CAPÍTULO 166- Un adorable vientre.
—¡Uwaaaah! ¡Tengo mucho calor!
Kei estaba a punto de entrar al comedor, pero escuchó a Rose quejarse y volteó a verla.
Ella bajó los libros y se quitó la ropa, quedándose en ropa interior.
—Hace calor… ¡Maldito país sin tecnología!
—…
El cuerpo sudoroso de Rose… Y su hermoso cuerpo… Una combinación que excitaría a cualquier hombre.
Kei se acercó a Rose.
—Rose… Ah… Me arrepentiré de esto.
—¿Eh?
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Terkiana y las demás estaban en el comedor, esperando a Kei.
—Ya se tardó. ¿Lo habrá castigado demasiado su abuela?
—Ah, Kei… Un poco más… Sí… Así… Es perfecto… Ah… Se siente tan bien.
Todas se quedaron en silencio y siguieron escuchando.
La voz de Rose se escuchaba.
—Sí… Un poco más, por favor… ¡Ah! ¡Esto me encanta!
Drin se levantó furiosa y salió del comedor.
—¡¿Lo están haciendo y no me invitaron…?! ¿Eh?
—¿Qué pasa, Drin?
—… ¿Qué haces, cariño?
Kei de cabello blanco estaba creando bloques de hielo y se los lanzaba a Kei de cabello negro por la ventana.
—Estamos construyendo una piscina. Hace demasiado calor.
Drin se asomó por la ventana y vio a Rose nadando en la piscina.
—¡Está refrescante!
—¡Se supone que estás castigada! ¡No tienes permitido ni respirar!
—¡No seas amargada, Drin!
Kei de cabello blanco le acarició la cabeza a Drin.
—No somos malvados… Rose será de ayuda… Me duele decirlo, pero no debemos ser tan crueles con ella.
Kei de cabello negro entró por la ventana y ambos Kei se volvieron a unir.
—Es mejor olvidar el pasado.
—Kei, ¿no nos dirás el por qué ella está castigada?- Dijo Mio.
—No. Es un secreto que me llevaré a la tumba. Lo siento.
Kei no quiere que se enteren de las cosas malas que hizo Rose, para que Rose consiga que las chicas sean amigas de Rose.
La confianza es importante para el grupo.
Nem se quitó la ropa y saltó al agua.
—Parece que está muy emocionada.
Terniak observó a Kei por unos segundos y luego bajó la mirada.
Comparó su cuerpo con el cuerpo de las demás.
Ella es linda, pero no es tan hermosa como Nerka o las demás.
Se siente inferior a ellas en cuanto a lo atractivo.
—Si solo fuera más hermosa.- Pensó Terniak.
—¡Oye, idiota, ¿qué haces?! ¡Déjame!
—¡Sé que quieres bañarte, pero no lo quieres admitir! ¡Vete a nadar!
Kei cargó en sus brazos a Nirkat y la lanzó al agua.
—¡Idiota!
Kei volteó a ver a Terniak.
—No seas tímida. Entra también.
—S-sí.
Kei volvió a su forma de adolescente y estiró los brazos.
—Ah… Me sigue doliendo el cuerpo… Chersy y las demás siguen inconscientes… Tuvimos suerte, Drin.
Kei se dio cuenta de que el vientre de Terkiana había crecido y la curiosidad invadió su cuerpo.
—… Un mes de embarazo, ¿no?
—Sí… Creo.
—… ¿P-puedo tocarlo?
—Por supuesto.
Kei tocó el vientre de Terkiana.
—… ¡Uwaaaah! ¡No siento nada! ¡¿Estará bien?! ¡Vamos con un doctor Elfo!
Terkiana no pudo evitar reírse de Kei.
Estaba exagerando sobre eso.
—Es normal, no te preocupes, todavía no se desarrolla tanto. En unos dos meses comenzará a moverse… Iré a nadar, hace calor.
—… Espérame, conozco un doctor Elfo. Le iré a preguntar si puedes nadar.
—Sí puedo, no te preocupes.
Terkiana se quitó su ropa y su vientre se pudo apreciar mejor.
—…
Kei todavía no puede creer que en poco tiempo él será padre y no puede evitar sentirse emocionado y feliz.
—…
Pero recordó a Zero y su sonrisa desapareció.
