Casi no pasaba tiempo con Alejandro ni con las chicas ya que Gloria ocupaba un 80% de mi día, fuera libre o no siempre me llamaba o me escribía para vernos, yo al principio realmente no le pare ya que eran meses sin vernos pero a los demás les incomodaba. Alejandro no quería estar ni cerca de Gloria, Andrea y Esther no sabían que hacer y aunque tratarán de calmar a un Alejandro enojado al saber sus dudas no sabían ni que creer.
Por una parte Andrea entendía sus teorías, pero también pensaba que eran celos de falta de atención, Esther por otro lado también creía que algo no andaba bien con Gloria y que era una doble cara. Esther le pidió Alejandro más detalles de Gloria ya que presentía algo malo y había tenido sueños conmigo donde yo salía lastimada; claramente eso a Alejandro le preocupo y aunque yo les escuchara y entendiera no lograba ver esa maldad en Gloria.
Alejandro por sus grandes dudas y temor del sueño de Esther decidió ir unos días a Madrid y pedirle ayuda a Mac Fly para una gran investigación, este le contó a Esther todo lo que haría, con lo que yo no conté fue que Alejandro en su ausencia le pidiera a Carlos que fuera mi guardaespaldas mientras el no estaba cerca.
Al principio no me gusto ni pizca la idea, pero como Esther también estaba conmigo accedí a conocerlo un poco mas y quitarles dicho apodo, realmente el tenía más estatura que edad ya que apenas 23 años y yo ya era casi una mujer de 30; realmente accedía a todas nuestras peticiones, que ir a comprar comida a la gata, pastelería, entre otras cosas pero siempre le brindamos algo ya que el realmente hacía un gran trabajo.
Carlos quería estudiar para ser policía, sólo que aún no hacía la prueba de la Academia, pero estudiaba cuando iba con Esther al mar, me prohibieron de nuevo entrar al mar, pero estaba alerta con Carlos de las chicas. No entendía el porque no me querían en el mar, pero con la insistencia de todas tuve que acceder a dicha petición, a veces presentía que nos vigilaban pero nunca lograba ubicar desde donde nos vigilaban.
Las veces que llamaba Gloria las chicas escondían el teléfono porque ya las tenía arta, Selene para aliviar la rabia decía "está peor que una novia" o "esta mujer no tiene otras cosas que hacer", pero su manera cómica de decirlo sólo me hacía reír a carcajadas por como quería imitarla.
Pero lo más insólito eran los 20 mensajes seguidos de Gloria, Marta para matar el tiempo decide leerlos y sólo puede exclamar
Marta: oye luz, ¿estas segura de que esta loca tiene novio?.
Selene: yo creo que la palabra corta se queda muy corta, valga la redundancia. -juntando su pulgar e índice-
Rosa: no quiero ser cruel pero real mente sólo te busco para ser una garrapata. -mirando el celular con Marta-
Andrea: chicas revisar un teléfono ajeno no está bien, pero realmente Luz apoyo el comentario de Rosa, esa chica sólo quiere que estés las veinticuatro horas para ella, ya ni te deja trabajar bien y los clientes más cercanos están preocupados.
Luz: chicas deben entenderla, he sido su compañera de trabajo por un año y tenemos una amistad de 8 meses, yo sólo creo que me extrañaba nada mas.
Carlos: entiendo tu punto, pero no te parece que te absorbe mucho, si fuera tu amiga de verdad entendería más y sería más flexible. -lo comenta a modo de curiosidad-
Esther: ves hasta el opina lo mismo, nosotras también somos tu amigas, ok si admito que ella nos gana por un gran trayecto, pero nosotras sabemos respetar tu espacio y tus momentos; ella te ha llamado hasta en tus citas con Alejandro.
Al oír eso me quedé asombrada y Andrea me explico que se había desahogado con ellas porque no entendía si era algo normal o no, no me lo había comentado porque yo en parte defendería a Gloria y en eso no lo podía culpar porque aunque yo dijera que no, sabía que si lo haría de manera inconsciente.
