice mientras se seca la lagrimas.
—Vamos...—él la toma de la mano y salen de la habitación.
Se colocan cerca de las escaleras y escuchan toda la conversación.
—¿Les dirás en cuanto tiempo?—pregunta Antony.
—Se los dire en su momento y cuando sea imprescindible. Por ahora no quiero perjudicarlos o que se depriman, esto las afectará en la escuela, porque sí, la depresión existe y no es cosa de locos—responde Angelica.
—¿Vas a morir y no les quieres decir a tus hijos?—contradice el.
Jacobo y Fanny se miran el uno al otro al escuchar esa palabra.
—No es algo sencillo, tengo que buscar el momento, y no quiero afectar a Fanny, eso la destruiría...—responde ella en voz baja.
—Ella no es la culpable de nada, no le tengas odio o rencor, Antony. Me sorprende que mirando por lo qué pasó ella, cambiarás de repente, pareces alguien irreconocible...—dice Angelica mientras toma agua.
—Tengo miedo de perderte—responde el.
—Eso no es justificación...—dice Angelica.
...
Mientras tanto del otro lado del mundo...
—¿Qué te pasa?—pregunta Jessica al ver a su primo verse al espejo por varios minutos.
—Nada, solo que me siento triste, problemas, como todos—responde con una sonrisa y se retira a la sala.
—Tienes un pasado, ¿cierto?—pregunta Jessica.
—Como todos en esta vida—ríe. —Pero no quiero hablar del tema, Jessica—contesta mientras se va.
—Entiendo. ¿Agregaste a mi amiga en Instagram?——pregunta ella con duda.
—Si, la comencé a seguir apenas hoy por la mañana, me siguió también, pero no creo que yo le guste, o no lo sé, pero ella tiene novio, lo pude ver en sus fotos de Instagram, además también la encontré en Facebook, y de igual forma tiene fotos con el y aparece que "está en una relacion"—regresa y responde Kevin ante la inquietud de Jessica.
—Tal vez remplazaras a su novio—ríe. —en la fiesta lo sabremos, aunque ahora que dices eso, no estoy segura si sea correcto que vayas a esa fiesta—comenta Jessica mientras va por maquillaje a su habitación.
Kevin entiende el comentario.
Jessica se comienza a maquillar mientras Kevin va por un poco de jugo de manzana, para después regresar a la habitación de arriba.
—Personalmente creo que te quedaría más el tono dorado de sombra, para que resalten tus ojos azules-ríe. —Te mostraré como—dice Kevin mientras toma la brocha y comienza a maquillar a Jessica tan naturalmente.
Sin avisar ni hacer ruido, Angelica la otra prima de Kevin se recarga en el marco de la puerta a ver cómo Kevin maquilla a su hermana.
Después de unos minutos Jessica sonríe y se ve al espejo. —¿Lo habías hecho antes?—le pregunta mientras y lo ve.
Ríe. —Algo así... no es tan difícil—responde Kevin mientras colocas las cosas en la mesa. —¿Estas aquí Angelica? No te había visto—agrega Kevin mientras la ve recargada en el marco de la puerta.
—¿Por qué maquillas tan bien? Yo creo que lo solías hacer donde vivías, ¿trasvesti?—pregunta Angelica sorprendida por el maquillaje.
Kevin ríe a carcajadas. —Para nada, es una larga historia qué tal vez algún día les cuente—responde Kevin riendo.
—¿Con que ese es tu pasado?—pregunta Jessica sonriendo y en tono sarcástico.
—Para nada...—responde Kevin mientras toma su teléfono y revisa unos mensajes.
—Me recuerdas a alguien Kevin—dice Angelica.
—Tu igual Angelica, a alguien a que quería demasiado—responde Kevin mirándola fijamente.
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