{26 de abril}
No vuelvo a dormir con ella. Es un hecho, toda la noche se ha movido como si no hubiera nadie más en la cama, para no incomodar termine durmiendo en el suelo. Como dirían en otro país, a dos velas y en el suelo. Lo peor es que por momentos daba gemidos extraños y al despertar estaba junto a mí en el suelo mirándome fijamente a los ojos. Casi me da un ataque.
Ya saliendo del hotel.
[¿Qué sucedió anoche? Te movías mucho y termine en el suelo, los gemidos que hiciste los malinterpretaron en el hotel. Todos me ven raro.]
[Tuve un mal sueño.]
[¿Los dioses tienen sueños?]
[Dijiste que no creías en dioses, pero sí.]
[No creo en eso, mas dijiste ser una. Así que solo pregunté.]
[Solo me calmé cuando me acerqué a ti en el suelo.]
[¿Por eso me veías fijamente? Casi me dio un ataque al verte.]
[Pensé que había sido por la impresión de que amaneciste con una belleza a tu lado.]
[No, me asustaste. No lo vuelvas a hacer.]
[Querido, es que me pareció extraño que solo me calmara a tu lado.]
[Debe ser por nuestra conexión por el contrato.]
[No es eso.]
[Acaso ya ¿habías hecho un contrato antes?]
[No eres el único con un pasado.]
[Es cierto no sé nada de tu pasado. ¿Cómo era él?]
[Él fue una equivocación. Nunca debí hacerlo, por suerte no duró mucho.]
[Supongo que murió.]
[Bueno no, también se puede romper si lo haces de mutuo acuerdo en el último piso de la torre de Orimpus.]
[Me dijiste que solo se acababa en la muerte de uno de los dos.]
[Sí, pero el método de Orimpus solo funciona con dioses.]
[Entonces, ¿fue tan malo?]
[Es complicado, cosas entre dioses.]
[¡Ja! dioses, pero entiendo que sea difícil para ti. Entonces Orimpus existe.]
[Sí, cualquiera puede ir allí, pero es un lugar muy lejano.]
[¿Cómo es?]
[Diferente]
[¿Diferente?]
[Si, no podrías imaginártelo solo con palabras. Deberíamos ir algún día. Necesito presumirte con mis amigos.]
[Ja, ja, ja, ja. Dejemos de hablar del pasado y concentrémonos en el futuro.]
[Si, vamos.]