"Entiendo"
Asistiendo con la cabeza, Yuki estaba muy agradecido por la sinceridad de Est, ser capaz de contarle su situación, así como su efecto secundario, Est demostró que no quería hacerle daño, mas bien ella quería protegerlo.
[Por eso, Maestro, deberíamos terminar este contrato y...]
"No"
Escuchando las palabras de Est con profunda tristeza, Yuki no dejo que ella terminara.
[¿Eh?]
"Estoy consiente del riesgo que conlleva blandirte, pero eso no es suficiente para que yo renuncie a ti, Est"
Yuki tenia razón, el seria un idiota si renunciara a una espada con semejante poder, a pesar que su vida peligra.
¿Y eso que?
Zafkiel era lo mismo y el no le dio ninguna advertencia como Est, pero a pesar de eso, Yuki se negó a dejar de usar su poder.
Zafkiel nació con él, por lo que eran uno.
Y aunque Est era diferente, Yuki se negó a dejarla ir.
[¡Pero Maestro! ¡Yo voy a matarlo! ¡Mi maldición terminará consumiéndolo!]
"Lo se, pero Est... ¿Qué clase de personas seria si renunciara a mi compañera por esto?"
Negando con la cabeza, Yuki continuó.
"¿Me consumirás? ¿Y eso que? Tengo un ángel que es mucho mas peligroso que tu...¿Me mataras? ¿Qué hay con eso? Todos mueren un día y si el día de morir llega, quiero morir entre los brazos de quienes me importan... ¿Quieres terminar el contrato? ¡Me niego! No soy una escoria que se asustaría de la muerta y abandonaría a mi compañera"
[...]
Est estaba en shock, las palabras de Yuki hizo que su corazón palpitara muy rápido.
"Así que no te preocupes que no soy tan débil... Aun no puedo morir... No, ¡no tengo permitido morir!"
Recordando los rostros de las personas que aun lo esperan, así como las personas que confiaron en el, Yuki apretó los puños, el no caería, no lo haría hasta terminar su aventura.
[Te arrepentirás...]
" No lo hare, jamás me arrepentiré al tenerte a mi lado"
[Sufrirás … ]
" ¿Y que hay con eso?... El que no conoce el dolor no puede avanzar"
[... Si continuas, vas a caer]
"¡Entonces solo debo levantarme! ¡Y continuar caminando!"
[Yo... ]
Con sus labios temblando, Est no pudo mantener la calma, después de todo, cada una de la palabras de Yuki, no hizo que su alma temblara, al contrario, su alma brillo con mas intensamente.
"Est, no se lo que has pasado, pero no puedes quedarte atrapado en el pasado, es necesario que levantes la cara y enfrentes a la vida"
Mirando intensamente la espada en su mano, Yuki recordó las veces que cayó cuando aun estaba en la tierra, ser un asesino no era fácil, la cantidad de personas que tuvo que matar, así como el peso de su consciencia era alta, pero aun si caía, el se levantaba, negándose a ser derrotado por la vida...
"No te pido que lo olvides todo lo has pasado, nadie puede olvidar los recuerdos que han marcado la vida, sin embargo te pido que uses esos recuerdos y avances... ¡Que continúes tu camino! ¡Quiero que vivas y nunca te arrepientas de tus elecciones! …."
Acariciando suavemente su espada, Yuki la atrajo a su rostro, al mismo tiempo que sonreía con ternura.
"Después de todo, el hermoso Quetzal debe liberarse de la jaula que es el pasado y volar con fuerza hacia el futuro... Est, el mundo debe ver la belleza del Quetzal"
(Nota Autor: por si no lo sabían el Quetzal es el ave mas hermosa del mundo)
*Pum, pum
Con su corazón latiendo fuertemente, los ojos de Est se llenaron de lagrimas, mientras miraba fijamente a Yuki.
[Yo.... ¿Puedo quedarme?... ¿Puedo seguir caminando?]
"Por supuesto, todos en esta vida tienen derecho a avanzar, no, todos deben avanzar en algún momento y tú no eres la excepción"
[Maestro....]