Los sueños de Esther eran cada vez más seguidos y todos eran sobre mi, sino salía lastimada por un arma blanca, salía herida de gravedad, la pobre ya no podía dormir en las noches y sus gritos a las 3: 00 am era para no volver a dormir. Como podía trabajaba el doble y dejaba que Esther descansará en nuestra sala de relax, los niños entendían el porque no jugábamos allí y jugábamos sentados en la mesa algunos juegos de mesa, cuando me sentía agotada le decía a Andrea y Wendy me cubría.
Tuve que cambiar mi horario de sueño a fraccionado ya que había logrado conseguir un truco para que Esther logrará dormir bien entre ""; tuve que hacerla dormir estando pegada de mi como una niña pequeña, jugaba con su cabello mientras lograba dormir, no quería llevarla donde un médico y tomará pastillas, aunque si eso no funcionaba lo haría pero por suerte empezó a funcionar y descarte lo del doctor.
En las noches la hacía ver conmigo series animadas japonesas o clásicas como Tom y Jerry, la Pantera rosa o en su defecto Scooby Doo para hacerla reír y así relajaba su mente, en las mañanas luego del desayuno me ponía a meditar con ella para que se logrará relajar, muy pocas veces tenía las pesadillas, pero yo no podía bajar la guardia, aunque deseaba nadar y relajarme al máximo, el agua era mi elemento de relajación y deseaba nadar pero entendía que debía ser cautelosa.
Ya había pasado una semana de las pesadillas aunque Esther ya casi no las tenía pero las recordaba con lujos y detalles, le pedía que lo ignorar a y olvidará ya que sólo era eso "un sueño" aunque había leído por Internet que un sueño frecuente del mismo tipo ya era calificado como premonición pero yo no podía quedarme pensando en eso y debía olvidarlo igual. Le había pedido una vez a Carlos de acompañarme al mar, no entraría como sirena y no iría lejos pero quería nadar y olvidar todo.
Carlos con tanta insistencia mías tubo que decir que si, pero que vería que otro lugar podía usar, ya que nuestro lugar no era seguro, accedí a ir a otra pero con tal de nadar sería feliz, mi gran error fue delatar mi plan a Gloria por una pequeña conversación sobre playas; le prometí que le avisaría de una buena. Esa misma tarde mientras consentía a mi bebé peluda me llamo Gloria y toda animada dijo
Gloria: Luzzz, amiga… que bueno que tomas la llamada te tengo un notición y grande. -alzando la voz-
Luz: -alejando un poco el teléfono y calmando a Pecosa por el susto- H.. Hola Gloria, estoy bien gracias por preguntar y me alegra saber que estas bien, ¿Qué ha pasado?, ¿te ganaste la lotería?. -mirada curiosa y medio burlona-
Gloria: -risa cortante- -tose- que linda amiga y si en parte se puede decir que me gane la lotería, Larry me pidió matrimonio y quiero que estés conmigo para celebrarlo, también invite a algunas amigas; ¿Crees que debía contratar un Stripper?. -sonríe con malicia-
Luz: ah!, bueno… eso ya te lo dejo a tu gusto de igual manera es tu despedida de soltera. -sonríe-
Gloria: -risa extraña- pero la idea es que todos se lleven una sorpresa en especial tu amiga. -dice esto ultimo en tono curioso-
Luz: -mira extrañada el teléfono- que detalle pero la importante eres tu.
Gloria: -risa rara de nuevo- claro eso es lógico. -respira hondo-
Luz: bueno… ya me mantendrás al tanto del día. -cortando la llamada-
Gloria: si no te preocupes. -voz seria- no te vallas a perder.
