–Esta bien don. –En eso le pregunto a Isabel y a su madre si deseaban sentarse y tomar una tasa de café, a lo que la madre de Isabel se negó diciendo;
–No yo ya me tengo que marchar. –Antes de marcharme me gustaría pedirte un favor. A lo que respondí con amabilidad;
–Si de acuerdo, ¿Qué se le ofrece?
–¿Podrías prestarle un cargador a Isabel para que cargue su teléfono aquí?. A lo que le respondí que si, luego de eso se marcho y Isabel se quedo esperar que cargue su teléfono. En eso le pregunto a Isabel vergonzosamente;
–¿Y tu quieres una taza de café? Perdón por no poder invitarte otra cosa, es que es lo único que tengo por ahora. –A lo que respondió con la cara sonrojada.
–De acuerdo, pero solo una taza pequeña.
–Esta bien, espera voy a la cocina a prepararlo. En eso voy a la cocina y pongo la pava en la cocina a hervir, en lo que buscaba el café para preparar, me paso su rostro por la cabeza (un pensamiento sobre ella). Que linda se ve con el cabello suelto y su vestido largo de color Fucsia, que resalta con sus ojos color azul y su sonrisa que enamora. En eso me pregunto por que me parece tan hermosa y radiante, ¿Acaso me eh enamorado de ella?.
Luego de varios pensamientos y preguntas sobre Isabel, agarro el café y preparo dos tazas de café, una taza mediana para mi y una pequeña para Isabel. Agarro una charola y preparo la azúcar el pan y las dos cuchara con las tazas de café para llevar a la mesa donde esperaba Isabel. Y me dirijo a la mesa y mientras voy llegando veo al costado de la mesa que había plata en lo que dejo la charola en la mesa le pregunto a Isabel, con una cara de intriga.
–¿Y esa plata?. –A lo que Isabel respondió.
–Esa plata mi padre la dejo para pagarte por poder ocupar tu baño para bañarnos y prestarme tu cargador para cargar mi teléfono. –En eso respondí sin pensarlo dos veces;
–No, no puedo aceptarlo, solo les ice un favor no necesitan pagármelo, además tu me prestaste tu libro así que luego se lo llevas y les devuelves ¿de acuerdo?, me sentiría incomodo cobrándoles.
–Bueno, y muchísima gracias.
–No hay de que. (Esta bien no importa).
–Tomemos el café antes de que se enfríe.
–De acuerdo, ¿y tus padres donde están? Me pregunto Isabel. Con una cara de angustia le respondí.
–Eh mi madre falleció hace ya unos años de cáncer y mi padre vive en otro lado con su nueva mujer, así que solo vivo yo solo aquí.
–Lo siento mucho no quise ponerte mal con mi pregunta. –Me dijo Isabel mirando hacia abajo.
–Esta bien igual ya no importa, ¿y tu familia por que mudaron aquí?. –A lo que me respondió.
–Por que a mi padre lo contrataron en una empresa que esta a 7 cuadras de aquí.