Mirandola con ojos vidriosos, varios recuerdos destellaron en la mente de Est.
Ella recordaba las aventuras que tenia con su primer maestro, así como el héroe que derrotó al rey demonio, ella se habia culpado de su muerte, sin embargo solo ahora recordó sus últimas palabras.
("Est... ¿Sabes algo? Yo nunca quise ser la Reina Sagrada, pero ahora estoy muy feliz de serlo, ya que fui capaz de conocer a mi amiga")
("Maestra...")
Mirando el rostro moribundo y pálido de su maestra, las lagrimas de Est rodaron.
("Asi que no te pongas triste, Est... Esto no es tu culpa, yo elegí caminar por este camino, esta es mi elección, por eso no debes culparte... Y seguir caminando")
("¡Maestra!")
Diciendo estas ultimas palabras, una sonrisa suave se formo en el rostro de su antigua maestra, al mismo tiempo que su tiempo se acababa.
Tomando el cuerpo de su maestra, Est lloro y grito en desesperación, la conexión que tenia con su maestra se corto y la maldición la consumió, poniendo fin a su vida.
Desde entonces, Est sentía una culpa muy grande en su interior, después de todo, si no fuera por ella, su maestra continuaría viviendo.
Ella era muy joven, tenia una vida por delante, sin embargo su maldición, era algo que su maestra no pudo resistir, no importa que tan fuerte era.
Est era un veneno que lastimaba y mataba a su maestro conforme el tiempo pasaba.
Ella lo sabia muy bien, es por eso que se sello así misma en las ruinas, con la esperanza de nunca despertar.
Sin embargo aquí esta ella ahora, siendo blandida nuevamente.
" Además, ¿Qué hombre estaría dispuesto a dejar ir a una bella dama como tu? "
*Pum, pum
Con esas últimas palabras, llevo sus mejillas hacia la hoja y la acarició suavemente.
No hace falta decir que el corazón de Est golpeo fuertemente por eso, al mismo tiempo un enorme peso se desvanecía de sus hombros y varias lágrimas rodaron.
" Así que, lo diré formalmente... Terminus Est, ¿estas dispuesta a ser mi compañera y seguirme en esta aventura, hasta que mi alma desaparezca de este universo infinito?"
[....Si...acepto, Maestro]
Respondiendo al instante, una sonrisa se formo en su rostro inexpresivo y aunque Yuki no podia verla, el acarició suavemente su empuñadura.
Marcando el inicio de su aventura.
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(Fuerte)
Ais por otro lado, este ers su único pensamiento al ver a Yuki balancear su espada, al mismo tiempo también se sintió perpleja.
Aunque sabía que hace mil años, antes que los dioses descendieran, lo habitantes de este mundo, hacían contratos con espíritus para luchar contra los monstruos, otorgándoles habilidades y poderes.
Ella nunca habia visto un contrato tan inusual, así como ver a un espíritu convertirse en una espada.
Pero para bien o para mal, Ais descubrió algo importante.
Y eso es, que Yuki era un espadachín y uno muy bueno en eso, desde el momento que empuño su espada, su aura cambió así como sus ojos se volvieron afilados.
"No deberías sorprenderte, si te lo propones, puedes llegar a ser muy fuerte"
Acariciando suavemente su espada, Yuki le sonrió.
"¿En serio? ¿Puedo llegar a ser así de fuerte?"
"Por supuesto, pero... ¿Tienes la determinación para serlo?"
Mirando fijamente esos ojos monocromáticos, Ais estaba sin palabras, ella quería ser fuerte, mucho mas fuerte, pero también entendió, nada era gratis en este mundo.
"Si, quiero ser fuerte... Por eso, ofreceré mi espada...por favor enséñame"
Inclinándose nuevamente, esta era la cuarta vez que Ais bajo la cabeza, ella era la Princesa de la Espada, ella tenia su propio orgullo, pero eso no le impidió perseguir la fuerza.
"Bien, te entrenare"
Sin embargo a diferencia de las otra veces, esta vez no se encontró con rechazo.
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Nota Autor: Este es mi regalo de navidad, pasenla bien con su familia