Miro aún el teléfono toda extraña y veo como Pecosa esta alterada y enojada bufando al celular, eso me causó intriga ya que jamás lo había hecho, aleje el teléfono y trate de calmarla ya que había pensado que hize un mal movimiento y eso la hizo incomodar o sentirse amenazada por el teléfono. Tarde casi 20 minutos en calmarla y decidí salir con ella y estar en la hamaca a ver si de esa manera se sentir la más tranquila; al parecer mi mese en la hamaca había logrado calmarla más, así que busque un cuaderno y empecé a copiar ideas, pero no me sacaba de la mente la actitud de Gloria tanto así que recordar su risa erizo mi piel por unos minutos.
Pecosa se había dormido en mi vientre y yo de rato en rato le hacía cariño de manera suave para no despertarla, tanto así que me dormí un buen rato ignorando luego de un rato el teléfono sonar, entre con Pecosa y luego atendí la llamada, Alejandro me había llamado y hablamos por un rato largo, le pregunté el ¿Cómo estaba?, ¿Qué hacía? Y ¿Cuándo Volvería?, me dijo que estaba por terminar su trabajo en unas semanas y tomaría de allí el primer ferry hasta acá, oír eso me hacía feliz en parte pero luego de oír su voz sería me hacía sentir que algo no andaba bien, entre insistencias me contó que no había dormido bien pero había tomado té para relajarse y luego dormir.
Sabía que era una mentira piadosa pero entendía que el estrés lo tenía agotado; luego de hablar con el y estar en la habitación hable con mis padres por vídeo llamada, estaban alegres por mi nuevo trabajo y amistades y esperaban que les copiar más seguido, lo cual prometí llamarlos más seguido. No era que no quisiera sino que muchas cosas me tenían ocupada y a veces caía tan agotada que sólo quería dormir unas buenas horas y al despertar sentirme renovada.
La semana se me hizo eterna, estaba ansiosa por el regreso de Alejandro tanto que fui a buscarlo y pasada dos horas recibí una llamada de el, me explico que había pasado algo de último momento y por ello no podía volver hoy, cuando le pregunté ¿Cuánto tiempo tardarás?, su suspiro fue largo y entre su voz melancólica y enojada me dijo
Alejandro: -algo incomodó por perder el viaje- si fuera por mi, sería cosa de cinco minutos, pero la verdad no lo se mi reina. -leve pausa- perdóname.
Luz: -voz melancólica- no tienes porque pedir perdón, entiendo los trabajos de último momento, sabes que mi trabajo en parte era así y me agotaba. -ríe-
Alejandro: -ríe con ella- gracias mi reina por entenderme, te estaré avisando de igual forma, ve con cuidado camino a casa.
Luz: -sonríe- si lo prometo, Te quiero.
Alejandro: -animado- yo igual amor. -pide un taxi antes de colar-
Mientras iba camino de vuelta a casa me encontré con Gloria quien en un tono curioso exclamó que me estaba llamando para hablar conmigo y contarme los detalles de su boda y que necesitaba ayuda en la misma. Mientras la saludaba decía
Luz: lo lamentó Gloria pero no podré ayudarte con los preparativos de tu boda, ahora si me disculpas debo volver al hotel. -cortante-
Gloria: si vas al hotel puedo llevarte, además yo igual voy para allá. -mirada fija pero tranquila- Además debo contarte muchas cosas, creo que no te dejaré dormir.
Luz: *esto debe ser una broma, ignoro lo que dije* agradezco tu oferta pero yo puedo irme sola, además no es tan lejos que se diga. -la mira seriamente-
Gloria: venga ya, déjate de hacerte rogar, yo te llevo en mi coche. -ríe normal- Bueno es de mi prometido pero pronto será mío.
Luz: *¿Otra vez?, será que no entiende la palabra no, no puedo decirle que si ya que lo prometí, sigue con el No mujer* como ya te dije Gloria gracias pero No. -me afinco en el no- podemos hablar otro día tranquila aún hay tiempo. -sonrió sin ganas mientras marcó el número de Carlos-
Sabía que Carlos al oír un rin insistente y sin yo hablar era un SOS, me sentía rara con tanta insistencia de Gloria que ella no era así, además que había dicho una mentira de el trayecto a casa.
