Chapter 57 - Dolor

La hora llegó y el alcalde de Brathior, rápidamente,  salió al balcón junto con la reina Snowly y el alcalde de los vampiros.

-Alcalde de Brathior: ¡Encontraremos a Buidet! ¡Mataremos al ser maligno que le haya secuestrado! ¡Ahora es el momento! ¡Por Brathior!

De repente la luz de la ciudad se va y aparece el chico de las fuerzas oscuras junto a su líder , es decir, junto con el líder de las fuerzas oscuras y con toda la tripulación oscura.

-Líder de las fuerzas oscuras: El chico, me ha convencido, veo que es mejor que acabe con él, aquí y ahora, de una vez por todas.¡Jajajajajaja!

-Thrachar: ¡Antes tendrás que matarnos! ¡Rata callejera!

-Líder de las fuerzas oscuras: ¡Insulta querida! ¡Estáis muertos! ¡Ajajajaj! Por cierto, se me olvidaba. ¿Buscabais a Buidet?

-Charlie Cuttons: ¡Donde está!

-Líder de las fuerzas oscuras: ¿Quereis verlo?

-Charlie: ¡Como le hagas daño te voy a arrancar los pelos uno a uno! ¡Pedazo de rata!

-Líder de las fuerzas oscuras: Me lo tomaré como un sí.

El líder de las fuerzas oscuras hace un hechizo y aparece Buidet amarrado a un tronco.

-Buidet: ¡Charlie! ¡Ayudadme por favor!

-El alcalde de Brathior: ¡Magos! ¡Atacar!

Los magos apuntan sus baritas a el líder y tripulación, y les lanzan hechizos para dejarlos inconscientes.

-Líder de las fuerzas oscuras: ¿Enserio? Que inútiles 

El líder de las fuerzas oscuras hace un hechizo para que la magia no les afecten, es decir, se convirtieron como en espíritus.

-El líder de las fuerzas oscuras: ¡Ahora!

De repente una arquera oscura lanza una flecha y se la hinca a Buidet. Charlie empieza a chillar y llorar como un loco. 

-Thrachar: ¡Hadas! ¡Ahora!

-Meryer: ¡Sirenas! ¡Atacad!

-Reina Snowly: ¡Atacad! ¡Osos y lobos protegednos! ¡Ahora!

-El lider de los vampiros: ¡Atacad! ¡Absorberles la sangre!¡Cómo los mosquitos!

Los duendes salen a atacar también. El líder de las fuerzas oscuras al ver que eran muchos, transportó a su tripulación y a él a su mundo oscuro. Dejando el dolor de la muerte de Buidet en Brathior. Charlie no dejaba de llorar.

-Thrachar: Charlie, ¡ tus lágrimas!

Se acordó de que sus lágrimas eran curanderas. Se acercó corriendo a Buidet y se las hecho en la herida. Buidet despertó y se curó, gracias a Charlie.