—Necesito tomar aire.
Kei salió de la casa y tomó aire.
—Zero… Te mataré.
Una chica aterrizó detrás de él y lo abrazó fuertemente con sus piernas y brazos.
—¡¿Quién es Zero?!
—¡Uwaaaah!
Kei reaccionó inmediatamente y golpeó a la chica contra la pared usando su cuerpo.
—¡Kya! ¡Idiota, mi cuerpo sigue adolorido!
—¡¿Chersy?! ¡Maldita loca, no me asustes!
Chersy soltó a Kei y levantó la mirada para ver los ojos de Kei.
—Fufu. Realmente eres el héroe Kei… Eres más genial en persona que en los dibujos.
—… ¿Quién te dijo que estábamos aquí?
—Fui yo, cariño. ¿Estuvo mal?
Drin tomó a Chersy del brazo y sonrió.
—Le dejé una nota en su pecho con la dirección de nuestra casa y le di permiso para que atraviese el campo de protección. Tenemos un asunto pendiente con ella.
—¿Eh? ¿Conmigo?
Nerka acarició la cabeza de Chersy.
—¿Olvidaste lo que le hiciste a la hermana de mi lindo esposo?
Eris la tomó del brazo izquierdo.
—Vamos. Tenemos que hablar en privado.
—K-Kei…
Kei se dio cuenta de que las chicas tenían un aura siniestra rodeando sus cuerpos y tragó saliva.
—C-chicas, Chersy nos ayudará… Eso espero… T-tranquilas.
—… Ah, tienes suerte de que mi cariño tuviera piedad de ti.
—… No, yo estaba preocupado por ustedes.
—¿Eh?
—Chersy estaba a punto de saltar sobre ustedes y arrancarles los ojos. Miren sus manos.
Chersy tenía fuego en las puntas de sus dedos.
—Ops.
Chersy sonrió dulcemente.
—Me descubriste.
—Recuerden que ella está igual de loca que mi madre.
—Pero lo que nos diferencia es que yo no tengo sangre Molfer.
Chersy se acercó a Kei.
—Quiero saber todo… Absolutamente todo de ti y tus compañeras.
—Claro… No tenemos otra opción.
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(Pov- Drei.)
Linmek está durmiendo tranquilamente… Es muy adorable… Es muy triste que una pequeña niña de 8 o 10 años esté sola en esta difícil vida.
Su cabello violeta es lindo… Es una niña muy adorable.
—Ah… Este lugar es más raro de lo que me imaginé… Maestro, espero que todo salga bien.
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Tiempo atrás.
—¿I-irme? ¿A ese lugar?
—Esa será tu prueba. Si logras superarla, estarás preparado para la siguiente fase del entrenamiento.
—Pero…
—¿Quieres derrotar a la Reina Demonio y proteger a las personas que amas?
—… Sí.
—Entonces harás lo que yo te diga.
—… Está bien, maestro.
Las pruebas que mi maestro me dio son 100 en total. Hasta el momento llevo 4… Ah, será un camino largo, pero estoy seguro de que valdrá la pena.
Cristhela, espero que seas feliz… Y gracias por todo.
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—¡¡Ruaj!!
Esquivé sin problemas las garras de ese enorme oso, salté y le di un fuerte golpe en la frente.
Le destruí parte de su cráneo y cayó al suelo, muerto.
—Y no puedo dormir tranquilo.
... Este lugar es demasiado peligroso... Me sorprende que esa pequeña niña sobreviviera tanto tiempo.
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(Pov- Zei.)
Dianka está dormida en mi cama... Desnuda... Ah... Creo que estamos exagerando con el sexo.
—Creo que se volvió adicta a ti.
¿Y eso es bueno?
—Supongo... No lo sé... Pero no te preocupes, tiene magia demoníaca en su cuerpo. Si te engaña o está en peligro, lo sabremos inmediatamente.
... ¿Crees que ella pueda engañarme?
—Escucha, estamos en el mundo 15, pero también es una combinación del mundo de los clichés. Es un cliché que a los protagonistas los engañen.
¿Soy el protagonista?
—Supongo... Yo creo que sí.
Ya veo... Supongo que más vale prevenir que lamentar...
[Chantaje: Reim.]