No pasaron ni cinco minutos y Carlos todo vestido de manera deportiva con los chicos había llegado y me había llamado, mientras me decía
Carlos: Señora la estaba buscando adentro, ¿Llegó el señor?. -serio-
Luz: Si, el señor aún está adentro buscando la maleta. -mirada discreta-
Carlos: muy bien Señora ya lo busco, y su secretario esta esperando la. -firme como soldado-
Luz: -aguantando una sonrisa- gracias por avisarme ya iré a donde está el.
Los chicos habían ido a ayudarle, Carlos al ver mi primer SOS prefiero pedir el refuerzo de los chicos y no sabía por qué pero eso me hacía sentir aliviada en parte ya que tenía más apoyo, me despedí de Gloria de manera normal y me fui con calma donde los otros chicos, pero la mirada de Gloria era tan pesada que sólo al subir al carro fue que pude respirar; no lograba entender el porque pero al apenas sentarme atrás en el auto tuve que dar un suspiro y calmar mi respiración; Algo raro había sentido cerca de Gloria como si me faltara el aire y ni entendía el porque.
Carlos al verme algo pálida abrió la ventana y manejo en parte rápido; vigilando que nadie lo siguiera mientras me comentaba que esa esa mujer que estaba conmigo no le inspiraba confianza, que incluso el llegó a sentirse incomodó, se que Carlos le querría contar eso a Alejandro y le pedí que no lo hiciera y a la vez me disculpaba por el llamado, pero siendo honesta conmigo misma mi mente era un caos y sólo podía decir *Creo que hize mal en llamarlo, algo no me cuadra*.
Luego de una semana Gloria me había copiado indicándome el lugar y la hora de su despedida de soltera y una invitación impresa a un club de los más caros, en la tarjeta impresa indicaba la dirección, hora y piso de dicha recepción para los invitados VIP, al ver la tarjeta sólo pude decirme *menudo pastón se gastó esta con el noviete, si sigue así lo dejara en la quiebra*, como era en la noche podía dejar la cena lista ya que Esther había ido a nadar con las chicas y tomar más fotos, como era algo retirado llame un taxi no quería incomodar a Carlos.
Cerca de las 6:30 pm estaba lista y arreglada, me fui cómoda pero coqueta, le había dejado una nota a Esther y una copia de la invitación para que estuviera en parte más tranquila ya que allí estaba la dirección, lugar de recepción y el piso de la misma. Le deje comida a la gata y me despedí de ella, de allí monté el taxi y le di la indicación.
Llegué justo a las 7:00 pm, había un hombre de esmoquin de negro y vigilaba la puerta, le iba a pedir indicaciones justo cuando el celular sonó y yo al apenas decir "Hola Gloria, acabo de llegar" ya sentía un dolor de cabeza fuerte, como pude me gire y vi a otro hombre de deportivas con una piedra en las manos quien reía al verme caer y desmayarme poco a poco.
Cuando desperté estaba atada de manos y pies en una limosina de sofás gris claro y pintura negra, mientras aun mareada preguntaba
Luz: ¿Quiénes son? -adolorida-
Hombre 1: acaso las víctimas no pueden decir otra cosa que no sea -aclara su voz- ¿Quién eres?, ¿Qué quieres?. -imitando voz de mujer- parecen un disco rayado.
Hombre 2: -carcajada- calla hombre, adore tu voz de mujer.
Luz: -tratando de olvidar el dolor y no desmayarme- así que quieres oír algo diferente. -tratando de mover las manos- ¿eres idiota?.
Hombre 2: ugh, golpe bajo. -carcajada-
Hombre 1: cállate pareces una hiena riendo así, modérate. -señalándome luego de hablarle al hombre- y tu cuida esa boquita o te la parto.
