Para mí la peor tortura era el 15 de cada mes
En ese momento en que las doce en punto de la mañana empezaba a llegar, mi cuerpo procedía a cambiar de una forma que hasta hoy en día no comprendo en absoluto
Sed de dolor y sangre se instalaban en mi cerebro haciéndome perder el control de mi consciencia
Pero quizá era peor el 16, cuando me dolía la cabeza de una manera brutal, me levantaba y frente a mí, o a mi alrededor habían diversos cuerpos sin vida
Sí, definitivamente esa era la peor parte.