La mayoría de las personas puede llegar a odiar a una persona. Algunas veces el odio se ocasiona por razones justificadas y otras que son completamente absurdas. La justificada pueden ser cuando hay una razón o causa para generar odio hacia otra persona, para decirlo de manera corta podríamos decir que esa persona tiene todo el derecho a odiar. La justificación o razón absurda es cuando hay una razón, pero esta razón no podría causar odio. La causa de este odio es algo sin importancia para los demás. Un ejemplo podría ser cuando un chico se enoja con su mejor amigo por perder su lápiz favorito. En fin, podríamos decir que una razón justificada no tiene solución y una razón absurda tiene solución.
Mientras tanto en el castillo, Dark estaba preparando su plan para acabar con Sky, los demonios descansaban en sus habitaciones. Unas pisadas extrañas comenzaron a escucharse fuera de la habitación de Dark, él salió, pero en el pasillo no había nadie. Nuevamente entro a la habitación, pero al entrar vio una extraña figura en su ventana, se acercó lentamente. La figura comenzó a tomar forma, era una chica que estaba sentada en la esquina de la ventana. La chica tenía un vestido blanco, cabello pelirrojo que parecía fuego, ojos amarillos claro y piel blanca.
—Vas a morir pronto y la pesadilla que siempre tienes se hará realidad. Tienes demasiado odio hacia alguien, pero la causa es muy absurda. —dijo la chica
—Este odio no es absurdo. —respondió Dark
—¿Enserio? Yo creo que el pensamiento de "lo odio con todo mi corazón, ese maldito destruyo mi plan de resurrección, destruiré a ese maldito. No puede existir nadie más fuerte que yo" es bastante absurdo para matar a alguien. —
—¿Cómo leíste mis pensamientos? —
—Puedo ver tus pesadillas mediante tus ojos, la mirada que tienes me lo dice todo. —
—Puedes ver mis pesadillas, pero no leer mi futuro, mi destino lo decido yo. —
—Di lo que quieras, adiós. —
La chica desapareció frente a lo ojos de Dark, él estaba algo confundido, las palabras de la chica lo hicieron dudar de su plan. Mientras tanto en la preparatoria, Sky y Laura almorzaban juntos en la azotea de la escuela, él le había prometido todo el día de hoy para hablar. Moon y Sara decidieron no entrometerse en el reencuentro de ellos, Sky habló sobre lo sucedido anoche y sobre la promesa que le hizo a Laura.
—Vaya, Laulau tu comida es muy deliciosa. No sabia que cocinabas. —dijo Sky feliz
—Gracias por tu halago, mi madre me enseñó a cocinar. Si lo deseas, yo podría traerte algo de comida. —contestó Laura sonrojada
—Pues te enseñó muy bien. No puedo aceptar, no quiero aprovecharme de tu amabilidad. —
—Por mi no hay problema, así mejoraría mis habilidades en la cocina. —
—Ok, si recibes algo a cambio puedo aceptar. Me doy cuenta de que has crecido bastante. También parece que ya no eres muy tímida. —
—Ya han pasado 6 años, ahora tu tienes 17 y yo tengo 16. Puedo controlarme cuando estoy contigo, cuando las personas que no conozco intentan hablarme salgo corriendo. —
—Entiendo, entonces te ayudaré a vencer tu timidez. —
—¿En serio? Gracias por ayudarme. De hecho siempre me haz ayudado, el día que nos conocimos recuerdo que me lastime la rodilla, mi rodilla tenía una pequeña herida que sangraba, pero como siempre me asustaba al ver la sangre, de pronto llegaste corriendo al escuchar mis gritos, aunque no te conocía, me ayudaste a curar mi herida. —
—Si, aun lo recuerdo. Ese día es especial para mi. —
Laura se sonrojó al escuchar a Sky, el corazón de ella estaba seguro que el chico que estaba a su lado era el calificado para ser su esposo. Sky recordaba los momentos cuando ellos jugaban. En las vacaciones de Sky y sus padres siempre hubo momentos felices, pero solo uno fue triste y ese momento es el día que Sky volvió a su hogar, todo fue tan rápido así que no le dio tiempo de despedirse. Cuando Sky ya había partido hacia su hogar, Laura tocó la puerta varias veces para que Sky saliera a jugar, pero nadie atendió la puerta. Ella continuó tocando hasta el anochecer, de pronto, su madre llegó para recogerla. La madre le contó sobre la partida de su amigo, ella no lo creía. Así que todos los días lo buscaba en su casa, en el pequeño bosque donde solían jugar, en la orilla del río donde lanzaban piedras, pero jamás lo encontraba. El tiempo pasó y se dio por vencida, pero ella se negó a olvidar a aquel niño.