Luz: ustedes tampoco dicen cosas nuevas, de donde las sacan de una película de malos. -mofándose-
Gloria: hablas mucho para aún estar mareada, drogada y medio desmayada, apágala un rato quieres.
El hombre de esmoquin blanco me inyecta una droga para volverme a desmayar, cuando volví en si tenía mis pies libres pero se movían tan torpemente que ni podía caminar, entre con el hombre de deportivas a una especie de cueva, aunque claro esta Gloria se admiraba por hacer una mazmorra especial para mi donde nadie podría encontrarme; se que me hacía las mismas preguntas de una película ¿Por qué haces esto?, ¿Qué daño te hice?, ¿Qué quieres en si? Y más preguntas, en la mazmorra que ella "construyó" para mi parecía casi un lugar de tortura medieval.
Me agarraron de las manos a unos pocos metros del suelo y sin importarle los hombres arrancó la ropa que tenía y me vistió con una nueva; sabía que el efecto de la droga no duraba mucho y pronto sólo tendría un horrible dolor de cabeza, me dejó descalza y con ropa algo pequeña para mi gusto.
Me quito los aretes, el collar y el anillo de noviazgo que me había regalado Alejandro, delante de mi quemo dicha ropa y guardo las joyas. Sin yo aún hablar sólo la miraba enojaba y mientras buscaba una pregunta no tan obvio respire y dije
Luz: bien, ya tienes una fase de tu plan, ¿Ahora que prosigue?. -mirada de enojo-
Gloria: -acomoda su cabello y busca una silla para estar cómoda- esa es una buena pregunta, ven chicos que ella sabe mantener la calma aunque todo este en su contra. -señalándome-
Luz: -tanteando- ya veo tu plan es ignorarme, muy bien. -mirada calmada aunque con fuerte dolor de cabeza-
Hombre 1: admito que es fuerte ya que ese dolor de cabeza debe estar la matando. -ríe-
Hombre 2: así no es divertido, eres algo aburrida. -acercándose a mi-
Hombre: calma Dragón, ella nos está retando, la idea es desesperarla a ella; esa fue una buena jugada señorita pero hay que ver cuanto dura. -quitándose la corbata y chaqueta-
Gloria: sabes… te tengo una hermosa historia con un final desgarrador. -risa fuerte- ¿Quieres oírla? Ja no se para que pregunto porque acá no hay opciones.
Gloria: hace mucho tiempo había una mujer muy hermosa de hecho era una Diosa y tenía a más de uno bajo sus pies, pero luego esa Diosa conoció una lacaya que de pronto le quitó seguidores y fue brillando, la Diosa celosa invocó el mal y disfruto como la plebeya moría. -hace una pausa- sabes que es lo más hermoso, ella podía revivirla muchas veces para que muriera de mil formas. -jadea-
Luz: eres una enferma, estas loca, ninguna Diosa por muy mala que fuera haría algo tan retorcido. -grita- debes ver a un psicólogo.
Enojada Gloria se alza y busca un látigo que tenía cerca, me agarró de la mandíbula con fuerza mientras su ojos se abrían más y en tono de histeria decía
Gloria: yo no estoy loca. -aprieta más mi mandíbula- la culpa fue de la lacaya por creer en la Diosa y volverse su esclava.
Cuando soltó mi cara se alejó unos pasos pero su rostro se tornó tan oscuro que alzó su mano y me bofeteo mientras gritaba "Cállate". Luego se alejó un poco mas y con el látigo azotó mi pierna izquierda; oírla gritar "sufre", "Cállate", y como paseaba como si eso le diera placer. Aunque aguantaba los gritos no pude evitar llorar hasta que ella calmo sus azotes y soltando el látigo se acercó de nuevo a mi y dijo
Gloria: esa es tu verdadera belleza, ya veo porque cautivaba a más de uno. -se ríe parecido al Joker- ay esto me relaja tanto.
