"Nushi-sama..."
En la noche después de que Mana se uniera oficialmente a Ratatoskr, Yuki llevó a las chicas a su casa o para ser mas preciso la casa de todos los espíritus.
Mukuro seguía igual de pegajosa que Tohka siempre estaba enojada, afortunadamente gracias al sello en sus estómagos no podían usar su poder de lo contrario, Tohka hace mucho tiempo habría golpeado a Mukuro.
Yuki no dijo mucho, pero sabia que tenia que hacer algo con Mukuro, es demasiado pegajosa y solo se separaban cuando es necesario, de lo contrario estaba junto a el todo el tiempo, no es como si fuera un gran inconveniente, pero Mukuro podía intervenir si Yuki traer a otros espíritus, para eso Yuki debía mantener a Mukuro bajo control...
Tal como lo hizo en la otra linea de tiempo, no quería que un día se despertará y descubriera que todos los espíritus lo olvidarán...
"¿Nushi-sama de querías hablar?"
Mientras Yuki peinaba el hermoso cabello dorado de Mukuro, esta misma no pudo evitar preguntar con curiosidad.
Ella se sentía tan bien que entrecerró los ojos y disfruto del cuidado de Yuki por su largo cabello, hace mucho tiempo que no disfrutaba del cuidado de su cabello dorado, que para Yuki era una infinidad de peinados posibles.
Y Mukuro disfruto de cada uno de ellos, ya sea trenzas grandes, doble coleta.
"¿Mukuro tu me quieres?"
Después de cepillar el cabello de Mukuro, Yuki respondió a su pregunta.
"¡Fum! ¡Muku quiere a Nushi-sama!"
Mukuro asistió emocionada, Yuki sin embargo no pensó lo mismo.
"¿Te gusta la resonancia?"
Yuki no fue por las ramas directo al grano, Mukuro siempre que se emocionara brillaban sus ojos y según lo que vio en la otra línea de tiempo, Mukuro es adicta a la resonancia....
"Fumu, a Muku le gusta"
Mukuro no negó su adicción, apretó su brazo con sus enormes melones y se acurrucó como un gatito, siempre que sus cristales Sephira estaban cerca podían sentir la resonancia, aunque muy débil seguía siendo el favorito de Mukuro...
"¿Es por eso que me quieres?"
"..."
Mukuro no hablo, levanto la cabeza y miro directamente...
"¿Nushi-sama no cree en Muku?"
Mukuro se sintió triste, esta pregunta no es algo que Yuki debía preguntarle, ya que estaría dudado de sus sentimientos....
Aun así Yuki tuvo que hacerla, tenia que estar seguro.
"Por supuesto que creo en ti, pero temo que si un dia la resonancia entre ambos se acaba, tus sentimientos cambien"
Como experto en tratar con el sexo opuesto, Yuki eludió la pregunta trampa de Mukuro y dijo sus propios pensamientos.
Después de todo una vez que descubra lo que pasa entre la resonancia y los espíritus, Yuki definitivamente eliminará este estado anormal.
"No, lo sentimiento de Muku nunca cambiaran..."
Negando suavemente con la cabeza, Mukuro se separó de Yuki, se dio media vuelta y llevo ambas manos detrás de su espalda...
"Muku nunca dejara de amar a Nushi-sama..."
Haciendo una pausa Mukuro volteo la cabeza y sonrió...
"Porque Nushi-sama es la familia de Muku, Nushi-sama lo dijo, serás mi familia y estarás siempre con Muku..."
"...."
Yuki suspiro, el por supuesto no dijo estas palabras, al menos no él de esta línea de tiempo.
Mukuru en sus sueños recordó esto.
En esa linea de Tiempo, Yuki la enfrentó y enamoro a Mukuro llevándola a las estrellas, asi mismo prometió ser su nueva familia...
Mukuro en esa línea de tiempo le creyó, sin mencionar que Yuki fue el único que abrió el sello en su corazón sin necesidad de la llave.
Fue tan repentino e intenso...
Yuki era la llave misma, Mukuro pensó eso por lo que Michael no podía sellar nuevamente sus emociones, no podía sellar lo que sentía por Yuki, causando así una reacción en cadena de depender de Yuki, la emoción de estar completa estando junto a él.