—... Chantaje.
Salí rápidamente de mi casa y comencé a correr por las calles.
—Dos cuadras... Una cuadra... Es ahí.
... Una casa desconocida para mí.
Mejoraré mi oído.
—¡No, déjame en paz!
—¡¿Quieres que les enseñe esta fotografía a todos?! ¡Chupa mi pene!
Toqué inmediatamente la puerta.
—Tsk. ¿Quién será?
Un hombre de unos 30 años abrió la puerta.
—¿Qué quieres?
Ella está en el segundo piso... Llorando.
—Mi nombre es Zei.
Lo empujé, entré a su casa y cerré la puerta.
—¡¿Qué haces, mocoso?!
El hombre es gordo y asqueroso... Qué asco.
Me golpeó, pero no me hizo nada.
—Eres débil.
Le di un fuerte golpe en la entrepierna y le tapé la boca para evitar que grite.
—Te metiste con la persona equivocada.
—¿Zei?
Oh, ya bajó.
—Una pregunta, Reim... ¿Quién es este señor?
—... Mi jefe en mi trabajo de medio tiempo.
—Oh, ese cliché lo conozco.- Dijo Fetoca.
—... Ya veo... Espera, por favor.
Saqué mi teléfono y le llamé a Elizabeth.
—¿Sí?
—Oye, tú conoces a Fetoca, ¿no? Tengo un criminal para él.
—¿Eh? ¿Qué?
—Te mandaré mi ubicación y se la envías.
Colgué y le envié mi ubicación por mensaje.
Guardé mi teléfono y le di un fuerte golpe en la cara a este pervertido violador.
Lo dejé inconsciente.
—Listo... Estaba pasando por aquí y te escuché. Me di cuenta de que algo malo estaba pasando... Y estás llorando... Algo te hizo este hombre.
—... Puso cámaras de seguridad en el baño de empleados y casi me obligó a chupar su asqueroso pene.
—Ya veo...
Lo obligaré a chupar penes de Orcos.
Tocaron la puerta y abrí.
—Trabajo para el héroe Fetoca.
Un empleado de Elizabeth.
—Tomen. Cargos por intento de violación y acoso sexual.
—Entendido.
Dos hombres lo subieron a un auto y se fueron.
—... Es probable que tengas que conseguir un nuevo trabajo.
—S-sí.
Fetoca, revisa su cuerpo.
—Mmm... Terminé... Su cuerpo sigue virgen... Los labios también... No ha besado a nadie... Llegaste a tiempo.
—Debo irme, solo salí para comprar algo.
Estaba a punto de salir, pero Reim me tomó del brazo.
—¿Pasa algo...?
Intentó besarme, pero logré taparle la boca con mi mano.
—Por favor... Déjame agradecerte... Solo un beso es todo lo que pido.
—Tengo novia.
—Será nuestro secreto.
—No.
Seré fiel. Eso es normal en este mundo... Bueno, hay personas que engañan a su pareja, pero lo normal es tener una sola novia.
Decidí ser normal, y lo seré.
—Lo siento... Adiós.
Salí de la casa.
—¿Estás seguro, Zei? La salvaste de una violación. Se enamoró más de ti.
Tengo novia... Fin de la discusión.
—Supongo que no cambiarás de opinión.
•
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—¿Q-qué paso?
—Eso es todo. ¿Entendieron?
—Sí, jefe.
—Oh, ya despertó.
Me acerqué a ese pervertido.
—Hay dos noticias. Una mala y una peor. La mala es que no lograste perder tu virginidad. 34 años y sigues virgen... Y la peor es que la perderás, pero no de una manera bonita o romántica.
10 Orcos nos rodearon.
Estamos en una aldea de Orcos. En este lugar los Orcos no son violadores, pero yo les proporciono comida y todo lo que necesitan para sobrevivir, a cambio ellos hacen lo que yo diga.
—Serás violado hasta la muerte... Bueno, vivirás un par de años y finalmente morirás.
Uno de los Orcos bajó sus pantalones y sonreí.
—Recuerda, no muerdas o te irá peor.
—N-no...
Me alejé de ellos. No quiero ver eso.
—¡No, aléjate! ¡No quiero! ¡No...! ¡Hmmmh!
—Fufu. Se lo merece.