Luego de ir a la piscina la toca y me ve, luego se acerca y me comenta que ella ya sabía de mi trabajo real y no ese falso de contadora y con secretario, sabía que era una sirena de un bar barato y que antes era de mala muerte, sabía que me quería hacer enojar y mucho pero calme mi ira y mi dolor, me explico que mando a hacerme una piscina para ser su esclava tanto humana como sirena, tanto que había pedido agua y animales de dicha playa junto con trozos de coral y algas.
Oír todo eso de ella me hacía sentir mal, había destruido parte de ese lugar sólo por capricho y poderme torturar de mil maneras, cuando Rayo fue a buscar la ropa de sirena sólo pude pensar *Se robó el traje* ella al ver mi asombro sólo podía reír; me volvió a quitar la ropa dejándome desnuda esta vez y colocándome el traje de sirena, me bajaron y me llevaron a la piscina, donde al poner mi cuerpo allí una cadena de pies apareció y me inmovilizo, sólo dejando libre mis manos.
Las cadenas del pie en parte parecían trampa de osos ya que era gruesa y tenía pequeños dientes, sabía que tener la pierna lastimada me impedía moverme bien, Gloria había pedido que el agua no se mantuviera muy fría o moriría muy rápido y no sería divertido.
Esa noche no me quiso dar de cena, su verdadero carácter me hacía tener en parte miedo, pero debía mantener mi cordura y averiguar la verdad, el verdadero ¿Por qué?, si era realmente algo contra mi o contra Alejandro ya que se pudieron haber arruinado sus planes o quería volver loco a Alejandro, la "mazmorra" estaba cerca de su cuarto, sabía que al frente mío había un pasillo y la sala el cual sólo la dividía unas cortinas gruesas de color rojo o vino ya que me costaba distinguir su color, la habitación donde estaba no tenía rejas pero sus colores tenues de azul claro con oscuro daba la impresión de un mar, las paredes eran con estampado de ladrillos medievales de color negro.
Daba la idea de que estaba en lo profundo del mar, casi no podía moverme, no me daba nada de beber y sabía que era capaz de tomar agua del mar aunque luego eso me lastimara; había ordenado que comería sólo cosas ligeras ya que no saldría de la piscina. Pero a veces lograba calmar su risa como la del Joker y otras veces me lastimaba y se veía como eso la "excitaba" aunque me enojaba lograba algunas veces retarla, y eso en ves de calmarla o parar con una frase, pero siempre inventaba como lastimarme, ese día busco su cuchillo de comer carne y me pinchó las manos con el filo y arrastrarlo hasta mi muñecas.
Hasta que saciaba su sed y luego como una niña chiquita me decía "eres aburrida, la idea del juego es que grites", yo sólo podía decirle que eso no era divertido y que estaba loca, sus expresiones y manera de ser cambiaban mucho, igual su manera de vestir, a veces vestía provocativa, otras deportiva y otras toda tapada, sabía que debía buscar respuestas y tanteando le llegue a preguntar
Luz: Gloria tu eres inteligente y amas el dinero, dime acá entre nos ¿Cuánto te lograste robar en Si?. -sobando mis manos-
Gloria: -ríe discretamente- si se que soy inteligente y bella, yo soy poderosa -auto consintiéndose- sabes que, por haber sido buena niña y educada te diré -hablando bajo- te lo pondré en dólares… saque más de ocho billones en total.
Luz: valla -fingiendo asombro- realmente me asombrada, así que… ¿Compraras una isla o la mansión de la Reina Isabel?.
Gloria: -me mira fijo y se incomoda un poco- no querida yo no quiero cosas de viejos, aunque la isla suena tentadora -extiende sus manos- "la isla de la Gloria" sería más que una reina, sería la Diosa de esa isla, tu serás allí mi esclava y con quien yo diga tu serás de el o ella -ríe- el límite es el cielo, puedo dejarte nadar cerca de la isla y demás buscaré tiburones para que nunca te vallas.