—Laulau, perdóname por no despedirme de ti aquel día. —dijo Sky avergonzado
—Te perdono, con una condición. —respondió Laura
—¿Condición? ¿Cuál es la condición? —
—¿Podrias darme un b... —
Moon interrumpió la conversación para recordarle a Sky que ya era momento de regresar al salón de clases. Ellos caminaron hacia el salón de clases. El tiempo transcurrió rápidamente, los cuatro amigos estaban alistando sus cosas para partir hacia sus casas, pero de pronto el sonido de una explosión se hizo presente en la biblioteca. Ellos corrieron hacia la biblioteca, cuando llegaron habían escombros sobre las personas, también había una gran nube de polvo que azotaba el lugar. Sky decidió ayudar a levantar los escombros, pero Moon tomó su brazo para detenerlo.
—Moon ¿Qué sucede? —dijo Sky
—No puedes ayudar, si alguien descubre tu poder, podría ser un riesgo para ti. Ellos te secuestraran para hacer experimentos, también te consideran un riesgo. — contestó Moon
—Entiendo todo lo que puede sucederme, pero aun así, no puedo dejar que mueran. —
Sky corrió hacia los escombros, rápidamente rescató a todas las personas que estaban enterradas y las llevó al césped del jardín para recostarlos. Las personas que rescató eran 35 personas y todas ellas vieron como Sky los recataba. Sky se dirigió hacia Moon con una sonrisa de satisfacción.
—Perdón, por no escucharte, pero no podía dejarlos ahí. —dijo Sky
—Te entiendo, ese es el Sky que conozco. ���respondió Moon
—Espera, ahora no entiendo, ¿a qué te refieres? —
—Te conozco, así que sabia que te negarías. —
De pronto, los alumnos de la escuela que presenciaron las acciones de Sky se acercaron hacia él. Formaron un circulo para que no escapara, todo parecía una película de zombis. Pero repentinamente, ellos le agradecieron por lo que hizo, aunque parecía algo sobrenatural. Al principio, Laura y los alumnos de la escuela estaban sorprendidos, pero al ver lo que él hizo se dieron cuenta de la persona que es Sky. Los alumnos estaban felices. De pronto, una voz conocida se hizo presente en la nube de polvo.
—Veo que los rescataste, pero ahora tu poder ya no es un secreto. Pero descuida, haré que lo olviden con tu muerte. —dijo Dark sonriendo
—Me sorprendo de que sigas vivo, pero te diré que no pienso perder. —respondió Sky
—Tu no serás el único que perderás, las personas que están aquí, también morirán. —
—Al que quieres es a mí, déjalos ir. —
—No lo creo. —
Sky caminó hacia Dark, los alumnos que estaban en circulo lo dejaron salir, sus amigas estaban preocupadas por él, pero decidieron no seguirlo. Los alumnos no sabían lo que sucedía. La luna que adornaba el cielo era enorme. Sky corrió hacia Dark para golpearlo, pero él logró esquivarlo. Dark lanzó una patada directo al estómago, Sky cayó al suelo. La fuerza de Dark había aumentado, el aura que lo cubría era aterradora. El dolor del estómago de Sky era insoportable, no podía levantarse, él trataba de levantarse, pero el dolor no lo dejaba. El dolor que sentía era diferente. Los alumnos comenzaron a preocuparse al ver a Sky tirado al suelo. Dark se acercó a Sky para darle otra patada, Sky terminó cayendo enfrente de los alumnos. De pronto, unos alumnos se colocaron a un lado de Sky para protegerlo.
—Jajaja, ¿en serio creen que podrán defenderlo? —dijo Dark, —Su aura es insignificante. —
Laura posó la palma de su mano en la mejilla de Sky, él se despertó repentinamente, miró a los alumnos que lo protegían, vio a sus amigas llorando por él.
—Puedes hacerlo, así como me salvaste, sálvalos a ellos. —dijo Moon
—Yo no podría vencerlo, solo moriría en el intento, sé que puedes hacerlo. —dijo Sara
—Me gustaría que me explicaras todo, pero creo que no es el momento. Quiero conocerte más tarde, por eso quiero que nos salves a todos. —dijo Laura
—¡¡TU PUEDES!! —gritaron los alumnos
Algunas veces, nosotros pensamos que todo podemos hacerlo sin ayuda, pero en algunas ocasiones necesitamos de alguien más. Es cierto que puedes darte fuerzas a ti mismo, pero para adquirir más es mejor ser apoyado. Los alumnos de la escuela estaban muy asustados, pero aun así trataban de proteger a Sky.