Su amor la cegó y la resonancia fue la gota que rebasó el vaso de sus emociones.
Simplemente no podía vivir si Yuki, debido a eso lo obedeció y siguió sus ordenes, aunque esas emociones también la llevaran al suicidio.
"Tienes razón, siempre serás mi familia"
Con la duda levantada en su mente, Yuki la abrazo con ternura, Mukuro no era una mala chica, una vez fue un niño solitario que creció sin familia. En su soledad, llegó a la conclusión de que las personas bendecidas con una familia eran especiales y ella no podía ser considerada especial. Sin embargo, un día, fue adoptada por una pareja que quería un hijo. Ellos, junto con una hermana mayor, pronto se convertirían en una familia para ella. Durante un tiempo, vivió feliz bajo el calor de una familia. Su hermana Asahi complementaba su cabello mientras lo peinaba, y a menudo iban juntas a mirar las estrellas, mientras ella le recitaba la tradición de cada constelación. Sin embargo, un día, mientras visitaba la Torre Tenguu, Asahi trajo a un amigo, quien comentó que Mukuro necesitaba cortarse el cabello. Dolido por cómo su hermana estuvo de acuerdo con la sugerencia, a pesar de siempre elogiar su cabello dorado todo el tiempo, concluyó que Asahi había amado a su amiga más que a ella
Mientras entraba en pánico por esa conclusión, el primer Espíritu apareció ante ella y le dio un Cristal Sephira que contenía a
En conclusión, Mukuro es una chica con sed de amor, no deseaba estar sola que haría cualquier cosa por tener estos sentimientos...
Este sentimiento tan pesado ahora estaba sobre Yuki, para Mukuro ahora él era su mundo.
Por supuesto Yuki, no negó estos sentimientos, el ya estaba acostumbrado a estos amores no comunes, Yuno y Mana son un buen ejemplo...
"Mukuro..."
"Mun, Nushi-sama"
"Tienes prohibido morir"
"Nushi-sama..."
Mukuro no podía comprender lo que Yuki dijo, pero antes que expresa su duda, Yuki ya había robado sus labios...
Un beso dulce lleno de ternura que derritió el corazón de Mukuro, después de unos minutos ambos se separaron respirando con dificultad, el beso tierno poco a poco se convirtió en uno intenso que ambos disfrutaron...
"Mukuro aunque tenga a otras personas en mi vida, debes saber que nunca dejaré de ser tu familia"
"Nushi-sama"
Incapaz de refutar, Yuki nuevamente beso a la tierna Mukuro, tenia que dejar en claro que no importa lo que pasara en el futuro, Yuki estaría para ella, en sus malos momentos y buenos momentos, incluso si tenia que recurrir al viaje en tiempo, Yuki se aseguraría de estar con ella...
Y al parecer Mukuro entendió el mensaje, ya que sus besos poco a poco fueron mas atrevidos y apasionados que la resonancia entre ellos volvió a destellar en sus cristales Sephira, así mismo las manos de Mukuro se movieron con rapidez, la ropa era ahora un obstáculo y Mukuro deseaba no tenerla.
"Hohoho... ¡Que mal momento!"
Tan inmersos estaban en su apasionados, que no notaron que la puerta se abrió un poco donde un par de ojos azules los miraban fijamente...
Nia llevo ambas manos a sus ojos mientras intentaba no ver lo que sucedía en la habitación, aunque fallo por supuesto ya que estaba emocionada con su rostro sonrojado y sus dedos se abrieron dejando abertura en sus ojos..
"Mukku-chi no pierde el tiempo"
Cerrando suavemente la puerta con cuidado de no asustar a la pareja, Nia regresó a su habitación emocionada.
Ya era tarde en la noche y pensó que era posible colarse en la habitación de Yuki, como era de esperar ella esperaba una noche de pasión, tenia curiosidad sobre si la Resonancia junto al sexo crearían un nuevo placer, llevaba un camisón semi trasparente que dejaba a la vista su erótica lencería negra que resaltaba en su piel blanca de porcelana, el poder replicar estos atuendos con poder espiritual era fantástico que Nia tenia confianza en provocar a Yuki, desafortunadamente Mukuro se le adelantó...
La próxima vez debía vigilar en Rasiel...
"Hehehe"
Aun así no fue una perdida, ya que fue testigo de algo bueno...