Luz: eres malvada y retorcida. -furiosa y asqueada-
Gloria: hago lo que puedo nena, aunque tengas que ser juguete te cuidaré bien, tal ves yo también me divierta con tu cuerpo. -se muerde los labios-
Luz: eres una puerca, sólo quieres torturarme, ¿Tanto daño te cause?, ¿Por qué no me matas?. -grita-
Gloria: cállate, estas dramática mujer, en parte lo dije en broma, no te tomes todo tan enserio, además tu no me has hecho nada malo, pero alguien cercano a ti si.
No necesitaba investigar mas de quien era, pero sentía que exageraba ya que se había robado una gran cantidad de dinero, mientras pensaba otras opciones una muy fuerte vino a mi mente *tenía en mente otro robo y Alejandro logró moverse antes*; era la idea más acertada, al ver que no me podía dejar sin comer su lado madrastra obsesiva se había mostrado ante mi y fue a buscarme agua con azúcar y un trozo de pan, luego de allí volvió a su recámara y me deseo feliz noche.
Entendía por ese "buenas noches" que eran pasada las 12: 00 am, podía ver un poco el cielo y ver una hermosa luna tan radiante y brillante, sin hacer mucho ruido intente morder el nudo de mis muñecas, pero lograba lastimarme más los labios ya que Gloria no había curado ninguna herida, a pesar del dolor y ahogar mis gritos forcejeo como pude para liberarme, sólo había logrado lastimar más mi pierna, boca y poner mis manos algo rojas.
El agua la mentían tibia y educada para algunos peces, entendí que está idea no era del todo de ella, aún me sentía cansada, aunque tenía el fuerte dolor de cabeza sabía controlar el malestar. Aunque no había cámaras de vigilancia dentro del cuarto sabía que me tenían más que vigilada, pero lo único que no podía lastimar por el momento era mi mente libre.
Pensaba en las chicas y en Alejandro, mientras calmaba mis ganas de llorar me decía a mi misma *no te pongas débil ahora, aguanta Luz, se fuerte* recordaba la voz de Alejandro con palabras de aliento, me hacían sonreír aunque quería llorar recordé mi promesa ese día de "ser fuerte y no volver a caer" lo había prometido ante la tumba de ella y no pensaba romper esa promesa.
Habían pasado sólo 3 días que para mi fue 1 semana exacta, no me dejaba dormir casi, su lado infantil era preguntón, y aún sabiendo que no sabía la respuesta no me dejaba dormir, sólo comia pan y agua, mi herida seguía igual, por estar tanto rato en la misma posición no sentía una parte de mi cuerpo, como podía le preguntaba más cosas de manera educada. Notaba como los hombres casi no la trataban y entre leves conversaciones entre ellos entendí que sólo la habían ayudado en uno que otro trabajo pero en si era "loca".
Puede que fuera loca pero sabía jugar muy bien sus cartas, logró imitar mi manera de copiar y mandarle un SOS a Carlos e indicarle una leve pista de donde estaba y que se apurara porque me había escapado, ella no le importaba decirme lo que hacía con mi celular y que las fotos que me tomo las subió a una página de BDSM, sólo oír la decir eso me daba náuseas su mente retorcida; el pobre Carlos había caído en su trampa, lo llevaron al mismo cuarto en que yo estaba, lo ataron como a mi la primera vez, lo interrogaron y mientras pasaba eso Gloria llamaba a alguien para que me revisará.
