Sven había escuchado la historia de como Einar había matado el oso blanco solo pudo apretar el hombro de su hijo.
"Einar lo que has logrado es algo que ni tu abuelo o yo podríamos hacer sin poder garantizar nuestra vida.
Aunque está vez tuviste suerte no podemos garantizar que si esto vuelve a ocurrir sólo pueda encontrar tus huesos."
Sven miró con una sonrisa a Einar "Por lo que como padre me gustaría que a partir de ahora puedas estar acompañado por dos guerreros hasta el final de la expedición."
Max quién pudo sentir la preocupación en las palabras de su padre solo asintió.
Sven suspiro pues pensaba que Einar se negaría por lo que usando su dedo tocó la frente de Einar.
"Puedes estar seguro que la cicatriz que dejará está herida te hará ver cómo un verdadero guerrero, pero no habría sido mejor que usarás fuego para cerrarla."
Max negó con su cabeza "Es demasiado peligroso hacer eso con heridas muy grandes pues puede acabar quemando solo la piel.
Esa técnica solo se debe de usar en situaciones de emergencia en dónde no cerrar la herida puede significar morir."
Los ojos de Sven entonces se movieron a uno de sus brazos en dónde tenía una gran cicatriz y se sumergió en sus recuerdos hasta que solo le dió una palmadita a Einar para después señalar la improvisada jaula.
"Por cierto Einar para que quieres a los zorros, no sería mejor solo matarlos y tomar sus pieles."
Todos los zorros sintieron una sensación de peligro por lo que levantaron sus cabezas buscando de donde venía la amenaza.
Einar solo se rió "Papá estos zorros los pienso criar como animales de granja, si tienen suficiente comida y un lugar seguro podemos tener camadas de hasta catorce cachorros.
Claro que en el proceso podemos seleccionar a los zorros más tranquilos para que se reproduzcan y de esa manera quizá mis nietos o bisnietos puedan jugar con zorros pues serán buenas mascotas."
Sven rascó su barba y miró a los pequeños zorros para después ver a los dos oseznos que estaban durmiendo cerca de un árbol "También es posible hacer dóciles a esos dos pequeños osos."
Max forzó una sonrisa y los señaló con su cuchara de madera "Es posible hacerlos sentir un vínculo con nosotros los humanos pero siempre estará el peligro que nos maten en cualquier momento.
A diferencia de los lobos o los zorros, el oso es un animal solitario en su mayor parte de su vida, quizá si empezemos un programa de crianza selectiva interrumpido.
En unos mil años nuestros descendientes puedan tener osos de mascotas, suena mucho tiempo pero puede ser un buen proceso de aprendizaje de generación en generación..."
El ruido de un oso enojado acompañado por los gritos de batalla de algunos guerreros interrumpieron la plática.
Sven y Max se cruzaron miradas y se levantaron del tronco dónde estaban sentados mientras sostenían sus ballestas en el hombro.
Cuando caminaron hacia el bosque pudieron ver a algunos guerreros sosteniendo a tres pequeños oseznos, los cuales estaban viendo con tristeza el cuerpo de su madre.
Eskol quien tenía su cuchillo en el cuello de la osa miró a Sven "Jarl Sven, hemos matado a una osa y hemos capturado a tres oseznos.
Parece ser que se vio atraída por el aroma de la carne que había estado cocinando Einar."
Max quién ya se encontraba frente al cadáver de la osa se sorprendió al ver el gran tamaño que tenía "Si hubiera estado solo quizá me hubiera matado.
Pero a pesar de que ya está muerta siento que este bosque es más peligroso de lo que podemos imaginar, quizás en este lugar tendremos más encuentros con osos."
"Si ese es el caso creo que sería mejor que dejáramos el bosque y hagamos el campamento en otro lugar."
Max quien estaba rascando su barbilla sonrió "Creo que podemos hacer nuestro campamento en este lugar y hacer algunas trampas para poder matar a cualquier oso blanco.
Quizá en el proceso podremos también atrapar algunos cuantos zorros blancos más."
Sven bajo su ballesta y sacó su hacha para ponerla sobre su hombro "Muy bien Einar, no hay que perder el tiempo."
Max sonrió y empezó a organizar a todos los guerreros para poder hacer el campamento en el bosque.
Mientras esto sucedía Ansgar se encontraba poniendo los pedazos de carne del oso en un costal.
"Ansgar que quieres que hagamos con los huesos del oso."
Ansgar limpio el sudor de su frente usando su antebrazo "Toma solo el cráneo y las garras, lo demás huesos déjalos en la nieve."
Elof asintió y usando su hacha rompió la columna vertebral del oso para después tomar un pequeño costal que tenía las garras del oso.
Derick quien estaba limpiando el exceso de carne y grasa en la piel del oso blanco pudo ver que bajando de una pendiente se acercaba corriendo uno de sus compañeros.
"Ansgar, Elof , ya viene el enviado del Jarl Sven.
Tenemos que empacar para poder llegar…"
Derick se calló cuando pudo ver que su compañero parecía estar herido pues estaba dejando un pequeño rastro de sangre.
Ansgar y Elof que también habían visto a su compañero herido dejaron lo que estaban haciendo para tomar sus ballestas de la nieve.
Cuando su compañero estaba cerca pudieron ver que de la colina salían corriendo dos osos.
"Preparen su ballesta y apunten a la cabeza de los osos blancos, disparen al primer oso que se acerque a nuestro compañero.
Yo no usaré mi ballesta ya que no podemos los tres cargar al mismo tiempo."
Kaj quien estaba sosteniendo su brazo estaba corriendo con todas sus fuerzas intentando escapar de los dos osos que lo habían atacado hacía algunos momentos.
Mientras corría la sensación de seguridad fue aumentando ya que pudo ver a sus compañeros apuntando sus ballestas a dónde él estaba.
Ansgar quien estaba un poco nervioso apuntó su ballesta y dió la orden de disparar.
Kaj quien estaba corriendo solo pudo sentir como los virotes pasaban cerca de él y tras esto pudo escuchar el grito de dolor de uno de los osos.
Con una sonrisa en su rostro continuó corriendo, Ansgar quien tenía sus manos sudorosas pudo ver cómo el segundo oso blanco estaba cerca de su compañero.
Por lo que apunto y espero que el oso estuviera por atacar para poder disparar.
Cuando el oso blanco estaba por atacar, Ansgar apretó el gatillo de su ballesta y el virote salió disparado hacia el pecho del oso blanco.
Debido a esto el ataque del oso fue interrumpido por lo que acabó rodando en la nieve.
Kaj quien pudo ver al oso rodando en la nieve cerca de él sólo pudo suspirar y continuó corriendo pues tenía miedo que los osos blancos volvieran a perseguirlo.