~Lost Haven, 6 de julio de 2022.~
Aris Fletcher
Desde la muerte de mamá todo se ha convertido en una repugnante novela depresiva.
Spence está bastante perdido.
Y papá prefiere trabajar antes que pasar tiempo aquí, la verdad no me molesta, ni nada por el estilo, ya que lo entiendo.
¿Quién querría estar en la casa de su esposa muerta?
El lugar donde compartieron tantas cosas, dónde criaron a sus hijos, dónde varias generaciones de su familia ya han estado, dejando historia y agregándole más alegría al asunto, el lugar donde encontraron su cadáver.
Hasta yo odio estar aquí. Cada maldita cosa que veo me recuerda a ella y la ausencia de otras cosas también; las flores en la mesa de la entrada, la música clásica que hacía eco en cada lugar, incluso sus tazas de té, esas estúpidas tazas que siempre dejaba tiradas por ahí y olvidaba donde las ponía.
Hablar de cómo la encontré creo que ya no es tan malo, a fin de cuentas ya se lo he repetido a la policía un millón de veces, después a papá y a Spencer, y por último al querido - siéntase el sarcasmo - Dr. Johnson, mi psicólogo.
Las cosas sucedieron así o bueno, de esta manera las recuerdo, ya no estoy muy segura.
~Lost Haven, 19 de abril 2022, cerca de las 6 PM.~
Esta haciendo frío, demasiado, siendo sincera. No traje chaqueta al salir, porque tenía pinta de que iba a ser un día caluroso, pero al parecer no lo fue. Voy hacia casa en este momento. A esta hora papá sigue en el trabajo y Spence debe estar viniendo aquí, ya que salió de los dormitorios de la universidad para pasar el fin de semana con nosotros y volverá el domingo en la tarde.
Camino lo más rápido que el frío le permite a mis heladas piernas y emito maldiciones a cada paso, como si aquello me fuese a calentar. Al llegar a la puerta casi no puedo meter la llave en la cerradura, de lo congelados que tengo los dedos. Al abrirla, puedo escuchar como algo se rompe. Tal vez a mamá se le ha caído un plato o algo por el estilo, pero la luz de la cocina esta apagada. Veo una luz proveniente de la sala así que me acerco y la llamo.
- ¡Mamá! ¡Mamá! ¿Me escuchas? Ya llegué... ¿Estás bien?- no obtengo ninguna respuesta y eso me empieza a asustar.
Lo primero que veo al llegar, es un espejo junto a la chimenea, de esos de cuerpo entero, aunque bastante antiguo. No es un espejo común, pues por algo mamá lo mantenía en una habitación cerrada del segundo piso. Lo segundo que noto, es que junto a la mesa de centro estan los trozos de una de sus tazas y a los pies del espejo, se encuentra tirado el cuerpo de mamá.
No parece que este respirando. El miedo que previamente había empezado a sentir, se multiplica de manera abismal. Corro velozmente hacia ella, necesito saber si sigue viva, pero verla en el estado que se encuentra, es bastante malo, ya que lo único que quiero es escapar - sinceramente, de lejos no se veía tan mal como de cerca - no debí haberme acercado, pero lo hecho, hecho está.
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Nota
Antes que nada:
Gracias por leerme! ♥️
Segunda cosa:
Soy nueva en esto y la verdad es un poquito complicado si te confunden los signos de puntuación y a mí me sucede. También está el hecho de que lo tenía escrito en pasado y al pasarlo a presente me confundí bastante😅.