Cuando todos se fueron, el quiso hablarme y como pude le pedí que no me contará nada, que guardará esa noticia que el me quería contar, a pesar de su enojo al verme en tal estado sólo repetía una y otra vez perdóname Luz. Yo le hable contándole que saldríamos de esta y que sólo tuviéramos calma; con el eran más bruscos y los hombres lo maltrataba, a el a pesar del pan y agua le daban algo dulce, a las horas llegó otra mujer igual de rubia y hermosa, era un poco mas baja que Gloria, apenas le dijo "hermana" sabía que estaba fregada, cambio su ropa a algo mas cómoda y ponerse su bata de doctora con su nombre, Gloria me tocaba con un bolígrafo mis partes más lastimadas hasta que dijo
Gloria: Hermana como ves acá necesito que vuelva como antes, sin ese moretón y rasguño en labio inferior. -luego señala mi pierna-
Camila: -me inspecciona- esa agua ya está contaminada, si quieres que dure tu pez debes cambiarle el agua y saquemos esa aleta y la miraré. -sonríe-
Luz: valla ni sabía que ahora debo ser insultada como mascota, hasta para los que llamamos animales es una ofensa. -enojada-
Camila: -me ignora- no sabía que tu pez hablaba, creí que sólo era un tiburón bruto y sin voz. -afincando la palabra tiburón-
Gloria: ah es que aún no aprende educación, tranquila que pronto será tan sumisa como los esclavos de años atrás.
Luz: no tienes ni pizca de pena ¿Verdad?, ya que hablas de esclavos como si nada, sabiendo como mucha gente sufre y para ti es algo normal. -la mira fijo-
Gloria: -señalando los hombres- ah ellos son esclavos diferentes a ti, tu comes de un plato de cobre, este nuevo juguete de plato de bronce y ellos plato de plata, han sabido bien ser cautelosos y obedientes -ríe- son perros de raza.
Camila: -señalando a Rayo- oye tu, quita el agua del tanque y quita todo esto que la decora.
Luz: deberías ser más educada, eres de lo peor.
Camila: sabes… deberías besarme los pies porque curare tu herida y tendrás algo mas de libertad, así que cállate.
Sabía que eso que había dicho era porque trataban algunos peor de lo que sólo podía imaginar, le pedí amablemente a Rayo que no botará los peces, en parte no me hacían sentir sola aunque Carlos ahora me hiciera compañía, aunque sólo se limitó a verme vi una leve sonrisa y quise creer que era un si a mi petición.
Me había sedado Camila para que no hiciera nada tonto o "absurdo", me quitaron el traje de sirena y lo lavaron, mi pose había cambiado pero aún estaba en la piscina tipo tanque, estuve un rato en esa posición, Camila le pidió a Gloria que me dejara así unos días y luego de eso ella se iría a su casa de nuevo. Efectivamente había curado mis heridas. Carlos cuando ve bien mi cuerpo trato de no llorar ya que ambas piernas tenían marcas de látigos, una que le causó tal herida, la partida de mi labio fue del látigo y mis costillas estaban golpeadas, ya su color era un morado claro.
Delante de Camila como podía seguía preguntándole de su próxima jugada y quien más estaba en dicha estafa, hasta que Camila sólo podía reír y mofándose dijo que todo había sido idea de Gloria pero ella fue quien logró ejecutar parte del plan, lo de mi computadora fue fácil sólo un simple hakeo, luego hacer una página falsa donde cerraba la sesión del banco y por llamadas de Gloria algunas veces en la noche y sin yo estar cerca de la pc el vigilante con guantes hacía dichas transferencias y a través de la cámaras de seguridad me vigilaban y le avisaban de todo.
Verlas reír y contarle Gloria a Claudia con lujos y detalles mi cara de miedo al ser arrestada y como tubo que aguantar las risas para no arruinar un plan perfecto. Gloria no sólo tenía mis horarios, sino que sabía que tan organizada era y donde guardaba todo hasta el más mínimo detalle.
Verlas como reían y contaba como actuaba delante del jefe y la detective era algo que me asustaba ya que su plan no era dese que yo entre sino desde mucho antes y yo sólo había sido una fachada para sus cosas. Luego de tanto reírse ambas se fueron y nos dejaron solos, llenaron el tanque y Rayo escondido de Gloria y Camila volvió a poner en el agua los peces, yo como pude le agradecí y el de manera escondida me dio un poco de dulce.